Fate/Zero:Acto 5

From Baka-Tsuki
Jump to navigation Jump to search

Acto 5[edit]

-150:39:43[edit]

Act 5.


Aún más lejos al oeste que la ciudad Miyama de Fuyuki, la sinuosa autopista estatal se extiende hacia el oeste con su espalda vuelta a las luces de la ciudad. Mientras tanto, un bosque no alcanzado por la mano del hombre esperaba a sus visitantes más allá del camino. La autopista estatal serpenteaba silenciosamente, continuando incluso más allá del límite de la prefectura.

Aunque había dos pistas en el camino, no se podían ver vehículos con las escasas luces de las calles. En plena noche, la autopista estatal parecía desvanecerse en la memoria y en el silencio.

En una noche tan silenciosa como esta, una bestia plateada pasó volando.

Mercedes-Benz 300SL Coupe. El cuerpo ondeante, elegante y aerodinámico con un aroma de antigüedad lucía como una noble dama, mientras que el rugido del motor Straight-6 SOHC era como el de una bestia salvaje. Y detrás del manubrio del sedán clásico andando osadamente por sobre los 100 kilómetros por hora – inesperadamente estaban las finas muñecas de una joven dama.

“Oye oye, esto sí que va rápido, ¿no es así?”

Dijo Irisviel, que sostenía el volante y cuya cara estaba llena de contentas sonrisas. Sentada en el asiento del pasajero, la cara de Saber estaba llena de nerviosismo y apenas conseguía esbozar una tiesa sonrisa y asentir.

“Ci-ciertamente, inesperadamente conduces… más bien… muy hábilmente…”

“¿Cierto? Tuve un entrenamiento especial, aunque pueda no parecerlo.”

Dicho eso y basada en la manera poco familiarizada de manejar los cambios, ella estaba lejos de ser una conductora versada.

“Entre todos los juguetes que Kiritsugu trajo al castillo Einsbern, este es mi favorito. Yo siempre no hacía más que dar vueltas por las tierras del castillo, y hoy es la primera vez en la que conduzco en un lugar tan amplio. ¡Es maravilloso!”

“Un juguete, huh…”

No habría objeciones al llamar a algo como una patineta o una bicicleta un juguete. Pero para una máquina con una velocidad por sobre los 100 kilómetros por hora en un camino serpenteante, es una confusión de clases. La gente jamás llamaría juguetes a las cosas que pueden poner en peligro sus vidas tras los mínimos errores en situaciones ordinarias. Aunque es un sedán clásico fabricado hace más de cuarenta años, poseía un 2996cc, motor M198, y su velocidad máxima estaba por sobre los 260 kilómetros por hora. Comparado a la habilidad potencial del auto, el rodar osado de Irisviel es un mero preludio.

Aparentemente, Emiya Kiritsugu había preparado especialmente este auto en el castillo Einsbern mucho antes para que Irisviel y Saber pudieran tener un transporte aparte de caminar una vez que llegaran a Fuyuki.

Por más de medio mes, este auto había estado estacionado en el estacionamiento subterráneo del hotel. Ahora ellas conducían este precioso auto hacia la residencia del castillo Einsbern.

“Hmm. Espera un minuto, Irisviel. ¿No habías estado conduciendo del lado derecho hace solo un rato?”

“Ah, es verdad.”

Irisviel asintió casualmente como si solo fuera un pequeño error, el auto dio una sacudida y se movió a la pista de circulación.

Irisviel nunca había estado fuera del castillo Einsbern desde que nació; para ella, es obviamente su primera vez conduciendo en una autopista. Saber había estado prestando atención a su espacio de visión desde que partieron. Obviamente Irisviel no sabe nada de señales de tráfico. Aunque está escrito en la ley que se debe conducir por la izquierda, parece que Irisviel no sabe tampoco eso.

Al menos ella entendía un poco lo que significaban las luces de tráfico, pero eso solo iba tan lejos como para considerar reducir la velocidad al ver la luz roja… Aunque justo ahora es de media noche y hay poco tráfico, sería un milagro para ellas llegar a salvo a su destino.

“… ¿Aún falta un largo camino antes de llegar al castillo Einsbern en estas tierras?”

“Oí que solo tomaría una hora llegar en auto. Cuando estemos cerca deberíamos ser capaces de verlo…” Saber no dejaba de desear que este peligroso viaje terminara, aunque fuera tan solo un segundo más pronto. Ya es muy afortunado que no vengan autos hacia ellas en la autopista de media noche, pero el hecho de que el camino ondeante suponía un gran peligro llenaba la sangre de Saber con adrenalina, como si se encontrara justo antes de una batalla. Como un Sirviente, ella poseía extraordinarios reflejos y fuerza, y podía cargar inmediatamente a Irisviel fuera del auto para escapar si se presentara peligro. Como sea, el legendario auto deportivo se vería reducido entonces a una irreconocible pila de chatarra. Eso no coincidía con la sencilla economía de Saber.

“… ¿No hubiera sido mejor contratar a un chofer?”

“Por supuesto que no. Eso sería aburri- no, eso sería muy peligroso. Después de todo, una vez que entremos a la ciudad Fuyuki, podemos ser atacados por otros Maestros en cualquier momento. ¿No eras tú la que no querías ver a gente inocente envuelto en esto, Saber?”

“Eso es cierto…”

Tan solo que es más peligroso en medio del camino montañoso: ¿Ser atacado por otros Maestros o las habilidades de conducir de Irisviel? – Saber estaba considerando medio-seriamente esta pregunta cuando una fría oleada alcanzó sus sentidos como el filo de una espada.

“¡Detén el auto!”

“¿Qué?”

Sin comprender la repentina advertencia de Saber, Irisviel preguntó despistadamente.

Saber no tuvo tiempo de explicarle. Ella forzosamente extendió su torso hasta el asiento del conductor tomó control del volante con una mano y puso su pie izquierdo sobre el freno con la punta primero.

La razón por la que Saber podía tomar estas decisiones inmediatamente permitiendo controlar esta máquina en movimiento es su habilidad de Montar, la cual poseía como un Sirviente. Ella puede entender completamente el manejo de todo el equipo de conducción ambos conocidos y desconocidos para ella.

Afortunadamente el auto mantuvo un tramo recto durante la brusca frenada en vez de girar furiosamente.

Las llantas del Mercedes derraparon en el asfalto, emitiendo nubes de humo blanco. Mientras continuaba el incontrolable deslizamiento del auto, Saber confirmó una vez más la sensación que puso sus nervios al borde.

Sin duda este era el aroma de un Sirviente. Hablando del rey.

“Saber, eso es-“

Irisviel se quedó en silencio. Una figura de extraña apariencia emergió en el lejano trecho del camino iluminado por los focos del Mercedes.

La alta figura ante ellas, como si no considerara el peligro del auto andando, se paró imperturbable en el medio del camino.

Un lujoso manto de diseño antiguo; patrones de un rojo sanguinario adornaban la tela negra. Aquellos ojos anormalmente grandes recordaban a los de los animales nocturnos. Incluso ignorando estas bizarras características, ningún viajero ordinario aparecería en un lugar como este a esta hora.

El impulso del auto se vio vencido por la fricción de las ruedas y el Mercedes finalmente se detuvo. Había tan solo diez metros entre el auto y la figura en frente de él.

“… ¿Saber?”

Saber analizó rápidamente la situación y luego le dijo a Irisviel:

“Sal del auto tan pronto yo lo haga. Pero no vayas lejos.”

Si el oponente es un Sirviente, un auto con su estructura de hierro sería tan frágil como una sola caja de cartón. Si se fueran a quedar en el auto se verían indefensas. Después de todo, es mejor trasladarse a una mejor posición defensiva.

Saber abrió la puerta de ala de gaviota y puso los pies en la glacial noche. Mezclado con el olor de los arboles crujiendo por el viento nocturno estaba el acre hedor de las llantas quemadas.

La figura en frente de sus ojos era diferente de los cinco que ya había visto antes. Si es un Sirviente con el que aún no se ha encontrado debía ser Caster, o quizás Assassin… fue lo que pensó Saber.

Aunque Saber e Irisviel, que no sabían acerca de la artimaña llevada en la residencia Tōsaka la otra noche, no podían eliminar la posibilidad de Assassin, este Sirviente que ni escapada ni huía, sino que se paraba orgullosamente en frente de ellas, no parecía ser Assassin. Por eliminación, solo había una conclusión – la figura en frente de ellas es Caster. Como sea…

¿La expresión en su rostro es realmente la expresión de un guerrero a punto de comenzar una batalla?

La confundida Rey de los Caballeros examinó nuevamente el semblante del oponente.

Él estaba sonriendo, lo que en sí era comprensible. Que un guerrero este envuelto en goce al enfrentar su lugar decidido de muerte no es extraño. Pero esa no era la expresión de Caster. Era como si ellos fueran hermanos hace mucho separados que finalmente se reúnen, un cara brillando tan puramente con deleite que era casi molesto…

Antes que la desconcertada Saber pudiera desafiarlo, Caster traicionó sus expectativas y actuó.

Caster arqueó su cabeza respetuosamente, se arrodilló en el camino de asfalto como un cortesano presentándose ante el rey.

“He estado esperando, su majestad la santa doncella.”

“¿Huh…?”

Saber estaba perdiendo aún más y más el seguimiento de la situación. Aunque ella fue una vez un rey y aceptó la genuflexión de incontables señores y héroes, ella no tenía memorias de este hombre en frente de sus ojos. Este hombre no era uno de sus anteriores súbditos en Camelot.

Ante todo, el título de ‘santa doncella’ es muy extraño. Cuando ella gobernada Britania como el Rey Arturo, ella nunca expuso el hecho de que ella era en realidad una mujer ni siquiera al final.

Irisviel, quien salió del Mercedes después de un tiempo, se ocultó tras Saber quien estaba llena de una guardia nerviosa, y observó silenciosamente a Caster.

“Saber, ¿Tú conoces a esta persona?”

“No, no tengo ninguna impresión de él –“

Como si él hubiera oído los murmullos de Saber e Irisviel, Caster levantó su cabeza y dijo:

“… Oh, oh, ¿Cómo puedes decir eso? ¿No me recuerdas?”

En consecuencia a sus palabras aún más exageradas, Saber estaba atónita.

“Lo que sea que tú digas, esta es la primera vez que te he visto – Yo no sé en qué te habrás equivocado, pero… ¿Quizás llegaste a la persona equivocada?”

“Oh oh, wuwuwu…”

Caster comenzó a sollozar como si estuviera muy triste y sus manos arañaban su cabello. Su expresión completamente feliz hasta ahora cambió completamente; su extraña y grasa tez se remeció por la consternación y el abatimiento como una caricatura. Solo basado en esto, se puede ver que este es un hombre peligroso cuyas emociones cambian a capricho.

“¡Soy yo! ¡Soy tu siempre más leal sirviente Gilles de Rais! Siempre he suplicado por tu resurrección, siempre esperé por el milagroso día en que te encontraría de nuevo. ¡Llegue aquí al fin de los tiempos con ese propósito, Juana! “

Cuando Irisviel oyó las palabras del hombre, sostuvo el aliento.

“¿Gilles de Rais…?”

Este ya es el segundo Sirviente que declara su verdadero nombre frente a ellas. Aunque su propósito es desconocido, el nombre es ciertamente el renombrado título dado al Caster en el mundo del presente.

Pero para Saber, una vez que su origen quedo claro, la duda simplemente se endureció en rechazo.

“No conozco tú nombre, ni conozco a esa Juana.”

Suspirando en parte de la impresión luego de la declaración de Saber, Caster dejó salir muchos otros ruidos.

“¿Qué… podría ser que, te has olvidado? ¿¡De quien eras en tu vida mortal!?”

Saber se estaba enfadando con esta situación en la que no podía dejar claro su punto, así que observó implacablemente a Caster y dijo:

“Dado que tú ya has declarado tu verdadero nombre, entonces de acuerdo concordando con el decoro de un caballero te diré mi verdadero nombre también. Yo soy Arturo, la legítima hija de Uther Pendragon, y rey de Britania.”

Caster, falto de palabras, miró en blanco asombro a esta muchacha en frente de él que hinchó el pecho y orgullosamente declaró su nombre. Y entonces –

“¡Oh! ¡Oh! ¡¡Oh waaaaa!!”

Caster comenzó a lamentarse casi a chillidos mientras invirtuosamente martillaba sus puños contra la tierra.

“¡Qué doloroso, qué trágico es esto! No solo ella perdió sus recuerdos, incluso su mente se ha confundido del todo… tú… ¡tú! Dios, ¿Por qué eres tan cruel con esta amada doncella mía?”

“¿De qué estás hablando? Para comenzar, yo no –“

“Juana, yo entiendo porque no lo admites. Tú, quien originalmente eras la más devota a Dios y creías en él aún más profundamente que cualquiera, en su lugar fuiste desechada por Dios. Cuando fuiste condenada como una bruja y ejecutada, Dios no te brindó ninguna ayuda ni salvación. Que actúes de esta manera no es sin ninguna razón.”

Saber repentinamente tuvo un sentimiento repulsivo completamente distinto del miedo. Era como si cada uno de los pelos en su cuerpo estuviera erizado del todo.

