Heavy Object:Volumen 1 Capítulo 1

From Baka-Tsuki
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Capítulo 1: Los Soldados Rasos que Atan a Gulliver >> Batalla en la Helada Nieve de Alaska[edit]


Parte 1[edit]

Al final, la guerra no es nada más que peleas entre Objetos.

Un humano de carne y hueso cargando un rifle bien cuidado no puede hacer nada.

Incluso si decenas de miles o cientos de miles de soldados se reúnen o incluso si un montón de tanques y bombarderos son preparados, ese monstruo de 50 metros puede acabar con todos fácilmente. Algunos de ellos pueden continuar moviéndose incluso después de recibir uno o dos golpes directos por parte de unos misiles, así que parece una locura intentar enfrentárseles.

Es por eso que todos le dejan el papel principal a un Objeto.

Al dejar que el monstruo se encargue del problemático rol principal, los demás pueden observar cómodamente desde lugares seguros.

Tal vez es por eso que los 800 soldados que se encuentran en la zona base, una base que se especializa en mantenimiento, se sienten tan relajados a pesar de estar en la línea frontal de un campo de batalla.

El área es llamada una base, pero todo lo que hacen es mantener eficientemente al Objeto y cuidar que sea enviado.

Los soldados de carne y hueso sólo tienen que cuidar el arma gigante mientras recibe mantenimiento durante el corto período de tiempo que se encuentre ahí y son recompensados como héroes que protegen a su país sin haber arriesgado sus propias vidas.

Con el Objeto ahí, ellos se encuentran totalmente seguros.

El Objeto que los protege es como un árbol que retoña oro. Simplemente con observarlo, éste puede derrotar a un enemigo tras otro tras otro. Los soldados insisten que todo ello es el resultado del arduo trabajo de la zona base así que tienen que ser recompensados, y así sus cuentas bancarias quedan inundadas con dinero pagado a partir de los impuestos de las personas.

Pero en verdad la guerra sólo es llevada a cabo por el Objeto.

Mientras éste se encuentre ahí, sus vidas y futuros están básicamente garantizados.

Es por eso que el pánico invade a todos los soldados observando desde la zona base el instante en el que su Objeto es consumido por el fuego y explota.

En la era actual, la guerra no es nada más que peleas entre Objetos.

Eso significa que la derrota del Objeto propio siempre es una posibilidad cuando el enemigo también posee un Objeto.

La tormenta de nieve blanca de Alaska obstruye su visión, pero aún así pueden observar con claridad las flamas rojas y el humo negro.

El dispositivo de expulsión lanza a la chica piloto conocida como una Élite hacia el cielo, pero nadie se preocupará por salvar a la perdedora ahora inútil.

Hay cosas más importantes en sus mentes.

Para reiterar, en la era moderna, la guerra no es nada más que peleas entre Objetos. Reunir tanques, bombarderos, y otro tipo de armas usados antes sólo causaría que fueran destruidos fácilmente por los monstruos de 50 metros que son los Objetos.

Ahora que su propio Objeto ha sido destruido, el Objeto enemigo puede moverse libremente.

Lo que eso significa es algo simple.

Todos serán masacrados.

El aplastante flujo de municiones lanzará por todos lados su carne, huesos, y órganos en una masacre desesperanzadora y definitiva.

No tienen otra opción más que intentar escapar. Pero incluso si eligen escapar sin vacilar, será un milagro si al menos una décima parte de los soldados dentro de la zona base sobreviven. Ni uno solo recuerda la orden más básica dentro de la milicia --- quedarse en posición y aguantar.

Así comienza un infernal juego de persecución.

Es un ridículo juego entre un monstruo de más de 50 metros de alto y pequeños humanos.


Parte 2[edit]

Un día antes, un chico llamado Quenser se encontraba en un área nevada de Alaska. Estaba en el interior de la zona base de mantenimiento para el Objeto gigante. La complexión de Quenser es diferente a la que uno esperaría de un soldado. Para decirlo de manera simple, no tiene los músculos que necesita un soldado. Se ve más como alguien que iría a una escuela en un país seguro. De hecho, seguramente podría disimular su sexo dependiendo si utilizara pantalones o una falda.

En realidad, esa impresión general no es incorrecta.

Los brazos que estaba utilizando para cavar en la nieve con una pala estaban temblando debido al cansancio y la mialgia.

“¡¡Maldición!! ¿¡Cuál es el punto de este trabajo!?”

La persona que hizo esa declaración y se rindió fue el soldado que se encontraba a un lado de Quenser. Quenser mostró una expresión sorprendida y el chico soldado al que conoció en la zona base dejó caer su pala.

“Existen muchos tipos diferentes de soldados. Normalmente soy el analista de radar que revisa las especificaciones del Objeto enemigo para encontrar una debilidad. ¡¡No me uní al ejército para cavar en la nieve!!”

A ese intelectual soldado se le conoce como Heivia. Ya que Quenser no se adaptó muy bien al espíritu atlético del ejército, se llevó mejor con ese otro chico que con los demás.

(…Bueno, somos de tipos similares.)

Con ese pensamiento arbitrario, Quenser comentó.

“No es que tengamos otra opción. Toda la pelea se le deja al Objeto, pero las personas viviendo en paz en sus hogares no seguirían dando su dinero en impuestos si no vieran a nadie trabajando. Estaba viendo el canal de noticias de CS y vi al Consejero Flide gritando sobre la reducción de impuestos para ganar más votos en las próximas elecciones.”

“Ese es justamente el problema,” respondió Heivia. “Incluso las personas que viven en paz en sus hogares saben muy bien que cavar en la nieve para mantener despejadas las autopistas es inútil. Saber que es sólo para pretender hace que me den menos ganas de seguir cavando.”

“Sí, un bombardero no hará nada contra un Objeto. En la batalla de prueba, acabó con 1500 de ellos, y estoy seguro que en realidad lo dejaron hasta ahí porque se cansaron de contar.” Quenser clavó la punta de su pala en el suelo y se apoyó en ella con ambas manos. “Después de todo, los Objetos utilizan láseres anti-aire que reciben energía de un reactor de alta potencia. Los bombarderos tal vez sean capaces de volar a Mach 2 o 3, pero no son competencia contra la velocidad de la luz. El instante en el que el Objeto los localiza, ya es demasiado tarde. He escuchado que las unidades armadas que mencionan en las clases de historia fueron salvadas por el polvo y la tierra y otras cosas cerca de la superficie refractando los láseres, pero la gran altitud por la que se caracterizan los láseres es tan limpia que no hay nada que pueda obstruir a un láser.”

“Esas cosas son monstruos de 50 metros que aún pueden moverse después de recibir un impacto de bomba nuclear. Un bombardero no es nada más que un pequeño pájaro para ellos. Mantener una pista despejada es una pérdida de esfuerzo.”

“Sí, he escuchado que los ases de la unidad de aviación sólo se quedan esperando en sus cabinas para poder escuchar el radio. Pero dudo que los tanques de esas unidades armadas puedan ser de mucha ayuda. …Y sobre despejar esta pista, ¿no sería mejor instalar una pala gigante en frente de un vehículo blindado para despejar toda la nieve de una sola vez?”

“… ¿Qué diablos estamos haciendo…?”

“Bueno, aún así prefiero hacer esto que tener que pelear.”

“No es algo muy soldadesco para decir, pero estoy de acuerdo contigo,” el soldado delincuente Heivia respondió al escuchar al chico de origen civil. “Simplemente dejemos las peleas a los Objetos. Perder tu vida en un campo de batalla ya no se utiliza. Sólo tenemos que ver desde lejos y esperar a que el Objeto regrese con el éxito como regalo. Personas como nosotros peleando por ahí es algo impensable.”

“¿Eres un noble, cierto, Heivia?”

“Sí, así que tengo que estar aquí y ‘convertirme en un soldado honorable’ para probar mi valor y convertirme en el próximo líder de mi familia. Básicamente, si supero mi vida en una base por tres años, podre gastar el resto de mi vida en una mansión gigante coqueteando con muchas sirvientas.”

Contrario a sus palabras, Heivia no parecía complacido.

Parecía no sentirse totalmente stisfecho con esa vida pacífica.

“Parece que tú tienes tus propios problemas.”

“Sí. A diferencia de ti, Heivia, soy una persona común. Necesito asegurarme de conseguir un trabajo. Es por eso que vine aquí como un estudiante de campo de batalla.”

“¿Esperas convertirte en un diseñador de Objetos?”

“Se dice que aprender en el lugar es la manera más rápida de ganar experiencia. Si me quedo aquí por tres años, habré obtenido la mejor educación que se pueda encontrar. Entonces podré ganar dinero y los privilegios de ser un ‘santo que ayuda a los héroes’ al fabricar y vender Objetos para que esos héroes los manejen.”

“Los estudiantes de campo de batalla que tienen éxito tienen un alta estima debido a todas las barreras que encuentran en su camino. Ya que no pasan por un entrenamiento para soldado, he escuchado que comienzan a caer como moscas debido a enfermedades del campo de batalla y el exceso de trabajo. Escuchar eso en verdad me hace recordar que estamos en un frente de guerra.”

“Halblando de eso, ¿pasaste por algún entrenamiento, Heivia?

“Sí, pasé por el entrenamiento de estilo antiguo cuando me enlisté. Parece que querían fabricar una fuente de músculos y un espíritu de camaradería en un período de 5 meses, pero terminé de esta forma sin importar lo sucedido. Ya que no he estado en una sola pelea real desde que fui asignado aquí, incluso mis habilidades de combate mano a mano deben haberse oxidado un poco.”

“Me siento perfectamente cómodo con el tipo de vida que provoca olvidar cómo pelear.”

“Eso no es algo muy soldadesco para decir, pero una vez más, estoy de acuerdo contigo.” Cansado de ese tema, Heivia se mevió a uno diferente. “Esas raciones militares balanceadas nutricionalmente son totalmente asquerosas. ¿Qué estaban pensando las personas que las desarrollaron? …Es más caro que la carne normal pero sabe mucho peor. Simplemente no puedo soportarlo.”

“¿No lo hacen a propósito sin sabor para que los espíritus de los soldados no cambie basándose en si les gustan los alimentos de ese día o no? Las personas tienen diferentes gustos cuando se trata de comida, así que no pueden hacer algo que les guste a todos.”

“¿Así que nos alimentan con algo que todos odiarán? ¡Qué estupidez!”

“La comida es pagada por los impuestos de las otras personas, así que no deberías quejarte. Aunque tengo que admitir que atrapar un venado y asarlo con algo de sal sería mucho mejor.”

Quenser hizo ese comentario sin pensarlo demasiado, pero hizo que Heivia se paralizara por alguna razón.

Desvió los ojos llenos de admiración hacia el rostro de Quenser.

“…Eres todo un estudiante de campo de batalla. En verdad eres un genio.”

“Hey.”

“Tienes razón. Si no no nos dan comida sabrosa, simplemente tenemos que atraparla por nuestra cuenta.”


Parte 3[edit]

Y así Heivia lanzó a un costado su pala, tomó su rifle militar, y se dirigió al exterior de la zona base. Un bosque de conífera que parecía salir de la blanca nieve rodeaba el área. Es un área natural que parece como si se pudieran encontrar más animales salvajes de los que uno quisiera.

Quenser fue arrastrado hasta ahí, pero bajó el rifle que Heivia le había dado para que cargara.

“Regresemos. Los superiores nos buscarán después de que se den cuenta. Ya puedo escucharlos hablando sobre la falta de amor por los animales o algo así.”

“Vamos, sé que prefieres comer un poco de carne jugosa en vez de esas raciones que saben a gelatina de petróleo. Y no entiendo porque te felicitan por dispararle a un soldado enemigo, pero se molestan si le disparas a un animal.”

“Eso es porque las balas no son gratuitas. Utilizaron el dinero de los impuestos para comprarlas para poder matar soldados enemigos, así que supongo que simplemente no les parece que se gasten en cualquier cosa,” explicó Quenser, pero Heivia no le prestaba atención.

Estaba dirigiéndose a las profundidades del frondoso bosque, siguiendo los rastros de un ciervo en la nieve.

(…No seguiré con esto.)

Quenser sujetó firmemente su rifle y se sentó en una roca cercana.

Desvió la mirada hacia la zona base de mantenimiento.

Sin embargo, no estaba observando la línea de edificios de concreto reforzado. La zona base a la que pertenece Quenser es una base móvil, así que está constituida por un gran número de vehículos. Esos vehículos base son mucho más grandes que los enormes camiones de remolque. Los cuarteles de los soldados, la torre de control del radar, y todo lo demás estaba ubicado a bordo de esos grandes vehículos. Incluso el área de mantenimiento del Objeto estaba creada al alinear varios camiones gigantes que tenían docenas de metros de longitud.

Ese es otro aspecto de las reglas de la guerra que los Objetos han cambiado.

En vez de fortificar una sola posición defensiva, es más importante militarmente el ser capaz de enviar rápidamente al Objeto a cualquier lugar en el que se necesite.

Quenser pensaba mientras observaba esa base de la nueva era.

(Mis superiores con sus medallas militares están sentados en una habitación cálida bebiendo café mientras esperan a que regrese el Objeto.)

Sin embargo, guardar rencor no reduciría el frío de Alaska y Heivia tenía razón sobre Quenser sintiéndose harto de las raciones con sabor asqueroso.

Quenser buscó en el bolsillo del uniforme militar al que aún no se había acostumbrado. Sacó el kit de supervivencia que le fue entregado junto con el cuchillo que no sabía como utilizar. El kit tenía todo lo necesario para tratar heridas así como herramientas para encender un fuego o atrapar un pez.

(En una era en la que los Objetos se encargan de todo, incluso esto es un desperdicio de impuestos.)

Cuando está guardada, la caña de pescar es tan larga como un bolígrafo, pero cuando se extiende, mide unos 50 centímetros y prece el tipo de caña que se usaría para pescar wakasagi. Sin embargo, está hecho de algún tipo de carbón militar así que su resistencia y flexibilidad son excepcionales. En vez de cebo, el kit contiene diferentes tipos de señuelo. Parece que intentaron encontrar una manera de permitir que uno pesque sin tener que gastar nada de cebo.

Quenser caminó por un tiempo y encontró un arroyo serpenteante. Quebró el hielo cubriendo la superficie y dejó que el cordón colgara hasta adentrarse en el agua.

“Ahh, hoy en verdad es un día tranquilo,” murmuró a pesar de encontrarse en la línea frontal de un campo de batalla.


Parte 4[edit]

Sin embargo, un estudiante novato no puede usar un kit de supervivencia tan fácilmente. No queda claro si Quenser sería capaz de atrapar un pez con una caña adecuada, así que no era de sorprender que no atrapara ninguno sin importar lo mucho que esperara.

Escuchó disparos intermitentes a la distancia.

Por supuesto, no eran soldados enemigos aproximándose, era Heivia persiguiendo ciervos con la esperanza de conseguir alguno para la cena de esa noche. En ese día y época, la idea de soldados de carne y hueso atacando una zona base de mantenimiento para un Objeto es algo impensable. Es como intentar destruir el muro de un refugio nuclear al embestirlo.

Justo mientras Quenser pensaba sobre ello, escuchó pasos crujiendo contra la nieve.

“¿Qué está sucediendo?”

Al darse la vuelta, encontró a una chica con expresión confusa. La chica parecía tener unos 14 años y se veía mucho menos adecuada para el ejército que un estudiante de campo de batalla como Quenser.

Tenía cabello rubio y sedoso que le llegaba a los hombros y piel blanca. En vez de un azul puro, sus ojos eran de un azul como el cielo y parecía estar observando siempre a la distancia así que era difícil detectar sus emociones.

Las delicadas líneas de su cuerpo iban más allá de ser meramente delgadas.

Su pregunta parecía referirse a los disparos distantes en vez de al propio Quenser.

Quenser respondió directamente.

“Tendremos barbacoa esta noche. Yo estoy a cargo del salmón y Heivia está a cargo del ciervo. Tal vez fui yo al que se le ocurrió, pero no sé ni siquiera si la carne de venado sea sabrosa. Nunca la he probado, así que tengo mis dudas. Sólo espero que no sepa muy extraño.”

“…Morirán jóvenes si comen barbacoa sin nada de vegetales.”

La chica soltó un suspiro con la expresión de alguien que abrió una caja para encontrar algo nada interesante en su interior.

Quenser desvió la mirada de la caña de pescar que no mostraba señales de movimiento sin importar todo lo que esperara.

“¿Hacia dónde te diriges, princesa?”

“¿Intentas provocar mi enojo?”

La expresión de la chica permanecía relativamente sin cambio alguno, pero después de eso parecía un poco ofendida.

Sin embargo, Quenser y la chica apenas se conocían y él no estaba seguro sobre qué más decir. Ella seguramente le habló sólo por impulso. Quenser realmente dudaba de alguna situación en la que él necesitara comunicarse con aquella chica.

Después de todo, ella era una Élite, una piloto de las gigantescas armas conocidas como Objetos.

Mientras ayudaba en el área de mantenimiento de Alaska, intercambió simples saludos con ella, pero nunca pensó que eso sería suficiente para crear algún tipo de amistad. Sus posiciones se encontraban simplemente demasiado alejadas. Él era un estudiante de medio centavo y ella tenía una posición que muy pocas personas poseían incluso dentro de una sola nación.

A diferencia de Quenser y los demás, ella llevaba puesto un traje exclusivo para los pilotos Élite. El traje es un poco difícil de describir. Claramente es distinto a un uniforme militar normal. Es principalmente un traje color azul marino que comienza desde el cuello y cubre incluso sus manos y pies. Las botas y guantes parecen ser removibles y están conectados solamente con broches.

Sobre eso, lleva puesto un traje blindado negro para proteger su torso y un tipo de bolsillo que se extiende como una minifalda. Aparentemente, el fondo del traje y la parte superior del bolsillo se conectan cuando se encuentra manejando el Objeto. En lo que podría considerarse una tradición militar, la parte superior de su uniforme tenía un cuello de uniforme de marinera que de alguna manera se veía como parte de un uniforme escolar de algún país seguro.

El traje es altamente resistente al agua así que puede ser utilizado al trabajar bajo el agua e incluso puede detener el flujo sanguíneo a la parte inferior del cuerpo para preservar el funcionamiento del cerebro al igual que los trajes de la fuerza aérea. El traje especial concuerda demasiado con el Objeto por el hecho de que ambos superan a las antiguas ramas de la milicia.

Quenser recuerda haberse sorprendido cuando vio por primera vez esos ojos color azul cielo en el área de mantenimiento. Al principio creyó que eran realmente brillantes, pero se equivocó. Cuando maneja el Objeto, débiles rayos infrarrojos son utilizados para permitir que incluso los movimientos de sus ojos actúen como dispositivos de entrada. La larga exposición a ese láser ha clarificado el azul original de sus ojos.

Ese esclarecimiento no era una destrucción no deseada del funcionamiento de sus pupilas por el láser. En vez de eso, era un avance que le permitía al láser ser mucho más efectivo, así que sus ojos no se clarificarán más una vez que alcancen cierto punto.

La chica desvió esos ojos claros que son símbolo de un Élite hacia Quenser y comentó.

“El Objeto está en servicio. No tenía nada que hacer, así que estaba vagando en el exterior. Fue en ese momento cuando escuche lo que parecían disparos.”

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“…Oh, maldición. ¿Lo escuchaste desde la base? Entonces probablemente nos estén esperando para sermonearnos.”

“Y la anciana comandante estaba gritando algo como ‘ese estúpido mocoso huyendo de aquí y gastando una oportunidad perfecta para aprender algo ya que el Objeto está pasando por mantenimiento’.”

“¡Oh, maldición! ¡¡Esto es peor de lo que pensaba!!”

Quenser comenzó a correr de regreso hacia la base, pero entonces…

“…No, espera. Incluso si regreso ahora, recibiré el sermón de todas formas, así que mis opciones son ser regañado con las manos vacías o ser regañado después de atrapar algún salmón. …Ya veo, ya veo. No me iré de aquí hasta atrapar al menos uno incluso si muero primero.”

“Si actuaras con más madurez y no hicieras cosas como esta, no se enojarían contigo tan frecuentemente.”

Quenser regresó a la caña de pescar prácticamente por ser su único medio de escape y la chica lo observaba con expresión sorprendida. Tal vez en verdad no tenía nada mejor que hacer o no estaba acostumbrada a estar con alguien que no fuera un verdadero soldado (para los soldados, manejar un Objeto era cuestión de vida o muerte, así que intentaban mantener su distancia de la chica Élite para evitar que ocurriera algo inesperado) porque continuaba caminando por ahí. Esto era distinto a cuando él ayudaba con el mantenimiento porque en ese momento sólo intercambiaban palabras como de negocios.

(… ¿Podrá ser que esta princesa también está cansada de las raciones, así que está interesada en el salmón?)

Quenser no se atrevía a decir eso en voz alta porque estaba seguro que eso la haría molestarse mucho más.

Así que continuó pensando en algún tema de conversación, pero la chica continuó hablando antes de que se le ocurriera cualquier cosa.

“¿Viniste aquí para estudiar los Objetos, cierto?”

“Sí. Si puedo sobrevivir ayudando con el mantenimiento aquí en la base por tres años, no me espera otra cosa más que éxito cuando regrese a casa.”

“¿Por qué esta base?” la chica preguntó con curiosidad. “Sabes que tipo de Objeto manejo en esta base, ¿no es cierto?”

“Es un Objeto Compuesto Multi-usos. …En otras palabras, puede ser usado libremente en cualquier ambiente de la Tierra y en cualquier condición climática. Es el tipo de arma más estandarizada. Funciona tanto en la tierra como en el agua.”

“Estándar es otra forma de decir pasado de moda,” la chica suspiró. “Los Objetos de segunda generación no son tan codiciosos como para declarar que funcionan en todos lados. Un objeto fabricado para pelear en el desierto sin ninguna capacidad de pelear en cualquier otro lado acabará con un Objeto normal en una pelea en el desierto.”

Esa era una teoría que había comenzado a esparcirse gradualmente entre la industria de fabricación de Objetos.

