Maru-MA Volumen 06 Capítulo 9

From Baka-Tsuki
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Capítulo 9[edit]

Al acercarnos a la costa, la velocidad del barco disminuye y nuestro rumbo cambia mas lentamente. Al final encajamos de forma admirable en el lugar perfecto entre la hilera de barcos. El timonel se limpia el sudor de la frente satisfecho y recibe un generoso aplauso de la tripulación.

Sin embargo, yo me encontraba en pánico a causa de los pensamientos que afloraron en mi mente hace unos minutos. Si el barco hubiera golpeado e inclinado hacia adelante haciendo que todos caigamos al rió, definitivamente no me hubiese enterado. Dai Shimaron, con quienes Flynn ha hecho un trato, desean tanto la caja como su llave. Han puesto las manos en El Fin del Viento, pero esa vital llave puede que se rehúse a abrir la tapa. Así que usaron el veneno Wincott para volverlo una marioneta con absoluta obediencia.

Las armas lanza fuego que usaban los supuestos soldados de Dai Shimaron, el misterioso veneno en la punta de las flechas... y Flynn buscando un descendiente de los Wincott. Todo encaja. Cuanto más lo pienso, más tiene sentido.

Los soldados de Dai Shimaron invadieron Shin Makoku guiados por conexiones criminales que tenían dentro del reino. Atacaron porque iban tras Conrad, Günter o yo, ¿cual de nosotros? ¿Cual de nosotros es la llave que abrirá la caja de Pandora que nunca debería ser abierta porque llevará a a todo tipo de desastres? Si fuera Günter, él aun esta en el reino. Probablemente protegido y curado por quienes llegaron corriendo después. Entonces si fuera Conrad...

—Shibuya, ¿qué es eso? —pregunta Murata parado a mi lado. Me apresuro a limpiarme rápidamente la nariz, y fingiendo ignorancia saco el corta papeles del bolsillo de mi pecho.

—¿Mm? Ah, si, le compré esto a un kappa.

—¿A un kappa? Entonces es un pepino[1].

—Se siente como si fuera de marfil. En Japón seria un objeto raro y de gran valor, pero aquí es mas barato que la comida para ovejas.

—¿No es un hueso humano? De todos modos Shibu-- Capitán Crusoe, te moquea la nariz. Tu voz también suena diferente de lo normal. Puede que hayas pescado un resfriado caminando por ahí con este viento frío.

—¡¿Ay, de verdad?!

Como dijo Murata mientras miraba a la distancia, hay un grupo de soldados armados en la costa. Parece haber tantos soldados como estudiantes en mi año del colegio. Fácilmente son doscientos. Todos usan uniformes celestes, sus pechos y la parte baja de sus piernas están revestidos de cuero y llevan espadas a la cadera. Parecen esperar mientras fuman cigarrillos o dibujan figuras de ratas en el piso, en general están relajados. Siendo que solo ha visto tropas de los tiempos modernos, me pregunto que pensará mi amigo de este ejercito de RPG de fantasía.

—Genial. ¿Están haciendo cosplay? ¿Hay alguna clase de feria renacentista? La Sociedad de Preservación de Tiempos Medievales lo tiene difícil.

Así que ahora son una sociedad de preservación.

Pero aunque no tienen armas o ametralladoras, las espadas largas también son peligrosas. En Japón estarían violando la Ley de Control de Posesión de Espadas y Armas de Fuego[2], y si estuvieran en el distrito de Chiyoda se les haría una multa por violar la ley de no fumar caminando. Con tan solo más de doscientos soldados, son los suficientes como para amenazar sin armas de fuego. Los tres nos vamos al rincón más alejado y decidimos simplemente esperar conteniendo el aliento hasta que el barco parta de nuevo. El agente de reservas al cual Flynn le compró los pasajes está charlando con un soldado que parece el comandante. La discusión se acalora por un par de minutos y luego el hombre bajito salta con agilidad de vuelta al barco.

—¿Acaba de recibir un fajo de billetes?

—Si, pero es extraño... Dijo que no iba a recibir dinero de Shou Shimaron porque no sabía si lo podría usar cuando empezara la guerra.

Murata responde la mirada de duda de Flynn con sorpresiva seriedad.

—Probablemente vendió algo. Algo vivo que ellos querían.

—Robinson, ¿había pescado fresco a bordo? ¿No es que solo habías pescado una bota? —pregunto.

—...Tengo un mal presentimiento sobre esto. Seria lindo si solo fueran peces.

Murata tiene una expresión oscura y severa que hace ver a su Modo Risueño de hasta ahora como si fuese una mentira.