El hombre en frente a ella no oía las palabras de Saber en absoluto, ni tampoco quería oírlas en primer lugar. Él había llegado a una conclusión basado en sus propios engaños respecto a Saber, y él no sostenía ninguna duda frente a esta conclusión. Bajo el control de su propio tren de pensamiento, ninguna de las palabras de Saber podía entrar en la cabeza de Caster.

“¡Despierta, Juana! ¡Tú no necesitas ser aturdida por aquellos como Dios! ¡Tú eres la santa doncella de Orleans, la salvadora de Francia, Juana de Arco!”

“¡Es suficiente! ¡Esto es desagradable!”

Gritó Saber, ya no mostrando confusión o contención, y abiertamente exhibió su indignación hacia el Caster arrodillado.

“Yo soy Saber y tú eres Caster, un Espíritu Heroico. Ambos somos Sirvientes que luchan por el Grial. La razón de que nos encontremos aquí no es nada más ni nada menos que eso.”

“… Saber, no tiene caso decirle nada a este hombre.”

Detrás de la agitada Rey de los Caballeros, Irisviel le reprendió.

Como Saber – Arturo – es un Espíritu Heroico incompleto, ella no debía poseer el conocimiento que sobrepasa el tiempo y el espacio que uno obtiene al alcanzar el trono de los Héroes. Por lo tanto, ella no está al tanto del relato corrupto por la locura, la leyenda de “Barba Azul”, Barón Gilles de Rais.

Gilles de Rais alcanzó la posición de general como un salvador y héroe de Francia, pero él le dio su espalda a la gloria cuando consintió a la inmortalidad y la lujuria de la magia oscura. El ‘monstre sacré’ que eventualmente masacró a cientos de jóvenes… Que Gilles descendiera a la locura ocurrió casi al mismo tiempo del destino final de la valiente Juana de Arco, con quien peleó al lado. Así, hay muchas leyendas que los han conectado a los dos. La enraizada ilusión que el Espíritu Heroico llamado por el Grial, Gilles de Rais, está viendo ahora, no puede ser más que locuras. Es imposible saber tan solo cuanta semejanza existiría entre la Saber Arturo y Juana de Arco, pero ellas dos ciertamente debían ser muy similares. Sin importar qué, Gilles – Caster ya cree firmemente que Saber es aquella persona en la que él siempre pensó, y no permitiría ninguna duda al respecto.

“Juana, por favor deja de referirte a ti como Saber, o a mí como Caster. Pronto nosotros estaremos libres del lazo de estos grilletes del Sirviente. ¡La Guerra del Santo Grial está a punto de acabar!”

“Esas son solo tus propias ilusiones.”

Esta vez fue Irisviel quien contestó en lugar de Saber, que ya estaba demasiada furiosa para hablar.

“Oye, General de Rais, ya que dijiste que la guerra ya ha terminado, ¿Qué hay del Grial?”

“Es tan obvio; ¡el omnipotente Grial, la maquina concede deseos ya está en mis manos!”

Caster, lleno de satisfechas sonrisas, dijo orgullosamente.

“Mi único deseo era que la santa doncella Juana de Arco resucitara, ¡y ahora ese deseo se ha realizado! ¡Sin ni siquiera la necesidad de competir con nadie, mi deseo ya se ha hecho realidad! El Grial ya me ha escogido – Gilles – ¡sin siquiera pelear en absoluto!”

¡Ding! Un estridente sonido reverberó. El asfalto frente a los ojos de Caster se dividió perfectamente en dos. Era la espada invisible de Saber. Aunque Caster no podía verla, él podía sentir el aura de la aguda hoja justo en la punta de su nariz.

“Si continuas ridiculizando los deseos de nosotros los Espíritus Heroicos – Te partiré sin piedad, Caster.” Sus palabras estaban libres de emociones, pero la misma voz de Saber era fría como la hoja de una espada.

“Anda, párate. Los caballeros no puedes atacar a alguien que está arrodillado. Si tú eres un soldado, entonces te puedes guardar tus ingeniosos argumentos para ti y obtener el Grial con tu lucha frontal. ¡Permíteme a mí, Saber, ser tu primer oponente!”

La furiosa llama en los ojos de Caster desapareció.

Su cara, que estaba torcida con emoción, también retornó gradualmente a su calma. Caster alzó su cabeza para mirar a Saber; la formidable voluntad albergada dentro de su mirada no cambió en lo más mínimo.

Era una cara de silenciosa resolución. Él meramente había cambiado su determinación en una creencia aún más firme.

“Parece que las palabras no serán suficientes… ¿Aún está sellado tu corazón, Juana?”

La sombría voz de Caster ya no tenía más el lamento de justo antes.

“Entonces lo lamento mucho. Parece que es necesario forzar una terapia en ti. Lo que sea que sea – yo definitivamente tendré lista todas las preparaciones para la próxima vez.”

El largo manto negro flotó abruptamente hacia atrás, creando una gran distancia entre él y Saber. Caster, parándose nuevamente, era casi una persona distinta a la que estaba arrodillada en la tierra sollozando justo hace un momento. Un gran aire de majestuoso comando que parecía capaz de manchar a la tierra entera de rojo con sangre se emitía de su persona… no solo Espíritus Heroicos, sino incluso tiranos sentirían la opresiva tensión de ese miedo.

El hombre en frente a ella sin duda no es un enemigo fácil – Saber, que se plantaba en frente a Caster, entendía sin lugar a duda esto por sus instintos.

“Te juro, Juana. La próxima vez que nos encontremos, yo definitivamente… salvaré tu alma de la maldición de Dios.”

“Guárdate las palabras. Vete si no posees la voluntad de enfrentar una espada.”

A la fría respuesta de Saber, Caster silenciosamente se quitó su forma material y desapareció en la noche.

Dejando salir un largo suspiro, Saber también suprimió su tensión de lucha. Irisviel colapsó en el parachoques del Mercedes, exhausta.

“Confrontar a un oponente tan absurdo… fue más bien exhaustivo.”

“Cierto. Como sea, Lo voy a rebanar antes de que abra la boca la próxima vez – Voy a vomitar si se quedara un minuto más alguien como él.”

Aunque Caster ya había desaparecido, Saber aún dijo eso indignadamente.

“¿Lamentas que haya escapado tan fácilmente?”

“Uh huh. Estaba a punto de hacerlo pagar por su comportamiento de hablar absolutas ridiculeces aquí – es lo que quería decir.”

Por un breve instante, la docilidad cubrió su ira, cuando Saber reaciamente fruncía sus cejas.

“Pero en toda mi honestidad, puede ser que la retirada de Caster esta noche haya sido una buena porción de suerte para mí.”

“¿Cómo? ¿De verdad?”

Al oír a Saber decir esas palabras tan disgustada, Irisviel estaba muy sorprendida.

Para un oponente tan diestro en batalla taumatúrgica como el Sirviente Caster, su perdición hubiera sido Saber, que tiene la mayor resistencia a la magia. Si el par realmente hubiera comenzado a pelear, Saber debía haber conseguido la victoria con sobrecogedora velocidad.

Pero Saber, con una expresión que ni ella comprendía completamente, sacudió su cabeza con una amarga sonrisa.

“Ese Caster… era un poco diferente. O más bien no es igual comparado con otros magos. Aunque no puedo estar segura tampoco… pero se sintió muy peligroso para mi pelear contra él en esta condición, teniendo mi mano izquierda inútil.”

El sexto sentido de Saber también se veía fortalecido debido a las especialidades de su clase, casi al nivel de la premonición. Si ella se sentía insegura respecto al enemigo, Irisviel también debía reevaluar a Caster.

“En todo caso, Lancer debe ser primero…”

“Sí. Es extremadamente afortunado que Lancer también sea un noble guerrero, que no escape ni se encubra a sí mismo. Él también espera ansioso nuestro duelo.”

Aunque ellos son enemigos mutuamente, Saber era benévola con el espíritu Lancer. Pero aún así, eso no quitaba un matiz de intranquilidad de Irisviel. Después de todo, sin importar cuánto un Sirviente este lleno del espíritu de la caballería, es difícil decir cuánto de eso aplicará para el Maestro.

Y la Rey de los Caballeros, quién fue atada en los grilletes de ser un Sirviente, ¿aún sigue peleando según la reputación de la espada…? Cuando ella pensó esto, Irisviel no pudo evitar sentirse triste.


Desconocido a Irisviel, Saber o incluso a Caster, quién primero se retiro, el proceso entero de este oportuno encuentro entre ellos había estado bajo la vigilancia de perseguidores.

En el denso bosque conectado a la autopista estatal, los perseguidores vistiendo las fantasmales mascaras de calaveras se encubrían a sí mismos en las cimas de los arboles tragados por la oscuridad y evaluaron todo lo que tan solo recién había ocurrido con un ojo vigilante.

No solo se fundían en las sombras; los perseguidores que cortaban todos sus rastros para evadir los sentidos de Saber parecían ellos mismos ser sombras. Nadie más puede lograr esto aparte de Assassin. Parece que Assassin, de acuerdo al comando del Kotomine Kirei, siguieron a Saber e Irisviel de los almacenes hasta aquí.

Assassin, quien inicialmente solo recibía la orden de marcar a Irisviel, el Maestro de Einsbern, obtuvo un inesperado premio. El último Sirviente, que no se mostró a sí mismo en el combate de los distritos de almacenes, Caster, fue finalmente descubierto por Assassin.

Aunque el aroma de Caster, quién partió en forma espiritual, desaparecía rápidamente, los agudos sentidos espirituales de Assassin aún podían detectarlo. Justo ahora es la mejor oportunidad para perseguirlo.

“Por supuesto, esa no es una tarea para ti.”

Repentinamente una voz sonó detrás de Assassin. Un vago contorno emergió difusamente del sombrío bosque – es, inesperadamente, otra máscara de calavera.

El segundo Assassin difería del anterior solo en la forma del cuerpo, mientras que la máscara y el manto negro que vestían eran idénticos. A la vez, ambos diferían del Assassin que hacía el reconocimiento en el distrito de almacenes en constitución y forma del cuerpo. Aunque ellos son Sirvientes de la misma clase, ellos son clara e inconfundiblemente individuos diferentes.

“¿Y qué tal si te lo encargo a ti?”

“Sí. Tú solo debes seguir detrás de Saber y su Maestro… Por cierto, ¿Vio el Maestro Kirei la situación aquí?”

“No, el Maestro Kirei no compartió su percepción conmigo.”

El Assassin que inicialmente seguía a Irisviel sacudió su cabeza. Parece que era otro Assassin el que hacía el reconocimiento en el distrito de almacenes en ese momento.

El segundo Assassin chasqueó sus labios cuando oyó su respuesta.

“Solo para estar del lado seguro, nosotros aún deberíamos reportarle al Maestro Kirei las cosas que pasaron aquí…”

“Encárgame eso a mí.”

Siguió una tercera voz. Ya no es nada de que sorprenderse, otra blanca máscara de calavera apareció en la oscuridad.

Esta vez, era un Assassin de apariencia infantil con una aguda voz y baja estatura. Quizás nadie sepa tan solo cuantos Assassin estén reunidos aquí.

El monstruoso sonido del motor del Mercedes resonó una vez más en el cielo nocturno y partió rugiendo en la autopista estatal. Quizás Irisviel y Saber rápidamente emprenderán nuevamente su camino.

Al mismo tiempo las tres sombras asintieron entre sí y también desaparecieron como un torbellino en la vasta noche.


※※※※※


En la oscuridad tan espesa como la sangre, solo titubeaba una solitaria vela. La tenue luz se reflejaba en el apuesto rostro de Uryū Ryūnosuke.

Sangre escarlata manchaba completamente esos dedos demasiado delicados para un hombre. En frente del hombre, que se sentaba al lado de una larga mesa, se ubicaban tres corridas de carne cruda que reflejaban un rojo brillante.

Eran intestinos. Eran intestinos en la larga mesa.

Ryūnosuke observó resueltamente a los intestinos en frente de él y entonces tomó un diapasón con su mano izquierda y dio un golpecito con él en la mesa. Ding. El diapasón emitió un claro sonido.

Antes que el sonido del diapasón desapareciera completamente, él rápidamente pinchó en todos lugares de los intestinos con su mano derecha.

En ese momento –

Ahhh…

Haaa…

Un sonido angustiado repentinamente salió de la oscuridad.

Ryūnosuke escuchó cuidadosamente el sonido emitido y asintió satisfactoriamente luego que lo comparó con el resto del eco del diapasón.

“Muy bien, así que aquí es ‘mi’.”

En cuanto habló, marcó un punto en los intestinos con un alfiler. Muchas notas similares ya se habían hecho en el intestino temblando incesantemente.

Los intestinos parecían estar vivos. Más correctamente, parecía que el dueño de los intestinos seguía vivo.

En el crucifijo en la cima de la larga mesa, estaba atada una niña que sollozaba incesantemente con el dolor. Había un corte horizontal hecho en su abdomen, y los contenidos que habían sido extraídos eran acariciados en las manos de Ryūnosuke.

Incluso Barba Azul elogió a Ryūnosuke por su idea de hacer un órgano de tubos a partir de un humano vivo para hacer música de lamentos. Para hacer que la niña elegida como el material no muriera de la masiva pérdida de sangre o de infecciones, Barba Azul puso algunos conjuros de sanación y rejuvenecimiento en su cuerpo, e hizo especialmente algunos ajustes para prevenir que el dolor nublara su cerebro.