Cuando los primeros Objetos comenzaron a aparecer en el campo de batalla, un Objeto compuesto que podía pelear igual en cualquier campo del mundo era un rey de las bestias sin enemigos naturales. Sin embargo, cuando múltiples Objetos comenzaron a aparecer en los distintos campos de batalla alrededor del mundo, la situación cambió por completo.

Un modelo compuesto que podía ser usado en cualquier lado no tenía debilidades verdaderas. Sin embargo, eso también significaba que no tenía fortalezas verdaderas. Cuando la situación cambió de un Objeto acabando con armas normales a un Objeto peleando contra otro Objeto, la pregunta sobre cómo hacer que el Objeto propio superara a los demás se volvió en un tema principal.

Una respuesta a esa pregunta fue crear un Objeto que tuviera fortalezas definidas incluso si eso destruía el balance de su funcionamiento. Después de eso, ese Objeto mantendría sus actividades en el ambiente en el que era experto, dándole una ventaja sobre otros objetos cuando peleara.

“Aquí en Alaska es igual. Tenemos un Objeto normal sin desventajas y ellos tienen un Objeto optimizado con fortalezas definidas. En esta área nevada, tal vez mi Objeto no sea capaz de ganar.”

“Pero continúas utilizando ese objeto, ¿no es cierto, princesa?”

“…No tengo otra opción,” la chica conocida como una Élite respondió con algo de vacilación.

Todas las armas gigantes de 50 metros anteriores se convirtieron en “modelos de vieja generación” debido a las armas más modernas, pero no cualquiera puede convertirse en un Élite que maneje esos objetos.

Ellos son las personas que cumplen con cada una de las condiciones bajo una investigación ejecutada utilizando los diagramas de condiciones del ejército.

Además, un humano sólo se convierte en una terminal que controla a un Objeto después de desarrollar habilidades que superan fácilmente a aquellas de un genio al refinar su naturaleza y mejorarla con métodos eléctricos y químicos para que concuerden con un Objeto individual.

Una vez que un Élite se ha desarrollado tanto, su destino queda conectado con el de su Objeto.

Los Élites no pueden manejar cualquier objeto. Solamente pueden manejar el Objeto para el que fueron perfeccionados. De hecho, tal vez no sea incorrecto pensar en un Élite como alguien con el cerebro modificado para un Objeto específico.

Los Élites solamente pueden manejar el Objeto desarrollado para ellos o un objeto más desarrollado pero que utiliza el mismo diagrama de árbol.

En ese caso, ¿qué sucedería si el tipo de Objeto que utilizas se vuelve obsoleto?

“Tal vez no sea capaz de ganar,” la chica Élite que maneja al invencible Objeto comentó de pronto. “Tal vez no sea capaz de resistirlo.”

Esa chica sufrió modificaciones en su cerebro por el único propósito de manejar ese Objeto.

“Como alguien que ha trabajado en el mantenimiento del Objeto en vez de simplemente creer en él, deberías comprenderlo. ¿Entonces por qué viniste aquí?”

“Porque valoro las cosas de forma distinta,” Quenser respondió después de pensar un poco. “Sólo los soldados se obsesionan tanto con lo que es fuerte y lo que es débil. Yo soy un estudiante. Si no me quedo con un Objeto con valor académico, no ganaré el conocimiento y habilidades que necesito.”

“¿…?”

“Si aprendo de un modelo estandarizado y básico, podré utilizar ese conocimiento en donde sea. Por otro lado, si estudiara un modelo que ya ha sido mejorado de alguna forma, no podría usar ese conocimiento en ningún otro lado. Para un estudiante de campo de batalla, tu Objeto es la mejor opción.”

Su opinión no tomaba en cuenta ninguna de las cuestiones serias como ganar la guerra, pero podía decir ese tipo de cosas porque no era un soldado.

“Si intentas demasiadas cosas en el campo de batalla, no vivirás por mucho tiempo.”

“Es cierto, y es por eso que los estudiante de campo de batalla tienen tan bajos niveles de supervivencia. Pero estoy aquí en el campo de batalla con la esperanza de volverme rico rápidamente, así que no me quejo.”

Escuchando a Quenser diciendo eso, la chica que es una veterana de muchas peleas ladeó la cabeza en confusión como una chica normal.

“Entonces estás preparado.”

“Sí, bueno, odio trabajar lentamente a través de tareas escolares normales, así que estoy desesperado por que esta oportunidad de frutos rápidamente. Necesito estar preparado para lo que sea.”

“Hmm,” la chica Élite respondió con una reacción que la hizo ver como si fuera un poco lenta.

Y entonces…

“¿En verdad?”

“¿…?”

Esta vez, Quenser fue el que la observó confundido. Sin embargo, no parecía que la chica tuviera intenciones de continuar con la conversación. Se dio la vuelta y salió del área boscosa de Alaska, dejando al chico con su rifle y su caña de pescar.

En la vida real, las personas normalmente no piensan en las cosas extrañas que suceden.

En ese ejemplo, la razón por la que esa chica Élite habló con él de esa forma era algo que Quenser probablemente debió haber analizado un poco más.

Después de todo, los Objetos son sinónimo de guerra y los soldados de carne y hueso no valen nada.

Sin embargo, eso también significa que pensar en lo sucedido tal vez hubiera sido una pérdida de tiempo.


Parte 5[edit]

Como era de esperarse, recibieron un regaño.

Los dos idiotas llamados Quenser y Heivia fueron llevados a los cuarteles para los oficiales comisionados distinguidos. Justo como todo lo demás, esos cuarteles se encuentran dentro de enormes vehículos que conforman la base. Tres vehículos se encontraban estacionados uno al lado del otro, creando un edificio rectangular del tamaño de un edificio de unos cuatro pisos. Por supuesto, los vehículos podían ser separados en cualquier momento para poder pasar por un camino más angosto.

Quenser y Heivia se encontraban en el área más alejada equivalente al cuarto piso de los cuarteles oficiales.

(Malditos burgueses obsesionados con Japón.)

No era simplemente debido a la decoración interior de la habitación por lo que los dos chicos tuvieron ese pensamiento al unísono. Tenía más que ver con el hecho de que estaban siendo obligados a sentarse usando el estilo japonés sobre el duro suelo.

Mientras tanto, su oficial superior, Froleytia-sama, no estaba sentada en el suelo duro. La mitad de la habitación se encontraba más elevada que el resto y tenía esteras de tatami cubriendo el suelo. Estaba sentada en frente de un escritorio de patas cortas en medio de las esteras de tatami. Estaba sentada sobre una almohada zabuton tan suave que un gato seguramente nunca se levantaría nuevamente después de recostarse ahí.

Era una hermosa mujer con cabello largo y plateado.

Tal vez su cabello estaba un poco teñido porque el plateado despedía un leve brillo azul.

Es alta, delgada, y tiene enormes pechos que se distinguen a la perfección gracias a su uniforme. Las piernas envueltas con medias negras que salen de la falda pegada de una oficial no son simplemente delgadas. Desborda una belleza racional que de alguna manera llama bastante la atención. Sus labios coloreados con un tono pálido sujetaban una pipa. No era el tipo de pipa corto y grueso amado por los detectives europeos. En vez de eso, era un kiseru japonés largo y angosto que casi medía 30 centímetros de largo.

Quenser no sabía si era por el tipo de tabaco que estaba fumando o si había un aroma mezclado con su cabello, pero podía distinguir un leve aroma dulce.

“¿Saben por qué fueron llamados aquí, correcto?”

Sus palabras eran más frías que las planicies nevadas fuera de la ventana cuando entraron a los oídos de Quenser y Heivia.

Por supuesto, sabían a la perfección la razón por la que habían sido llamados ahí.

Abandonaron sus deberes de excavación para buscar comida fuera de la zona base de mantenimiento. Ya que Heivia también estuvo disparando su rifle militar por todo el lugar, sería extraño si esa chica no estuviera molesta con ellos. Este problema se encuentra a un nivel en el que podrían ser lanzados fácilmente a los cuarteles de detención o posiblemente incluso ser llevados a una corte marcial.

“(… ¿Qué hacemos, Heivia? ¡¡Por eso te dije que nos detuviéramos!! ¡¡Todo fue por las raciones, pero preferiría comer solamente nieve durante los próximos tres días a esto!!)”

“(…¡¡Cállate, maldición!! No puede ser, ¿en verdad tiene 18 años? ¡¡Sé que los soldados normales no son necesarios en el campo de batalla en estas épocas, pero apuesto a que ella podría derribar un Objeto utilizando solamente su puño apretado!!)”

“¡Quenser, Heivia!”

Al escuchar sus nombres, ambos enderezaron sus espaldas por la sorpresa. Froleytia ni siquiera observaba en su dirección. Estaba jugando con un broche de cabello largo y angosto, de unos 20 cm que estaba fabricado como un kanzashi japonés mientras movía un objeto similar a un bolígrafo sobre una pizarra en su escritorio.

La pizarra es conocida como una tableta.

Quenser pensaba que los aparatos eran usados normalmente para dibujar usando una computadora, pero…

“¿Esto te interesa, Quenser?”

“¡¡S-sí!!”

“Tal vez no se encuentre al mismo nivel de ustedes dos que gastan su tiempo buscando comida, pero estoy un poco ocupada. Tal vez no parezca nada comparado con ustedes intentando desesperadamente enterrar la carne y pescado que consiguieron en la nieve para mantenerlo, pero necesito comandar a distancia una operación en una pequeña isla en el Pacífico mientras estoy aquí en esta zona base de Alaska.”

“U-umm…”

Quenser movió solamente sus ojos para observar el muro a un costado. La pared entera era un gigantesco monitor LCD que mostraba un gran mapa del océano y algunas islas. Marcas rojas con forma de V continuaban apareciendo dependiendo de la manera en la que Froleytia manipulaba la tableta.

“Sí, de hecho es bastante simple. Hago marcas en esta pizarra y el Objeto gigante en modo de espera lanza un bombardeo a larga distancia que acaba con las bases de las guerrillas. En realidad es simple, ¿no lo creen? Por favor, díganme que así lo creen,” Froleytia dijo de manera indiferente mientras continuaba agregando más marcas. “Las tabletas son muy útiles. Incluso, parece como si pudiera leer la intensidad de mis agallas dependiendo de cuánta presión ejerzo mientras escribo. Siento que la operación a larga distancia de hoy está yendo especialmente bien.”

Debía estar bastante molesta mientras enviaba sus órdenes porque un extraño sonido salía del bolígrafo de plástico que sujetaba en su mano.

Cuando imaginaron los trozos de carne volando por los aires en algún lugar del mundo cada vez que ella hacía una marca, Quenser y Heivia comenzaron a temblar.

“Como iba diciendo, estoy un poco ocupada comandando múltiples zonas base y unidades a la vez, pero entonces algunos idiotas decidieron darme más problemas. …¿Por cierto, se imaginan lo que está sucediendo dentro de mi corazón ahora mismo?”

“¡Sí, señorita!! ¡¡Aunque la verdad preferiría no imaginarlo!! ¡¡Puedo deducir que está bastante molesta, Froleytia-san!!”

“Bien. Me alegra tener subordinados tan excelentes. Los tengo, ¿cierto? Asientan si están de acuerdo,” Froleytia comentó, finalmente viendo en su dirección con una sonrisa sádica.

Después de que terminó de dar órdenes a las unidades del Pacífico y haber revisado que la operación estaba completa, su expresión cambió a una totalmente despreocupada.

“¿Entonces qué lograron atrapar? Ya tuve suficiente de esos borradores comestibles a los que llaman raciones.”


Parte 6[edit]

Al final, el problema terminó de tal forma que la cena de esa noche se escuchaba como si fuera a ser algo espléndido (aunque Quenser y Heivia aún tenían que correr 20 km en la nieve como castigo), pero aún había algo de tiempo hasta la hora de comer.

“¿¡Quieres decir que ese maratón del infierno comienza ahora!?” Quenser preguntó mientras se preparaba para la respuesta, pero Froleytia negó con la cabeza.

“Eres un estudiante de campo de batalla. Si no te envío al área de mantenimiento para estudiar el Objeto, creo que la anciana a cargo terminará gritándome a mí.”

“¿¡Uuhhh!? ¡¡Olvidé que también dejé de hacer eso!! ¡¡Lo que significa que también me tocará un castigo por parte de la anciana que incluso puede derrotarte!!”

“Oh, y Heivia, puedes continuar cavando por tu cuenta. Asegúrate que la pista sea utilizable al atardecer. La unidad aérea ha estado quejándose.”

“¡¡Noo!! ¡¡Eso es peor que una carrera de 20 km!! ¿¡Y por qué no la unidad aérea mueve sus traseros y me ayudan un poco!?”

Y así Quenser se separó de Heivia y se dirigió al Objeto en el área de mantenimiento.

Era un edificio gigante que cubría por completo al arma gigantesca que medía más de 50 metros de largo. Al igual que los cuarteles oficiales, estaba compuesto por varios vehículos conectados.

Vehículos con plataformas de 10 metros de ancho estaban alineados en ambos lados y dos muros rápidamente construidos estaban colocados con un techo conectándolos. En general, se veía como la sección de una bodega. La enorme área de mantenimiento estaba constituida de varias zonas así conectadas.

Además de las persianas normales, el área de mantenimiento también tenía sus métodos de emergencia para liberar al Objeto. Los vehículos base que conformaban el área de mantenimiento estaban conectados rodeando al Objeto, así sería fácil separarse y alejarse del objeto cuando necesitara irse. Ya que ese método destruyó el suelo del área, normalmente no era usado.

Quenser entró al edificio gigante por una pequeña puerta trasera especial para los soldados de mantenimiento.

El Objeto de 50 metros que era el símbolo del poder militar era una vista impresionante.

Rodeando el reactor en su centro se encontraba un grueso muro como los que se usan para un refugio nuclear. El muro creaba una forma como de esfera. Su tren de aterrizaje se encontraba en forma de Y inversa y no se movía por medio de llantas como un vehículo normal. En vez de eso, usaba la electricidad estática para flotar sólo un poco sobre el suelo. La teoría detrás de ello era completamente diferente, pero sus movimientos hacían ver como si la tierra debajo se moviera para poder deslizarlo.

Por supuesto, simplemente cubrir el suelo con electricidad estática no es suficiente para hacer que una construcción tan grande flote. Un atomizador que actúa como repelente contra el Objeto electrificado es rociado sobre el suelo mientras avanza.

Utiliza un láser como medio de propulsión.

El poder de la electricidad estática crea un pequeño espacio entre el Objeto y el suelo y el aire en ese espacio es calentado al lanzar repetidamente un láser que es reflejado y concentrado. Ese calor causa que el aire se expanda explosivamente lo que provee la propulsión. Es la misma teoría usada en las plataformas de lanzamiento láser para los transbordadores.

Sus piezas principales de equipo militar son los 7 brazos que se estiran desde la parte posterior de la esfera.

Las 7 pistolas gigantes conectadas a ellos pueden atravesar incluso a otros Objetos del mismo rango.

También posee cerca de otras 100 baterías de artillería cubriendo la superficie de la esfera. Se ve menos como un arma optimizada y más como una extraña arma a la que se le instaló todo tipo de armamento que se le ocurrió a su creador.

En tiempos modernos, es la piedra angular de la milicia.

Es la línea divisoria en la historia de la guerra.

Es un Objeto.

Más de 200 gruesos cables similares a los que son usados con las grúas estaban conectados a los muros y el techo, anclando a la figura gigante en su lugar. Incontables pasillos recorren el aire y muchos soldados que llevan puesta ropa de trabajo estaban inmersos en varios tipos de trabajo.

De pronto, el fuerte sonido de una llave golpeando un riel de metal resonó por el área.

Quenser alzó la vista en sorpresa y vio a una anciana gritándole desde el pasillo equivalente a un tercer piso.

“¡Así que aquí estás, chico! ¡Deberías agradecérmelo! ¡Estoy dispuesta a tomar cualquier ayuda que se ofrezca, así que incluso usaré a un niño maleducado como tú! ¡¡Toma unas herramientas y ven acá!!”

“¡¡Perdón por el retraso!! ¡¡Sobre mi castigo…!!”

“Eso no importa, eso no importa. ¡¡Un soldado de mantenimiento demuestra su valor con resultados!!”

Al escuchar eso, Quenser se dirigió al tercer piso usando una escalera simple que podía ser desarmada presionando un botón.

“(…Ohh. Gracias a dios que es una anciana comprensible. Y yo pensando que debía tenerle miedo.)”

“(…Bueno, si termina siendo un inútil siempre puedo meterlo dentro de un tambo vacío y golpearlo con un bate de metal desde afuera.)”

Mientras ambos murmuraban sus respectivos comentarios de tal forma que el otro no pudiera escucharlo, comenzaron su trabajo en el pasillo del tercer piso.

La anciana estaba trabajando en algo relacionado con el sistema.

La cabina del Objeto (una compuerta para escapes de emergencia) estaba localizada en la parte superior del cuerpo esférico principal. Nadie quería pensar sobre ello, pero el Élite manejando podía ser expulsado en una trayectoria diagonal en caso de emergencia.

En ese momento, docenas de barreras estaban abiertas para crear una ruta al centro de la esfera y la luz de los monitores de la cabina podía distinguirse brillando en lo profundo como si fuera la abertura de un túnel. El túnel no era un simple camino a la cabina. También se dividía para conectarse con otros lugares como el cuarto de mantenimiento del reactor, la gruesa puerta de doble capa en donde se agrega más combustible, o el cuarto para intercambiar la caja conectada en donde los gases de escape se encuentran comprimidos y sellados. Recuerda un poco a un túnel subterráneo hecho de barreras y rieles intercambiables.

Mientras tanto, la anciana estaba recargándose contra el pasamano cerca de ese túnel y observando un aparato portátil.

“Eso conecta directamente con el sistema del Objeto inalámbricamente, ¿cierto? Si no necesitas un largo cable para conectarlo, ¿en verdad hay alguna necesidad de abrir todas las barreras hasta llegar a la cabina…?”

“Idiota. Los muros como barreras del Objeto interrumpen las señales electromagnéticas. Si no lo hicieran, un Objeto enemigo podría meterse con el sistema a media pelea.”

De pronto, un destello de luz blanco azulado surgió en la orilla de su visión, así que ambos se quedaron en silencio. Un soldador estaba trabajando en el blindaje del Objeto.

El cuerpo principal del Objeto mide más de 50 metros, pero no fue hecho al verter acero derretido en un molde ridículamente gigante. Hojas de acero cerca del tamaño de un tatami son preparadas y docenas, cientos, miles, y diez miles de ellas son fisionadas para crear la esfera gigante.

El punto de las miles de delgadas hojas es dispersar y distribuir el impacto en vez de suministrar el poder defensivo de un muro grueso. La teoría es similar a la de un chaleco antibalas simple, pero utiliza tantas hojas de acero que incluso puede resistir la onda de impacto de un golpe nuclear.

“¿Se le llama blindaje cebolla, cierto? No solo es resistente, las piezas pueden ser cambiadas fácilmente cuando un Objeto enemigo las daña. A quien quiera que se la haya ocurrido la idea merece el Premio Nobel.”

“Puede que se escuche simple, pero cada hoja de armadura individual es personalizada y templada por un artista habilidoso como en una espada japonesa.”

“El acero calentado tiene unos pocos miligramos de un agente antibalas en polvo agregado, ¿cierto? Por lo que he escuchado, eso lo hace más fuerte, pero lo hace más difícil de reutilizar.”

“Todo es gracias a las habilidosas manos de los artesanos. Una máquina simplemente no puede distribuirlos bien, así que termina siendo un poco más frágil.”

Quenser y la anciana miraron hacia abajo desde el pasillo justo mientras un montacargas llevando un paquete de hojas metálicas pasaba por ahí. El montacargas tenía “¡¡Una preciosa victoria para la princesa Milinda!!” escrito en el costado con enormes palabras en inglés.

(Se refiere a la princesa de hace rato.)

Mientras Quenser pensaba eso, la anciana continuó hablando a su lado.

“Personalmente, me siento más sorprendida por el mecanismo con el que se le suministra electricidad desde el reactor incluso hacia los láseres exteriores de la superficie exterior sin necesidad de usar un solo cable.”

“Utiliza un suministro energético de estilo de pizarra de circuito impresa, ¿cierto? Al colocar material aislante y material conductor en su lugar y calentándolos en las placas metálicas, la energía puede ser suministrada sin tener que reducir sus defensas al crear agujeros en el blindaje para introducir cables. La persona a la que se le ocurrió eso también merece un Premio Nobel.”

“En verdad, chico. Haces que todo se escuche como si fuera hecho muy fácilmente.”

La anciana sacudió la cabeza. Al mismo tiempo, ejecutaba el mantenimiento del software del Objeto con rápidos movimientos de sus arrugados dedos sobre el aparato portátil.

Mientras continuaba trabajando, le preguntó algo a Quenser.

“¿Así que esperas convertirte en ingeniero de armas?”

“¿Eh? Oh, quiero ser más como un ingeniero de Objetos. Bueno, para una persona normal como yo, pensé que esa sería la mejor posición para obtener una vida cómoda. En cuanto a dinero y estatus social, eso supera fácilmente a las clases bajas y a los nobles.”

“No obtendrás una buena vida por el simple hecho de tener mucho dinero. ...Bueno, es tu vida chico, así que no te detendré. ¿Así que cuál piensas hacer tu campo de experiencia como ingeniero en armas?”

“Estaba pensando enfocarme en la estructura total.”

“Idiota. Ningún novato en entrenamiento obtiene un trabajo armando Objetos enteros. Es como decir que tu sueño del futuro es convertirte en billonario. Es simplemente demasiado indefinido. ¿Los estudiantes como tú no comienzan usualmente analizando lo más conveniente como el campo de replicación para poder obtener un trabajo con un contraste de defensa y después aprenden cosas más complejas ahí?”

“Sí, bueno, no me llama demasiado la atención eso de la replicación.” La idea tal vez le recordó a algo más, porque Quenser mostró una expresión desagradable. “Ese es el campo que inventa nuevas máquinas de movimiento basándose en los movimientos de los insectos y otros animales, y no me gustan las arañas y cucarachas y cosas así. Aunque básicamente lo único que haces es observar insectos, así que admitiré que la investigación para ese campo es bastante barata.”