El grupo de soldados de celeste, el Equipo Polvo Azul, van todos a la misma barbería. La forma en que llevan cortada la barba y el cabello es perfectamente uniforme. Todos los doscientos de ellos tienen los lados rapados y una coleta, todos los doscientos de ellos tienen la barba recortada que se conecta con sus patillas como un luchador libre o un extranjero. Apodados: Cola de Caballo Rapada. Apodados de forma mas linda: Pony Rapado. Pero definitivamente no Pommy Rapado[3].

Si hay unos cientos de esos Nigel Weisz Maxines —que nunca se va a morir—, el cabello debe ser parte de alguna clase de uniforme.

—Esa barba que usan los soldados de Shou Shimaron es como una bandera nacional. Instantáneamente reconoces quienes son sin dudarlo —explica Flynn.

—Ah, si. Definitivamente no son parte de algún apasionado fanclub, ¿eh?

Siete u ocho de los soldados de la costa suben al barco. Pensé que tal vez era para reforzar la seguridad, pero abren la puerta del Comandante Montaña y los casi cien prisioneros sacándolos a todos afuera.

—¡¿Que esta pasando?! ¡Aun no llegamos al cabo!

—¡Vamos al paraíso del cabo! ¡Es un viaje directo!

—Nos vamos a resfriar si salimos afuera. Terine-shan siempre esta desnuda, ya ves.

Dicen que se pescan resfriados a través de la cabeza, pero supongo que una calavera también tendría frío.

—Oye, revisa a todos excepto a la tripulación. Puede que haya uno escondiéndose entre los pasajeros normales.

Los soldados armados comienzan a revisar a los pocos pasajeros. Ruego que los Laneros u otra persona no hayan repartido volantes de se busca por nosotros. Sin embargo, los soldados no están preguntando nombres o direcciones, sino que hacen a todos mostrar las palmas de las manos. Flynn y Murata apenas reciben un vistazo, pero....

—Tú, abajo.

—¡¿Eh?! ¡¿Por qué?!

Por alguna razón soy el único arrastrado lejos por mi ropa luego de mostrar al inspector mis palmas. Escondí adecuadamente mis ojos y mi cabello con mis lentes de sol y una bandana estilo pirata, así que seria raro haber sido expuesto como mazoku. Flynn va hacia el soldado y comienza a discutir furiosa mientras Murata agrega a intervalos algunas palabras afirmativas.

—Oye, Crusoe es mi compañero. ¡Me causará problemas si desembarca aquí!

—Mira sus dedos. Son callos prominentes por la espada. ¿Son esas las manos de un mercader o un erudito? Esas manos son incluso diferentes de las de los granjeros con sus azadas. Puede que use un arma especial, pero definitivamente es de combate. Todos los combatientes de origen desconocido y los prisioneros deben ser llevados ante Lord Saralegui. Lo siento, peor ya no será capaz de viajar junto a él.

—¡No necesitamos un ejercito que solo arregla las cosas con un “lo siento”!

Flynn se esta convirtiendo lentamente en una vieja enojada. Pero como sea, ¿combatiente? ¿que soy, un peón de alguna organización malvada?

—¡No, esos no son los callos de una espada! Son los callos del bat. ¡Mis manos se pusieron así de practicar tan apasionadamente los bateos!

Últimamente tuve algunas dudas sobre liderar, así que pensé que podría esmerarme en mis habilidades de bateo. El inspector ladea la cabeza con sospecha.

—¿Qué es un bat?

—Um, un palo. Lo sostienes con ambas manos y golpeas cosas haciendo ping. Por cierto, hay variedades de metal y de madera.

—¿Golpeas gente con una porra? ¡Esa es un arma extremadamente primitiva y cruel!

—¡No, golpeo bolas! No inventes cosas así con tu horrible imaginación... ¡Oigan, suelten! Escuchen, escuchen lo que estoy diicnedo-- ¡Ah!

Me excedo de fuerza. Puede que sea porque me estaba resistiendo agitando los brazos y piernas e incluso la cabeza, pero mi captor me suelta de repente. La punta de mis dedos buscan en vano de donde agarrarse mientras caigo por la borda.

—¡Oye espera un momento! ¡Tengo que nadar con este clima fri--! ¡Ug glup ah!

Recuerdo con añoranza mi yo que se preguntaba si este agua estaba bien para lavarse la cara. Bajo el agua colo verde intenso, pataleo desesperadamente para salir a la superficie. Si no estuviera usando esta ridículamente pesada campera de cuero sería capaz de nadar usando una elegante brazada. Esto no es divertido. No me puedo separar de Murata. Él no sabe nada sobre ese mundo y no hay nadie mas que lo proteja. Además, también está Flynn...