Ryūnosuke siempre había estado frustrado con el hecho de que el cuerpo humano cesara sus actividades vitales tan pronto como se encontrara con una estimulación ligeramente extrema.

Pero ahora, con la ayuda de la taumaturgia, todos estos obstáculos previos se solucionaban fácilmente. Ahora, Ryūnosuke puede agitar sus alas de percepción libremente, improvisando a su voluntad.

“Muy bien, ahora una vez más. ‘Do re mi-“

Ryūnosuke tarareó mientras presionaba el intestino-órgano. Pero el sonido de agonía que acompañaba a sus movimientos estaba muy fuera de armonía con su propia entonación.

“… ¿Hm?”

El afinador untado en sangre fruncía sus cejas, inclinaba su cabeza y una vez más presionaba en el lugar que recién afinó con el diapasón. Como sea, el sonido hecho por la muchacha en el crucifijo era completamente distinto al de la nota marcada.

Tras una cuidadosa reflexión figuró que aunque la estimulación ocurra en el mismo lugar, no garantiza que el quejido hecho sea el mismo. Este instrumento humano falla en el diseño de su concepción original.

“Huh… que fracaso.”

Ryūnosuke suspiró tristemente y rascó su cabeza.

Después del dosel humano que intentó arduamente de diseñar ayer, este instrumento humano también termino siendo un fracaso. Si esta frustración continua más allá, incluso Ryūnosuke perdería su confianza.

Pero justo entonces, Ryūnosuke recordó repentinamente lo que Barba Azul le dijo en consolación tras su fracaso al hacer el dosel ayer:

“Sin importar qué, la idea es lo más importante. Incluso aunque el final no resulte tan satisfactorio como lo imaginaras, ya es importante el hecho de desafiarlo.”

Ryūnosuke estaba inspirado por las palabras del exaltado entusiasta. Para un joven que nunca era comprendido por nadie, quién creaba arte solo, el ánimo de estas palabras sostenían un gran significado.

Es necesario el trabajo duro. Ryūnosuke alzó una vez más su espíritu. No funcionará temerle al fracaso. El fracaso es la madre del éxito; un largo viaje comienza de la tierra bajo sus pies.

Después de todo, él tiene que pensar progresivamente. Es muy temprano para descartar la fabricación de este instrumento humano. Si él puede encontrar la raíz del problema, podría encontrar alguna clase de solución.

Y, dejando de lado los sonidos, la expresión de dolor que tenía la niña cuando él se agasajaba con los intestinos retirados de su cuerpo también era extraordinariamente atractiva. Sería un desperdicio descartar una expresión tan preciosa.

El aire, lleno del hedor de la sangre, repentinamente se sintió pesado. La densidad del prana flotando en el aire se volvió aún más espesa. Todo esto señalaba que el dueño de este taller taumatúrgico ha vuelto.

“Ah, bienvenido de vuelta, Señor.”

Apareciendo gradualmente en la luz de la vela, Barba Azul, el Sirviente Caster, no le dio a Ryūnosuke ni una mirada. La cara sin emociones, La cara sin emociones, comparada a la expresión que tenia mientras bailaba y cantaba de goce al salir, había tenido un completo giro de ciento ochenta grados.

Parece que algo desagradable ocurrió cuando él estaba fuera. Aunque Ryūnosuke estaba un poco preocupado, él no podía esperar para reportar los frutos de su investigación a él.

“Señor, lo lamento mucho. Como usted dijo, el instrumento no funcionó. Pero yo–“

“– no es suficiente.”

“¿Cómo?”

Ryūnosuke no había resuelto lo que la frase repentinamente pronunciada por Barba Azul significaba. Caster dejó a un lado al atónito Ryūnosuke, tendió una mano fuera del interior del manto negro y la puso como la garra de un águila en la niña atada en el crucifijo gritando sofocadamente.

“¡Definitivamente no es suficiente! ¡Hasta este punto!”

“Ah, sí. Me figuré eso también… ¿Huh?”

La frase de Ryūnosuke se detuvo a la mitad. Los dedos como araña de Caster gradualmente aumentaron la fuerza en ellos; la cabeza de la niña fue aplastada en pedazos en su mano como si fuera una fruta.

“E-Esto…”

Ryūnosuke no era infeliz con la actitud de Barba Azul hacia él. Él entendía que justo ahora él estaba en un estado de agitación emocional e ignoraba completamente la existencia de Ryūnosuke.

“¡Oh tú, abominable Dios, incluso ahora tú encierras el alma de Juana y no dispones a dejarla ir! ¡Estos blasfemos sacrificios aún no son suficientes!”

No había ninguna luz de razón en los ojos de Barba Azul que rugía con saliva saltando de su boca. Aunque Ryūnosuke no sabía qué había ocurrido, la Juana que mencionó debía ser la muchacha en armadura que ellos vieron en la bola de cristal.

Probablemente son traumas causados por problemas emocionales con su ex.

Ryūnosuke comenzó a compadecerse de él. Aunque ellos no habían pasado mucho tiempo juntos, Ryūnosuke sabía que este demonio de extraña apariencia en frente de él es de hecho extremadamente simple en sus emociones.

“Debo hacerle saber que en este mundo el tal-llamado Dios es tan solo un mito vacio. Cosas como salvar al mundo entero son solo mentiras presuntuosas. ¡Las plegarias del silencioso cordero jamás pasarán a los Cielos!”

“Hum, sí. Comprendo, Señor.”

Hablando a la par de él, Ryūnosuke no tenía idea de lo que las palabras de Barba Azul significaban, ni tenía intención de tratar de averiguarlo; él piensa que es muy vulgar entrometerse en los problemas emocionales de otras personas.

“¡Con solo blasfemar a Dios no es suficiente! ¡También debemos probarle al mundo la impotencia de la autoridad de Dios y la hipocresía de su amor! ¡Necesitamos probar que es capaz de ajuiciar! Sin importar cuánto mal hayas cometido, no sufrirás el castigo de Dios. ¿No es así, Ryūnosuke?”

“Ah, cosas como Dios son solo trucos aburridos para que la gente estúpida crea. Señor, usted es mucho más genial comparado con ese falso Dios.”

“Entonces, ¡Blasfememos a Dios aún más vigorosamente! Apilaremos los sacrificios de blasfemia tan alto como montañas, y pondremos esa escena en frente de ella.”

Tras la declaración de Barba Azul, Ryūnosuke lo contempló solo un poco.

“Um, eso significa… ¿vamos a ir más allá en lo que estamos haciendo en calidad y en cantidad?”

“¡Sí, exactamente! ¡Estás en lo correcto, Ryūnosuke! Tú entiendes bien lo que trato de decir.”

Cuando él vio que Ryūnosuke entendía completamente lo que él quería decir, Barba Azul inmediatamente tenía la cara llena de sonrisas y le dio una palmada en el hombro. Ryūnosuke se fue acostumbrando a estos cambios radicales de temperamento hace mucho.

Solo que, acerca del cambio de métodos del que acaba de hablar… Ryūnosuke no tenía ningún interés en absoluto en eso.

“Ryūnosuke, ¿Cuántos niños siguen encerrados en las celdas?”

“… Aún quedan once de ellos vivos. Tres murieron cuando solo jugué un poco con ellos.”

“Muy bien. Comienza con esos once; sacrifícalos tan pronto como sea posible. Cuando terminemos con ellos, capturaremos a otros niños como reemplazo antes de mañana en la mañana.”

“Eso es… más bien una lástima.”

Después de todo, la masacre en masa no encaja al gusto de Ryūnosuke. A lo más, él disfruta el arte de matar, y no es una máquina de matar. Tales artes que no saborean el sentimiento de matar, sino que solo apila los cadáveres como montañas, no eran muy diferentes de las guerras o los desastres naturales. Es un desperdicio de vidas. Solo masacrando gente de una en una se pueden experimentar las maravillas de la vida.

Barba Azul percibió el descontento de Ryūnosuke; por eso, con una cara llena de angelicales sonrisas, él le habló a Ryūnosuke como alguien que razona con un niño revoltoso.

“Oye, Ryūnosuke, este no es momento para ser mezquino. Cada vida en el mundo es de nuestra propiedad. Por lo tanto debes tener el correcto tipo de actitud y un corazón tan generoso como el de un rey. Siéntete libre de despilfarrar. Por favor recuerda que tu riqueza nunca caducará. Solo así, tú serás apto de ser llamado mi Maestro.”

“¿Cómo un rey?”

Sí. Ryūnosuke es muy rico.

Ryūnosuke no está ni remotamente interesado en cosas como el dinero. Para él, la única cosa con valor gastable es la vida humana. A la vez él, quien obtuvo la ayuda de Barba Azul, no será perseguido por la ley sin importar como mate a la gente. Él es libre de matar cuando sea, donde sea, y usando el método que sea. Solo que, estos poderes eran otorgados a él por Barba Azul.

Si uno puede hacer lo que sea que uno desee y consumir de cualquier manera que guste todo en este mundo, es efectivamente lo mismo a poseer todas las cosas. Incluso el Papa o el Presidente no serían capaces de compararse a él. Uryū Ryūnosuke es actualmente el hombre más rico en el mundo.

“Pero yo aún pienso que deberíamos planear un poco en como los usemos.”

“Ryūnosuke, tú has sido envenenado muy profundamente por la sociedad capitalista. Viviendo en esta era, es inevitable que tú tengas esos pensamientos. Pero tú debes saber que para los nobles, el despilfarro es una virtud. Alguien que posee riqueza tiene el deber de exhibir esta riqueza al mundo. Solo haciendo eso podrás mostrar el brillo de la riqueza y hacerla aún más significativa.”

“Hum…”

Las pocas palabras de Barba Azul convencieron completamente a Ryūnosuke. Este maestro de la muerte y la destrucción una vez más recibió nueva inspiración.

De todos modos, tal como dijo Barba Azul, solo concéntrate en deshacerte de esos niños esta noche. A lo mejor pueda encontrar nuevas formas de jugar en ese corto periodo. Ryūnosuke sintió más ansias al pensar en esto.

Pero aún así –

Aunque él aceptó el punto de Barba Azul, Ryūnosuke no podía olvidar la figura de la chica que había sido usada como el instrumento humano.

Su cara que había sido aplastado por Barba Azul y que ya no era visible - originalmente era muy linda.





-149:47:12[edit]

Mirando abajo desde el piso numero 32 – el último piso – del hotel Hyatt de Fuyuki. No hay un edificio más alto que este en todo Fuyuki.

El título del edificio más alto pronto lo tomará el aún-por-terminar centro comercial de Shinto. Pero dado que el centro comercial de Shinto aún está bajo construcción, este hotel Hyatt es el más alto entre los edificios construidos completamente.

Acompañando al imparable crecimiento de Shinto, habrá más y más nuevos hoteles. Pero el hotel Hyatt, que tiene las instalaciones más avanzadas y las mejores normas de servicio, no le brindará esa condición a nadie más. No son solo los administradores del hotel o el personal los que piensan así, incluso lo clientes del hotel son sorprendidos por su alta calidad del servicio y de la administración.

Pero incluso el vivir en una habitación tan lujosa, sentado en un sofá de cuero verdadero junto a la ventana, no podía calmar la depresión de Kayneth Archibald El-Melloi en lo más mínimo.

Para él, los objetos en este cuarto son solo ‘una derrochadora colección’. Es meramente un sombrío cuarto, unos adornos caros, y algunos caprichosos objetos de todos los días. Para Kayneth que ha nacido en la aristocracia, no hay nada que lo altere más que las cosas originalmente comunes disfrazadas con lujosos conjuntos para parecer falsamente aristocráticos. Pero justo ahora, es exactamente así como era esta habitación de hotel. No hay ni la mínima pizca de procedencia histórica o patrimonio cultural en este cuarto. Es una mera pocilga decorada con una lujosa apariencia.

Pero el instigador de este sentimiento no se limita a solo este hotel; esta nación extremadamente pequeña conocida como Japón está llena de cosas que dejan a Kayneth con un feo e infeliz sentimiento.

Incluso la pequeña isla de Hong Kong puede dar un sentimiento muy local y folclórico. Pero ahora, Shinto de Fuyuki no muestra ni una pizca de su cultura local. Como ahora, mirando el escenario de la ciudad en la noche desde este alto punto, no habría forma de adivinar exactamente en qué ciudad de qué país estás. Simplemente conseguir los elementos más comunes y poniéndolos juntos – si a él se le fuera a preguntar qué es exactamente esta ciudad, Kayneth diría que es meramente como una montaña de basura.

Si la nación-isla del este hubiera preservado su entorno original de honesta aldea pesquera en el páramo, entonces sería mucho más interesante que lo que es ahora… pero desafortunadamente cuando se trata de la habilidad de comprender cosas como estas, una raza como los japoneses no va con cosas así. Este subdesarrollado país que ni siquiera tenía una constitución hace cien años quiere forjarse adelante y competir con los países occidentales fiándose solo de en las ciencias tecnológicas y el desarrollo financiero, como sí ellos quisieran desvergonzadamente forzar su camino dentro de los rangos de los países desarrollados. Es en realidad difícil razonar con esta gente.