“Cobarde. Tú serás el que al rato esté llorando por no haber prendido lo más básico.”

“Quería estudiar un Objeto con características estándar como el de la princesa como estudiante de campo de batalla para poder aprender rápidamente lo más básico sin tener que pasar por toda la demás basura.”

“¿Por qué crees que los líderes de los países construyen zoológicos y museos de insectos en todas las ciudades importantes? Han gastado los impuestos de las personas para poder inspirar a las jóvenes promesas para que intenten diseñar Objetos.”

La anciana suspiró.

Entonces Quenser desvió la mirada hacia la entrada de la ruta similar a un túnel que llevaba a la cabina.

“Hablando de jóvenes promesas, ¿no es hora de la búsqueda de pilotos… o más bien, de selección de Élites? Cuando estaba en la escuela en mi país, oficiales de gobierno vestidos de negro se pasaban por ahí.”

“Tienen que hacerlo cuatro veces al año, pero probablemente tampoco encontrarán a alguien calificado esta vez.”

“Los Élites deben ajustarse a algo llamado Elemento, ¿cierto? ¿Qué es eso?”

“…Es el término general para las condiciones que debe cumplir el piloto de un Objeto,” los dedos de la anciana se detuvieron sobre el aparato portátil y su tono de voz se volvió un poco más frío. “Pero, eso no es algún tipo de poder ESPer que les permita operar el equipo especial. Bueno, es cierto que tiene que ver con una característica especial obtenida desde el nacimiento, pero los Élites son un proyecto militar para refinar exhaustivamente el talento natural usando incluso cosas como estímulos eléctricos y sugestiones. Con ese método para crearlos, el impedimento más grande son los derechos humanos en vez de la falta de dinero o equipo.”

“¿Quiere decir…?”

“Se ignoran por completo los derechos humanos de aquellos que están calificados, pero nadie se queja e incluso los propios Élites en verdad desean pelear por su país a pesar de haber sido desarrollados de esa forma. Las personas que cumplen con esas condiciones no son exactamente comunes. …Los Élites que están en desarrollo manejarán las armas definitivas y eso sería un problema si en algún momento apuntaran sus armas hacia su propio país.”

En ese momento, escucharon un sonido mecánico y la anciana agregó con un susurro, “No hables con ella.”

Un asiento salió de la ruta similar a un túnel usando el elevador de la cabina. La princesa Élite estaba sentada en el asiento con la parte superior de su cuerpo sujeta por un cinturón de seguridad con forma de H.

“Así que finalmente estás aquí, dormilona.”

“Lo lamento. No tengo excusas.”

“Chico, tengo un trabajo para ti. Revisa el mecanismo de expulsión de emergencia. Nadie más lo hace porque dicen que es de mala suerte.”

En cualquier época, ese es el tipo de trabajo que se le deja a un novato. El novato se encarga de los trabajos inútiles o de mala reputación mientras observan a los profesionales haciendo su trabajo por el rabillo del ojo.

Quenser rodeó hasta llegar a la parte posterior del asiento en el que se encontraba la chica y comenzó a trabajar.

“Hablando de supersticiones, ¿hay alguna razón por la que el Objeto sea totalmente blanco? ¿O sólo es camuflaje para usar en la nieve?”

“Al principio, se usaba camuflaje para que concordara perfectamente con su ambiente,” respondió la chica.

“Pero el rey de las bestias no tiene enemigos naturales y no necesita ocultarse, y pagar por la pintura es bastante caro, así que ahora simplemente es blanco. …Sin mencionar que algo de 50 metros no puede ocultarse muy fácilmente,” agregó la anciana.

“Hehh. No es lo mismo que las cosas de replicación de las que estábamos hablando, pero escuché rumores de que había un proyecto para intimidar al enemigo con patrones basados en las bestias feroces o insectos.”

“También existe un plan para crear un modo terrible que emita continuamente un desagradable chirrido cuando giren los engranes. Ninguno de esos planes llegó más allá de eso.”

“¿...?”

“El enemigo no es el único que ve al Objeto. Sería algo inútil si acabara con la moral de tus aliados y no pueden exactamente mostrarle un Objeto horripilante a los ciudadanos en un desfile en alguno de los países seguros.”

“Ya veo,” respondió Quenser. “¿Entonces qué sucede con esa espada colgando del techo con una cuerda?”

“Es un amuleto de buena suerte tradicional.”

“Asegura la victoria,” la chica agregó como canturreando.

Mientras escuchaba, Quenser continuaba moviendo su llave.

Escuchó un leve chasquido y entonces la cabeza de la chica se sacudió justo cuando iba a agregar algo más sobre el amuleto de buena suerte. Quenser observó dubitativamente la espalda de la chica desde la parte posterior del asiento.

“No puedo respirar.”

“¡Ah, mierda! ¡¡Idiota!! ¡¡No te metas con el ajuste del cinturón!! ¡¡Estás constriñendo a la princesa!!”

“¿¡Qué!? ¿¡Acabo de hacer algo realmente malo!?”

“No puedo respirar,” la chica repitió.

Quenser sujetó rápidamente su herramienta, pero no sabía que había hacho para afectar el cinturón.

La anciana corrió hacia el pequeño elevador de trabajo.

“¡¡Iré a buscar un cuchillo!! ¡Chico, encárgate del trabajo físico! ¡¡Jala el cinturón para crear un espacio y así evitar que la princesa se sofoque antes de que regrese!!”

Mientras Quenser se sentía realmente nervioso, la anciana se fue.

Rápidamente rodeó el asiento hasta quedar de frente.

“¡¡L-lo lamento!!”

“No importa… Solo haz algo.”

“¡¡Muy bien!!”

Quenser decidió hacer lo que le dijo la ancana y jaló el cinturón para evitar que la chica se sofocara.

…Pero el cinturón con forma de H estaba presionando el pecho de la chica de tal forma que enfatizaba su busto.

“Umm…”

Los dedos de Quenser se paralizaron.

Para sujetar el cinturón, tendría que hacer una forma de gancho con sus dedos y pasar por debajo del cinturón, pero eso requeriría que tocarla el pecho de la chica.

(A pesar de sus proporciones de niña, aún tiene un poco…)

Mientras los pensamientos sin sentido se apoderaban de la mente de Quenser, escuchó la débil voz de la chica.

“…Voy a morir.”

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“¿¡...!?”

Es cierto. No podía titubear en una situación como esa.

(Estoy intentando salvar una vida. Esto es serio. Me equivoqué- Necesito redimirme por ello. Pero esos son sus pechos. No, no, ese no es el problema. Necesito mantenerme calmado. Si no me apresuro, su vida estará en peligro. Necesito salvarla. Necesito hacer lo que pueda por esta princesa. ¡¡Sus pechos!!)

“¡¡Ooohhhhhhhhhhh!!”

Después de prepararse mentalmente, Quenser estiró la mano hacia el pecho de la chica con todas sus fuerzas antes de que sus pensamientos revueltos debilitaran su resolución.

“¿¡Ee…!?”

La princesa soltó un pequeño grito como el de un pequeño animal y él se detuvo.

(Esto no es bueno. Acabo de sujetar sus pechos en vez de al cinturón, ¿cierto? No puedo estar sujetando sus pechos con expresión emocionada, eso la haría pensar que su castidad está en peligro. ¿¡Pero qué se supone que haga!? ¿¡Cómo puedo salvarla sin deshonrarla!?)

“Me-medidas de… emergencia…” la princesa logró decir mientras su rostro palidecía más y más.

“¿Qué? ¿¡Tienes alguna forma para salir de esto!?”

“Sí… pero…”

Mientras hablaba, la chica presionó un botón oculto debajo del asiento.

Inmediatamente después, el asiento en el que se encontraba explotó.

El cinturón con forma de H que la sujetaba se cortó automáticamente y su pequeña figura salió disparada por los aires. Sin embargo, Quenser no fue capaz de observar eso. Una masa de aire comprimido golpeó su cuerpo lanzándolo unos cuantos metros.

Giró después de caer sobre el pasillo y pudo ver una enorme flor blanca con el rabillo de su ojo.

Era el paracaídas de escape de emergencia.

Normalmente, el elevador de alta velocidad la sacaría de la cabina a la superficie, el asiento en su totalidad sería lanzado al aire, y finalmente el emisor de aire comprimido en el traje se activaría como tercera fase. Sin embargo, ella sólo activo la fase final lo que la lanzó casi hasta el techo.

(Ese mecanismo de expulsión en verdad trae mala suerte.)

Mientras murmuraba para sí mismo, Quenser escuchó una voz.

“Esta fue la primera vez que tuve que usar eso.”


Parte 7[edit]

Una vez que se ocultó el Sol, llegó la hora de la cena.

En vez de dirigirse al comedor, Quenser se dirigió afuera en donde caía la nieve. Comería barbacoa esa noche. Ya que él capturó al venado, Heivia obviamente también estaría ahí, pero parecía que su superior, Froleytia-sama, también estaría ahí porque según ella se preocupaba demasiado por sus subordinados.

Todos estaban aburridos ya que le dejaron todo sobre la guerra al Objeto. Si se lo hubieran ofrecido, seguramente los 800 soldados hubieran estado de acuerdo, pero Froleytia-sama decidió que eso debía mantenerse como un caso confidencial entre los tres. Después de todo, sólo tenían una cantidad limitada de carne.

Y así los tres tuvieron su barbacoa esa noche.

La comida se llevó a cabo dentro de los terrenos de la zona base de mantenimiento.

La zona base no era nada más que un conjunto de enormes vehículos y se juntaron secretamente en un espacio rodeado por instalaciones por todos lados para que el viento invernal no los golpeara demasiado. Ahí, encendieron una fogata y colocaron una hoja de acero sobre ella.

Froleytia, la oficial superior, llegó primero y estaba calentando sus manos con el fuego que ella encendió. Seguramente ella era la más ansiosa por esa cena.

“Incluso si me caliento, el frío invade todo mi cuerpo. Necesito comer algo de carne grasosa para calentarme desde el interior.”

Quenser miró de reojo las piernas de Froleytia.

“¿Qué no las medias son más cálidas que tener las piernas desnudas?”

“¿Quieres que meta tu cabeza a unas para que lo descubras, Quenser? Estas sólo son por apariencia. No dan nada más que paz mental. ¿Eliges tus calcetas basándote en cuál aislará mejor el frío? Siento celos de los chicos que pueden usar pantalones todo el año,” la chica de falda pegada comentó antes de voltear a ver a Heivia. “Buen trabajo, Heivia. Gracias a ti, la pista puede usarse para despegar en cualquier momento. Estoy segura que el grupo STOL de la unidad aérea también se siente agradecido.”

“Heh heh. No fue nada.”

“Pero en verdad la unidad aérea es totalmente innecesaria. Esos cobardes retiraron todas las armas de sus propios aviones, diciendo que era para mejorar la agilidad y la funcionalidad de sigilo. En serio, simplemente tienen miedo de que el enemigo decida atacarlos porque los vean como una amenaza. Incluso dicen especializarse en reconocimiento, pero casi toda la información de los Objetos enemigos es conseguida por las peleas de la princesa.”

“¡¡Maldición!! ¡¡Tenía una idea de que lo que estaba haciendo era algo inútil, pero en verdad me molesta que alguien más lo diga!! ¡¡Y tomando en cuenta las condiciones ambientales, probablemente para mañana esté repleta de nieve otra vez!!”

“Bueno, la era de las aeronaves comenzó su declive desde que los láseres de yodo y oxígeno comenzaron a ser usados en los bombarderos. …Las unidades eran simplemente demasiado grandes como para caber en un avión de combate pequeño. Una vez que la luz entró en acción, ser capaz de volar a la velocidad del sonido ya no importó demasiado. Y entonces los Objetos entraron a escena. Tienen todo tipo de láseres diferentes. Pueden disparar repetidamente y en cualquier dirección. Es imposible pelear contra ellos en un avión de combate. Todo lo que pueden hacer las unidades aéreas estos días es traer pizza de sus países seguros antes de que se enfríe.”

“…Fueron 700 metros. ¡¡Despejé la nieve de los 700 metros de pista por cuenta propia!!”

Mientras Heivia temblaba por la ira, Froleytia sacó la lengua de tal forma que él no pudiera verla. Después se dirigió a Quenser de manera más amigable a como normalmente da órdenes a sus subordinados.

“Por cierto, escuché que hablaste con la princesa fuera de la zona base,” preguntó la hermosa oficial superior quien incluso había mantenido sus uñas totalmente arregladas a pesar de ser un soldado de las líneas frontales.

Su tono hizo que se escuchara como si eso fuera más importante que el hecho de haber desobedecido sus órdenes.

“Umm, ¿hay algún problema con eso? Hablo con ella ocasionalmente en el área de mantenimiento, así que simplemente interactué con ella de la misma forma. ¿Debí pensar más acerca de nuestras respectivas posiciones?”

“Yo no le veo ningún problema. Aparentemente, el grupo médico le da raciones mucho peores que las nuestras para asegurarse que su salud no decaiga, pero yo opino que gracias a eso el estrés acabará con ella mucho antes de que lo haga una nutrición pobre.”

“¿No se supone que la princesa Élite tiene un edificio de recreación exclusivo? Por lo que he escuchado, supuestamente está repleto con aparatos que tienen efectos curativos digitales,” Heivia comentó de manera más educada de la que tenía planeado.

Froleytia tomó un jugoso trozo de carne de venado con los palillos que utilizaba como parte de su obsesión por Japón.

“Esa cosa cuesta muchísimo dinero, pero no es realmente buena. ¿En serio crees que podrías divertirte con materiales didácticos que te entregaran los profesores de tu escuela? Aparentemente, la princesa se pasó por ahí una vez y no ha vuelto nunca más.”

“Ya veo,” Quenser respondió mientras recordaba la conversación que tuvo con esa chica más temprano ese día.

No podía imaginarse algo que pudiera hacer sonreír a esa chica.

Ella era la chica que había dicho que tal vez no sería capaz de ganar la siguiente pelea.

Mientras esos recuerdos flotaban en su mente, Quenser preguntó, ¿Alguna vez has perdido, Froleytia-san?”

“Sí,” la chica afirmó rápidamente mientras se veía como si deseara que hubiera algo de cerveza para acompañar la carne. “He perdido tres veces cuando daba órdenes a distancia y una vez con la unidad en la que me encontraba. Fue terrible. Las críticas cuando regresé a casa fueron peores que la misma pelea. Pero no es de sorprender. Después de todo, perdí un arma usada para estrategias a nivel nacional.”

“¿Eh? Los Objetos son sinónimo de guerra, ¿cierto? ¿Qué sucede cuando el otro bando destruye tu Objeto? Dudo que puedas defenderte con un tanque o un bombardero,” preguntó Heivia, lleno de curiosidad.

“Es simple, muestras la bandera blanca,” respondió Froleytia de manera indiferente.

“¿Hah?”

“Las guerras estos días no se tratan de destruir todo. Una vez que el Objeto de un lado ha sido destruido, el ganador es decidido. Y este ganador no tiene tiempo para gastar persiguiendo a las inútiles unidades de infantería. No se ha creado un tratado oficial referente a ello, pero es uno de los hechos básicos de la guerra que ni siquiera sienten que valga la pena discutir. Si la unidad se retira rápidamente y entrega el territorio, no hay necesidad de hacer más complicadas las cosas y empezar a cazarlos.”

Viendo las bocas abiertas de los dos novatos, Froleytia mostró una expresión despreocupada.

“Ha ha. Entiendo por qué se sienten tan sorprendidos por eso. Cuando los entrenan, no quieren disminuir la tensión, así que no les dicen sobre reglas como esas. Pero sólo mírenme. Me uní a la milicia como una soldado de 13 años y he estado en varias campañas desde entonces, pero no tengo un solo rasguño. Para evitar muertes innecesarias, usamos armas como los Objetos que reúnen a toda la fuerza militar en un solo lugar en vez de que queden dispersos. Mi hermosa piel demuestra que este en verdad es un ‘campo de batalla seguro’.” Froleytia giró sus palillos levemente. “¿Sabían que la razón #1 por la que los soldados son enviados a casa desde esta unidad no es para que no sean disparados por el enemigo o que no pisen una mina por accidente? En verdad es por las peleas que surgen entre hombres y mujeres dentro de la zona base. En el campo de batalla moderno, necesitas temer más a los problemas amorosos que a las balas. ¿Ahora comprenden lo pacífico que es este lugar?”

Quenser comenzó a estar de acuerdo, pero entonces una pregunta asaltó su mente.

“Espera. Pero Froleytia-san, ¿no lanzaste bombardeos directamente a una base enemiga usando un Objeto aliado en el Pacífico hoy en la mañana?”

“Eres muy observador, Quenser. Esa no era una guerra contra un verdadero ejército. Los ataques contra las guerrillas o los terroristas no son más que operaciones de supresión, así que las reglas anteriores no se aplican. …Escuchen esto y recuérdenlo. Ese es el plan más eficiente para utilizar un Objeto. Las grandes naciones necesitan algún tipo de mecanismo para acabar con las fuerzas opuestas habilidosamente.”

Ya que el desagradable cambio en la conversación estaba arruinando el sabor de su comida, Quenser decidió cambiar de tema. El único tema además de los Objetos que se le ocurrió fue sobre la comida.

Quenser observó la carne de venado que actuaba como la parte principal de su cena y después observó a Heivia, quien se había encargado de cazarlo.

“¿Así que los soldados están entrenados para cazar? Yo sólo me encuentro al nivel en el que tal vez sea capaz de atrapar un salmón después de 3 horas.”

“Los rifles modernos tienen más que sólo miras. También tienen cámaras infrarrojas y micrófonos para buscar al enemigo. Es así para que puedas rastrear a tu enemigo de diferentes formas. Yo tampoco atraparía nada si saliera sólo con una caña de pescar. Aunque los rifles son un gasto de impuestos ya que toda la pelea se le deja al Objeto.”

Entonces Froleytia entró a la conversación mientras manejaba habilidosamente sus palillos.

“A menos que una línea de suministro para la zona base sea destruida, podemos obtener tanta comida como deseemos de nuestro país de origen. Y la base nunca recibirá ataques mientras tengamos nuestro Objeto. Incluso cuando era una soldado novata, nunca nos entrenaron para cazar animales. Al menos, ciertamente no es una habilidad que requieran los ingenieros de combate como ustedes.”

“Un ingeniero de combate… ¿hm? Simplemente no puedo acostumbrarme al sonido de eso.”

“La administración de la zona base gira alrededor de los impuestos. Si no le diéramos un trabajo a los estudiantes que andan por ahí, podría afectar al número de votos que reciban los políticos. La parte importante de las elecciones está sucediendo en el país de origen y el Consejero Flide está comenzando a preocuparse.”

Existen muchos tipos diferentes de ingenieros de combate, pero de los que estaban hablando Quenser y los demás eran soldados que manejaban explosivos. Sin embargo, no eran profesionales que los usaban para matar a soldados enemigos. En vez de eso, destruían puentes para interrumpir el camino enemigo o hacían explotar rocas para despejar su propio camino.

Para un estudiante que estaba lleno de conocimientos extraños y que no tenía las agallas para dispararle a alguien, ese papel era perfecto. También podía dedicarse a la medicina, pero la especialidad de Quenser eran las máquinas y no sabía demasiado sobre seres vivos.

“Pero entonces nuestra base está conformada de los vehículos, así que podemos acampar simplemente al manejarlos, y también tenemos al Objeto. En realidad no hay mucho que puedan hacer los ingenieros de combate.”

“No sólo se trata de los ingenieros de combate. Es casi lo mismo con todos en la zona base,” Froleytia dijo mientras estiraba sus palillos para tomar algo de salmón. “en verdad es un mundo pacífico. Se siente como si mi arma fuera a oxidarse y yo desarrollara algunos granos por el exceso de nutrición.”

“Lo sé. Mientras tengamos al Objeto, estamos a salvo. Después de tres años en una base, tengo el camino de un noble esperándome y Quenser puede regresar al país seguro y convertirse en uno de esos eruditos distinguidos,” Heivia dijo mientras golpeaba amigablemente a Quenser en el hombro.

“Están haciendo que me sienta celosa,” Froleytia dijo bruscamente, pero no se distinguía ningún rastro de celos en su rostro. Seguramente, ella prefería quedarse en su campo de batalla seguro a ser ascendida de la milicia a algún puesto político estricto.

“Sí,” Quenser agregó. “Mientras tengamos al Objeto, incluso aquellos aburridos por la paz como nosotros podemos pelear en una guerra.”

Las palabras de Quenser remarcaban una verdad del mundo.

Eso era cierto mientras tuvieran al Objeto de su lado.


Parte 8[edit]

Un día después ellos lo sabrían.

Sabrían qué tipo de infierno espera a los soldados aburridos por la paz una vez que su Objeto es destruido por un Objeto enemigo.

Froleytia dijo que simplemente tenían que alzar la bandera blanca si perdían.

Sin embargo, también comentó algo más.

No se ha hecho un tratado oficial en cuanto a eso.


Parte 9[edit]

Una explosión hace temblar los terrenos nevados de Alaska.

El gigantesco Objeto invencible que ha estado peleando a unos 10 kilómetros entre la tormenta de nieve comienza a expulsar humo negro y deja de moverse. A través de los binoculares, el asiento del piloto puede verse siendo expulsado y flotando lentamente hacia el suelo nevado con su paracaídas.

Y…

“…”

Un sonido desagradable que resuena en sus entrañas llega hasta los oídos de Quenser. El símbolo de su seguridad, el Objeto, ha sido destruido por el Objeto enemigo.

Su cuerpo principal es una esfera gigante cubierta por un grueso blindaje. En cuatro direcciones, piernas largas como de insectos se estiran hacia el suelo. Sus armas principales son conjuntos de dos cañones de plasma de baja estabilidad, cada uno midiendo 50 metros. Después de que un gas especial es cargado al cañón, una masiva cantidad de energía del reactor crea plasma súper caliente artificialmente que después es disparado. Los conjuntos de dos están localizados al frente, detrás, a la izquierda y a la derecha creando una cruz horizontal de cañones que permiten disparar en cualquier dirección. Posee un total de 8 de esos cañones. Su cuerpo esférico y sus cuatro patas poseen incontables rayos láser, cañones de riel, y cañones de Gauss, dando un resultado de más de 100 armas en total.