Ella confío en mi y me contó todo, así que no la puedo dejar simplemente de este modo.

La tabla de abordaje se levanta y el barco se aleja lentamente de la costa. Con Flynn y Murata a bordo. Dejándonos atrás a mi y a los prisioneros en una tierra desconocida. Los Llaneros graduados se despiden con tristeza de su Señora. Aunque, hablando de Señora...

—¡¿Flynn, vas en serio?!

—¡No tiene caso si no lo tengo conmigo! ¡Aposte mi vida a él!

Gritando lo que podría sonar como una confesión de amor para la gente que no sabe la historia completa, Flynn se arremanga el abrigo y salta desde la cubierta. Cae justo frente a mi salpicando con fuerza.

—¡¿Por-por que harías algo tan estup--?! ¡Ugh!

—...nadar.

—¿Eh? ¿Qué?

—¡No se nadar!

¡¿Ni siquiera pensaste en eso?! Agarro a Flynn por el cuello de la ropa y de alguna manera presiono su cuerpo contra el mio. Si la victima se resiste, la persona que la va a salvar se irá a pique con ella. Por suerte, ella se calma y confía en mi completamente tal como indican los salvavidas. Es una suerte que la corriente sea suave. Puedo mantener mi cabeza fuera del agua y casi no hay problema con beberla-

—¡Que malos! ¡Me están dejando atrás!

—¡¿Nmo?!

Es increíble. Incluso Murta salta del barco y T-Zou se lanza atrás como si le siguiera. ¿Son amantes? ¿Es un triangulo amoroso? ¿Y la Sociedad de Prevención Contra la Crueldad Animal? La gente a nuestro alrededor se emociona cada vez mas. Parece que todos son fan de las telenovelas. Se que Muraken sabe nadar y la oveja parece que flota, así que no necesito preocuparme de que lleguen a la orilla. El problema somos Flynn y yo. Mientras rezo: “mis pies deberían estar tocando el fondo, por favor deja que toquen el fondo”, intento desesperadamente avanzar con el peso de dos personas. Solo cuando comienzo a pensar: “¡maldita sea! ¡¿por qué no me muevo nada?!”, alguien nos arrastra con muchísima fuerza todo el camino hasta la orilla.

No se de quién son los brazos, pero inmediatamente recuerdo los brazos de quién no son.

No es Conrad.

Perdería la prueba de que aun está vivo.

Chorreando agua sucia, vamos hacia adelante mientras nos sostenemos el uno al otro. Nuestro salvador incluso nos tiende una mano, así que es fácil caminar. Sin aliento, quito el pelo de Flynn que se pega a mi.

—¡¿Por qué hiciste algo tan imprudente?! ¡Quedarse en el barco era obviamente la opción mas segura!

—¡Pero Capitán Crusoe... no parecía que fuera a ser capaz de volver al barco! ¿Qué voy a hacer en Dai Shimaron yo sola? ¡¿Ya se lo he explicado claramente, no es así?!

—...Tenías a Robinson.

—¡Oh vamos! De verdad que es lento para entender. El Sr. Robinson no me sirve. Usted es el que necesito. No tiene caso a menos que sea Crusoe el que--

—¡Deja de decir Crusoe! ¡En realidad no soy Crusoe!

Estamos en el río con el agua hasta las rodillas. Si miramos a la derecha, la costa está justo ahí.

—¿...Quién eres? —pregunta Flynn con voz apagada, dejando caer su mano de donde estaba jalando de su cabello hace un instante.

—¿Quién? Uh...

—Ah, ¿por fin nos han descubierto?

El astuto Murata que ha nadado a la costa antes que nosotros tira de mi ropa. Ambos chapoteamos hasta tierra firme. Mis pies y mis dedos tiemblan de emoción al sentir el suelo por primera vez en un tiempo. T-Zou, en un gesto de gratitud, frota su cuerpo de bola peluda contra mi. Está extremadamente entusiasmada.

—Nmonmonmonmo... ¡Nmoshikashiteeeee[4]!

Es la voz de una oveja sobrecogida de la emoción. Es algo que rara vez se escucha.

—¡Nmoshikashiteeee!

Como sus lentes de contacto no tiene aumento, mi amigo me mira entornando los ojos.