Kayneth usó un dedo para gentilmente dar unos golpecitos en su cabeza que sufría un leve dolor de cabeza por el fastidio, y suspiró airadamente.

En realidad, él no es él tipo de persona que pierda los estribos por cosas pequeñas como esas, pero algo más es causa de su irritación.

La amplia pantalla de TV en frente de él interrumpió repentinamente su programa nocturno y comenzó a transmitir noticias urgentes. El conductor de noticias está en la escena, reportando en vivo una explosión de origen desconocido en una calle de almacenes por la costa de Fuyuki.

De acuerdo a residentes de las áreas próximas que oyeron la explosión, hubo carros de bomberos en la escena hace cuatro horas. Aunque aún no hay noticias, los policías que ya han comenzado la investigación en el sitio definitivamente ocultan lo que han encontrado. ¿Cómo puede la gente común e ignorante tener un juicio correcto respecto a algo que sobrepasa su conocimiento?

No es simple tampoco ser el supervisor de la Santa Iglesia. Contando el tiempo, dentro de 30 minutos después que Kayneth cancelara el campo, todas las tareas encubiertas habían concluido.

Ahora la totalidad de la verdad recae tan solo en las memorias de aquellos pocos que estuvieron presentes. Uno de ellos era Kayneth; Sirviente Lancer – el Maestro del Espíritu Heroico Diarmuid ua Duibhne.

El comienzo del largamente esperado Toque del Cielo. Y ellos estuvieron minuciosamente preparados para la primera batalla. Aunque los resultados eran diferentes a sus expectativas.

Incluso en su juventud, Kayneth Archibald era visto mucho más adelante que otros niños. Sin importar cual fuera el problema, nadie podía encontrar una mejor solución que Kayneth; no existe un oponente que pueda ganar contra él en una competencia.

Y aún cuando sus esfuerzos no sobrepasaban el sentido común de un propósito, simplemente creyendo que los resultados de sus trabajos serían mejores que los de alguna otra persona en algún lugar o algún momento. Eso era todo.

Por eso, Kayneth había sido visto por otros como un ‘prodigio’ en su juventud.

Ese hecho es conocido por todos. Nadie ha puesto en duda su título de ‘prodigio’, y nada nunca ha amenazado su posición como ‘prodigio’. Así, él no tenía necesidad de ser orgulloso o egoísta, él simplemente disfrutaba su merecido título de ‘prodigio’.

Él nunca ha estado en un aprieto, ni ha estado alguna vez extremadamente frustrado. En el mundo del joven Kayneth, él era el maestro de todo. No había necesidad de dudar esto en lo más mínimo. Él era un talentoso mago prodigio. Él también era el heredero de la bien conocida familia Archibald. Él no solo heredaba la cresta mágica pasada por generaciones, él mismo poseía un talento raramente atestiguado en el mundo. Todos esos ‘hechos’ hacían que todos los honores que recibía Kayneth fueran solo lo natural. Así que para llegar a creer que no había nada en el mundo que Kayneth no pudiera alcanzar con su poder, ese tipo de confianza en sí mismo no era infundada. Este no es un error del mismo Kayneth, sino que es el conocimiento común de todos los que lo rodean.

Incluso en la atareada Torre Reloj entre los numerosos y exitosos investigadores, su coronación al famoso título de Lord El-Melloi por una gran ventaja fue ampliamente aprobada por todos. Pero para Kayneth quien se ha acostumbrado a ser llamado ‘prodigio’, que siempre ha sido blanco de admiración y de celos, él no sentía la más mínima satisfacción o sensación de logro. Todo esto es meramente un ‘resultado inevitable’ de la vida para él.

El pasado era así, y el futuro definitivamente será así. Este es un sagrado e inviolable ‘acuerdo de vida’; para Kayneth no hay duda sobre eso.

Por eso, para él que ya puede predecir el mundo entero– si un muy raro, casi imposible, ‘accidente’ ocurriera, entonces Kayneth absolutamente no podría tolerar ese caos; sería un insulto y una blasfemia al orden de Dios.

Tal como–

La Sirviente, Saber, que claramente había estado en su palma, escapara tan fácilmente. Es increíblemente inconcebible.

“Lancer, ven.”

“– Sí, aguardo sus órdenes.”

Tan pronto como las palabras dejaron sus labios, el apuesto Espíritu Heroico apareció obediente y respetuosamente en frente de Kayneth, agachado en una reverencia. Para Kayneth que es el principal catedrático en conjuración de espíritus, hablar directamente con la forma espiritual no le causa problemas, y de hecho es muy familiar. Pero una conversación cara a cara como esta es muy rara.

Al menos, si su Sirviente está cara a cara con él, Kayneth puede observar hasta los más pequeños cambios en su expresión mientras le hable. En cuanto a llamar a este tipo de actividad una conversación – podría ser más adecuado llamarla una interrogación.

“Gracias por tu arduo trabajo de esta noche. Fui capaz de atestiguar muy bien la grandeza de las lanzas gemelas de Diarmuid ua Duibhne.”

“Gracias, Maestro.”

Lancer respondió simple y francamente. Él no se sentía alagado al escuchar el cumplido, ni reveló algún signo de felicidad, ni parecía insatisfecho. Él solo lo aceptó con la rigurosa humildad de un caballero.

Pero para los ojos de Kayneth, está definitivamente no era la expresión normal de Lancer – él oculta algo.

“Ah, por favor responde a mi pregunta honestamente. … Tú, ¿Qué planeas hacer?”

“… Usted, ¿Qué quiere decir?”

Incluso enfrentado a la súbita pregunta de Kayneth con un aire de interrogación, Lancer aún mantuvo su cauta actitud.

“Lancer, tú hiciste un juramento conmigo como un Sirviente. Hacer todo lo que estuviera en tu poder para ayudarme a conseguir la victoria en el Toque del Cielo. ¿Cierto?”

“Sí, eso es correcto.”

“¿Entonces por qué no actúas en serio al respecto?”

Aún siendo regañado por Kayneth, Lancer no mostró ni la más leve expresión de ira o culpa, él solo mantuvo su cabeza agachada con una expresión seria. Quizás él había estado preparado desde antes para esta interrogación.

“… Solo lo hice por el honor de un Caballero. No por ver la batalla como un juego.”

“¿Oh? ¿No lo admites?”

Kayneth hizo un desdeñoso gruñido y continuó con las preguntas.

“Entonces, déjame preguntarte, ¿Por qué dejaste ir a Saber?”

“Eso es porque–“

“Tuviste una sobrecogedora ventaja más de una vez, pero en ambas ocasiones no diste el golpe; ¿realmente quieres que te controle con los Sellos de Comando?”

“…”

Lancer no tuvo respuesta esta vez, solo mantuvo su silencio.

“Lo diré de nuevo. Yo atestigüé toda la batalla de esta noche. Solo así soy capaz de hacer estas preguntas. Lancer ¿tú sientes que las batallas son ‘diversión’?”

Mirando al silencioso caballero con su cabeza agachada, Kayneth hizo una mueca de desprecio y continuó.

“¿Así de feliz eres? Pelear con Saber. ¿Al punto de no ser capaz de llevarte a ti mismo a acabar con ella?”

Para un espectador, podría elogiar la valentía y sutileza en batalla. Pero desde la perspectiva del Maestro, Kayneth, valentía y sutileza sin resultados – eso lo enfurece.

La reliquia original para conjurar a su Espíritu Heroico elegido, Alejandro, había sido robada por su desagradecido estudiante, Waver Velvet. Pero el poder de este Waver no se iguala en absoluto con el de Alejandro, causando al final que fuera incapaz de controlar a su propio Sirviente y provocando que Alejandro actúe desbocadamente. Por la inutilidad de Waver, la situación de entonces cayó a un estado caótico, destruyendo la posibilidad de victoria de Kayneth… Kayneth jamás había tenido tal mala suerte. Y la causa de esto es meramente Waver, pero estar furioso con una persona que no está al frente suyo no tiene sentido. Él solo debe contener esa ira dentro de él, esperando por su oportunidad para enfrentar a Waver en batalla para poder disparar toda su ira contra él. Al respecto de este tipo de ‘ira externa’, Kayneth es muy realista, sereno y brutal.

Pero en cambio, Kayneth no posee métodos para controlar su ‘ira interna’. Para Kayneth que ha llevado una vida de ser admirado, quien nunca ha tenido algún contacto con la derrota en su vida entera, sea sí mismo o alguna cosa subordinada que no caiga en sus expectativas – incluso si es por un poco – definitivamente no está permitido. Él quien ha sido exitoso toda su vida, quien nunca ha enfrentado algún contratiempo, es muy débil contra la derrota.

Así, justo ahora para Kayneth, entre el enemigo Waver que obstruyó la obtención de su victoria, y Lancer que fue incapaz de traerla la victoria, el segundo le enfurece aún más.

“… Honestamente lo lamento mucho. Maestro.”

Notando la ira de Kayneth, Lancer arqueó su cabeza profundamente y se disculpó en un tono serio.

“Lo juro por mi reputación como caballero; te traeré la cabeza de Saber. Por favor crea en mi sin importar nada.”

“¡No necesito que me lo jures de nuevo! ¡Ese será solo el resultado natural!”

Kayneth, que gradualmente se había puesto nervioso, usó su furiosa voz para suprimir las disculpas de Lancer.

“Ya me has jurado a mí. ¡Que tú me traerías a mí, Kayneth El-Melloi, el Santo Grial! En otras palabras, tú destruirás a los otros seis Sirvientes; esos dos son la misma cosa. Esa es la premisa de la batalla entera.

Pero lo que tú dices ahora… ¿Ese voto está dirigido solo a la victoria con Saber? Esto queda mucho más abajo que el trato del comienzo. ¿Qué anda mal contigo?”

“– Creo que tú eres él que anda con algo mal con él, Kayneth El-Melloi.”

No es ni la voz de Lancer ni de Kayneth, sino de una tercera persona. Nadie sabe cuando comenzó a oír la conversación entre el Sirviente y el Maestro la mujer que emergió de la habitación.

Aún luciendo un cabello rojo como llamas ardiendo, ella da una impresión de una belleza extraordinariamente fría, glacial. Aparenta ser un poco más joven que Kayneth, una dama de la clase alta de tan solo unos veinte años. Uno puede saber con una mirada que ella es una aristócrata sentimental y prestigiosa. Y la autoridad temperamental emanando de sus severos ojos la hacen ver como una emperatriz.

Sus ojos que parecieran estar reprendiendo a un subordinado miran a solo una persona – Kayneth.

“Lancer lo ha hecho muy bien. Eres tu quién juzga mal la situación.”

“Sola, ¿Qué tratas de decir?...”

Considerando la personalidad de Kayneth, es incomprensible que hasta este punto no haya estallado de ira. Pero todo esto es porque esta mujer es un ser muy especial para él.

Sola-Ui Nuada-Re Sophia-Ri. La profesora de Kayneth– la hija del jefe del Departamento de Eulyphis. También es la diosa de la victoria que completará la gloria de Kayneth– dicho de otra forma, ella es la prometida de Kayneth.

El matrimonio entre las dos renombradas familias Archibald y Sophia-Ri, la unión del prodigio y la hija del jefe del departamento, este era un tema popular dentro de la Torre del Reloj. Aunque la cresta de la familia Sophia-Ri de entrega al hijo primogénito, así que Sola no sostiene un lugar muy alto como mago.

Pero por sus venas fluye la sangre ancestral de mago de los Sophia-Ri. La unión entre Sola, que posee circuitos mágicos por muchas magnitudes sobre los de una persona normal, y el ‘prodigio’ Kayneth traerá a una siguiente generación aún más excelente.

Pero – el glorioso futuro visto por los espectadores puede no ser necesariamente tan feliz para la gente involucrada.

Sola que mira punzantemente a su prometido y Kayneth que sostiene una horrible expresión al sentirse humillado – sin importar como lo mires, ellos dos no dan la impresión de un armonioso amor.

“Kayneth, si me preguntas, en esa situación, la decisión de Lancer era correcta. Para contener a Berserker él no tuvo más opción que actuar en equipo con Saber.”

Aunque ella no había estado presente para presenciar la batalla en la calle de almacenes, Sola había usado a su propio familiar para reportar todo lo que pasó ahí. No por entretenimiento. Aunque ella no tenga cresta mágica, ella aún es un miembro de los Sophia-Ris y por lo tanto ha sido introducida en los caminos de la magia desde la juventud. Su conocimiento al respecto de una batalla entre magos como el Toque del Cielo no es para nada menor al de un Maestro como Kayneth.

No, más bien desde su punto de vista respecto a la batalla, las acciones de Kayneth como Maestro eran definitivamente insuficientes.

“La Gáe Dearg de Lancer es un Fantasma Noble muy efectivo contra Berserker. Pareado con el apoyo de Saber, sería un asunto sencillo derrotar a ese Sirviente negro. Esta es una muy buena oportunidad para destruir al enemigo.”

“… Eso es porque tú no entiendes lo aterradora que es Saber.”

Refutó Kayneth con una voz áspera mientras trituraba sus dientes al no poder ventilar su ira.