Solamente el cuerpo mide 50 metros y los cañones que se estiran en cada dirección le da un tamaño de más de 140 metros. La masa del tamaño de una montaña lentamente comienza a apuntar sus cañones del tamaño de puentes en su dirección. El conjunto de cañones de plasma de baja estabilidad puede deshacer un refugio nuclear enterrado en las profundidades con un solo disparo.

“Hey,” Heivia dice repentinamente mientras se encuentra perplejo al lado de Quenser. “¿Por qué está apuntando en nuestra dirección? Si el Objeto pierde, simplemente tenemos que alzar la bandera blanca y se acabó, ¿cierto? Eso es lo que Froleytia dijo, ¿¡cierto!? ¿¡Entonces por qué!? Esto no es algo para tomarse a la ligera. ¡¡Apresúrense y alcen la jodida bandera blancaaaaaaaaaaaa!!”

Quenser observa el radio que le fue entregado.

Puede escuchar un sonido intermitente proveniente de éste.

Seguramente esa es la bandera blanca digitalizada modernamente.

Froleytia debió seguir la regla que había dicho para poder terminar con la pelea. Tal vez se repuso mentalmente de forma rápida para mantener el número de subordinados sacrificados tan bajo como sea posible.

Sin embargo, el Objeto enemigo no se ha detenido.

El sonido de los cañones ajustando su puntería parece decir implícitamente que no le importa esa regla.

“Corran…” alguien dice.

Es posible que fuera el propio Quenser el que dijo eso.

“¡¡Corraaaaaaaaaaaaaaaaaaaannnn!!”

¿Los 800 soldados en el área podrán reaccionar?

Un estruendo y un rayo de luz afecta los sentidos de Quenser.

Algo parece estar intentando destruir su cráneo junto con sus tímpanos. El Objeto no lanzó misiles de metal. Está usando los cañones de plasma que utilizan el exceso de energía que producen.

¿A qué temperatura llegará eso?

Antes de que pueda pensar en eso, su conciencia es afectada.

Un rayo de uno de los cañones de baja estabilidad ha golpeado algunos de los vehículos de la base a una corta distancia de Quenser. Los vehículos usados para formar el área de mantenimiento del Objeto son los más grandes de los más de 100 enormes vehículos que conforman la zona base de mantenimiento y uno de ellos queda derretido como una escultura de azúcar antes de explotar como un volcán en erupción.

El impacto lanza a Quenser hacia la nieve.

Incluso mientras se encuentra enterrado en la nieve que debe estar por debajo de los cero grados, el cuerpo de Quenser está envuelto en un sudor desagradable.

“¿Qué…?”

Ni siquiera puede escuchar su propia voz.

Frenéticamente intenta revisar la situación a pesar de haber perdido más de la mitad de su habilidad para ver y de alguna manera logra determinar que continúa entero. El cañón de plasma de baja estabilidad debió haberse movido en línea recta mientras disparaba porque logra ver una zanja cortando el terreno nevado.

(¿El calor fue tan intenso… que derritió la nieve… y después causó una explosión freática…?)

Es posible que incluso el acero se haya evaporado y después haya caído al suelo.

Mientras Quenser se encuentra confuso en el suelo, alguien lo sujeta del brazo.

Es Heivia, quien tiene los ojos inyectados en sangre y respira con dificultad.

“Hey, necesitamos salir de aquí.”

“… ¿Qué…?”

“¡¡Necesitamos salir de aquí!! ¡¡Nuestro Objeto fue destruido y su Objeto está totalmente bien!! No podríamos hacer algo aunque tuviéramos 100 tanques. ¡¡Si no salimos de aquí, seremos aplastados como hormigas!!”

Escapar.

El significado de eso finalmente se asienta dentro de la mente de Quenser.

Cuando mira alrededor, ve a los otros soldados comenzando a tomar acciones. La zona base está conformada por más de 100 enormes vehículos base. Los soldados están escalando o abordando el vehículo más cercano y los vehículos están rompiendo su formación normal y diseminándose en pánico.

Pueden escucharse gritos de todas direcciones.

Ninguno de los soldados está dando órdenes para disparar.

“¡¡Maldición!! ¡Envíen a todos los UAV! ¡¡Alejen la atención del Objeto de nosotros!!”

“¿¡Tenemos una ruta de escape!? ¿¡Hay algún camino de montaña estrecho por el que no pueda pasar ese monstruo!?”

“¿¡Tenemos algunos reflectores antirradar!? ¡¡Incluso si no podemos escapar, tal vez seamos capaces de hacerlo perder su punte-…!!”

Ya que son soldados reales, saben lo inútil que es atacar al Objeto de frente.

Mientras observa todo eso, Quenser se dirige a Heivia inexpresivamente.

“¿Correr… pero, a dónde?”

“¡¡…!!”

La expresión de Heivia se distorsiona por el miedo en vez de la ira.

Es como si escuchar lo desesperanzadora que es la situación de boca de alguien más le hubiera devuelto toda la mala impresión.

Inmediatamente después, escuchan un extraño sonido.

Al desviar la mirada, pueden ver al Objeto que se encuentra a más de 10 kilómetros aproximándose como si estuviera deslizándose. No está moviéndose usando llantas como un auto. Al usar pequeñas aceleraciones repetidas como un deslizador de agua, se mueve hábilmente tanto por el terreno nivelado como por las pendientes de las montañas. Parece ignorar completamente el terreno como si fuera una luz moviéndose por el suelo.

El leve sonido como el de una nube llena de relámpagos aproximándose permanece en los oídos de Quenser.

(Ah, mierda. ¡¡Así que utiliza electricidad estática como el de nuestra princesa…!!)

Incluso mientras los vehículos de la zona base huyen frenéticamente dejándolo atrás, Quenser se queda de pie en medio de la nieve.

Ese Objeto está flotando levemente sobre el suelo usando electricidad estática. Pesa más de 20 toneladas, pero el reactor en su interior es mucho más limpio y poderoso que un reactor nuclear. Utiliza la habilidad para crear suficiente energía eléctrica para poder flotar.

Un olor leve pero distintivo llega a la nariz de Quenser. Lo más seguro es que el Objeto esté rociando el material que repele su gigantesca figura eléctrica. Generalmente, el repelente se difumina en pocos días y está hecho para no causar daño a plantas y animales, pero para Quenser huele más asqueroso que la propia sangre.

Algo así de grande moviéndose como si la superficie debajo estuviera deslizándose es una visión realmente extraña.

Los vehículos base están intentando escapar a través de un valle entre dos montañas.

Con el sonido como de una nube llena de relámpagos, el Objeto se mueve como si quisiera rodear a los vehículos y pasa de manera diagonal por el costado de una de las montañas. Después se mueve hacia el camino dentro del valle para bloquear su escape.

Su ruta de escape ha quedado sellada en menos de 20 segundos.

Lo que les espera ahora queda claro.

“¡¡¡Mierda!!! ¡¡Aléjense de ahí!!” grita Froleytia.

Inmediatamente después, el Objeto de 50 metros abre fuego con sus cañones.

No, es más que eso.

El Objeto posee más armas además de los cañones de plasma de baja estabilidad. Después de todo, la enorme masa de 50 metros tiene un reactor que es más limpio y poderoso que un reactor nuclear. Con sus cañones de plasma, rayos láser, cañones de riel, y cañones de Gauss, posee más de 100 armas diferentes.

Abre fuego con todas ellas.

Cada una de las armas de alta potencia es tan grande que seguramente causaría que un buque de guerra se balanceara si fuera puesto ahí y tiene más de 100 de ellos.

Es inútil el intentar contar cuántas veces se escucha el disparo de un arma.

Miles y diez miles de estruendos resuenan y se combinan creando un solo sonido explosivo.

Mientras los vehículos base intentan romper la formación en un intento por encontrar cualquier lugar para escapar, incontables misiles y rayos de luz los atacan sin misericordia.

Los muros de las instalaciones con forma de bloque pueden soportar el golpe directo de un misil normal, pero son destruidas junto con el grupo de vehículos como si estuvieran hechas de papel. Explosiones repetitivas se escuchan mientras la gasolina se enciende y los cuerpos de los soldados son lanzados al aire.

Heivia sujeta inmediatamente la cabeza de Quenser y lo hunde más profundamente en la nieve para ocultarse. Aún así, es un milagro que el bombardeo del Objeto no haya destrozado por completo sus cuerpos.

(…No…)

La cabeza de Quenser permanece en blanco mientras el resto de su cuerpo se encuentra en un estado en el que ni siquiera puede distinguir la fría temperatura de la nieve.

(No existen milagros ni coincidencias cuando se habla de Objetos. ¡¡Un Objeto no deja una abertura para ese tipo de cosas!! Debe haber una razón. ¡¡Debe haber una razón lógica por la que no fuimos asesinados…!!)

Heavy Object v01 070.jpg

Quenser observa el vehículo base siendo destruido por un cañón de riel siendo usado tan indiferentemente como una resortera (incluso aunque es lo suficientemente poderoso como para ser instalado en un bombardero). Puede distinguir a algunos soldados intentando huir, pero el Objeto ajusta su puntería a un vehículo diferente.

Viendo eso, la expresión de Quenser se distorsiona aún más.

“¡¡Maldición!! ¡¡Las instalaciones de mantenimiento!!” Quenser grita tan alto que siente que podría herir su garganta para poder evitar que las explosiones ahoguen el sonido de su voz. “¡¡Aléjense de los vehículos usados para mantener al Objeto!! ¡Están buscando acabar con todo lo relacionado al Objeto! ¡¡Si no se alejan de ahí quedarán atrapados en los ataques!!”

Justo después de que los soldados saltan del enorme vehículo base sorprendidos, el cañón de plasma de baja estabilidad del Objeto destruye sin misericordia la instalación de mantenimiento.

Los Objetos son sinónimo de guerra.

Sin importar cuántos tanques o aviones de combate se junten, no pueden enfrentarse a un Objeto.

Es por eso que el Objeto enemigo esté priorizando la destrucción de las partes de repuesto y otras instalaciones que puedan usarse para reparar al Objeto que destruyó. En caso de que el Objeto pudiera ser reparado, una verdadera pelea de Objeto vs. Objeto en la que el ganador es desconocido se desarrollaría nuevamente.

El Objeto no está perdonando las vidas de los soldados.

Primero está destruyendo por completo cualquier posibilidad de contraataque. Después de eso, usará su figura de más de 50 metros para perseguir y eliminar a todos y cada uno de los humanos de carne y hueso que parecen hormigas comparados con aquel monstruo.

Los vehículos base son destruidos uno por uno.

Aunque saben que ellos no son el objetivo, Quenser y los demás soldados se esconden desesperadamente. Una simple mala lectura de la situación podría provocar que fueran aplastados por los fragmentos del muro del tamaño de tatami que vuelan por todas direcciones.

“Necesitamos salir de aquí mientras podamos,” Heivia dice mientras sujeta a Quenser del brazo con manos temblorosas.

Quenser ignora la presión en su brazo y simplemente se queda inmóvil mientras escucha.

“¡¡No importa a donde!! ¡Sólo tenemos que alejarnos todo lo que sea posible de ese monstruo! ¡¡Sólo corre!!”

No está sugiriendo una retirada estratégica; está sugiriendo que huyan de algo espeluznante.

Y…

“…”

(¿Se…detuvo?)

El Objeto que ha acabado con la mayor parte de los vehículos base detuvo sus movimientos entre todos los escombros. Solamente las torretas y armas se mueven lentamente como si estuvieran buscando algo.

Quenser siente que su corazón va a detenerse.

Ahora que acabó de destruir las instalaciones relacionadas con el Objeto, ¿comenzaría a eliminar a los soldados?

Ese horrible pensamiento se forma en la mente de Quenser, pero aún así no puede hacer que su cuerpo se mueva. Lo mismo parece haber ocurrido con Heivia a su lado. Saben que su enemigo es un humano con mente propia y que de hecho es un soldado como ellos, pero la presencia es tan aplastante que se siente como un dragón gigante observándolos fijamente. Se siente como si la más mínima provocación los fuera a llevar a la destrucción por sus espeluznantes fauces.

Saben que el Objeto sólo se mueve basándose en órdenes militares sistemáticas, pero Quenser y Heivia se sienten como herbívoros que se han encontrado con el rey de las bestias y solamente pueden rezar para que los perdone.

Y…

El objeto gigante que mide más de 140 metros si sus cañones principales se estiran en cuatro direcciones comienza a moverse. Cambia de dirección con un movimiento similar a alguien dando la vuelta porque le tocaron el hombro desde atrás. Con el sonido de una oscura nube llena de relámpagos aproximándose, comienza a moverse en la dirección por la que vino. Los soldados en el camino hacen todo para apartarse del camino, pero el Objeto no les presta atención.

“¿Qué…?”

Quenser finalmente se levanta del suelo y mira en la dirección por donde se retiró el Objeto.

“¿Por qué seguimos con vida…?”

¿Qué diferencia había entre él y las figuras humanas esparcidas por el suelo y sin moverse? Quenser no puede encontrar la respuesta a esa pregunta. Heivia habla cerca de él.

“No lo sé, pero vámonos de aquí. No sé qué está sucediendo, pero logramos sobrevivir. ¡¡Si corremos tan lejos como podamos ahora, tal vez todo haya valido la pena!!”

El cuerpo de Heivia tiembla de forma incontrolable.

Quenser piensa que Heivia tiene razón, pero entonces se detiene.

Se ha percatado de algo a sus pies.

Seguramente salió volando de uno de los vehículos usados para su zona base. Es una pantalla de LCD. Es del tamaño de una hoja de papel A4 y parece funcionar de forma inalámbrica. Está emitiendo un sonido electrónico intermitente.

La pantalla muestra el mapa del área.

En un punto dentro de ese mapa, está parpadeando un punto rojo.

(… ¿Una señal de rescate…?)

En ese momento el significado de eso golpea a Quenser.

“¡¡La princesa Élite!!”

El Objeto enemigo estaba dando prioridad a la eliminación de toda posibilidad de que el Objeto sea reparado. Para hacer eso, destruyó La instalaciones de mantenimiento y dejó a los soldados en paz.

¿Eso no significa que sería natural que el enemigo priorizara el asesinato de la chica piloto que posiblemente podría manejar un Objeto diferente?

“¡¡Hey, el noble y el estudiante de ahí!!” Froleytia grita a la distancia.

Ambos desvían la mirada en esa dirección y observan a una hermosa chica con su cabello de color plateado como el acero haciendo señales hacia la base de la montaña.

“¡¡Necesitamos usar esta oportunidad para escapar!! ¡¡Prepararé una razón oficial de la retirada para reportarlo a los altos mandos!! Si pasamos más allá de la montaña, encontraremos un enorme valle. ¡¡Ahí se encuentra un puente suspendido!! ¡¡Una vez que lo atravesemos, podremos distanciarnos de ese Objeto!! ¡¡Tal vez intente atacarnos desde el costado del valle, pero posiblemente logremos sobrevivir si nos dispersamos una vez que nos ocultemos en el bosque de coníferas al otro lado!!”

“Pero…”

La mirada de Quenser se mueve de Froleytia a la pantalla a sus pies.

Honestamente, está lleno de tanto alivio que siente que podría desmayarse al tener una nueva meta para escapar.

Pero…

¿Qué sucedería con la chica Élite que sigue con vida…?

Ese pensamiento detiene a Quenser.

Entonces Froleytia se percata de la pantalla a los pies de Quenser.

“¡Idiota! ¿¡Por qué crees que está enviando la señal de rescate!?”

“¿…?”

“¡No es para que nosotros la veamos! ¡¡La princesa está transmitiendo la señal de rescate para que el enemigo la intercepte y así desviar su atención!! ¡¡Está asegurándose que no terminemos asesinados!! ¿¡Quieres gastar todos los esfuerzos que ella está haciendo!?”

Los ojos de Quenser se abren exageradamente.

Las palabras de Froleytia se incrustaron profundamente en su corazón.

(¿Eso es cierto…?)

Quenser mira alrededor hacia los soldados que supuestamente deberían tener cuerpos musculosos gracias al entrenamiento constante pero que han abandonado sus entrenamientos debido a los beneficios del Objeto. Todos desvían la mirada cuando Quenser los observa.

Parecen incómodos.

Parece como si no quisieran desaprovechar esa oportunidad para escapar.

(No importa lo que digan, ella es nuestra aliada y una chica de apenas 14 años. Es el tipo de persona que está usándose a sí misma como cebo para salvarnos. ¿En serio piensan abandonarla…?)

“Nos vamos,” Heivia murmura. “¡¡No tenemos otra opción!! ¡¡No importa lo que hagamos, la princesa será asesinada, así que necesitamos escapar antes de que regrese ese Objeto!!”

“¡A la mierda con eso! ¿¡En serio comprendes lo que estás diciendo!? ¿¡Has pensado en lo que le sucede a una chica Élite si es capturada por el ejército enemigo que claramente ha desechado cualquier pensamiento moral!?”

“¿¡Qué!? ¿¡Estás diciendo que irás a pelear contra ese Objeto!?”

Al escuchar esas palabras directamente, Quenser se queda callado.

La expresión de Heivia está llena de temor y desesperanza.

“¡¡Cualquiera puede sentarse sin hacer nada mientras dicen lo que creen que está bien y lo que está mal!! ¡¡Y si puedes enfrentarte a ese Objeto por cuenta propia y puedes salvar a la princesa, eso es genial!! ¡¡Pero en realidad, no puedes hacer absolutamente nada!! ¡¡El instante en el que esa cosa te localice con su radar, te atacará tan intensamente que ni siquiera quedará polvo de tu cuerpo!!”

Quenser piensa mientras Heivia lo sujeta de los hombros.

(…Maldición.)

La presión gradual en su pecho es la respuesta natural como humano.

Está siendo invadido por el miedo.

(Por supuesto que tengo miedo. Sin importar lo que digan o las esperanzas que tengan, no puedo concentrar nada de coraje. Un Objeto es un monstruo. Intentar enfrentarme a algo como eso está mal. Quiero estar tan lejos de aquí como sea posible. Heivia tiene razón. No importa lo que diga, esta enfermiza sensación no me abandona…)

Sin embargo, los pies de Quenser no comienzan a llevarlo a un lugar seguro.

Simplemente se queda ahí y observa a Heivia una vez más.

“…Pero, ¿qué no esa princesa estaba peleando contra ese monstruo?”

“…”

“Ese monstruo hace que los adultos tiemblen y que nosotros sintamos que moriremos cada vez que apunta sus cañones hacia nosotros!! ¡¡Y aún así ella estaba manejando un Objeto por cuenta propia para protegernos de esa cosa!!”

Incluso si esa chica estaba manejando un arma ridícula como un Objeto, seguramente sentía miedo. No hay manera de que no lo sintiera cuando estuviera enfrentando un monstruo como ese.

Un día antes, ella dijo que no sabía si podría ganar.

No parecía especialmente seria, así que Quenser no encontró ningún significado profundo en ese comentario. Sin embargo, se había equivocado. ¿Qué tal si esa chica había estado reprimiendo tanto malestar bajo la superficie que incluso lo reveló a pesar de mostrar una expresión indiferente y despreocupada? ¿Qué tal si simplemente quería hablar de ello con alguien –-con cualquiera—para intentar deshacerse aunque fuera de una pequeña parte de ese malestar?

Quenser piensa sobre lo que debería hacer.

“…Dame eso.”

Estira su mano hacia Heivia.

Heivia simplemente lo observa confuso, así que se lo repite.

“¡¡Dame ese rifle!!”

Quenser le arrebata el rifle militar a Heivia. El arma de alta tecnología posee una cámara infrarroja, un micrófono para buscar enemigos, y otros dispositivos además de la mira.

Sin embargo, el rostro de Heivia se tensa el ver eso.

“… ¿En verdad irás?” Heivia sacude la cabeza como un niño pequeño. “¿¡Qué ganarás con eso!? ¿¡Viste ese Objeto!? ¡¡Ese monstruo es básicamente un reactor gigante con los muros del grosor de un reactor nuclear!! ¡¡Puede moverse incluso de recibir el impacto de dos misiles nucleares!! ¡¡Es obvio que un futuro erudito como tú comprende eso!!”

“Lo sé,” Quenser responde.

El trabajo principal de Heivia es analizar y buscar las características y debilidades de los Objetos, pero Quenser aprende sobre los Objetos desde el punto de vista del diseño. Gracias a su conocimiento, sabe bastante bien que no hay manera de ganarle.

Pero…

“No tengo otra opción…”

“¿Qué?”

“¿En verdad crees que ese Objeto no nos alcanzará si cruzamos la montaña y el valle hasta el otro lado?”

“Bueno…”

“Si en verdad quieren matar a la princesa, solo necesitan un disparo. Y si quieren capturarla y llevarla a su base, el Objeto es libre de venir a buscarnos una vez que los soldados normales la capturen. Regresará a acabar con nosotros mientras estemos escalando la montaña. …¿Viste su maniobrabilidad, cierto?”

Quenser siente que su cuerpo pesa ante el peso del rifle porque nunca había usado uno seriamente. Intenta reprimir ese temblor y continúa.

“Parece que la princesa está intentando ganar algo de tiempo, pero probablemente no pueda ganar lo suficiente por cuenta propia.”

Las palabras que pronuncia no le parecen reales.

Quiere comenzar a moverse antes de que el miedo lo supere.

“Alguien tiene que hacer algo. No por responsabilidad, más bien para poder sobrevivir.”


Parte 10[edit]

La poderosa ventisca provoca un dolor agudo en la piel de su rostro.

El blanco ocupando toda su visión incrementa su necesidad innecesariamente.

La profunda nieve parece sujetarlo de sus pies como un pantano sin fondo mientras Quenser continúa corriendo desesperadamente mientras sujeta el rifle con ambas manos.

Ha estado en las líneas frontales por 6 meses, pero esta se siente como la primera vez que corre por un campo de batalla.

Su objetivo es salvar a la princesa.