—¿Qué hacemos, Shibuya? ¿Deberíamos contarlo todo? O si necesitamos otra coartada, pensaré otro engaño de inmediato. Déjame las coartadas a mi. Soy un embaucador nato. La esposa del hermano de la madre del tatara tatara abuelo de mi padre era una ninja Iga, nin nin[5].

—Eso quiere decir que no estás relacionado de sangre, Murata.

—¿Su nombre es “Shibuuia”, Capitán Crusoe? ¿Y el de Robinson es “Muurata”?

Somos interrumpidos por alguien aclarándose la garganta muy educadamente.

—¿Dama y caballeros, no hay palabras de gratitud para mi?

Nuestro salvador tiene el cabello naranja atado de manera floja y las dos manos en las caderas. Se encoje de hombros como un conejo travieso.

Su nombre es Gurrier Josak. Es un bromista, pero es talentoso. Es grosero, pero no puedes odiarlo. También es medio humano y medio mazoku, y es el amigo de Conrad y su ex subordinado. Nos ayudo con todo el lío de Mörgif, pero desde entonces casi siempre se la ha pasado escondido en otros países durante varias misiones, así que realmente no tuvo tiempo de volver a casa.

—Josak...

—¿Qué pasa, Señorito, poniendo una cara amargada como esa? ¡En momentos como este lo mejor es la leche de cabra! ¡Lo estimulará, le devolverá las fuerzas y le proporcionará un incomparable vigor!

—Leche de cab-- ¡¿eh?! ¡¿T-tú-tú eras la mujer sirviendo el almuerzo en ese negocio en Gilbit?!

—¡Acertó! Josa estaba triste porque no la había reconocido y lloró un poquito.

Algunas veces es excesivamente apasionado con su trabajo y se convierte en una mujer tanto de cuerpo y como de mente. Pero hay que recordar que hace eso por trabajo y definitivamente no como un hobby. Tal vez.

—Bueno, parece que aquí he vuelto a ver otra situación embarazosa en medio de un viaje.

Tiene una voz roca que oirías en una grabación de jazz, un cuello grueso, una increíble altura y hasta puedes ver a través de su ropa que posee un cuerpo admirable de outfielder. Le doy una palmada en el brazo y me siento aliviado de que nada en él ha cambiado. Si no me equivoco, las ropas rosadas que usa son el uniforme de un prisionero. ¿Eso significa que esta vez se disfrazó de prisionero y se coló aquí? De verdad que tiene unas buenas habilidades.

—Me sorprendí al verlo allá. No podía creer que el Señorito anduviera caminando en un territorio humano realmente peligroso sin un guardia. Terminé por enviar un mensaje especial al Jefe Gwendal por Vuela Vuela Blanca Paloma.

—Blanca Paloma... por cierto, ¿que ruido hacen las palomas?

—Doguu.

—¿...Doguu?

—De todos modos, —él apunta con la barbilla a Flynn que aun está ida por lo de nuestros nombres y T-Zou que continua en estado de éxtasis—. No puedo quitarle los ojos de encima. En el tiempo que he estado lejos se consiguió una mujer y ganado. Pobre de mi, ¿cómo piensa compensarme ahora? ¡¿Solo estaba jugando, no es así?!

Que bromee conmigo una figura masculina así me da escaslosfríos. Sin ser capaz de reír ante su broma, presento a mis tres compañeros.

—Murata, Flynn, este es el Sr. Gurrier Josak. Es el amigo de un amigo en Shin Makoku... ah, bueno, nos conocimos en otro país. Es un soldado multi propósito que incluso se vestiría de mujer para una misión.

—¡Hola, hermana[6]! ¡Gracias por lo de antes! —dice alegre Murata.

—Hermana... ¡Oye, ¿lo conoces?!

—Es el tipo que me dio la vela y la bomba de humo. En la finca de Flynn.

—¿Eh...?

Se me nubla la visión y soy atacado por un mareo. Estoy fuera del río pero siento como si el suelo bajo mis pies desapareciera.

—¿...No era Conrad?

—¿Mm? Estoy seguro que era este hombre. Estaba oscuro, pero recuerdo su voz.

Me veo inundado por la decepción y una extraña sensación de alivio.

En algún lugar en mi interior una parte de mi susurra. Admítelo. Solo admite que Lord Weller murió. Acéptalo y llora todo lo que quieras. Será mas fácil de ese modo. Más que aferrarte a una posibilidad casi inexistente, acepta la dolorosa verdad y deja tus lagrimas caer sin control. De ese modo podrás enfocarte solo en ti y la gente a tu alrededor para resolver los problemas que te esperan. Pero...