Aunque la prometida de Kayneth posee un ojo muy agudo para analizar, al final, Sola no es su maestra ni su líder. Como Maestro, Kayneth se ha determinado desde el comienzo a pelear fiándose en sus propias decisiones. También, como un hombre siendo reprendido por su propia prometida, su dignidad estaba aún más herida.

“Yo usé la habilidad de la Perspectiva del Maestro para entender las habilidades de Saber. Ella es una Sirviente muy fuerte. Sus habilidades en conjunto superan con creces a las de Diarmuid. ¡Se perdió una muy buena oportunidad de derrotarla!”

“Tú… ¿En serio comprendes la especialidad de tu Sirviente?”

Sola hizo un frio gruñido nasal hacia el testarudo Kayneth mientras decía eso.

“¿Piensas que Gáe Buidhe es solo para lucir bien? En comparación con Saber que ya ha recibido un daño crítico incurable, ¿no sería Berserker, cuya identidad es desconocida, una mayor amenaza?”

“…”

Aunque él quería seguir discutiendo, no pudo generar ninguna respuesta.

Kayneth se volvía reaciamente intimidado frente a la conducta ofensiva de Sola.

“Primero, si verdaderamente consideras a Saber muy peligrosa–“

Sola continuó ante el silencio de Kayneth.

“¿Entonces porque dejaste sola a la Maestra de Saber? A esa mujer Einsbern, completamente indefensa parada a un lado. Cuando Lancer ocupaba toda la atención de Saber y se batían en batalla, ¿Por qué no atacaste a el Maestro enemigo? Lo que hiciste en su lugar… ¿Ocultarte en los márgenes y observar hasta el final? Tú eres el único que actuó mal.”

Viendo a Sola suspirar profundamente, Kayneth sintió como si ardiera en ira con esta humillación, pero aún él solo podía mirarla en silencio, sin decir una palabra.

Si hubiera sido cualquier otra persona, Kayneth hubiera puesto fin a su humillación hace mucho. Incluso si hubiera tenido que poner en la cuerda floja al título de Lord El-Melloi, él definitivamente hubiera devuelto varias veces la humillación a esa persona.

Pero hay solo una persona en el mundo, solo Sola-Ui Nuada-Re Sophia-Ri, que era una excepción para esto.

No solo porque ella sea la hija del profesor de Kayneth, sino también porque ella es su prometida; su matrimonio con ella le traería a Kayneth aún más honor y prestigio, y el futuro que él siempre ha perseguido.

Esta dama inteligente y orgullosa como una gema es la única mujer que Kayneth ama en el mundo entero.

La vez que se conocieron, incluso antes de intercambiar alguna palabra, el corazón de Kayneth ya había sido robado por esta mujer.

Quizás al notar la depresión de Kayneth, el tono de Sola se ablandó y continuó con menos mofa:

“Kayneth. ¿Sabes donde recae tu ventaja en comparación con otros Maestros? En ti mismo.”

“Eso– obviamente–“

“Agregaste tus propios diseños al sistema original de contrato, verdaderamente eres un prodigio. Tú mereces ser llamado el prodigio más grande en Eulyphis.”

Aún cuando Kayneth ya estaba enfermo de oír cumplidos, no le molestaba oír las palabras que salían de los labios de Sola por más qué las dijese.

Pero de hecho, la opinión de él de Sola no era solo adulación. La técnica secreta preparada por Kayneth para este Toque del Cielo había reescrito completamente las reglas de la guerra que habían sido diseñadas por las ‘tres familias originales’.

Originalmente, hay una causalidad inamovible entre un Sirviente y un Maestro. Una técnica para separar el derecho de los Sellos de Comando y el derecho de suministrar prana, dejando a dos convocadores controlar uno cada uno de ellos… a través de las prodigiosas habilidades de Kayneth fue hecha posible esta imposible técnica.

Kayneth es el mago que posee los Sellos de Comando, y la que suministra al Sirviente con prana no es más ni menos que… Sola. Se puede decir que son un Maestro en un equipo de dos personas.

“– Pero Kayneth, a pesar de que tú eres un mago de primera categoría, como soldado eres meramente de segunda categoría. Pasando por todos esos problemas para terminar tus preparaciones, pero al final no fuiste capaz de hacer uso apropiado de ellas en el campo de batalla, ¿cierto?”

“No, yo…”

“¿Por qué piensas que yo suministro el prana para Lancer? Esto es originalmente de lo que tú deberías ser responsable, ¿Así que por qué debo hacerlo yo? ¿No es con el fin de que tus batallas marchen bien, con el fin de dejarte obtener la victoria en el Toque del Cielo? Comparado a esos Maestros que deben suministrar prana a sus Sirviente, tú ya posees una arrebatadora ventaja. Tú puedes usar tu prana en toda su extensión para tomar varias medidas.”

“Pero… la guerra apenas ha comenzado, es mejor ser cauteloso…”

“¿Oh, en serio? ¿Entonces por qué demandas resultados tan apresuradamente de Lancer?”

“…”

Aunque el tono de Sola es más suave que al comienzo, está aún el significado implícito fuera de sus palabras mofándose de la cobardía de Kayneth. La expresión de Kayneth se volvió aún peor.

“Por lo tanto antes de que culpes a Lancer, deberías reflexionar un poco primero. Kayneth, esta noche tú–“

“Sola-sama, por favor deténgase ahí.”

Una repentina voz baja interrumpió a Sola.

Es Lancer. No es sabido cuando alzó su cabeza, mirando de frente a Sola.

“Si sigues humillando a mi Maestro, entonces como un caballero no lo toleraré más.”

“No, esa no era mi intención… Me disculpo. Me pasé de la raya.”

Sola, que hasta el momento sostenía la dignidad de una emperatriz, se disculpó y agachó sus ojos como si estuviera avergonzada tras las palabras de Lancer. Sin importar como mires a esta transformación es demasiado repentina.

En el corazón de Kayneth, la escena en frente de él le dejó un efecto muy negativo. Sola siempre lo había regañado incesantemente y jamás lo había escuchado. Él, que luego se convertiría en su esposo. Sola, que luego se convertirá en su esposa. ¿Por qué las palabras de un Sirviente pesan más que las de su futuro esposo?

Y desde el comienzo Sola había estado discutiendo con él para proteger a Lancer. ¿Quizás ella no podía soportar que Lancer fuera regañado?

Kayneth observó los ojos de Sola, los que estaban fijados en Lancer, y vio algo de emoción en los ojos de su prometida como nunca había presenciado antes. Y luego volvió sus ojos hacia Lancer–

El centelleante lunar bajo el ojo izquierdo de Lancer capturó su atención. ¿Es ese el relatado “lunar de lágrima” de Diarmuid ua Duibhne que atraía a las mujeres?

No, es estúpido sospechar infundadamente. Incluso un cualquiera sabría que Sola era la hija de la renombrada familia Sophia-Ri. Incluso cuando ella no posee una cresta mágica, ella aún tiene una resistencia mágica poderosa contra este tipo de conjuros de encanto.

A menos, que ella misma no resista este tipo de encanto deliberadamente, entonces–

Justo cuando Kayneth estaba hundido en sus pensamientos la alarma de incendios se encendió sin aviso, interrumpiendo su tren de pensamiento.

“… ¿Qué? ¿Qué está pasando?”

Masculló confundida Sola, y al mismo tiempo el teléfono en la habitación comenzó a sonar. El visor de llamadas indica que viene del lobby.

Kayneth tranquilamente alzó el auricular y oyó al recepcionista. Cuando terminó, la mirada de Kayneth recobró una vez más la perspicacia única entre los magos.

“Parece que hay fuego en algún lugar abajo; la administración nos pide que evacuemos.”

Le dijo Kayneth a Sola a la vez que colgaba el teléfono.

“Aunque el fuego no es muy violento, los lugares que está en llamas están muy dispersos. Parece intencionado.”

“¿Fuego intencionado? ¿Esta noche?”

“Sí, creo que definitivamente no es una coincidencia.”

Kayneth hizo un sonido desdeñoso. La inquietud y las preocupaciones que habían estado en su corazón más temprano desaparecieron completamente.

“Este es un plan para dispersar a la multitud. El oponente debe ser un mago. Luce como que él no quieren combatir en un edificio con muchos espectadores.”

Sola hablaba con una expresión llena de tensión.

“Entonces– ¿Una emboscada?”

“Me temo que sí. Podría ser esa mujer de la calle de almacenes que quiere jugar un poco más.

Interesante. Eso es justo lo que queremos, ¿no es así, Lancer?”

“Sí, exactamente.”

Lancer asintió determinadamente, como preparándose para luchar con el enemigo. De entre los siete Maestros, solo hay una persona que estaría en tanto apuro para atacar a Kayneth– ella es el Maestro de Saber, cuya Sirviente ha sido herida por Gáe Buidhe. Ella debe querer dispersar la maldición tan pronto como sea posible.

“Lancer, ve al piso debajo de este para encontrarlas. Pero no las hagas separarse muy rápidamente.”

Con la intención oculta en las palabras de Kayneth, Lancer solo asintió:

“Comprendido. Cortar el camino de los atacantes, y entonces perseguirlos hasta acá, ¿es eso?”

“Sí. Ya que tenemos visitas, ¿entonces por qué no hacerles dar un vistazo al taller mágico de Kayneth El-Melloi?”

Este hotel, como la fortaleza de Kayneth, debió pasar una completa renovación. No el tipo material de renovación, sino una fortificación a través de la magia. En este edificio que suma un total de treinta y dos pisos, el campo de Kayneth cubre veinticuatro. Este lugar puede ser llamado un castillo de magia. En adición, hay tres hornos mágicos para el uso exclusivo de Kayneth, y en lugar de perros, ha invocado una decena de espíritus y apariciones malignas. No hay ni una sola falla en los tubos de drenaje; Kayneth cubrió completamente el área bajo el vestíbulo con su campo.

En lugar de atacar territorio enemigo es mucho mejor perfeccionar un territorio propio. En cuanto para el contrincante que se atreva a plantar un pie aquí, Kayneth le hará saber el terror de Lord El-Melloi.

“Ya que todos los otros clientes se han ido no habrá nada de qué preocuparse. Ustedes dos pueden usar todo su poder para pelear.”

Un irreprensible sonido de carcajada escapó de la garganta de Kayneth. Y también el caballero que no había sido capaz de dejar de temblar de la emoción salió arrebatadamente.

Para Kayneth, ahora lo único necesario es la acción. Solo la acción y los resultados pueden diseminar la humillación infligida por Sola. Justo ahora, lo único por hacer es darle uso a su potencial entero, a eso que hace a los otros llamarlo prodigio, probar sus capacidades.

Sí, ahora Kayneth desea sangre. La oscura ira que estaba embotellada en él debe contrarrestarse con la sangre de alguien. El desafortunado enemigo que se mostró casualmente a atacar ahora está a punto de convertirse en la ofrenda perfecta.

“Tú dijiste que soy un soldado de segunda categoría; te voy a hacer que te retractes de esas palabras. Sola.”

“De acuerdo. Estaré esperando.”

La prometida de Kayneth que usualmente está criticándolo, solo por este momento lo vio con una sonrisa en la cara. El espíritu de lucha de Kayneth pesaba aún más que–

El miedo y la somnolencia de los clientes que habían sido sacados del medio de sus sueños repentinamente por la alarma de incendios y se reunían fuera del estacionamiento, combinado con el frio de afuera, los hacía llevar expresiones complicadas. En medio de esa gente, los empleados del hotel se escabullían bulliciosamente.

“… ¡Señor Archibald! ¡Kayneth El-Melloi Archibald! ¿Está aquí?”

De todos los nombres registrados en la lista de clientes solo hay una persona cuya presencia no ha sido confirmada; el botones lo llamaba con una voz frenética. Todos reconocían a este generoso cliente que había reservado el piso superior entero del altísimo hotel. De cierta manera, esta es la persona que ellos menos quieren que esté en peligro.

“¡Señor Archibald! ¿Está aquí?”

“– Estoy aquí. No te preocupes.”

Una voz resonante vino de detrás del botones, pero cuando él se volteó se sintió confundido. La persona que hablaba con él era un japonés vistiendo un abrigo de un estilo antiguo.

Esta broma es demasiado. El furioso botones estaba a punto de gritarle– pero fue cautivado por los ojos del hombre.

Este hombre poseía una indescriptible y misteriosa fuerza de atracción; el botones fue incapaz de evitar sus ojos y no era capaz ni de hablar.

“Yo soy Kayneth El-Melloi Archibald. Mi esposa Sola está conmigo.”

Declaró este desconocido hombre japonés con una voz clara. Y el botones aceptó esto sin dar ninguna sospecha, como hipnotizado.

“… ¿Es eso cierto? Ah, sí. Así es.”

Luego que el botones marcara un tic en la sección de ‘escapados’ de la lista, finalmente confirmando que todos los clientes estuvieran a salvo exhaló un largo suspiro. Todas sus sospechas mientras hablaba con Archibald más temprano y sus sentimientos de que algo andaba mal desaparecieron sin dejar rastro.

Viendo a los empleados continuar atendiendo a los otros clientes, Emiya Kiritsugu abandonó a la caótica multitud. Su sugestión hipnótica a una persona común sin resistencia mágica alguna no debería romperse en poco tiempo.