No hay razón para pelear contra el Objeto. De hecho, si se encuentra con él, será asesinado como un pedazo de basura más que como un enemigo. Desea que haya alguna manera de aproximarse aprovechando un punto ciego del Objeto y salvar a la princesa, pero…

(¿En dónde?)

El rifle se siente tan frío como un trozo de hielo.

Quenser aprieta los dientes y mira alrededor mientras intenta olvidarse del dolor en la punta de sus dedos.

(¡Maldición! ¿¡En dónde está!?)

Podría jurar que la pantalla indica esa zona, pero la chica Élite no está por ningún lado. ¿Los soldados enemigos ya se la habrán llevado? ¿O habrá leído mal el mapa y llegó a un lugar incorrecto?

(¡¡Maldición!! ¿Cómo pude sobrevivir seis meses sin siquiera saber cómo ubicarme en un mapa? … ¿Qué tanto he estado dependiendo de los demás?)

Quenser conecta un cable a la mira del rifle. El otro extremo del cable posee un pequeño audífono para un oído. Lo coloca en su oído derecho y opera el rifle con dedos temblorosos.

Según Heivia, posee un micrófono para encontrar enemigos.

(…)

Mientras se concentra en el micrófono que sobresale del barril como una bayoneta, Quenser gira lentamente en su lugar. En el proceso de señalar el micrófono en cada dirección, escucha un leve sonido por el audífono.

“¿Por aquí…?”

Nunca entrenó adecuadamente, así que sujeta el rifle como vio que los demás lo hacían mientras se encamina en dirección del sonido.

Mientras se aproxima, el sonido leve se hace cada vez más fuerte.

Eventualmente, comienza a escucharse como voces humanas y Quenser se oculta rápidamente detrás de algunas rocas.

Entonces asoma la cabeza cuidadosamente.

Puede ver figuras humanas del otro lado de la blanca cortina de nieve soplando.

Supone que se encuentran a unos 100 metros de distancia. Desde ahí, no puede distinguir su aspecto, pero puede ver tres o cuatro figuras musculosas rodeando una sola figura pequeña. La figura pequeña está arrodillada de manera poco natural con ambas manos detrás de su cabeza.

(¡La princesa! ¡¡Maldición, así que fue capturada después de todo…!!)

Quenser deja de asomarse y mira alrededor del área.

No puede ver la enorme estructura del Objeto por ningún lado.

Tal vez regresó a acabar con los sobrevivientes ahora que la chica Élite había sido capturada.

Por un instante, Quenser piensa que tal vez sea una trampa absurdamente bien planeada y que podría ser disparado por los cañones de plasma de baja estabilidad desde la distancia el momento en el que intentara hacer algo. Sin embargo, se percata de que eso es poco probable. Duda que puedan utilizar el Objeto para crear una trampa sólo para él y el Objeto gigante no necesitaría crear una trampa para acabar con un simple humano de cualquier forma. Simplemente acabaría con él sin esfuerzo.

El chico siente tanto temor que su sensor mental de peligro deja de funcionar correctamente.

El Objeto es simplemente tan espeluznante que está tomando en cuenta posibilidades nada reales.

De cualquier forma, si se calma y piensa sobre ello…

(El Objeto no está por aquí.)

Quenser siente el peso del rifle una vez más.

Asoma la cabeza nuevamente para revisar la situación.

(¡¡Si puedo hacer algo con esos cuatro, podré salvar a la princesa!!)

Una sensación incómoda diferente al miedo por el Objeto comienza a apoderarse de su corazón.

Tiene que “hacer algo” con esos cuatro.

Con ese rifle en sus manos, “hacer algo” significa disparar y matar a esos cuatro humanos. Quenser no es tan habilidoso como para atacarlos sin disparar a sus puntos vitales y las balas en ese rifle militar son lo suficientemente poderosas como para arrancar una extremidad si llegan a impactar ahí. Esas personas morirían por el impacto tanto si les disparara en sus puntos vitales como si no.

¿En verdad puede matarlos?

¿En verdad puede matar a cuatro personas para salvar a una sola compañera?

(¡¡Maldición!!)

Sujeta su mano con la otra para controlar sus temblorosos dedos.

No puede evitar que sus dientes castañeen.

(Es un campo de batalla. ¡Matar es lo más básico! Dejarle toda la pelea al Objeto invencible… ¿¡esto es lo que la hemos obligado a hacer!?)

En un intento desesperado para armarse de valor, Quenser golpea su propio muslo con su puño y después se obliga a alzar el rifle. Sin embargo comienza a sentirse aturdido cuando observa por la mira. Reprime las ganas de vomitar y de alguna forma logra apuntar.

Está apuntando hacia el soldado más cercano a la chica Élite.

Coloca la mira justo en el medio de la cabeza del hombre que no sospecha nada.

Ahora sólo tiene que jalar el gatillo.

Sin embargo, como si se hubiera paralizado, su dedo sobre el gatillo es incapaz de moverse.

(…Es un humano.)

Mientras suprime las ganas de vomitar, la imagen a través de la mira tiembla.

(No es uno de los objetivos con forma humana que se utilizan para entrenar. Es un humano real. Es un soldado como nosotros que se aburrió de la paz después de ser protegido por su Objeto y solo quiere regresar a la seguridad de su país…)

No puede disparar.

Justo cuando se percata de ese hecho, escucha un extraño sonido a través del audífono en su oído.

Es un sonido siendo recibido por el micrófono del rifle.

Son las palabras provenientes de la boca del soldado al que le estaba apuntando.

“Hey, probemos la durabilidad del traje especial de la Élite. Cuando regrese el Objeto, podremos atar sus manos a él con una cuerda para que la arrastre por ahí. La prueba será superada dependiendo si termina desnuda o no para cuando regresemos a la base.”

Los movimientos de Quenser se detienen cuando escucha eso.

Entonces escucha una risa y las palabras de otro soldado.

“No importa lo fácil que sea deslizarse por la nieve, ¿eso no terminaría volviéndola picadillo de todas formas?”

“Sí, ¿y qué haremos si continúa con vida una vez que regresemos a la zona base? ¿Harás una prueba con el increíble cuerpo de la Élite? Escuché que los tipos del cuarto de tortura se quejaron porque sus herramientas estaban oxidándose por la falta de uso.”

No, no fueron sus movimientos los que se detuvieron.

Fue su temblor.

Así como las ganas de vomitar que producían el temblor.

Su corazón se clarificó.

Apaga el micrófono como si quisiera dejar de escuchar los comentarios de los soldados.

Quenser tiene un nuevo pensamiento.

No había sido capaz de jalar el gatillo porque pensó en ellos como humanos.

Pero…

¿No lo son, o sí?

Un fuerte estruendo resuena y la bala del rifle destroza la cabeza de uno de los soldados que se reían antes de que Quenser se percatara de que el sonido fue producido debido a que su dedo jaló el gatillo. Ignorando al cadáver sin cabeza, Quenser grita.

“¡¡Agáchate!!”

¿La chica Élite habrá comprendido el significado de esas palabras o los soldados enemigos a su alrededor lo habrán hecho antes que ella?

Justo mientras la chica lanza su cuerpo a la profunda nieve, Quenser utiliza movimientos rápidos de su dedo para lanzar bala tras bala en modo semi-automático. Con el poco entrenamiento que tuvo, duda que pueda suprimir el retroceso al disparar en modo totalmente automático. Sin embargo, los soldados enemigos no se quedan esperando a que les disparen. Casi como reflejo, apuntan los cañones de sus rifles en dirección a la voz y disparan.

Quenser simplemente es un poco más rápido.

Quenser sólo quiere acabar con todos, así que mueve el cañón de izquierda a derecha mientras dispara en vez de apuntar con cuidado. Al jalar el gatillo repetidamente, lanza balas volando a intervalos lo que crea una valla mortífera a la altura de la cintura.

Afortunadamente, los tomó por sorpresa. La sangre se esparce por el aire y los soldados caen hacia la nieve.

(…¡¡Tal vez en verdad pueda lograrlo…!!)

Sin embargo, dos de los soldados enemigos se agacharon de inmediato y escaparon de la lluvia de balas. Mientras Quenser se mantiene totalmente derecho debido al retroceso del rifle, puede ver a uno de los soldados enemigos apuntando su propio rifle mientras se encuentra arrodillado. Mientras se mantiene cerca del suelo, la princesa lo embiste. En un problema a corta distancia, el soldado no puede disparar el rifle, Quenser se asusta, pero su preocupación no tiene bases. La princesa lleva en la mano un pincho para cocinar que venía incluido en el mismo kit de supervivencia que también incluía vendas y una pequeña caña para pescar. Utiliza el pincho para apuñalar al soldado en el costado.

El único soldado enemigo que queda intenta apartarse de la princesa inmediatamente, pero alza su cuerpo descuidadamente. Inmediatamente después, es golpeado por una de las balas del rifle de Quenser y cae al suelo.

Se terminó.

O eso es lo que piensa Quenser.

El soldado que estaba sangrando por el pincho de metal que le fue incrustado por la princesa, jala el gatillo mientras se encuentra sobre la nieve. Seguramente no había pensado en hacer eso, pero golpea el gatillo del lanzagranadas que se encuentra en la parte inferior del gatillo. El cañón está apuntando en una dirección al azar… que casualmente es la dirección en la que se encuentra Quenser.

El explosivo pesado vuela por el aire formando un rco en vez de formar una línea recta.

Quenser es incapaz de decidir lo que tiene que hacer en el instante que más lo necesita.

Inmediatamente después, Quenser es lanzado por el impacto y un extraño dolor recorre casi toda la parte superior de su cuerpo. El color blanco llena su visión. Al principio, piensa que se trata del cielo, pero en realidad es el suelo cubierto de nieve. Le llevó algo de tiempo percatarse de que estaba tendido sobre su costado.

(… ¿Qué… me sucedió…?)

Justo mientras esa pregunta entra a su mente, toda la fuerza abandona su cuerpo.

De alguna manera logra mover su mano que se ha quedado inmóvil como si se tratara del efecto rigor mortis, pero el mango del rifle se resbala de sus dedos. Entonces su brazo cae nuevamente a la nieve.

Finalmente comienza a sentir un intenso dolor en su abdomen y pecho.

(Mierda, ¿qué sucedió? ¿Todos murieron? ¿No me faltó ninguno, o sí? ¿Ninguno se levantará nuevamente, cierto?)

No se escuchan más disparos.

¿Los mató, escaparon, o se detuvieron porque consideraban que acabar con él sería un gasto de balas? Enterrado en la nieve como está, Quenser no puede saber la respuesta.

(…Kh…)

Intenta ver sus heridas, pero su cuerpo no se mueve como él lo desea.

Mientras tanto, incluso su mente parece estar dejando de funcionar adecuadamente.

(¿Qué sucedió con la princesa…?)

Vino hasta ahí para poder rescatar a la chica Élite y aún así ya no tiene la energía suficiente para al menos alzar la mirada y comprobar que si ella sigue con vida.

Su conciencia se hunde en la oscuridad.

Incluso el dolor que se incrementó parece desaparecer en vez de explotar dentro de él.


Parte 11[edit]

Piensa que puede escuchar a alguien pronunciando su nombre.

Todo lo que puede ver es el extraño escenario que no es negro pero tampoco coloreado. Parece que está viendo las imágenes que llegan a sus ojos como un mosaico y sin que su cerebro las procese. Ya que Quenser perdió su sentido de balance, siente que va a vomitar, y observa inexpresivamente ese esa escena. Entonces escucha a alguien pronunciando su nombre.

“…¡¡Hey, despierta, Quenser!! ¡No te duermas! ¡¡Despierta!!”

“¿Heivia…?” Quenser murmura con voz pastosa.

Su cuerpo debe estar enterrado en la nieve, pero ni siquiera puede sentir eso.

“¿Por qué? ¿No se supone que escapaste…?”

“Cállate. No tuve otra opción.”

Heivia lleva un misil anti-tanque portátil colgando de una correa. Seguramente sabía que no sería de ninguna ayuda, pero tal vez quería llevar cualquier cosa que pudiera servir. Quenser puede distinguir que el cuerpo de Heivia continúa temblando.

El miedo hacia un Objeto no es algo de lo que uno pueda deshacerse fácilmente.

Aún así, Heivia siguió a Quenser.

“… ¿Fui herido…?”

“Novato. La granada no iba apuntada directamente hacia ti y solamente afectó a una roca cercana. Tu cuerpo fue golpeado por los fragmentos de la piedra. Si hubieras sido golpeado directamente por la granada, te hubiera destrozado. Están hechas de tal manera que puedan hacer algo así.”

“Ya veo. Maldición. Soy patético… ¿Me desmayé por el miedo después de recibir unos simples rasguños?”

Quenser intenta levantarse, pero suelta un quejido después de sentir una poderosa presión sobre su pecho. Parece ser que el impacto mental fue lo suficientemente grande como para que su corazón se contrajera en exceso. Tose y finalmente logra levantarse de la nieve.

“¡Ah, maldición! ¿En dónde está la princesa Élite…? ¿Se la llevaron después de que me desmayé?”

“¿De qué hablas? Ganaste. Acabaste con todos esos bastardos, así que no te preocupes. Mira, héroe. La princesa a la que salvaste está por allá.”

Quenser desvía la mirada en dirección a la que señala Heivia y ve a la chica Élite de pie a unos 2 metros de distancia. Se encuentra de pie inmóvil mientras observa el rostro de Quenser como si estuviera viendo algo imposible de creer.

Su expresión es algo difícil de describir.

Un miedo extraordinario ciertamente se encuentra presente. Al igual que una sorpresa incomparable. También parece como si no pudiera decidir si debería sentirse aliviada. En general, su expresión no es una que pueda ser descrita fácilmente utilizando una emoción en particular.

“¿Por qué…?” la chica dice con una voz vacilante que no puede controlar debido a las olas de emoción dentro de ella. “¿Por qué viniste a salvarme…?”

Después de eso, sus verdaderos pensamientos salen disparados como si escaparan de un agujero en su corazón.

O tal vez siente algo que la hace no querer seguir mintiendo.

“Tú no eres el que debe pelear. No eres un Élite. No tienes la protección de una armadura tan gruesa como un refugio nuclear, ¿entonces por qué viniste hasta aquí?”

Quenser piensa en sus palabras silenciosamente.

Algo más profundo que lo que muestra normalmente en la superficie está presente en las palabras de esa chica.

“Y yo me burlaba de ustedes dentro de mi corazón.”

Sus palabras continúan saliendo.

Tal vez eso fue algo inapropiado para la piloto Élite del Objeto que es la piedra angular de su fuerza militar y, de cierta forma, la representante de su nación.

“¡¡Me burlaba de ustedes porque siempre necesitan que los proteja y porque todos terminarían muertos sin el Objeto!!”

Sin embargo, esas palabras aparentemente inapropiadas son las que la hacen ver humana.

Quenser se percata de que su imagen demasiado pura no es algo como agua natural; es más como agua de la llave con olor a cloro.

“¡¡Quería negar eso y quería tener una opinión apropiada, pero siempre terminaba teniendo esos horribles pensamientos sobre ustedes!! ¿¡Entonces por qué viniste a salvarme!?”

Quenser y Heivia intercambian miradas.

Después observan a la chica Élite.

Observan a la chica que ha perdido su rol con la pérdida del Objeto.

“¿A qué te refieres con ‘horribles pensamientos’? Esa sólo es la verdad.”

“¿Eh…?”

“He intentando estudiar todo lo posible sobre los Objetos, pero sólo hasta ahora comprendí algo después de pelear contra uno. Esas cosas son monstruos. Monstruos reales. ¿Y quién era la que estuvo peleando a solas todo este tiempo para asegurarse que esos monstruos no llegaran a destruir nuestra zona base?”

La chica observa a Quenser con expresión sorprendida.

El largo tiempo enterrado en la nieve y el impacto mental del que parece no poder deshacerse han tensado su rostro, pero Quenser mueve sus músculos para forzar una sonrisa.

“Pero ya no más,” Quenser dice mientras recoge el rifle que cayó al suelo cerca de él.

Saca el cartucho vacío y lo reemplaza con uno nuevo que le dio Heivia.

Comparado con un Objeto, esa es un arma patética.

Con eso en mano, Quenser encara a la chica mostrándole una expresión realmente horrible.

“Ya no necesitas pelear sola. ¿Hay alguna razón verdadera por la que tengas que hacerlo?”

La chica parece no sabe cómo reaccionar ante eso.

Es una Élite, la piloto de una de las armas gigantes conocidas como Objetos.

Tal vez es porque nadie nunca le había dicho algo así antes. Siempre se le dio la carga de muchas vidas, siempre esperaban a que trajera la victoria, e incluso fue amenazada implícitamente de que perdería todo lo que tenía si llegaba a ser derrotada. Peleaba desesperadamente bajo esas condiciones. Es por eso que nunca había alzado la voz para protestar contra esa pelea solitaria sin importar los daños que sufriera o el malestar que sintiera.

La chica no parece ser capaz de aceptar por completo las palabras de Quenser.

Desvía la mirada hacia Heivia, pero él solamente alza los hombros.

“No soy nada especial. Quenser solo dijo que tu sola no serías suficiente distracción y eso me regresó a mis cinco sentidos. Me percaté de que tenía toda la razón, así que preparé algo que funcionara como una distracción apropiada o todos terminaríamos muertos. Y entonces… bueno… como dije antes, no tuve otra opción.” Con esa respuesta tranquila, Heivia mira alrededor. “Entonces, princesa y caballero. Parece que no podremos quedarnos aquí por mucho tiempo.”

“¿…?”

Quenser frunce el ceño, pero se percata de lo que Heivia está hablando poco después.

La falsa valentía de Heivia oculta su temor por el distante sonido como el de una nube llena de relámpagos que emite el Objeto mientras se mueve.

“¡Vámonos! Armaste un alboroto cuando les disparaste a esos soldados. ¡¡Su Objeto debe haberse percatado y viene hacia acá!!”

El grito de Heivia termina con la emotiva escena.

Han regresado al infierno.

El juego de persecución de vida o muerte con el Objeto de más de 50 metros ha comenzado nuevamente.

“¡¡Mierda!! ¿¡A dónde se supone que iremos!?”

La profunda nieve estorba a sus pies mientras se mueve, pero Quenser se mantiene en movimiento desesperadamente. En respuesta, Heivia grita tan fuerte como puede como si quisiera deshacerse de su temor.

“¡¡Necesitas memorizar el mapa del área en el que pelearás!! Hay una cueva a unos 50 metros de aquí. ¡¡Si podemos llegar ahí, lograremos escapar del Objeto!!”

Cincuenta metros.

Esa es una distancia que pueden recorrer en 10 segundos incluso cuando están totalmente equipados y sobre una superficie pavimentada.

Sin embargo, la profunda nieve les arrebata la velocidad y el Objeto enemigo usa la electricidad estática para aproximarse rápidamente sorteando las pendientes de la montaña. Sus movimientos hacen parecer como si la superficie debajo del Objeto se deslizara.

Está a unos 3 kilómetros, pero eso no es nada para esa arma gigante.

“¡¡Está apuntando sus cañones de plasma hacia acá!!” grita la chica Élite.

(Con los aparatos para apuntar de ese Objeto, es obvio que nos puede disparar desde esa distancia. ¿Aún no se deciden si quieren capturar a la princesa o asesinarla?)

La distancia a la cueva se siente extrañamente larga.

(¡¡Es cierto que tal vez sean capaces de obtener algo de información clasificada relacionada con nuestro Objeto si la torturan, pero esta respuesta es inconsistente con los soldados de antes!!)

El chico siente que sus piernas se rendirán ante el miedo, pero no tiene otra opción más que continuar corriendo.

“Hey, Quenser. Eres un ingeniero de combate, ¿¡cierto!? ¿¡Traes algún explosivo!?”

“¡¡Tengo cerca de 5 kilogramos de C4 normal!”

“¿¡Qué!? ¿¡No se supone que lo más común son 10 kilos!?”

“¡Me sentía un poco tonto cargando explosivos inútiles por todos lados! ¡Y lo que tengo se utiliza para actividades de ingeniería civil! ¡¡No funcionará contra ese Objeto!!”

“¡Dámelo! ¡¡Simplemente apresúrate y dámelo!! ¡¡Y una mecha también!!”

Mientras se aproximan a la entrada de la cueva, Quenser lanza una masa semejante a la arcilla del tamaño de una lata de atomizador para cabello. La bomba se encuentra dentro de un paquete de envoltura transparente y Heivia coloca el receptor para la señal de detonación a través de la envoltura antes de incrustar la mecha eléctrica. Después la lanza cerca de la cueva.

Las armas principales del Objeto que se aproxima, los cañones de plasma de baja estabilidad, lentamente apuntan hacia ellos.

Sin embargo, Heivia salta hacia la cueva antes de que los cañones puedan escupir sus flamas y Quenser lo sigue. El pie de la chica Élite queda atorado en la nieve y comienza a tropezarse, pero logra transformar su caída en un giro que la lleva hasta la cueva.

Quenser atrapa rápidamente a la chica Élite antes de gritarle a Heivia.

“¿¡Hey, qué se supone que haremos!? ¡¡Si dispara sus cañones de plasma a la cueva, seremos asados hasta morir!! ¡¡No importa todos los túneles que tenga esta cueva, todo el aire en su interior se calentará a tal punto que toda la cueva será como un horno!!”

“¡Para eso son los C4! ¡¡Ahora, apártense del camino!! ¡¡Hay que adentrarnos aún más!!”

Heivia los apresura y Quenser se dirige al interior de la cueva mientras lleva consigo a la chica Élite. Después de adentrarse unos 10 metros, Quenser piensa en algo.

¿Qué está planeando hacer Heivia con los C4?

Tal vez planee detonarlos cuando el Objeto se encuentre cerca de la entada de la cueva, pero Quenser duda que eso pueda dañarlo. Después de todo, el blindaje del objeto puede soportar un golpe directo de un misil nuclear o dos sin problemas.

“Lo lamento, decidí probar nuestra suerte desde el principio.”

Inmediatamente después, Heivia golpea el interruptor del aparato de detonación inalámbrico.

Con un estruendo impresionante, el techo de la cueva colapsa, sellando la entrada.

Es cierto que estaba poniendo a prueba su suerte.