Extiendo mis palmas tanto como puedo y cubro mi rostro. Aprieto los ojos llenos de agua sucia y espero que pase el mareo.

¿Puedo llorar aquí?

Murata no es consciente del peligro en el que estamos, como es usual, y Flynn Gilbit está exhausta tanto en cuerpo y mente debido a la sucesión de eventos no previsto con la que fue atacada. Esa mujer que era tan directa y valiente ahora es un miserable ratón mojado. Ahora tengo al confiable Josak conmigo, pero él no va a comprender todo lo que pasa de inmediato. Tomará un largo tiempo explicarle nuestra situación.

Quito las manos de mi cara un dedo a la vez. Para el momento que mi mano derecha baja hacia mi pecho, el dolor en la parte trasera de mis ojos y el preocupante mareo han pasado. Como si tuviera mi dedo sobre el botón de volumen, los sonidos a mi alrededor regresan de a poco. Flynn ha comenzado a hablar salvajemente.

—¡¿Te colaste en mi finca?! ¡Ah, eso te hace un ladrón!

—No me robe ninguno de tus sostenes así que cálmate. Es un hecho que no me entrarían. Ah, esto va por mi cuenta —dice Josak con un tono que amerita un corazón al final de la frase. Entonces tira del cuello de su ropa y muestra su pecho. Está usando ropa interior elegantemente diseñada... ¡por tra-trabajo! ¡Es por trabajo! Pero aun así, esto es un serio acoso sexual.

—Muchos de sus amigos son pervertidos, ¿no es así? —pregunta Flynn.

—Eso no es de tu incumbencia. Josak es un poco, ya sabes. Es un caso especial. ¿En quién más estás pensando?

—Ese hombre Adalbert. Y también Nigel Weisz Maxine.

No puedo llamar a ninguno de los dos mi amigo. Pero parece que no hay nadie mas que sugerir.

—No gustarte los amigos de tu marido, eso es típico de esposa joven.

—¡Oye, Robinson, no hagas bromas que hagan peor el malentendido!

Frente a nosotros los prisioneros son amenazados para que caminen. Hay mas de doscientos soldados armados de Shimaron, así que les toma un poco de tiempo llegar hasta nosotros al final de la fila. Un soldado cercano desenvaina su espada y se nos acerca en un grupo de cinco.

—Sinceramente, no es como si incluso un caballero como yo no pudiera desacerase de un grupo de cinco personas. ¿Qué debería hacer, Señorito Pacifista? Haré lo que me diga.

Aunque cuán caballero sea no tiene nada que ver con eso, Josak es fuerte. Pero lamentablemente es el único luchador que tenemos de nuestro lado. El único otro que tiene potencial de combate es... supongo que el lobo con piel de oveja.

Echo un vistazo a la orilla por el rabillo del ojo. Hay varias personas que parecen estar a cargo de unos caballos fornidos.

—¿Cómo vamos a poner las manos en esos caballos..?

—Si, algo de bazasi estaría bueno[7].

Murata, no para comerlos.

—¿Dónde piensan llevarnos... no iban al cabo? —pregunta Flynn.

Siendo un hombre bien informado, Josak niega.

—No, ese lugar fue cerrado hace dos años. Su destino era distinto desde el principio.

¿Qué estaban planeando hacer al transferir a los prisioneros... o mejor dicho, los antiguos soldados enemigos convertidos en prisioneros de guerra?



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Referencias[edit]

  1. Ya hablamos de que a los kappa les gustan los pepinos, peor no que tanto. Si fueran a bañarse en un río, la gente tiraba pepinos para que los kappa los dejen en paz. Y el sushi que lo lleva como ingrediente suele llamarse kappa (como el kappa maki).
  2. Esta ley es real y muy estricta. Está relacionada a lo sucedido durante el Bakumatsu, ultima parte del periodo Edo cuando termina el shogunato Tokugawa y japón se abre al mundo en la posterior era Meiji. Gracias a esta nueva restricción de portación de armas se acaba por completo la era de los samurai.
  3. Pommy de pomeranian, una forma de apodar a la raza de perro tan popular en Japón.
  4. El sonido que hace la oveja es la palabra moshikashite que significa “posiblemente / tal vez” en japonés.
  5. Iga y Kouga son dos provincias donde aparecieron las mas famosas de las familias ninjas. Lo que dice Murata al final de la frase es solo algo típico de ninjas y samurais, está bromeando.
  6. Es una forma muy japonesa de referirse a la gente, suena un poco como un niño hablándole a una chica mayor.
  7. Sashimi de caballo, finos cortes de carne cruda. Es una delicadeza.