Luego de caminar a una turbia área oscura a cierta distancia del hotel, Kiritsugu sacó el celular en su bolsillo mientras sondeaba los alrededores para asegurarse que nadie lo estuviera mirando. Los celulares eran muy comunes entre la gente y le han dado gran ayuda a Kiritsugu. Es un aparato inalámbrico para comunicación simple pero útil, y sostener uno no levantará ninguna sospecha de nadie.

Primero debía contactar a Maiya, quien estaba ubicada para vigilancia.

“¿Todo listo por tu lado?”

“Sin irregularidades. Lista.”

La posición de Maiya es un alto edificio en construcción viéndose diagonalmente desde el Hotel Hyatt de Fuyuki. Desde ahí es posible ver claramente la habitación de Kayneth; esa era la posición que Kiritsugu le designó.

Kiritsugu suspiró levemente y alcanzó su caja de cigarrillos con una mano, digitando los números en el celular con la otra.

Kiritsugu marcó un número vacio. Y no había respuesta alguna desde su celular. Las redes de comunicación modificadas no se conectaban a una señal análoga sino al detonador de una bomba C4.

La bomba solo causó una explosión muy pequeña, al punto de que el sonido de la explosión ni siquiera pudo ser oída desde fuera del hotel.

En su lugar, lo que resonó en la noche fue el aterrador sonido del concreto reforzado haciéndose añicos y colapsando.

Los evacuados que habían notado que algo andaba mal vieron el súbito cambio en el altísimo edificio y comenzaron a gritar en pánico.

“¡El hotel, el hotel está colapsando!”

El hotel, alcanzando una altura de unos ciento cincuenta metros, mantuvo su postura erecta mientras colapsaba como si estuviera siendo tragado por la tierra. Ya que todas las paredes exteriores colapsaron hacia adentro, ningún fragmento de escombros salió volando, y tan solo el polvo creado por la demolición se desplegó hacia las calles que lo rodeaban. Precisión de demolición– una técnica altamente avanzada de demolición usada primariamente para demoler edificios altos. Debido a la destrucción de los muros que cargan el peso y de las estructuras clave de soporte, el edificio colapsa hacía abajo y hacia adentro por su propio peso. Usando la menor cantidad de explosivos para obtener la destrucción total. Emiya Kiritsugu que es familiar con todas las técnicas de demolición del pasado al presente, tiene una gran apreciación por este tipo de arte de destrucción.

Todos los edificios funcionando como bases de magos en la Ciudad Fuyuki están marcados en la lista de destrucción de Emiya Kiritsugu. Y el hotel Hyatt de Fuyuki es uno de ellos. Kiritsugu obtuvo los planos del edificio de antemano y determinó los puntos donde colocar los explosivos. En tanto las preparaciones estén completas, la ejecución completa toma menos de una hora.

Aunque los evacuados ya estaban tan lejos como era posible del edificio colapsando y del rango seguro para los escombros que salgan volando, ellos estaban bañados en el polvo que salió volando del colapso y eran presas del pánico. Mientras observaba el disturbio en la multitud, Kiritsugu buscó algún espacio con viento más débil y encendió el cigarro en su mano.

“Maiya, ¿Cómo están las cosas de tu posición?”

“Hasta el final no hubo actividad en el trigésimo tercer piso. El blanco no ha escapado del edificio.”

En otras palabras– pensó Kiritsugu con satisfacción mientras miraba las cenizas de las ruinas del hotel Hyatt de Fuyuki– aquel llamado ‘Lord El-Melloi’ Kayneth-sama ahora seguramente está manteniendo acompañados a los escombros.

Debido a la reacción en cadena causada por la precisión de la demolición hizo que el trigésimo tercer piso en que estaba Kayneth perdiera su soporte y prácticamente se precipitara en caída libre desde unos ciento cincuenta metros hasta el suelo. Sin importar que tan bien esté defendido por un campo, frente a una fuerza destructiva tal probablemente no pueda proteger a la gente dentro de las habitaciones.

Repentinamente vino el sonido de un niño llorando y la atención de Kiritsugu fue robada de las ruinas.

La madre del niño pasó junto a Kiritsugu sosteniendo a un niño que no podía dejar de llorar por el miedo. Ambos vestían solo sus pijamas y estaban cubiertos de pies a cabeza con cenizas blancas, luciendo tan miserables que era difícil de observar.

Kiritsugu siguió mirando las espaldas de la madre y el hijo… hasta que su mano se quemo por la llama de su cigarrillo y entonces captó de nuevo su atención. Kiritsugu lanzó al piso el cigarrillo ya quemado en gran parte y lo cubrió con el pie.

Emiya Kiritsugu se sintió un poco confundido; el sentimentalismo es definitivamente inaceptable para él. Esta clase de débiles sentimientos amenazarían directamente su vida. Pero él no puede enfrentar ese fracaso con compostura sin importar nada.

Sí. Incluso si no quisiera admitirlo la realidad era esta– Kiritsugu vio las figuras de Irisviel y Ilyasviel en las figuras de la madre y el hijo que se retiraban.

Emiya Kiritsugu una vez creyó que no se podía diferenciar entre sacrificios. Toda vida era igual, así que elegir el camino que llevara a los menos sacrificios estaba bien. A su juicio, las vidas de mujeres y niños no reciben ningún tratamiento especial.

El Santo Grial podía ser usado para salvar el mundo. Y Kayneth es un objetivo que debe ser eliminado para obtener el Santo Grial. Hay unas mil y tantas personas en el hotel Hyatt de Fuyuki, y el Santo Grial debería poder salvar al menos a cinco billones de personas. Kiritsugu podría haber erradicado completamente a estos inquilinos junto con Kayneth si hubiera sido necesario hacerlo.

¿Entonces por qué necesitaba prender un fuego antes de causar este disturbio?

En el comienzo él pensó que esta habría sido la táctica más obvia. Kayneth había puesto muchas trampas específicamente para protegerse contra una emboscada; así que como táctica contra su defensa estratégica, está definitivamente trajo buenos resultados. El mago prodigio contenía su muro de hierro con orgullo, pero él nunca pensó que el castillo entero sería destruido así que permaneció adentro.

Pero, ¿Su verdadera intención se limitaba solo a esto?

Su esperanza sentimental de que los inquilinos inocentes escaparan a tiempo, ¿se mostraba ahora solo inconscientemente?

Este verdaderamente es un romanticismo fatal. Si él estuviera en el campo de batalla, esta clase de sentimientos lo llevaría definitivamente a su muerte.

Para sostener los vacilantes sentimientos en su corazón Kiritsugu prendió una vez más un cigarrillo.

Él está deteriorado. Aunque él no sabe exactamente cuánto más débil es ahora, el Emiya Kiritsugu de hoy definitivamente se ha deteriorado a comparación a nueve años atrás. Si esto continuaba entonces él podría no ser capaz de obtener la victoria en la Guerra del Santo Grial. Sin importar que, no restaurar el frio juicio de antes es inaceptable – mientras más rápido mejor.

El vecindario trastornado por el incidente profundo en la noche ha comenzado al fin a agitarse. Viendo a la multitud agruparse en las calles, Kiritsugu inhaló profundamente y sacó su celular para dar a Maiya la señal de retirada.

El sonido que llegó a sus oídos no era la voz de su subordinada, sino el rugido de dos entes metálicos colisionando.

※※※※※

El punto estratégico metálico aún sin nombrar. Próximo a su finalización, es temporalmente llamado el trigésimo octavo piso del centro comercial de Fuyuki.

La construcción ya está a más de medio hacer, solo el exterior está dejado incompleto. La construcción alzándose alto pronto será un centro comercial y el símbolo de Shinto de Fuyuki, pero ahora es solo un esqueleto vacio de concreto reforzado, golpeado por los fuertes ventarrones de la noche.

Fuera por las luces en las calles en la tierra o fuera por las estrellas en el cielo, todo parecía distante y desolado. Era en este vacío que Hisau Maiya se arrodillaba inmóvil, sosteniendo en su hombro el rifle de asalto AUG con visión nocturna equipada. El cañón se apoyaba en su rodilla izquierda alzada.

Si el mago Kayneth hubiera notado el plan de Kiritsugu y hubiera escapado por la ventana, Hisau Maiya que lo esperaba aquí lo emboscaría. Pero el resultado es que esta preparación había sido completamente innecesaria.

“Maiya, ¿Cuál es la situación allí?”

Desde los audífonos de Maiya vino la voz interrogante de Kiritsugu que estaba a nivel de tierra. Necesitando ambas manos para sostener el rifle, Maiya cambió su celular a modo manos libres.

“Hasta el final no hubo actividad en el piso trigésimo segundo. El blanco no ha escapado del hotel.”

Maiya habló en el micrófono al lado de su boca y le dio a Kiritsugu un breve resumen de su vigilancia. Aunque ella acababa de presenciar una devastadora destrucción, su voz no contenía ni una pizca de agitación.

Su misión de vigilancia había terminado. Maiya retiro las balas del arma, que no tuvieron oportunidad de ser usadas antes que la misión terminara, las puso en un estuche, aventó el rifle de asalto sobre su hombro y se paró para dirigirse a las escaleras.

En ese momento ella notó un rastro de anormalidad.

No una típica anormalidad, sino un sutil cambio en la atmosfera difícil de detectar. Para una soldado experimentada es un asunto sencillo detectar esta clase de intento asesino.

“– Tus sentidos son agudos, dama.”

Desde detrás de la ahora quieta Maiya vino una voz masculina baja y fría. La voz hizo eco en el vacio edificio de concreto reforzado, haciendo imposible determinar de dónde procedía.

Maiya no respondió ni hizo preguntas. Ella solo usó tranquilamente su intuición para determinar la posición del enemigo y sacó pistola de mano de calibre 9mm desde su cinturón.

En cuanto a la otra persona en el lugar, la persona que descubrió la existencia de Maiya – sin importar quién sea, esta razón es suficiente para convertirlo en el blanco de Maiya.

“– Hmm, está muy bien tener esta clase de preparación.”

Dijo el hombre oculto en las sombras con un tono de burla.

En ese momento algo fue lanzado a los pies de Maiya desde la sombra de algún pilar.

Maiya apuntó inmediatamente su arma al objeto, y después de asegurarse que no fuera peligroso apuntó su arma de vuelta al lugar de donde el objeto fue lanzado. Pero aún así, Maiya usó su visión periférica para observar el objeto que había sido lanzado.

El cadáver de un animal pequeño.

Un murciélago. Y juzgando por la cámara CCD en su abdomen, este es definitivamente el familiar murciélago que Maiya mandó. Este es el que había dejado en la iglesia Fuyuki con el que había perdido comunicación.

Entonces sin duda, el que lanzó deliberadamente el cadáver del murciélago solo puede ser él. Y el oponente parece no tener interés en ocultarse otro momento más. Caminando lentamente desde atrás del pilar donde se ocultaba, se expuso al campo de vista y de disparo de Maiya.

El hombre en frente de él parecía lleno con autoridad y presión, vistiendo un hábito completamente negro. Maiya lo conoce.

“Kotomine, Kirei…”

“¿Oh? Esta debía ser la primera vez que nos encontráramos. ¿Así que cómo sabes quién soy yo? ¿Quizás es tu premonición?”

Dándose cuenta de su error, ella se arrepintió.

Kirei no mostró ninguna incomodidad enfrentando el arma de Maiya y continuó tranquilamente.

“Si eso es así, entonces definitivamente deberías saber acerca de muchas otras cosas, ¿cierto? Esta es una posición primordial para espiar el trigésimo segundo piso del hotel Hyatt de Fuyuki; ¿Quizás una persona muy importante viva allí?”

Esta vez Maiya quedó en silencio. Pero su mente estaba llena de sospechas: como un Maestro… Kotomine Kirei debería esconderse cuidadosamente, ¿Así que por qué escogería mostrarse aquí? ¿Cuál es su verdadera intención?

Por el otro lado, Kirei separó levemente su vista hacia afuera – ubicándose en el lugar en donde el hotel Hyatt de Fuyuki ahora es una pila de escombros. El fijo la mirada resueltamente por un rato y luego exhaló un largo suspiro.

“Aún así– ¿era realmente necesario destruir el edificio también? Al usar esta clase de tácticas, ¿Aún puede ser llamado un mago? O más bien, ¿Quizás él no debió haber sido considerado un mago en primer lugar?”

“…”

Este hombre– Maiya repentinamente estaba sorprendida– él sabe. Él sabe todo acerca de Emiya Kiritsugu. Tal como Emiya Kiritsugu sabe de Kotomine Kirei.

“Mírame divagando más y más aquí, dama. ¿Por qué no dices algo? – ¿Dónde está el hombre que debería estar aquí en tu lugar ahora?”

Después de que le preguntara eso, Maiya hizo un nuevo juicio de Kotomine Kirei. Este hombre en frente suyo debe morir.

Repercutió el ruido de los rápidos disparos de Maiya. Aunque la bala de calibre 9mm llamada bala militar tiene una buena capacidad para infligir daño, no tiene suficiente poder. Así que para matar efectivamente al oponente, la clave es disparar al área abdominal tres veces consecutivas. Comparado al pequeño punto fatal que puede provocar muerte instantánea, atacar la posición donde es fácil acertar e infligir daño puede ser más efectivo. Esta es la regla de matar al disparar.

Aún así, las balas de Maiya no acertaron a los órganos bajo el hábito, sino el duro piso de concreto.