Primero que nada, acaba de enterrarlos vivos si es que no existe otra salida.

Después, el impacto comprimido de la explosión entró por completo a la cueva.

Gracias a eso, Quenser siente como si sus tímpanos fueran a explotar.


Parte 12[edit]

Los tres chicos logran llegar a un camino ramificado dentro de la cueva después de caminar por un tiempo y encuentran otra salida poco después de eso. Después de salir de la cueva, bloquean la salida con nueve. En verdad querían hacerla explotar con unos C4, pero el impacto podría atraer fácilmente al Objeto.

El Objeto gigante no puede entrar a la cueva, así que seguramente serán enviados soldados de carne y hueso para buscarlos. Quieren hacer creer al enemigo que aún se encuentran dentro de la cueva.

Quenser y los demás se ocultan en un bosque de coníferas fuera de la cueva. Quenser piensa que el esconderse detrás de los árboles no servirá de nada para evitar el frío de esa tierra congelada, pero simplemente estar protegidos del viento invernal afecta positivamente su temperatura corporal.

Mientras mastica una ración que sabe como pastel de arroz sin cocinar preparado con un borrador, Quenser mira hacia la entrada de la cueva.

“Bueno, no parece que hayan descubierto qué camino tomamos.”

“Aún puedo escuchar ese sonido bajo y similar a un trueno, así que el Objeto debe seguir cerca,” la chica Élite dice mientras aguza el oído y lleva una pequeña ración a su boca con ambas manos.

Escuchando eso, Quenser también se concentra en el sonido distante.

“Seguramente, el encargarse de la Élite que puede manejar un Objeto es su mayor prioridad. Probablemente no se vaya hasta terminar de buscar.”

Eso también significa que sus compañeros escapando no serán asesinados hasta que Quenser y los demás sean encontrados o hasta que el enemigo deje de buscarlos.

Heivia aún lleva el misil antitanque de aspecto pesado pero inútil colgando de su hombro.

“Hey, ahora que el enemigo nos ha perdido de vista, ¿no sobreviviremos si tomamos esta oportunidad para desaparecer?”

“Tal vez, pero eso provocaría que nuestro lado fuera asesinado mientras intentan escalar la montaña,” Quenser comenta.

“¡Mierda!” Heivia maldice.

La chica Élite mordisquea la orilla de la ración cuadrada y dice, “¿Pero en verdad creen que podamos seguir actuando como distracciones hasta que ellos logren escapar?”

“Definitivamente moriríamos si siguiéramos haciendo eso. Si un soldado enemigo llega a vernos, llamarán al Objeto y nos dispararán con sus cañones de plasma. ¡¡Incluso movernos por ahí actuando como cebos está fuera de discusión!!”

“¿¡Entonces estás diciendo que simplemente hay que irnos!?”

“¡¡Sí!! ¡¡Eso es lo que quise decir!! ¡Ni siquiera el Objeto de la princesa pudo aguantar contra ese monstruo! ¿¡Qué se supone que podemos hacer nosotros!?”

La princesa simplemente agacha la cabeza al escuchar sobre su derrota.

“…Eso sucedió porque el mecanismo comenzó a activarse repentinamente. Me llevó algo de tiempo cancelar ese modo y ese Objeto atacó mientras intentaba hacerlo.”

“¿El mecanismo? Ah, el mecanismo de seguridad.”

Básicamente, es un mecanismo de auto-destrucción. El Objeto es una masa gigante de secretos militares, así que deben haber métodos para asegurarse que no caiga en manos enemigas. Si sus sensores detectan que no puede seguir funcionando incluso si no ha recibido daños serios, el Objeto de la princesa sellaría el gas especial para los cañones de plasma de baja estabilidad en el espacio entre el blindaje y el reactor para después detonarlo.

“Eso no importa. ¡No intenten escapar del problema ante sus ojos con otros temas de conversación! ¡¡Necesitamos encontrar una manera para encargarnos de ese maldito deslizador de agua!!”

“¿Aún piensas en escapar? ¡Puede que sobrevivas, pero quedarás traumado de por vida! ¿Eres un noble, cierto? Ser el único sobreviviente aquí será visto como una desgracia para ti. ¡No lograrás ser el siguiente líder de tu familia y tu vida se dirigirá a un espiral descendiente más rápido de lo que puedas imaginar!”

“¿¡…!? ¿¡Entonces qué carajo se supone que debo hacer!?”

“¡A este paso, morirás aquí en el campo de batalla o en tu país de origen! ¡¡Si no quieres eso, entonces tenemos que hacer algo con esa cosa!!”

Los tres se quedan callados ahora que tienen que encarar la pregunta más obvia, “¿Cómo?”

Quenser lanza el último trozo de su ración insípida a su boca.

Observa el rostro de los otros dos y tiene un pensamiento repentino.

“Soy un estudiante que quiere ser un diseñador de Objetos, tú eres un analista que busca métodos que lleven a una estrategia ganadora contra los Objetos, y tú eres una Élite que maneja un Objeto. Con nosotros tres…”

“Hey, estás bromeando, ¿cierto? Siento que sé en qué estás pensando, pero por favor dime que estás bromeando.”

“No tenemos otra opción más que intentar encontrar una, ¿cierto?” Quenser dice con la expresión tensa característica de alguien que está verdaderamente acorralado. “Necesitamos encontrar algún tipo de debilidad en ese Objeto supuestamente invencible.”


Y así, Quenser y los otros dos rodean la base de la montaña a pie, dirigiéndose a la entrada de la cueva que sellaron con los C4. El chico se oculta entre la nieve profunda y coloca su rifle entre los espacios entre los árboles.

No está preparándose para dispararle a un enemigo.

Está usando la mira como binoculares.

Quenser está observando al Objeto, así que de todas formas el rifle no será de mucha ayuda.

“(…Hey, no actives el interruptor infrarrojo. Si se percata de eso, nos acabará con esos cañones de plasma.)”

Heivia se encuentra tendido cerca de él y dándole advertencias innecesarias. Así de nervioso se siente.

No es que sea de sorprenderse.

Se encuentran a unos 300 metros del Objeto, pero si los localiza, no tendrán escapatoria. Simplemente serán asesinados sin misericordia. Sólo por escuchar el estruendo que hace al moverse sobre el suelo es suficiente para hacer que sientan tensión provocada por el temor.

“(… ¿Qué está haciendo el Objeto?)”

“(… ¿Buscando con su radar? …No. Tal vez sea capaz de encontrar un tanque o un bombardero utilizándolo, pero dudo que pueda localizar personas.)”

“(…Parece ser que está intentando acceder a un satélite. Sin embargo, no le está yendo muy bien porque la señal no puede pasar,)” agrega la chica Élite.

“(…Ah, es cierto. Fue lanzado un misil antirradar como arma meteorológica. Esparció partículas que bloquean la señal en las nubes lo que transformó a las mismas en gigantescos escudos anti-satelitales.)”

Si el Objeto pudiera usar el satélite, serían descubiertos en un instante. Quenser ahora se siente inmensamente agradecido por ese gasto de los impuestos.

“Muy bien, repasemos lo que sabemos,” dice mientras observa a través de la mira del rifle.

Heivia observa al Objeto a través de la mira del misil antitanque y mantiene su tono de voz bajo a la fuerza.

“El nombre código del Objeto enemigo es Water Strider. Ah, y ese es sólo nuestro nombre código para él. No tenemos idea del nombre bajo el que fue desarrollado.”

“El nombre viene de esas patas,” dice la chica Élite agachada cerca de Quenser mientras observa al Water Strider directamente.

Quenser mueve el rifle para observar las patas del Objeto.

El cuerpo principal del Water Strider es una esfera gigante. Cuatro patas similares a las de un insecto se extienden desde ahí hasta el suelo.

Se mueve al deslizarse en vez de caminar. Se desliza por el suelo al igual que un insecto zapatero lo hace por el agua, y por eso recibió ese nombre código.

“Parece moverse sobre el suelo usando electricidad estática. Es básicamente igual al tuyo, princesa, pero con esas cuatro patas, puede regularse a sí mismo para moverse hábilmente a través de superficies más escarpadas,” Quenser dice mientras se concentra especialmente en la parte inferior de las patas.

La princesa continúa por él.

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“La electricidad estática sólo es usada para que flote el Objeto pesado. Utiliza métodos diferentes para propulsarse hacia adelante. El mío, utiliza láseres para detonar el aire, pero el Water Strider usa sus patas para patear el suelo directamente.”

En ese aspecto, el Water Strider se mueve como un verdadero insecto zapatero. Sin embargo, los cálculos de alto nivel y los ajustes en minutos tienen que ser hechos instantáneamente para asegurarse de que el peso del Objeto no se concentre en una sola pata, lo que llevaría a su destrucción. En verdad tiene que usar un método en el que las patas apenas logren tocar el suelo mientras lo usan para impulsarse.

Después de pensar sobre todo eso, Quenser continúa su explicación.

“Básicamente, el método de la electricidad estática es relativo a los aerodeslizadores que lanzan aire hacia abajo para flotar sobre la superficie del agua. ¿En vez de destruir al Objeto, no podemos excavar la tierra bajo sus patas? Si hubiera suficiente diferencia en el nivel del terreno, el poder que lo mantiene a flote dejaría de ser distribuido equitativamente y tal vez no sea capaz de deslizarse más.”

“Aún puede utilizar sus cuatro patas para caminar si tiene que hacerlo. Si una pierna se atora, simplemente puede desatorarla. Eso podría detenerlo unos 10 segundos, pero no sería suficiente para que dejara de funcionar,” explica Heivia. “Además, sus cañones de plasma y demás armas aún continuarían activas incluso si lográramos detener sus patas. Solo habríamos transformado un arma móvil en una estacionaria. Una vez que se percate de que nos acercamos para destruir sus piernas, nos destruirá en poco tiempo. Tal vez funcionaría si quisiéramos morir para poder salvar a Froleytia y los demás, pero honestamente preferiría no morir así.”

“En ese caso…” la chica Élite mueve su mirada de las patas del Water Strider a las armas principales ubicadas en la parte superior. “¿Podemos hacer que el enemigo se equivoque al disparar? Si sólo un Objeto puede destruir a otro Objeto, entonces si usamos el propio poder del Objeto…”

“Tal vez si tuviéramos nuestro propio Objeto, pero este pequeño misil no podría ni rasguñar sus cañones.”

Heivia golpea levemente su misil portátil como si fuera chatarra.

No pueden destruir sus patas o cañones.

Lo que queda…

“Así que tendremos que encargarnos del cuerpo principal.” Quenser observa la esfera gigante a través de la mira. “¿Pero no es el objetivo más resistente de todos? Un muro similar al de un refugio nuclear rodea al reactor gigante. ¿Cómo se supone que pasemos a través de eso?”

“Hey, teníamos partes de repuesto para nuestro Objeto, ¿cierto? ¿Había algún repuesto de las armas principales para el Objeto de la princesa? Sólo las armas de un Objeto pueden destruir a otro, así que eso podría funcionar si tuviéramos uno de sus cañones, ¿cierto?”

“¿Sabes cuánta potencia requiere el reactor de un Objeto?” Quenser sacude la cabeza con una expresión amarga en el rostro. “Produce suficiente energía para gastar mientras dispara más de 100 armas que no recibirían energía suficiente de un transbordador suministrado con energía nuclear. Esos reactores son la cristalización de la tecnología humana. Están hechos a mano por cerca de 300 técnicos con habilidades que ni siquiera tiene la maquinaria de precisión. ¿De dónde planeas sacar una fuente de energía que reemplace al reactor?” Quenser continúa resaltando las fallas en la sugerencia de Heivia. “E incluso si tuviéramos un reactor para usar, esas armas fueron hechas para activarse mientras están conectadas a un Objeto de 50 metros y 20 toneladas. La onda de impacto por lanzar los cañones de riel o los cañones de Gauss tal vez sea suficiente para matarnos si los disparáramos y el calor de los láseres o las armas de plasma podrían transformarnos en antorchas humanas. …De hecho, un cañón de plasma de baja estabilidad probablemente saldría disparado como un cohete si intentáramos activarlo.”

“Sólo estaba pensando en voz alta, maldición. Y ese maldito Water Strider se aseguró de destruir todas las instalaciones de mantenimiento de nuestra base para acabar incluso con la más mínima posibilidad para hacer algo como eso.”

Sin embargo, los dos dejan de hablar en ese momento.

“Espera un segundo.”

“Sí.”

La chica Élite parece confusa mientras los dos chicos separan sus ojos de las miras e intercambian una mirada.

“Incluso si no podemos destruir al Objeto, su zona base sigue siendo operada por soldados.”

“Ese monstruo sigue siendo un arma, así que se detendrá si no recibe el mantenimiento regular, ¿no es cierto?”

Quenser y los demás se alejan del Water Strider y se dirigen a la pendiente de la montaña. Los tres logran llegar a la parte posterior de la zona base de mantenimiento del Water Strider.

Se encuentran dentro de una torre de metal oxidada.

Seguramente fue colocada como una torre de vigilancia mientras la zona base era construida y aún no se han instalado los radares. Parece que fue abandonada desde que se terminó de instalar la zona base, así que Quenser y los demás la utilizan.

Mientras se mantienen escondidos detrás de los paneles de metal antibalas colocados en la torre, se asoman hacia la distancia en donde la zona base de mantenimiento se extiende frente a ellos. La base parece medir unos 500 metros cuadrados.

“…Hey, ¿lo notaron?” Heivia murmura mientras observa la zona base.

“Sí, tienen muchas instalaciones de radares. De hecho, la base está prácticamente constituida de puros radares.”

La mayoría de los edificios hechos con grueso concreto son áreas e mantenimiento para el Water Strider o instalaciones de radar para ayudar al Objeto. Casi no tiene fuerzas militares normales además del Objeto. La base fue construida basándose en la teoría de que los Objetos son sinónimos de guerra y por eso todo debería desarrollarse basándose en ello.

“No sólo no hay tanques o bombarderos, ni siquiera hay vehículos armados o vehículos de transporte de soldados. Los pocos vehículos esparcidos por ahí parecen tractores para cavar en la nieve.”

“Supongo que todo lo colocaron ya sea para mantenimiento de Objeto o radares para poder reducir los costos de mantenimiento innecesarios que requieren los demás vehículos.”

“Es cierto que gastar impuestos en mantener tanques pasados de moda se escucha bastante ridículo…”

Seguramente, la única fuerza militar además del Objeto en la zona base enemiga es la infantería. Y hablando de la infantería…

“Supongo que no es de sorprender…” murmura Quenser. “Un estudiante que nunca antes había usado un arma no podría acabar con cuatro soldados reales. Probablemente sólo eran trabajadores de mantenimiento. No esperaban capturar a una Élite, así que tal vez formaron apresuradamente un grupo de soldados de mantenimiento no combatientes para ir a buscarla.”

“Aunque estuvieran entrenados o no, siguen siendo bastardos horribles a los que mataste. Esto no cambia el hecho de que eres el caballero que salvó a la princesa,” Heivia comenta tranquilamente.

El humor de todos ha mejorado bastante por el simple hecho de haberse alejado del Objeto aunque sea sólo temporalmente.

“Sin embargo, si tienen que enviar soldados de mantenimiento a las líneas frontales, probablemente sea seguro pensar que no tienen soldados normales. Si pudiéramos deshacernos del Objeto gigante, Froleytia y los demás tal vez podrían ser capaces de derrotarlos.”

“El problema es qué haremos con el Objeto,” dice la chica Élite.

Quenser observa hacia el edificio más grande de la zona base que seguramente es el edificio de mantenimiento.

“¿...?... Parece ser que el techo y los muros pueden abrirse.”

“Bueno, su único método de pelea es el Objeto. Serpia un grave problema si fueran atacados mientras está en servicio. Apuesto a que se aseguran de que los cañones aún funcionen mientras están bajo mantenimiento para poder interceptar cualquier ataque.”

“Pero si el Objeto aún está en movimiento, ¿cómo pueden darle mantenimiento?”

“El Water Strider posee más de 100 armas, así que seguramente tienen 50 de repuesto incluso si tienen que intercambiar la mitad para mantenimiento. De esa forma, tienen un número mínimo activo a todas horas.”

Quenser observa nuevamente la zona base en su totalidad mientras escucha a Heivia.

“… ¿Entonces qué deberíamos hacer explotar?” Quenser pregunta a sus compañeros mientras piensa en la estructura de los distintos edificios. “¿Qué les causaría más problemas si fuera destruido?”

“Ya lo sabes, ¿no es cierto? Las patas. Debe haber un área de almacenamiento o algo así que guarde las partes de repuesto para las patas del Water Strider.”

“¿…?”

La chica Élite parece confundida, pero Quenser asiente.

“Incluso con esa figura gigante flotando, debe recibir bastante presión en las patas. De por sí es suficientemente malo con una superficie plana como un aerodeslizador y utiliza solamente los extremos de sus cuatro patas.”

“De acuerdo con los registros de la pelea, ese maldito Water Strider siempre regresa a la base para mantenimiento cada 12 horas. Seguramente, recibe una revisión para esas ‘zapatillas de cristal’ en sus patas. Producir constantemente suficiente energía para que esa cosa flote debe derretir las partes de metal.”

“Mi Objeto también utiliza electricidad estática, pero puede soportar hasta medio año sin reemplazar sus partes. Lo recuerdo porque generalmente se reemplaza la caja que guarda los gases de escape del reactor JPlevelMHD.”

“Eso se debe al área de efectividad, ¿no crees? La superficie plana flotando al fondo del tren de aterrizaje con forma de Y invertida mide unas docenas de metros, así que el peso en cualquier punto no es tan grande. Sin embargo, ese Water Strider flota solamente sobre los extremos de las cuatro patas, así que se desgasta más rápidamente. Eso hace que la diferencia entre tener que reemplazar las partes cada medio día o cada medio año sea demasiado marcada.”

“…Ya que es cada medio día, ¿no significa que el Water Strider podría perseguirnos por otras 12 horas incluso si destruimos las instalaciones?”

“Claro, si apenas acabara de reemplazar sus ‘zapatillas de cristal’ con unas nuevas. Ha pasado algo de tiempo desde que las reemplazó por última vez y debió haber causado más presión sobre sus patas de lo normal mientras peleaba contra el Objeto de la princesa. Supongo que su tren de aterrizaje ya debe estar bastante desgastado. De hecho, me sorprende que aún no haya regresado a la base.”

“Entonces, si destruimos esas partes de repuesto…” murmura la chica.

“No serán capaces de reemplazarlas. El Objeto desgastará sus patas y no será capaz de moverse. Incluso si se forzara a continuar moviéndose en ese estado, los resistentes muros derretirían su sistema desde el interior.”

“No podemos destruir al Objeto directamente, pero seremos capaces de escapar de su amenaza.”

“Eso significa que debemos pensar en una forma de infiltrarnos a la base,” comenta la chica Élite.

Quenser y Heivia observan a la pequeña princesa y ella continúa hablando.

“Como una Élite que maneja un Objeto, tengo una idea sobre cómo pasar a través de su red de radares.”


Parte 13[edit]

Los únicos explosivos que tienen a la mano son los C4 para destruir puentes o rocas y el misil antitanque portátil.

Quneser y Heivia salen de la torre de vigilancia y se dirigen a la zona base de mantenimiento del Objeto enemigo.

“… ¿En verdad debimos dejar atrás a la princesa?”

“Ir los tres no nos hubiera ayudado en nada. Si el Water Strider regresa mientras estamos trabajando, necesitaremos escapar de la base, así que dejar a alguien vigilando de esta forma es lo mejor.”

“Hah. Cálmate, Sr. Caballero. Incluso si unos soldados rasos como nosotros son capturados, existe la posibilidad de que mantendrán el tratado y nos traten como prisioneros de guerra. Sin embargo, una Élite obviamente sería diferente. Ella sería brutalmente torturada para obtener información clasificada sobre nuestro Objeto o sería asesinada ahí mismo para destruir desde la raíz la habilidad de pelea de nuestras fuerzas. Simplemente te aseguraste que ella fuera capaz de escapar si cometíamos un error en esto.”

“Como dije: es lo mejor.”

Mientras Quenser pasa por la nieve, una sonrisa aparece en sus labios.

Gracias al frío, es una sonrisa tensa y extraña, pero es una sonrisa natural.

“Ciertamente te has animado,” le comenta a Heivia.

“Por supuesto. Infiltrarse a una base enemiga con cierto bastardo es mucho mejor que ser perseguido por ahí por ese monstruoso Objeto.”

Se han recuperado mentalmente a tal punto que las bromas y el sarcasmo ahora aparecen naturalmente una vez más.

Eventualmente llegan a la barricada en la parte posterior de la base. La zona base enemiga está rodeada por una larga red hecha con fibra sintética, pero no parece tener ningún sensor conectado.

“¿Qué opinas? ¿Deberíamos escalarla?”

“No, idiota. Los guardias nos descubrirán si escalamos dos metros. Necesitamos abrir un agujero en la barricada,” Heivia murmura mientras saca un cuchillo de su cintura.

Utiliza la hoja para cortar las fibras sintéticas entretejidas sobre la barricada una a la vez.

Le lleva algo de tiempo y ambos están preocupados por la posibilidad de que los soldados que patrullan los descubran, pero ninguno lo hace. Parece que en verdad le dejan todo el trabajo a su Objeto.

“Vamos.”

“Hey, ¿en dónde crees que se encuentren los repuestos para las patas del Objeto?” Quenser pregunta mientras pasa por el agujero en la barricada.

Parece ser que edificios de grueso concreto se encuentran por aquí y por allá dispersos en la amplia área de la zona base. Varias son instalaciones con enormes antenas para apoyar al Objeto. El área entre los edificios es inusualmente grande de tal forma que un intruso sería descubierto desde las torres de vigilancia y también para que el Objeto pase sin ninguna obstrucción.

Heivia contesta mientras se oculta detrás del edificio más cercano.

“No lo sé, pero el Objeto tiene que ser revisado cada medio día. Probablemente sea el lugar en el que entra y sale más gente.”

“Por cierto, ¿cuánto tiempo habrá pasado desde que comenzó a moverse el Water Strider?”

“Debería regresar pronto, así que necesitamos destruir esas partes antes de que lo haga.”

Si pueden evitar que el Water Strider reciba mantenimiento, quedará atorado dentro de la zona base. Sin embargo, si es revisado exitosamente, podrá moverse libremente por otras 12 horas. Si eso sucede, sus superiores y soldados compañeros que intentan escapar seguramente serán asesinados.

Quenser utiliza la mira de su rifle para observar los edificios alrededor y encuentra un edificio que tiene más huellas sobre la nieve que llevan a su entrada que cualquier otro. Las tormentas de nieve han hecho que las huellas desaparezcan, pero la nieve blanca tiene un color sucio solamente en esa área. Puede ver huellas de 100 o 200 personas así como huellas de neumáticos de algún vehículo pesado.

“Ese edificio no es lo suficientemente grande como para que quepa el Objeto.”

“¿Entonces esas huellas son de los que transportan las partes de repuesto a las instalaciones de mantenimiento?”

“O tal vez sólo es el club nudista más popular dentro de la base. Si es así, terminaremos en una balacera contra 100 idiotas con casas de campaña dentro de sus pantalones.”

Quenser utiliza la mira de su rifle para observar las torres de vigilancia en las cuatro esquinas de la zona base, pero las antenas parabólicas de distintas instalaciones de radar que fueron construidas después bloquean la vista de cualquier guardia que pueda estar en ellas. Una vez más, el Objeto tiene toda la prioridad. De cualquier forma, no parece que vayan a ser capturados si corren por la zona base.

Quenser y Heivia salen corriendo de detrás del edificio cruzando por una amplia área abierta de nieve.

Sólo les lleva 10 segundos cruzar, pero ellos sienten que su corazón se detendrá.

No se escuchan disparos de los francotiradores en las torres.

Se recargan fuertemente sobre el muro del almacén.

“Entremos por atrás. ¿Sabes cómo abrir un seguro electrónico?”

“Si tenemos que hacerlo, podemos usar los C4 para destruir la puerta.”

“Es una idea genial. Si tan solo no atrajera a todos los soldados de la base hacia nosotros.”

Mientras Quenser y Heivia intercambian comentarios, rodean el edificio hasta la entrada trasera y encuentran que no está asegurada.

“…Supongo que juzgaron que no había posibilidad de que hubiera algún intruso humano.”

“Y yo que pensaba que tener guardias era un gasto de dinero en nuestra base…”

Abren la pequeña puerta y entran al almacén.

El edificio mide unos 50 metros de ancho, 100 metros de largo, y 15 metros de altura. Es un área abierta sin muros interiores. Vigas de metal recorren el área horizontal y verticalmente. La estructura metálica es altamente regular y tiene el aspecto de algo que parecen estantes gigantes de una librería.

Y esos estantes están repletos de partes cilíndricas.

Los cilindros tienen un diámetro de cerca de un metro y una longitud de unos 5 metros, haciéndolos ver como el motor de un avión de combate. Gracias al conocimiento de Quenser sobre los Objetos, deduce que son los aparatos que crean las masivas cantidades de electricidad estática al girar sus turbinas.

“Supongo que esto es parte del tren de aterrizaje, pero…”

“Sí, en mi estación, analizábamos los registros de batalla e intentábamos idear un diseño esperado del Objeto enemigo. Estoy seguro que una parte similar a esta fue dibujada en el diagrama de predicción,” comenta Heivia.

Quenser observa el costado de las turbinas cilíndricas en donde se encuentra escrito un número. Seguramente sólo es una especificación de la energía eléctrica que utiliza, pero…

“… ¿Qué demonios? ¿El punto decimal se encuentra mal ubicado? Si esto es correcto, entonces es más del doble de lo que suponía del valor para los cañones de plasma.”

“Para mantener un objeto tan grande flotando y moviéndose a semejante velocidad, tienen que esforzarse al máximo. El grupo de estímulos eléctricos estima que cada pata utiliza cerca de 10 de estas turbinas.”

“¿Veinte veces la energía de un cañón de plasma? ¿Y sólo para una pata?”

“Mira,” Heivia dice mientras abre la cubierta de mantenimiento de la turbina y se asoma. “Esta cosa está atascada de sensores. Casi parece una de esas bombas de tiempo que ves en películas. Todos son para una seguridad extremadamente sensible. Tienen que asegurarse de poder predecir antes de tiempo si el control de una de estas turbinas de alta potencia será perdido para así poder desactivarlo antes de tiempo.”

“…Ahora que lo pienso, creo que escuché algo acerca de las turbinas que se derriten si crean energía continuamente.”

“El momento en el que se derriten ya es demasiado tarde,” dice Heivia. “Sólo porque la turbina deje de funcionar no significa que la energía producida por el reactor vaya a desaparecer. El reactor y las patas tienen unos cuantos transformadores de emergencia y mecanismos de descarga instalados, pero la cantidad de energía de la que tendría que deshacerse sería de magnitudes mucho mayores de las que puede manejar. Si todas las turbinas instaladas en una sola pata se salieran de control, eso sería 20 veces la potencia de uno de sus cañones de plasma. Apuesto a que los transformadores y mecanismos de descarga dejarían de funcionar si las turbinas se derritieran y dejaran de servir. Los aparatos explotarían.”

Es por eso que las turbinas tienen tantos sensores instalados. Si pueden predecir una falla antes de tiempo, pueden encargarse del exceso de energía al descargarla por etapas.

“Puede que su funcionalidad haya sido optimizada… pero el diseño del Water Strider provoca una carga excesiva en muchas partes, ¿no es cierto?”

“Ese sólo es un aspecto al crear un Objeto que se especialice en esta región nevada. Uno como el de nuestra princesa que fue diseñado para ser resistente en cualquier situación y el Water Strider que solamente funciona en Alaska tal vez ambos sean Objetos, pero fueron desarrollados con ideas en mente totalmente distintas,” Heivia continúa. “La nieve profunda puede reducir tu velocidad, así que un Objeto que puede moverse rápidamente es una ventaja importante. …Y eso fue lo que derrotó a nuestra princesa.”

Sin embargo, si las turbinas no pudieran ser reemplazadas, Quenser y los demás serían victoriosos.

Si el productor de electricidad estática en el tren de aterrizaje del Water Strider fuera destruido, no podría ser examinado, y entonces el Objeto enemigo quedaría atorado.

Y ellos tienen los C4 para llevar a cabo eso.

Pero…


Parte 14[edit]

Dentro de la torre de vigilancia a corta distancia de la zona base de mantenimiento, la chica Élite espera a que regresen Quenser y Heivia.

De pronto, sus oídos se sacuden y se da la vuelta rápidamente.

Acaba de escuchar el sonido similar al de una oscura nube llena de relámpagos que emite el Water Strider cuando se mueve utilizando cantidades masivas de electricidad estática. Seguramente esté regresando a la zona base de mantenimiento porque su tiempo límite está aproximándose.

Si se encuentra con los dos chicos en la zona base, seguramente serán asesinados.

Le entregaron a la chica un radio justamente para esa situación. Si debe hacerlo, tiene que contactar a Quenser y Heivia para que puedan escapar. Su plan fallaría, pero continuarían con vida. Si el plan para destruir el tren de aterrizaje del Objeto tiene que ser detenido, simplemente tendrán que idear alguna otra cosa.

La chica Élite estira la mano hacia el interruptor del radio, pero se detiene repentinamente.

(…Esto no es bueno.)

Traga saliva de manera sonora.

La zona base enemiga está conformada por instalaciones de mantenimiento para el Objeto y enormes instalaciones de radio para apoyar al mismo. Seguramente sirven para localizar al enemigo en una tormenta de nieve, pero si ella utiliza el radio tan cerca de la base con tantos radares de precisión…

(Definitivamente se darán cuenta. No sólo me localizarán a mí, tal vez incluso se percaten de que la señal es enviada hacia su propia base…)

Se supone que el radio le permitiría advertirles del peligro, pero la propia transmisión podría ponerlos en peligro.

Sin embargo, sin el radio no puede avisarles que el Objeto está regresando a la base.

El Water Strider continúa aproximándose a la zona base.

(¿Qué hago?)

La chica Élite baja la mirada hacia el radio.

No quiere que esos dos chicos mueran. Esto no es cuestión de sentirse obligada a proteger a los demás soldados como la Élite de un Objeto. Más allá de esa obligación, simplemente no quiere que aquellos que se levantaron para protegerla mueran en vano.

Compañeros.

Cuando ese término aparece en su mente, la chica Élite asiente.

(La prioridad del enemigo es la Élite que maneja al Objeto…)

Inhala profundamente y después observa intensamente al arma gigante.

Esa es su única oportunidad para actuar como distracción.


Parte 15[edit]

Con los C4 en mano, la expresión de Quenser se vuelve más amarga.

“… ¿Qué se supone que haremos?” murmura con voz temblorosa.

Las partes de mantenimiento para el Objeto son solo los equipos de mantenimiento sin protección exterior, así que los C4 son más que suficientes para destruirlos.

Sin embargo…

“Hay demasiadas de esas cosas. ¡¡La cantidad de C4 que tengo no será suficiente!!”

El amplio espacio dentro del edificio está repleto con las partes cilíndricas. Quenser aprieta los dientes ante la cantidad exagerada que han preparado.

Los Objetos son sinónimo de guerra.

Todos en esa base serían derrotados si el Objeto dejara de funcionar.

La cantidad masiva de partes demuestra el temor que sienten de que eso suceda. Los enemigos son lo suficientemente cobardes para dejarle las matanzas al Objeto, pero tienen muy en cuenta las debilidades del mismo.

Heivia siente la misma impresión y llama a Quenser tocándolo por el hombro.

“Hey, simplemente volemos todo el edificio. ¡¡Incluso si no podemos destruir cada parte individual, podemos aplastarla bajo los escombros si destruimos uno de los pilares de soporte principal del edificio!!”

“¿Estás totalmente seguro de que todas y cada una de estas partes quedarán inutilizables después de eso? ¡E incluso si cada parte se vuelve inútil, tal vez sean capaces de reunir suficientes componentes para crear una que si sea útil!”

“¡Pero-…! No, tienes razón. La operación continua del Objeto es cuestión de vida o muerte para ellos. No me sorprendería que fueran tan persistentes. ¿¡Pero entonces qué otra cosa podemos hacer!?”

“¡¡Mierda!!” Quenser maldice y corre a través del almacén.

Revisa cada uno de los estantes de metal para ver si puede encontrar algo de información útil. Mientras lee las indicaciones, incrementa su impaciencia, evitando que pueda comprender lo que lee.

Al mismo tiempo, Heivia desvía la mirada hacia la salida.

“Hey, esto es peligroso. ¡En serio deberíamos detenernos! ¡¡Si no podemos acabar con el método de movimiento del Objeto, no hay razón para quedarnos aquí!! ¡¡Necesitamos irnos!!”

“¡Espera un poco más! ¡¡Tiene que haber algo!!” responde Quenser, mientras pasa las hojas de un manual de mantenimiento de las turbinas que encontró.

Cuando escucha el leve sonido como el de una nube moviéndose por el suelo, siente que su corazón está a punto de detenerse.

Es el sonido del Water Strider moviéndose.

“¡¡Ah, maldición!! ¿¡Por qué la princesa no nos advirtió a través del radio!?” Heivia grita, pero Quenser no le presta atención.

Después de haber llegado tan lejos, tendrán una muerte en vano si no contraatacan de alguna manera.

(Espera un momento. Esta combinación de un sensor de cuarto nivel y el interruptor automático…)

Quenser observa el manual de mantenimiento y después los estantes.

(¿¡Cuál es el número!? ¡¡Si supiera el número principal…!!)

“¡¡¡Se acabó el tiempo, héroe!!! ¡¡Si no salimos de aquí en 30 segundos, quedaremos atrapados!!”

“¡¡Sólo un minuto más!!”

“¿¡Qué estás haciendo!? ¿¡No quedamos en que no podríamos destruirlo todo!?”

“¡¡45 segundos más!!”

Heivia escucha un gran número de pasos aproximándose. Seguramente Quenser ha perdido la habilidad de tomar decisiones racionales debido a la esperanza que piensa que tiene ante él. Justo mientras Heivia piensa en patearle el trasero para obligarlo a escapar. Quenser finalmente regresa a su lado.

“Vamos. ¿¡Aún podemos lograrlo!?”

“¡Gracias a cierto idiota gastando nuestro tiempo, será algo difícil, pero esperemos que sí! ¡¡Por aquí!!” Heivia dice mientras corren a la entrada trasera.

Abre la puerta con un chasquido y se asoma al exterior justo a tiempo para ver al Objeto pasando cerca de ahí. Seguramente se dirige al área de mantenimiento. Los soldados de mantenimiento lo siguen por detrás.

“¿Lo lograremos?”

“Será como pasar entre un panal de abejas, pero no tendremos otra oportunidad. Las instalaciones de radar estarán en alerta máxima cuando el Objeto esté bajo mantenimiento. Necesitamos salir de la base antes de que cambien a ese modo.”

Entonces escuchan un sonido metálico.

No proviene de la entrada trasera. La puerta de personal cerca de la persiana gigante al frente está abriéndose.

“¡Maldición, vámonos!”

Quenser y Heivia están prácticamente empujándose mientras salen corriendo del almacén.

Parece que el ejército enemigo ha bajado bastante la guardia desde que el Objeto que era su única amenaza fue destruido. Un gran número de personas están reunidas alrededor del Water Strider que regresa como si fuera un desfile de victoria.

“Hey, no piensas utilizar esos C4, ¿cierto? Inserta unos fusibles y lánzalos por toda el área.”

“¿Planeas utilizar una distracción?”

“Una vez que el mantenimiento del maldito Water Strider termine, necesitaremos algún tipo de plan para ganar suficiente tiempo para escapar. ¡¡Si reciben el reporte de explosiones por toda su base, tal vez piensen que se trata de un bombardeo y hagan que el Objeto se encargue de eso!!”

Quenser sigue la idea de Heivia y lanza los pequeños trozos de C4 mientras corre. Es cierto que ya no necesitarán los explosivos.

Después de deshacerse de todo el C4, se dirigen al agujero que crearon en la red de la barricada.

Es en ese momento cuando Quenser se percata de algo.

Se detiene repentinamente.

“¿¡Qué sucede, héroe!? ¿¡Olvidaste algo!?”

“¡Sí! ¡¡La princesa fue capturada!!”

La expresión de Heivia se transforma a una de sorpresa al ver la mirada seria de Quenser.

Se dirigen a la parte trasera de un edificio en vez de correr hacia el agujero en la barricada y se asoman por la esquina para poder ver el centro de la zona base.

A la distancia, pueden ver a la chica Élite esposada y siendo obligada a caminar cerca del Water Strider. Su humor triunfante no se debe simplemente al regreso del Objeto. Están animados porque ahora tienen la oportunidad de linchar a la persona que amenazó sus vidas.

Quenser mira hacia el agujero en la barricada y después hacia la chica Élite en el centro de la zona base.

“Maldición. ¿¡Qué se supone que haremos!?” pregunta.

“¿Qué se supone que haremos…? Oh, no. ¡Aunque admito que eres todo un caballero, no puedes estar pensando en salvarla en esta situación!”

“¿¡Entonces simplemente la abandonamos!? No estoy diciendo que tengamos que enfrentarnos al Objeto. Acabamos de dispersar el C4 por todos lados, ¿¡recuerdas!? ¡¡Si podemos confundir al enemigo, tal vez podamos crear una abertura para poder salvarla!!”

“¿¡Sólo nosotros dos!? Ellos tienen su Objeto. E incluso si no lo tuvieran, ¿¡cuántos soldados crees que hay ahí!? ¿¡Tienes idea de a cuántos refuerzos tendríamos que enfrentarnos para lograr hacer eso!?”

“Pero sin el Objeto, las cosas serían diferentes, ¿cierto?”

“¿Qué?”

“Si podemos deshacernos del Water Strider, podremos hacer algo contra los refuerzos normales como tanques y bombarderos, ¿cierto?”

Quenser aprieta los dientes y opera el radio en su mano.

No está detonando los C4.

Está intentando contactar a Froleytia y los demás soldados que están escapando, pero Heivia sujeta rápidamente su mano al percatarse de ello.

“¡¡Idiota!! ¡¡Su base está formada principalmente por instalaciones de radar!! ¡Si envías una señal de radio, nos encontrarán en segundos!”

“¡¡Pero…!!”

“No hay nada que podamos hacer. ¡Incluso si pudiéramos contactar a Froleytia y los demás, ¿en verdad crees que vendrían?!”

“¿¡Entonces simplemente abandonamos a la princesa!? ¿¡Recuerdas por qué nos separamos del grupo principal y vinimos aquí en primer lugar!? ¡Fue porque no podíamos abandonarla!”

“Maldición,” Heivia dice y chasquea la lengua.

Parece estar dudando sobre algo, pero finalmente se decide y habla.

“Mi instructor militar me enseñó un truco secreto cuando estaba en entrenamiento.

“¿...?”

Si elevas la potencia del buscador infrarrojo en un misil antitanque portátil de 8va generación hasta su límite, haces unas cuantas modificaciones a la computadora que apunta, y después lo conectas al puerto de la radio, el satélite de alto poder militar atrapará la señal, completando la transmisión.”

“¡¡Espera, quieres decir que…!!”

“Pero no hay garantía de que aquellos en control de las instalaciones de radio aquí no se percaten de un truco como ese y el misil antirradar lanzado a las nubes está obstruyendo cualquier señal o transmisión. El instructor que me enseñó eso me dijo que sólo debía ser utilizado como última opción para enviar un SOS. Será un milagro si la transmisión se mantiene aunque sea por un minuto.”

Mientras explica bruscamente, Heivia baja el misil y comienza a hacer las preparaciones necesarias. Quenser remueve la cubierta de la computadora del misil utilizada para apuntar.

“¿Sabes en dónde y cuándo pasará el satélite sobre esta zona?”

“Revisa la tabla en el Archivo 399 de tu aparato portátil. Si se encuentra en su órbita estándar, deberías ser capaz de revisarlo sin tener que hacerlo en línea.”

Heivia conecta el radio y el misil antitanque portátil con un cable y mueve lentamente mueve el cilindro hacia el cielo basándose en los datos del aparato portátil de Quenser. Mientras lo hace, un poco de estática resuena por las bocinas del radio.

“Ahí, Heivia. …Muy bien, parece que localizamos el satélite.”

“¡Apresúrate y asegura la línea de transmisión y después conéctate al aparato de comunicaciones satelital de Froleytia! ¡¡No sé cuánto tiempo durará este método manual!!”

A pesar del método poco ortodoxo, están utilizando el código militar adecuado, así que el satélite realmente captura su señal. Después de que la señal indica que el acceso ha sido un éxito, Quenser habla a través del radio.

“Aquí Quenser. ¿Puedes escucharme, Froleytia-san? ¡¡Actualmente nos encontramos cerca de la zona base enemiga!!”

“¿¡…!?”

Escuchan el sonido de alguien que aguanta la respiración debido a la sorpresa a través de la bocina.

Debido a que la señal está siendo forzada con el misil antitanque portátil, la señal tiene mezclado bastante sonido. La estática es más alta que las voces, pero apenas logran distinguir las palabras entre ambos.

“La princesa fue capturada por los soldados en la base. Iremos a salvarla. ¿Podrían ayudarnos? La base está conformada prácticamente por instalaciones de mantenimiento para el Objeto y por instalaciones de radar, así que básicamente no poseen tanques o bombarderos. ¡¡Si pudiéramos hacer algo sobre ese Objeto, podríamos derrotarlos fácilmente!!”

“¿Sabes lo peligroso que es un Objeto? Olvídate de la princesa. No es necesario que mueras y, Quenser, ni siquiera eres un soldado real. ¡¡Nadie te culpará si escapas!!”

“Nosotros nos encargaremos del Objeto,” Quenser dice directamente. Nadie piensa que sus palabras sean algo más que una broma.

“¡Froleytia-san, puedes esperar hasta que veas el destello del Objeto explotando, pero el instante en el que pienses que podemos ganar al menos envía un tanque hacia acá! Sólo eso podría cambiar por completo la situación. ¡¡Por favor tómalo en cuenta!!”

“Muy bien, pero no elevaría mis esperanzas si fuera tu.”

“Soy libre de elevar mis esperanzas todo lo que quiera,” Quenser dice antes de apagar el radio.

Después voltea a ver a Heivia.

Intenta controlar el temblor de su cuerpo y dice, “Ahora y hicimos todo lo que podíamos.”

“Sí, pero no creo que exista posibilidad de que Froleytia regrese. Poe una cosa, tu pedido no estaba basado en las regulaciones militares. Ella no pondrá a sus subordinados en riesgo por eso.”

“Ahora simplemente tenemos que resolver todo rezando por un milagro y destruyendo al Objeto por nuestra cuenta.”

“No lo digas como si fuera tan fácil. Además, nunca dije una sola palabra sobre ayudarte a salvar a la princesa.”

“Ya veo.”

Quenser no maldice a Heivia por querer escapar. Antes de eso lo obligó a envolverse en esto, pero no hay garantía de que sobrevivan la próxima vez. Además, lo que Quenser está por hacer no es una acción militar verdadera. De hecho, se siente agradecido de que Heivia lo acompañara por todo ese tiempo.

“…Lamento haberte arrastrado hasta aquí. Mejor sal por el agujero de la barricada y escapa hacia el bosque por allá. Haré todo lo posible para distraerlos en lo que tú te vas.”

“Espera, maldito. ¡No me dejes con algún trauma horrible! ¿¡No me darás ninguna otra opción, cierto!?”

Heivia continúa observando obstinadamente hacia el agujero en la barricada, pero cuando Quenser sale corriendo de detrás del edificio y se dirige hacia el siguiente lugar para cubrirse, Heivia lo sigue.

Quenser y Heivia se dirigen a una misión que prácticamente no tiene posibilidad de tener éxito.


Y por supuesto, no ocurre ningún milagro.

Después de apenas 10 minutos, son localizados, las señales de emergencia son lanzadas cerca del suelo a sus pies por un francotirador, y terminan rindiéndose con las manos elevadas sobre sus cabezas.