Incluso si las acciones evasivas de Kirei fueran a una velocidad increíble, no podían ser más rápidas que la velocidad de las balas. Pero él determinó los pensamientos de Maiya antes de que ella jalara el gatillo y así actuó de antemano. Lo que es sorprendente es el juicio de Kotomine Kirei respecto a tácticas.

Predecir el momento de los disparos de Maiya y así esquivar las balas. Incluso en el campo de la taumaturgia esto va más allá de las capacidades de una persona promedio.

No solo eso–

En ese instante la persona que corría a esconderse no fue Kirei sino Maiya. Su mano derecha estaba manchada de sangre, y la pistola que debía estar empuñada en su mano cayó al suelo con un sonido metálico. Y sus ojos llenos de sorpresa se plantaron en el pilar en el que justo antes había estado apoyando su espalda. El agudo filo que impetuosamente sale del pilar brilla con una luz fría.

La delgada hoja, más larga que un metro, se asemeja a la de las armas usadas en esgrima; como espada, la empuñadura era muy corta. Esta es el arma de proyectil utilizada específicamente por los ejecutores de la Santa Iglesia, llamada la “Llave Negra”. Esto fue lo que cortó la parte trasera de la mano de Maiya y la hizo tirar su arma. Kirei había derribado el arma y esquivado la bala simultáneamente.

Aún siendo un arma lanzada con la mano, tenía suficiente poder para penetrar concreto reforzado. Aún así, solo hizo a Maiya soltar su arma y no poseía la intención de cobrar su vida. Para usar esa fuerza a propósito, él probablemente quiera quitarle el arma al oponente y destruir su moral. Es mejor capturar al otro vivo– después de todo, Maiya no ha respondido aún las preguntas de Kirei.

“Tus movimientos no están mal. Muy definidos.”

Kirei, que sostiene la iniciativa después de invertir completamente la situación de ataque y defensa, hablaba y caminaba despreocupadamente. Y una vez más apareció una Llave Negra en sus manos. La larga hoja de la Llave Negra es una forma semi-solida compuesta de prana, así que para llevarlas solo hace falta tener las pequeñas empuñaduras. Nadie sabe exactamente cuántas Llaves Negras se ocultan bajo el hábito de Kirei.

La Llave Negra, como parte primordial del equipo de los ejecutores de la Santa Iglesia, posee un gran poder, pero a la vez es muy difícil de usar. Alguien que es capaz de usar su poder tan hábilmente debe ser un gran experto. Y Maiya parece haber encontrado a ese raro experto ahora.

Maiya no es una guerrera, solo un soldado. Así, ella no tiene un registro de combate del que jactarse, solo el análisis del combate. La habilidad de combate de Kotomine Kirei obviamente sobrepasa por mucho a la suya. En esta situación en que ella no tiene equipamiento o un terreno ventajoso o tácticas, admitir su derrota es más sabio.

“¿Qué es Maiya? ¿Qué ocurre?”

La voz de Kiritsugu sonó en los audífonos. Parece que celular en su bolsillo aún se mantiene en contacto con Kiritsugu. Pero– Maiya no puede responder. Él puede oír la voz de Maiya. La meta de ese horroroso ejecutor no es Maiya sino Kiritsugu. El juicio de Kirei de que Maiya era la subordinada de Kiritsugu, realizando cada acción basada en las instrucciones de Kiritsugu, fue verificado del todo aquí.

“¿Qué anda mal? ¿No llamarás ayuda? ¿Emiya Kiritsugu está cerca, no es así?”

Kirei ya no tenía la más mínima duda cuando mencionó su nombre, porque él está convencido que su juicio es correcto. Si Kiritsugu quiere el Santo Grial, entonces el definitivamente actuaría esta noche.

Es fácil ver el efecto del maleficio de la Gáe Buidhe de Diarmuid. Ellos quedaron presos en una situación muy desfavorable con uno de los brazos de Saber inútil mientras los otros seis Sirvientes aún están en buenas condiciones. Para el grupo Einsbern el asunto más apremiante es eliminar al origen del maleficio, Lancer, tan pronto como sea posible.

Por eso Kirei tejió su red cerca de la residencia de Kayneth, esperando con calma a los que tenderán la emboscada.

Pero al final no encontró a Emiya Kiritsugu sino a alguien más. Aunque de todas formas Kotomine Kirei está seguro de que esta persona actúa en base a las instrucciones de Kiritsugu. Así que esta mujer que él enfrenta ahora es definitivamente la clave para encontrar a Emiya Kiritsugu.

No puede matarla; es mejor capturarla viva. En tanto la pueda hacer hablar, está bien.

Incluso si tuviera que romper sus brazos y piernas.

Después de realizar un juicio cruel en su corazón, Kotomine Kirei se aproximó al escondite de la mujer lentamente. El oponente debe estar desarmado. El rifle de asalto ya desarmado no puede rearmarse suficientemente rápido y la pistola se dejó caer muy lejos. Este encuentro ya ha sido decidido.

Pero lo que detuvo a Kirei fue un impedimento más allá de las expectativas de Kotomine Kirei.

Repentinamente un velo de humo blanco apareció entre él y su presa, obscureciendo su visión completamente, y con él, un olor irritante de reacciones químicas se apresuró dentro de sus fosas nasales.

“¿¡Pantalla de humo!?”

Lo que apareció repentinamente en frente de Kirei era una pantalla de humo liberada por una bomba de dispersión de humo de uso militar.

Y en el instante en que obscureció su vista, Maiya escapó con prisa.

Aunque Kotomine Kirei lanzó una Llave Negra en la dirección del ruido, no le dio al blanco. Su instinto de ejecutor que ha atravesado incontables batallas le dijo que no podía moverse imprudentemente en este predicamento.

Kotomine Kirei sostenía Llaves Negras en ambas manos, sin osar a bajar su guardia en lo más leve, y sondeó sus alrededores mientras esperaba que el humo se dispersara. En este edificio expuesto a fuertes vientos, solo tomó algunos segundos para que se disipara el espeso humo – pero esa mujer logró escapar en esos meros segundos.

Solo quedaba él. Dándose cuenta de que él era la última persona en el vacio edificio, Kirei gruñó y puso de lado sus Llaves Negras. No tenía ninguna intención de perseguirla.

Kirei levantó del suelo la bomba de dispersión de humo, ahora vacía, y comenzó a inspeccionarla. Es un modelo de granada Americana. No tiene nada especial al respecto; es simplemente algo que cualquiera puede obtener teniendo los contactos correctos.

No fue lanzado por esa mujer, porque si él hubiera notado que ella se hubiera movido en lo más mínimo él hubiera lanzado una Llave Negra para detenerla. Esto fue lanzado en frente de él por alguien que ayudó a esa mujer a escapar.

Por supuesto, no debería haber nadie más dentro del edificio. Si ese es el caso, entonces la granada de humo debe haber sido lanzada desde afuera del edificio.

Kirei caminó al borde del edificio – ignorando el viento tirando de su hábito – y miró abajo.

Alrededor de los escombros del pasado hotel Hyatt de Fuyuki, no hay algún edificio que pueda ponerse hombro a hombro con él más que este. La distancia desde el suelo a esta posición es de al menos unos ciento cincuenta metros. Sería difícil apuntar a esta posición con precisión aún con un arma de rango largo. Sin mencionar una granada de humo lanzada a mano. Sería un absurdo cósmico que alguien lanzara eso desde el nivel del suelo.

Pero después de todo Kirei era un ejecutor que ha casado a muchos magos extraños antes. Él ya estaba completamente acostumbrado a enfrentar a enemigos que estaban más allá del sentido común. Para él, este nivel de anormalidad no tenía nada que valiera sorprenderse.

En algún lugar bajo él está el mago que lo detuvo.

En tanto esto fue confirmado, entonces esta noche no había sido en vano.

Al mismo tiempo, Kirei sintió la respiración de la extraña forma encubierta detrás de él.

“¿Assassin?”

“Sí, soy yo.”

Assassin, que vestía una larga toga negra, se materializó arrodillado frente a Kirei. Este Assassin es uno de los tres que espiaban a Irisviel y Saber en el bosque, quien había sido encargado de traer la información obtenida.

“¿No te mencione que no te materializaras en interiores?”

“Lo lamento terriblemente, pero tengo cosas urgentes que reportar…”





-144:09:25[edit]

Luego de una noche de peleas a muerte consecutivas, un rayo de luz blanca apareció gradualmente en el cielo del este. En este momento Kirei estaba usando el comunicador mágico para establecer comunicación con la mansión Tōsaka en el distrito Miyama. Él y su padre Kotomine Risei se preparaban para llamar una reunión de estrategia de emergencia.

“¿Huh? ¿De verdad podemos seguir el rastro de Caster ahora inmediatamente?”

El elogio y la satisfacción de Tokiomi se revelaron en su tono. Los esfuerzos de Kirei y Assassin finalmente habían rendido los frutos que él quería. Aunque su Sirviente aún era un problema difícil, el bando de su aprendiz había avanzado sin problemas.

“Nuestro oponente es en realidad el Espíritu Heroico de un mago. A pesar de ser un Assassin, no dejó de serle difícil entrar desapercibido a su taller. Pero ahora estamos seguros de la posición aproximada del enemigo. En este momento Assassin lleva una vigilancia minuciosa al perímetro del área. Una vez que Caster salga de su taller, nos podemos enterar inmediatamente de sus actividades.”

“Lo que quiere decir que ¿Caster no se quedó en su taller, y opera activamente en el exterior?”

“Sí. Eso es porque…”

Recordando la reacción de Tokiomi cuando él dio su reporte la última vez, Kirei vaciló levemente. Las acciones de Caster y su Maestro pueden conducir a graves consecuencias.

“… Ambos fueron a la ciudad junto a Miyama y raptaron a los niños que dormían hasta su taller. Hasta que apareciera la luz del día, habían capturado unos 15 de ellos. Aunque casi todas sus operaciones se llevaron sin problemas, los padres de 3 niños los descubrieron y sobrevino una lucha. Eventualmente los dos mataron a la familia entera.”

Capaz de sentir claramente la furia de Tokiomi, Kirei continuó apresuradamente antes de que consiguiera responder.

“Caster usa magia sin pensarlo dos veces, y ni siquiera limpia el lugar después de eso. Ahora, bajo las instrucciones de mi padre, trabajadores de la Santa Iglesia están despejando los rastros que ellos dejaron en los escenarios. Como sea… me temo que incluso después de hoy, el comportamiento de Caster y su Maestro no cambiará de ninguna forma.”

“… ¡Pero qué demonios están pensando! ¿Qué tipo de persona es ese idiota? El Maestro de Caster.”

“De acuerdo a Assassin quien oyó sus conversaciones, antes de invocar a Caster ese Maestro había estado llevando a cabo asesinatos similares a estos. Aunque aún no podemos estar seguros, este sujeto es la misma persona que el asesino serial buscado.”

“…”

Tokiomi respiró furiosamente.

Desde este mes, se han reportado continuamente noticias del misterioso asesino serial- ‘El Demonio de Fuyuki’. Usando métodos brutales raramente vistos en estos años, él ha estado relacionado a 4 casos de asesinatos en la ciudad. Aún peor, en el último caso se ha dicho que ha matado a todos los miembros de la familia mientras dormían – un asesino extremadamente brutal. La policía de Fuyuki ha establecido una fuerza especial que ha reunido a las fuerzas policiales de la vecindad para terminar rápidamente con el caso. Como sea, no ha habido algún progreso en absoluto; ellos seguían en la etapa en que no pueden determinar los rasgos faciales del sospechoso.

Para Tokiomi, que algo tan serio ocurriera durante un Toque del Cielo sí que era un dolor de cabeza. Esto debería ser igual para todos los Maestros. El Toque del Cielo debe ser llevado en secreto. Esta es una regla solemne para todos los participantes. Alguien que atraiga tanta atención a este lugar no sería bienvenido.

Y más aún, cualquier mago es responsable de proteger ese noble credo. Quién sea que fuera, nadie le expondría la magia a la gente común. Todos investigaban su magia clandestinamente; aquellos que fallaban en proteger este secreto serían dejados muertos sin demora por la Asociación. En tanto algo fuera relacionado con el secreto de la magia, la Asociación de magos era firme y consumada al manejarlo. Es por eso que este asunto siempre ha puesto helada la sangre de los magos.

Digamos que hay un mago que aparece en los encabezados de las noticias de la comunidad casi diariamente; y que este Maestro es la marioneta de su Sirviente– esta era una situación críticamente alarmante.

“Acerca de esos dos, ¿Obtuviste alguna información detallada, reportes, o algo así?”

“Por como ellos se llaman el uno al otro, podemos incidir en que el nombre del Maestro es ‘Ryuunosuke’, mientras que Caster es conocido como ‘Barba Azul’.”

“¿Barba Azul? Entonces la verdadera identidad de Caster debe ser el Conde Gilles de Rais, ¿no es así?”

“Posible. Esta persona era muy famosa por la alquimia y la magia negra.”

Desde el punto de vista de su fama como leyenda, no es sorprendente que haya sido invocado por el Santo Grial como un Sirviente. Es solo que sus características son totalmente diferentes a las de un Espíritu Heroico. Es más adecuado llamarlo un ‘espíritu vengativo’.