Parte 16[edit]

Quenser, Heivia, y la chica Élite son llevados al centro de la zona base de mantenimiento. Se les ordena que se arrodillen y coloquen las manos detrás de la cabeza.

Un soldado se coloca detrás de cada uno de ellos, colocando sus armas en su cabeza. Un círculo de personas de la zona base apareció para observar su ejecución pública.

“Es una historia bastante triste, ¿no es cierto? Este es un buen ejemplo de un caballero regresando a salvar a la princesa.”

“¿Te estás burlando de mi?”

“Ah, maldición. El Objeto está entrando al área de mantenimiento.”

Mientras Heivia y la chica Élite intercambian comentarios, Quenser permanece en silencio y observa al Water Strider moviéndose lentamente.

“(…Si creo algo de confusión, ¿crees que podamos escapar?)”

“(… ¿Ahhn? ¿Te refieres a los C4 que esparcimos? Si eso de alguna manera destruyera al Objeto, tal vez lograríamos hacerlo de alguna forma.)”

“(…Estoy hablando en serio.)”

“(…Igual yo.)”

Mientras tanto, uno de los soldados enemigos da un paso hacia enfrente ante Quenser y los demás. Mientras mastica algo de goma, escupe algo de saliva amarilla hacia la cabeza de Quenser.

“Te rostizaremos con las armas principales del Objeto.” Después se dirige hacia la chica Élite. “Para ti, usaremos sugestiones y electrodos para sacar todo lo que esté dentro de tu cabeza. Tu personalidad nunca se recuperará, pero terminaremos en unos 30 minutos. Después de eso, te desnudaremos y colgaremos de las armas principales hasta que te congeles. Tal vez los salvajes corriendo por los bosques y montañas se rindan una vez que vean eso.”

“… ¿Así que no te importan los tratados de guerra acerca de los prisioneros militares? Creo saber quiénes son los verdaderos salvajes aquí, cabrón.”

Heivia deja escapar ese comentario e inmediatamente después una bota militar de piel gruesa vuela hacia su mejilla. Lo golpea lanzándolo a la nieve. Mientras tose, observa al soldado enemigo con una poderosa luz en sus ojos.

“El mantenimiento está completo, así que es hora de la ejecución,” el soldado enemigo dice con tono burlón.

Con un estruendo como el de una campana de iglesia, los muros y techo de las instalaciones de mantenimiento del Objeto se abren totalmente. Apareciendo desde el interior se encuentra el arma gigante con un cuerpo principal de 50 metros y cañones principales estirándose en cada dirección, dándole una medida total de más de 140 metros. El Water Strider es el gobernante de la invernal tierra de Alaska con sus más de 100 armas y poderoso blindaje. Ya que acaba de reemplazar las partes de su tren de aterrizaje, el sonido similar a una oscura nube llena de relámpagos creado por la masiva electricidad estática que crea parece tener un tono más agudo.

Se encuentra a unos 300 metros, pero posee tanta energía que puede ignorar esa distancia. La escena en verdad los hace sentir como si fuera a aplastarlos con sus patas si se atrevieran a moverse aunque fuera un poco.

Viendo al Objeto, Quenser le murmura a Heivia.

“(…Agáchate cuando salga corriendo. Utiliza ese tractor para nieve para cubrirte.)”

“(…¡¡Hey!!)”

Heivia no tiene tiempo para detenerlo.

Quenser corre rápidamente hacia el soldado enemigo que se les aproxima. Los soldados a su alrededor alzan sus rifles, pero no pueden decidirse a disparar debido al alboroto. Eso tal vez sea gracias al hecho de que todos son soldados de mantenimiento que no recibieron un entrenamiento adecuado.

El soldado enemigo tal vez pensó que Quenser intentaría arrebatarle su rifle porque lo aleja rápidamente.

Sin embargo, Quenser no busca el rifle.

Intenta sujetar el radio rectangular pegado al hombro del soldado como un cuchillo.

“¡¡Agáchense!!” Quenser grita mientras el soldado lo empuja.

Quenser opera el radio con su pulgar mientras gira por el suelo a pesar del hecho de que muchos cañones de rifle le apuntan. Heivia asume que está utilizando el radio para detonar los C4 que esparcieron por el área, así que salta inmediatamente detrás del tractor para nieve de tal forma que también cubre a la chica Élite.

Sin embargo, eso no es lo que sucede.

Quenser no detona los C4 que esparcieron como distracción.

Lo que hace explotar es una pata del Water Strider.

Con un estruendo explosivo, una de las cuatro patas a 300 metros de distancia explota desde el interior. No es una explosión externa. La explosión claramente ocurrió dentro del blindaje.

Cuando Quenser vio todas las partes de repuesto dentro del almacén determinó que sería imposible destruirlas todas. Es por eso que buscó las partes que serían colocadas en el Objeto durante el siguiente mantenimiento y colocó C4 dentro de ellas. Aún tiene mucho que aprender, pero sus estudios de la estructura de los Objetos tal vez fue lo que le permitió determinar qué partes eran importantes y en dónde podría pegar los C4 dentro de ellas de tal forma que no fueran descubiertos.

Con su grueso blindaje, el Objeto no puede ser destruido incluso con un arma nuclear. Sin embargo, un explosivo dentro del blindaje puede destruir el equipo dentro del Objeto.

Además, ha destruido las turbinas que consumen cantidades masivas de energía para crear la electricidad estática que ayuda al movimiento del Objeto. Incluso una de ellas utiliza el doble de energía de un cañón de plasma de baja estabilidad lo que significa que cada pata usa 20 veces esa energía durante el uso normal. Eso crea un punto débil.

Entonces, ¿qué sucedería si ese punto fuera aprovechado?

Incontables sensores se encuentran instalados en las turbinas para predecir fallos y desactivarlos por etapas para minimizar el daño. ¿Cuánta presión recibiría los transformadores de emergencia y los mecanismos de descarga ---así como el propio reactor--- si una explotara causando una reacción en cadena que hiciera explotar a las demás?

El soldado al que Quenser le robó el radio y que ahora apunta su rife hacia el chico desvía la mirada ante la explosión repentina.

Pero…

“… ¿En serio creíste que podrías destruir al Objeto con una explosión interna?” dice con tono triunfante.

La explosión inicial causó unas cuantas explosiones secundarias, pero permanece en una sola pierna. No fue suficiente para destruir al Water Strider por completo.

“¿Sabías que el 5% del peso de nuestro Objeto se debe a los mecanismos de seguridad? Unos cuantos soldados rasos infiltrándose a las instalaciones de mantenimiento y ejecutando algunos trucos no podrían destruirlo.”

Después de causar la enorme explosión, Quenser saltó detrás del tractor para nieve y el soldado enemigo se encuentra en el medio de la zona nevada abierta mientras apunta su rifle hacia él.

“La superioridad de los Objetos nunca será revertida. Así es el campo de batalla en el que peleamos.”

“¿En verdad?”

Sin embargo, Quenser continúa sonriendo a pesar de estar en esa situación desesperanzadora.

“¿Sabías que el Objeto de nuestra princesa y su Water Strider tienen mecanismos similares instalados? Vi que lo mencionaban en su manual de mantenimiento. Algunos Objetos tienen mecanismos de seguridad instalados para asegurar que no caigan en manos enemigas. Si no es destruido pero ya no puede funcionar, el enemigo podría recuperarlo y analizar la tecnología. Para evitar eso, el gas especial de los cañones de plasma es utilizado para hacer explotar al Objeto.”

Algo aparece en la mano de Quenser como si se tratara de un mago.

Heavy Object v01 142.jpg

Es algo lo suficientemente pequeño como para caber en su mano y parece un circuito impreso rectangular.

“El mecanismo es controlado por sensores de precisión, así que casi nunca se activa innecesariamente.”

El soldado enemigo se percata inmediatamente de lo que es ese circuito impreso rectangular.

Sin embargo, ya es demasiado tarde para hacer algo sobre ello.

“Pero si ese sensor es removido de la turbina que explota, ¿crees que pueda tomar una decisión acertada?”

Después de todo, la explosión del C4 causó un mal funcionamiento en el mecanismo de seguridad del Water Strider, causando que se activara. El gas especial para los cañones de plasma de baja estabilidad ocupa un lugar especial dentro de la máquina gigante… y causa una impresionante explosión poco después.

La enorme explosión causada por el plasma dentro del Objeto envuelve al reactor en poco tiempo. Sin embargo, es una explosión intencional utilizada para destruir toda información clasificada. Fue creada sólo para producir la fuerza destructiva necesaria para evitar que la tecnología sea analizada, así que es muchas veces menos poderosa que una explosión crítica del mismo reactor.

Aún así, todo el sonido desaparece.

La esfera gigante que es el cuerpo principal del Objeto se expande explosivamente con un destello de luz blanca y una intensa onda de impacto es emitida en todas direcciones. El soldado enemigo de pie en el área abierta es golpeado por la onda de impacto. Se inclina y es lanzado una docena de metros antes de aterrizar. Efectos similares suceden con los demás soldados enemigos.

El gigantesco Objeto ha sido destruido por las manos de un ingeniero de combate de carne y hueso.

Ese es un evento nunca antes escuchado que destruye por completo la propia teoría de la guerra. Ese logro ha sido llevado a cabo por la combinación de las habilidades de Quenser, Heivia, y la chica Élite. Un ingeniero de combate que trabaja normalmente tras bambalinas para destruir rocas y puentes para crear u obstruir pasos ha sido ascendido al nivel de un héroe que puede influenciar el resultado de una guerra entera.

Sin embargo, el chico no tiene tiempo de disfrutar de ese honor.

“¡¡Gwaaaahhhhhhhhhhhhh!!”

Quenser se cubrió inmediatamente, pero no logra salir sin ningún rasguño.

Aunque se encuentre a 300 metros del Objeto y esté oculto detrás de un tractor para nieve, el destello de luz explosivo parece incrustarse en sus retinas. La superficie metálica del tractor comienza a calentarse y lo derriba a un costado.

Un intenso dolor recorre su cabeza y su sentido del oído prácticamente se ha ido. Un dolor quemante cubre su espalda. Se frota los ojos desesperadamente ya que su visión está llena con un blanco puro e intenta encontrar a Heivia y la chica Élite que deben encontrarse en un estado similar.

Entonces escucha un sonido metálico proveniente de algún lugar.

Unos cuantos soldados debieron haber sobrevivido milagrosamente al igual que Quenser y los otros dos. Su visión regresa finalmente y observa a unos soldados intentando apuntar desesperadamente hacia él mientras se tambalean debido al impacto de la explosión.

Quenser siente el radio en sus manos una vez más.

Coloca la frecuencia y envía el código de detonación para los C4.

Los explosivos que diseminaron por todos lados explotan y los soldados enemigos sujetando sus rifles cerca de ahí son lanzados al aire de manera casi cómica.

Quenser le grita a Heivia quien se encuentra tendido sobre el suelo.

“¿¡Puedes correr!? ¡¡Toma uno de los rifles del suelo y contraataca!!”

“¡Maldito seas! ¿A eso le llamas ‘crear una confusión’? ¡¡Algo así de grande era obvio que también me afectaría!!” Heivia grita mientras recoge un rifle del suelo.

Incluso si lograron destruir al Water Strider debido a incontables coincidencias, su meta no es la destrucción de la zona base de mantenimiento.

Simplemente quieren escapar sanos y salvos.

Pero…

“¿¡…!?”

Mientras Quenser y los demás corren hacia la salida de la zona base, un soldado enemigo bloquea su camino. Está sujetando su rifle y lo apunta directamente hacia el pecho de Quenser. Los dos se observan en esa situación desesperanzadora. Quenser puede ver claramente una sonrisa apareciendo en el rostro del soldado.

Y después escucha un disparo.

Sin embargo, no provino del rifle del soldado.

La bala de un francotirador voló desde una distancia mucho más lejana y atravesó directamente el costado de la cabeza del enemigo.

El resto de los soldados enemigos se dan la vuelta sorprendidos en dirección de donde provino el disparo justo a tiempo para ver una cantidad increíble de misiles volando desde el exterior de la zona base. Los soldados enemigos no son los únicos sorprendidos por eso. Quenser y los otros dos han sido salvados por el fuego amigo desconocido, pero simplemente se quedan inmóviles debido a la incredulidad.

“En verdad vinieron… Es la unidad de Froleytia-san, ¿¡no es cierto!?”

“¿Qué demonios? ¡¡Parece ser que ese par de tetas gigantes obsesionada con Japón puede ser una comandante decente!!”

La zona base enemiga está repleta de instalaciones de mantenimiento y de radar para apoyar al Objeto. El resto de sus fuerzas no son más que unidades de infantería. No poseen tanques o tan siquiera vehículos armados.

Por otro lado, la armada de Quenser y los demás tienen un complemento entero de tanques y bombarderos de los que siempre se quejaban por no ser más que un gasto de impuestos. Incluso parecía que esas armas pasadas de moda nunca serían usadas, pero finalmente son capaces de mostrar su verdadero valor.

Varias explosiones se crean y los soldados enemigos son lanzados por el aire. Entre todo eso, Quenser sujeta la mano de la chica Élite y corre hacia la salida. Parece ser que el guardia ha sido eliminado por un obús.

Heivia corre a su lado mientras dispara su rifle de manera intermitente.

“Heh heh. ¡Hey, Quenser! Tendríamos que ser demasiado estúpidos como para morir después de haber llegado tan lejos, ¿¡no es cierto!?”

“Sí, Froleytia-san regresó porque creyó en nosotros. ¡¡Necesitamos vivir al menos para cmplir sus expectativas!!”

¿Sus superiores, quienes estaban huyendo, regresaron porque vieron la clara señal de victoria que era el Objeto explotando? ¿O sintieron algún tipo de responsabilidad después de escapar y abandonar a la chica Élite?

Mientras Quenser pasa por la salida de la zona base, desvía la mirada para ver el humo que se eleva desde la base.

La batalla ha terminado.

Ambos bandos perdieron su Objeto. Todo lo que queda son soldados normales para defenderse. Una vez que ha llegado a eso, hay una gran diferencia entre un ejército formado por soldados de mantenimiento y personal para los radares creados para una batalla entre Objetos y un ejército conformado por varios tanques y bombarderos pasados de moda.

(Soldados de carne y hueso destruyeron ese Objeto…)

El chico que llevó a cabo ese acto que ha revertido el conocimiento básico de la guerra observa la zona base enemiga en donde continúan las explosiones y disparos.

La chica Élite debe estar pensando algo similar porque abre la boca para hablar.

“…Esas personas deben vernos como monstruos del mismo nivel que un Objeto.”

“No es mi problema,” Heivia dice defensivamente mientras observa la zona base con el rostro cubierto de hollín. “Esto es la guerra. Ellos son los que nos enseñaron eso cuando ignoraron nuestra bandera blanca. Todos habíamos olvidado el peso de la palabra ‘guerra’ debido a los Objetos.”


Parte 17[edit]

La guerra se lleva a cabo en todo el mundo, pero al menos, la intensa pelea que se desarrolló en Alaska finalmente concluyó. Los Objetos de ambos ejércitos fueron destruidos y (algo extraño en esa época) una pelea entre soldados de carne y hueso comenzó. Al final, la unidad de Quenser y los demás salió victoriosa.

Quenser, Heivia, y la chica Élite regresaron de Alaska a su país de origen.

Todos eran de diferentes lugares, así que tomaron caminos diferentes después de dejar la zona base de mantenimiento. Sin embargo, tuvieron una última oportunidad para encontrarse.

Una ceremonia de premios especiales se llevó a cabo.

Aquel que salvó a su ejército de una situación desesperanzadora después de que su Objeto fuera destruido no fue un soldado profesional. Fue un simple estudiante que se encontraba con la unidad para estudiar los Objetos. La noticia de que unas personas de carne y hueso habían destruido un Objeto invencible se había regado por todo el mundo y fueron honrados con medallas.

Quenser se encontraba dentro de la sala de espera del salón de fiestas de un gigantesco hotel del tipo en el que nunca antes había puesto un pie. (La verdad había planeado en visitar algunos muchas veces después de volverse rico como un diseñador de Objetos). La sensación de la ropa formal poco común lo molestaba y continuamente ajustaba la posición de la corbata de alta calidad. Sin embargo, al ver a Heivia después de tanto tiempo lo hizo olvidar esa incómoda sensación.

“¿Pensé que supuestamente te convertirías en un noble? Nunca vi a alguien que se viera peor que yo en ropa formal.”

“Cállate. Perdí el gusto por este tipo de cosas mientras perseguía ciervos en Alaska. Y no se ven nada mal en ti.”

Sin embargo, él era de una familia noble, así que no se sentía intimidado por la atmósfera del salón de fiestas incluso si su ropa formal no se le veía bien. Su cuerpo no estaba innecesariamente tenso como el de Quenser.

“¿Entonces a qué campo de batalla te dirigirás después, Heivia?”

“¿Eres estúpido? Solamente estaba perdiendo el tiempo en una base militar para poder obtener suficientes logros para ser el sucesor de mi familia. Ahora soy conocido públicamente como una de las personas que destruyó un Objeto, no tengo necesidad de seguir con la milicia. Ahora puedo vivir el resto de mi vida cómodamente. …Aunque eso se escucha como si tuviera sus propios problemas.”

“Ya veo. Así que tomarás el camino de la ‘carrera exitosa’.”

“Tu harás lo mismo, ¿cierto? Escuché que el ejército se interesó en ti y te dio un derecho especial para revisar la base de datos del país. Ahora puedes ver los planos de tantos Objetos como quieras sin tener que salir al campo de batalla. Con tantos ejemplares para estudiar, tu velocidad de aprendizaje debe ser mucho más rápida que la de los que te rodean.”

Escuchando eso, Quenser se pellizcó una mejilla.

Aún no le parecía algo real, pero parecía que había tenido éxito en el inicio de su exitosa carrera.

“¿Qué está haciendo la princesa?”

“Bueno, un Élite que maneja un Objeto obviamente no puede abandonar las líneas frontales tan fácilmente. Para nosotros, destruir un Objeto fue suficiente milagro como para recibir reconocimiento público, pero para nuestra princesa Élite, es lo normal,” comentó Heivia, mostrando casualmente lo diferente que era el mundo en el que vivía la chica Élite.

Quenser pensó nuevamente en el peso que tenían que cargar aquellos que manejaban y peleaban con Objetos.

Mientras tanto, Heivia continuó hablando.

“Ella está esperando nuevas órdenes dentro de un Objeto mejorado desarrollado bajo la misma línea que su Objeto destruido en Alaska. Escuché que un Objeto así tardaría de tres a cuatro años en desarrollarse desde cero, así que parece ya había un plan para cambiarla al nuevo. …Bueno, ¿no crees que a esa princesa debe gustarle el campo de batalla si escogió por voluntad propia un lugar como ese para esperar?”

“Después de todo lo que vivimos, no puedo comprender cómo es que quiso regresar.”

“Tal vez es debido a todo lo que vivimos. Tal vez ella tomó esa oportunidad para pensar seriamente sobre el valor de las vidas de soldados como nosotros.”

De pronto, alguien golpeó la puerta de la sala de espera.

Una hermosa secretaria que trabajaba para un oficial militar de alto rango asomó su cabeza hacia la sala y les ordenó que se dirigieran al salón de fiestas porque las preparaciones para la ceremonia estaban completas.

Mientras dejaban la sala de espera y caminaban por el pasillo hacia el salón de fiestas, Quenser tuvo un pensamiento repentino.

“Oh, hey. ¿Recibiste un correo por parte de la princesa?”

“Idiota. Ese es otro derecho especial que sólo tú tienes. Después de todo, tú fuiste el primero que tomó un rifle y salió corriendo tras ella esa vez.”

“…Esperaba verla mientras nos encontrábamos aquí.”

“Bueno, tomaremos caminos diferentes una vez más después de la ceremonia de premiación, pero hagamos esto más como una celebración por nuestra separación y menos como un luto por separarnos.”

Abrieron las puertas dobles hacia el salón de fiestas y fueron recibidos por aplausos y los destellos de las cámaras. Guiados por la voz del líder de la ceremonia, Quenser y Heivia se dirigieron lentamente hacia el escenario en donde fueron felicitados por miembros distinguidos del ejército y les colocaron medallas alrededor de sus cuellos que probablemente eran más valiosas que las medallas de oro entregadas en los juegos Olímpicos.

Al final de la ceremonia, el líder se encargó de las últimas palabras.

“Ahora, una ronda de aplausos por estos dos que derrotaron a un Objeto sin la ayuda de un Objeto de su lado. Veámoslos dirigirse a su próximo campo de batalla mientras rogamos que sus estrategias especiales y eficaces puedan continuar beneficiando al mundo en el futuro.”

(… ¿Eh? ¿Qué acaba de decir este idiota?)

Mientras se encontraba en el escenario, Quenser observó frenéticamente a varios de los oficiales militares de alto rango, pero ellos simplemente estaban aplaudiendo con sonrisas claramente falsas en sus rostros.

Sus ojos estaban totalmente serios.

Los Objetos son el sinónimo de guerra. Una presión silenciosa se apoderó de Quenser advirtiéndole que los oficiales no tenían planeado dejar ir al tipo de soldados que podían destruir un Objeto y cambiar el curso de una guerra.

“(…Hey, escucha, héroe. Parece ser que esto no es una broma. Acabo de escuchar al gordo de ahí hablando. ¡Ya sé a dónde seremos asignados!)”

“(… ¿A dónde seremos asignados? ¿¡Ya ha sido decidido!?)”

“(… ¡Aparentemente, trabajaremos en conjunto con el Objeto de la princesa! ¡¡Parece ser que están pensando que, ya que logramos destruir un Objeto por nuestra cuenta, tal vez seamos capaces de dañar a un ejército enemigo más eficientemente si tenemos a un Objeto trabajando con nosotros!!)”

“(… ¿Estás hablando en serio? ¿¡Entonces tendremos que enfrentarnos a esos monstruosos Objetos otra vez!?)”

Mientras la inesperada fuerza de su relación con ciertas personas lo aturdía, Quenser bajó la mirada hacia la medalla colgando de su cuello.

(Por favor díganme que esto no terminará siendo algo equivalente a un ascenso póstumo.)