“A partir de sus conversaciones, como Maestro, Ryuunosuke no tiene ningún conocimiento previo sobre el Toque del Cielo. Poniendo eso de lado, él ni siquiera es consciente de que es un mago.”

Eso es muy posible. Bajo situaciones accidentales, es imposible para alguien sin ningún tipo de enseñanza en magia que establezca un contrato con el Sirviente invocado… Ese Maestro sería el títere del Sirviente.”

“Pero, eso es…”

Recordando de lo que había oído a través de los oídos de Assassin, Kirei continuó:

“… Sin importar que, las palabras y acciones de Caster están más allá del límite del entendimiento normal. Él se mantiene diciendo cosas como que el Santo Grial ya es suyo; debo rescatar a Juana de Arco – cosas que no llevan ningún sentido en absoluto.”

Como si tratara de ventilar toda la ira en su corazón en un solo respiro, Tokiomi dejó salir un profundo suspiro.

“¿Un Sirviente descontrolado debido a su desorden mental y un Maestro completamente desamparado frente a la situación? ¿Pero por qué demonios escogió el Santo Grial a tales idiotas?”

Sirvientes atacando a seres humanos – eso en sí no es algo anormal. Para seres espirituales que se alimentan de prana para existir, los Sirvientes no solo adquieren restauración de su prana a través de sus Maestros. Ellos también pueden lograr energía absorbiéndola del espíritu de los seres humanos. Los Maestros que son incapaces de proveer prana suficiente a sus Sirviente deben hacer ceremonias de sacrificios para compensar por el prana insuficiente.

Incluso en el Toque del Cielo, casos como ofrecer sacrificios estaban dentro de las expectativas de Tokiomi. Esto no es algo de lo que se pueda culpar. Los magos en sí son existencias más allá de las reglas comunes. Ellos pueden ignorar la moral y los preceptos usuales de lo correcto e incorrecto. Si ellos tienen que sacrificar a gente inocente, en tanto sea encubierto y hecho en secreto, se ofrece una silenciosa aprobación.

Pero asesinatos insensatos como estos que causan tal conmoción – este comportamiento jamás es permitido.

“No puedes dejar que este asunto continúe libre, ¿o no? Tokiomi-kun.”

Con una apariencia disgustada intervino el Padre Risei.

“Las acciones de Caster y su Maestro claramente han obstruido el progreso del Toque del Cielo. Esto es contra las reglas.”

“Por supuesto. Como alguien cuyo previo trabajo fue proteger el secreto de la magia, no los dejaré libres.”

Por generaciones la familia Tōsaka siempre ha sido el guardián del secreto en el área de Fuyuki. Administrando las líneas de esta tierra y monitoreando cualquier suceso anormal aquí – esta es la responsabilidad confiada a ellos por la Asociación de Magos. Esta es también la razón de que los Tōsaka, como una de las ‘tres familias del inicio’, ofrecieran este lugar bajo su cuidado como el escenario para el Toque del Cielo.

Como un Maestro cuya meta es adquirir el Santo Grial y también como el guardián de esta tierra, Tokiomi realmente debe detener las acciones de Caster.

“Me temo que ellos también están tras las continuas desapariciones de los niños tras los 4 casos de asesinato.”

Kirei reportó su parecer mordazmente.

“Hay solo 17 niños reportados como perdidos. Si tomamos en cuenta la situación de la vigilancia de esta mañana, y si incluimos los otros que han capturado, el número de niños desaparecidos deberían ser al menos 30. Sus acciones solo se intensificarán, me temo. Padre, debemos detenerlos tan pronto como sea posible.”

“Sí. Ya va más allá del grado en que las advertencias y los castigos son efectivos. La única manera que resta es destruir a Caster y a su Maestro.”

“Pero el problema es que para combatir a un Sirviente, debemos fiarnos de un Sirviente. Y de cualquier manera, mi Assassin no puede llevar a cabo ninguna acción.”

Las observaciones de Kirei tenían perfecto sentido. El propósito de Assassin era específicamente cumplir planes clandestinos, ¿y cómo podría permitirse aparecer de nuevo tan rápidamente?

El Padre Risei contempló esto por un momento en silencio. Él le sugirió a Tokiomi:

“Está dentro de mi jurisdicción como supervisor alterar las reglas levemente. ¿Qué tal si ponemos a un lado la lucha por el Santo Grial primero? Reunimos a todos los otros Maestros para que vayan contra Caster. ¿Qué tal?”

“¿Huh? Entonces… ¿Qué tienes en mente, Padre?”

“Yo puedo brindar cierta ayuda para las futuras batallas a quien consiga erradicar al Maestro de Caster. Tener el resultado de tener el Toque del Cielo completamente desbaratado solo por el frenesí de Caster… dudo que los otros Maestros quisieran que ocurriera.”

“… Oh, ya veo. Cambiar el objetivo de este juego a una cacería. ¿Es eso correcto?”

Teniendo en cuenta a la Sirviente que fue herida en la desordenada pelea de anoche, ninguno de los Sirvientes ha sido asesinado aún. Así que si todos cambian su objetivo a Caster, su vida pendería de un hilo. Tal como una vela encendida en un huracán, la suerte de Caster estaría lista para extinguirse en cualquier momento.

“Pero la condición de premiar algún beneficio a quien derrote a Caster…… ¿No se volvería contra nosotros? ¿No nos impediría eventualmente obtener el Santo Grial?”

Sonriendo respondió Padre Risei:

“Por supuesto que no es bueno que alguien más adquiera los beneficios. Pero el único que podría darle el golpe final a Caster, arrinconado por los perros sería Archer.”

“… Ya veo. Eso es obvio.”

En tanto el Assassin de Kirei esté presente, será demasiado fácil arreglar el tiempo certeramente para que Archer retribuya el tiro final. Aunque las reglas estaban alteradas ahora, las tácticas y habilidades de batalla del grupo Tōsaka seguían inmutadas.

“Entonces prepárate para reunir a todos los Maestros.”

Después de decidir qué hacer, el Padre Risei se levantó y abandonó la cámara subterránea. Justo cuando Kirei estaba por pararse fue detenido por Tokiomi.

“… Oh sí, Kirei-kun. Oí que dejaste la Iglesia Fuyuki para actuar por tu cuenta anoche.”

Kirei había anticipado la pregunta de Tokiomi. En la superficie, el aprendiz de Tokiomi ya ha sido derrotado en el Toque del Cielo y estaba actualmente bajo la protección de la iglesia. Así que él no debería estar haciendo nada de nada.

“Lo lamento mucho. Yo sé también que esto es muy riesgoso, pero había descubierto un espía en la vecindad de la iglesia. Así que debía hacer algo al respecto–“

“¿Espía? ¿Eres tú su objetivo, que eres parte de la Iglesia?”

Tokiomi sonó mucho más estricto.

“Por favor no te preocupes al respecto. Ya he destruido al espía. Ningún secreto se filtrará.” Respondió Kirei con una voz despreocupada.

Kirei se sorprendió hasta a sí mismo de su calma dirigiéndose de frente a su Maestro.

“¿Por qué no usaste a tu Sirviente?”

“Sentí que era algo trivial. Assassin no era requerido.”

Luego de un momento de silencio, Tokiomi comentó levemente disgustado.

“… Tú eres verdaderamente un Ejecutor altamente capacitado, y también sé que tienes fe en tus habilidades. Pero basados en la situación actual, ¿no estás siendo muy descuidado en tus acciones?”

“Tienes razón. Me batiré cuidadosamente la próxima vez.”

Kirei mintió de nuevo.

De ahora en adelante Kirei probablemente iría al campo de batalla unas cuantas veces más a seguir el rastro de Emiya Kiritsugu hasta que lo encuentre.

Kirei esperó hasta que el comunicador estuviera en completo silencio antes de abandonar la cámara subterránea.

Tan pronto como Kirei abrió la puerta de su habitación en el primer piso de la casa él sintió un desbalance como si hubiera entrado en la habitación incorrecta.

No era ni el cambio de aroma ni el cambio de temperatura en el cuarto. En conjunto, él sintió un gran cambio en la sensación en conjunto de la habitación. Su corriente habitación había emanado súbitamente una sensación lujosa y elegante como la de un palacio.

No había diferencia en la colocación o la iluminación de la habitación. La única diferencia era un hombre que estaba sentado en la banca en el medio de la habitación, totalmente ignorante de todo lo demás.

Este intruso, que asumió la habitación de otro sin razón, es alguien que sorprendió un poco a Kirei. Sobresaltado, Kirei frunció el ceño.

“… ¿Archer?”

Con cabello dorado parado derecho como una llama y un par de ojos del rojo de un rubí, este hombre en frente de él no era otro que el Sirviente de Tōsaka Tokiomi, el Rey de los Héroes, Gilgamesh. Como sea, en vez de vestir su armadura dorada original, este Espíritu Heroico vestía un conjunto moderno de una chaqueta de cuero con pelaje y pantalones de cuero a la moda.

Desde que fue invocado, este Sirviente había estado deambulando despreocupadamente por su habilidad de Acción Independiente. Pero, habiéndose cansado de desfilarse a sí mismo en forma espiritual, Archer decidió vestirse a sí mismo en ‘atavíos de juego’ para tomar su forma física a su antojo para pasear en las calles de noche. Aunque ya había oído de las idiotas acciones de Archer de parte de Tokiomi, Kirei nunca imaginó que Archer aparecería en su cuarto.

Aparentemente, Archer no estaba avergonzado en absoluto de entrometerse en las habitaciones de otras personas. Poniendo eso de lado, él incluso había sacado una botella de vino tinto del armario y se había servido a sí mismo una copa. Elegantemente, Archer sorbió el vino.

“A pesar de ser pocos en número, comparado con la colección de Tokiomi, la tuya tiene más clase. Que presumido aprendiz.”

“…”

Aún a oscuras sobre la razón de la visita de Archer, Kirei miró a la corrida de botellas vacías de vino en la mesa.

Parece que Archer ha probado todo el vino escondido de Kirei.

Aunque inicialmente es sorprendente, si uno lo evalúa no lo hallaría extraño. Kirei tenía este hábito de que cada vez que oye de un vino de extraordinaria calidad lo compraría inmediatamente.

El estudio del vino es en realidad un gran mundo sin bordes si uno desea seguirlo. El vino puede llenar el vacío de un corazón a través de su sabor. Cuando te sientes vacío por dentro, emborracharse con alcohol no es tampoco una mala idea.

Kirei pensó estas ideas en un callejón sin salida, medio-seriamente.

De cualquier manera, él nunca había probado ni una sola vez el vino. Todo lo que él hacía era incrementar el número de los deliciosos vinos. Kirei ni siquiera pensaba en servirlo a sus invitados.

En tanto a este borrachín que casualmente bebe el vino escondido de otros, sin importar cuanto lo elogiara, Kirei no tenía ninguna actitud de bienvenida hacia él.

“¿Qué quieres?”

Frente a esta franca pregunta, Archer alzó su copa de vino y miró significantemente a Kirei.

“Parece que quienes están aburridos no se limitan solo a mí.”

“¿Aburrido?”

Oyendo su respuesta, Kirei entendió el significado detrás de esas palabras inmediatamente.

Aparentemente, este Espíritu Heroico había sabido lo ocurrido anoche – Kirei desobedeció las ordenes de Tokiomi de quedarse en el lugar y se aventuró por sí solo. Aunque Kirei no estaba seguro desde cuando lo supo Archer.

“¿Qué anda mal, Kirei? ¿Tú también te sientes insatisfecho de solo obedecer las órdenes de Tokiomi?”

“… Y, ¿tú aún estás descontento con tu contrato, Gilgamesh?”

Evadiendo la pregunta de Archer, Kirei preguntó de vuelta en un tono disgustado. Aunque él es el mítico ‘Rey de los Héroes’, Kirei no lo veía como alguien a quien temer. A pesar de los comentarios de Tokiomi, un Sirviente sigue siendo un Sirviente. Sin importar quien sea este Espíritu heroico, él es aún el Sirviente Archer, una existencia perteneciente a Tokiomi. Comparándolo a él con Kirei quien es el aprendiz de Tokiomi, su condición es casi la misma. No hay necesidad de preocuparse mucho por él.

A Archer no le preocupaba mucho su actitud. Él meramente bufó y tomó otro sorbo de su vino.

“El que me invocó aquí y me ha estado proveyendo con prana es Tokiomi. Así que sin importar que, yo aún debo tratarlo con la ceremoniosidad de un sirviente.”

Después de esta sorprendente declaración una tajada de niebla melancólica brilló en los rojos iris de Gilgamesh.

“Pero hablando francamente, él es un hombre realmente aburrido, completamente falto de aspectos interesantes.”

“… Esas palabras no deberían venir de ti, un Sirviente.”

Desde su asombrado corazón, Kirei sintió una leve oleada de ira por el descortés comentario de Archer hacia su Maestro. Al mismo tiempo, sintió que tenía una vaga idea respecto a por qué Archer lo vino a visitar. En esta atmosfera más relajada, Kirei había gradualmente aceptado la presencia de Archer en su cuarto.

“¿Son en realidad mundanas? Las ordenes de Tokiomi-shi.”

“Huh… Realmente insignificantes. Queriendo conseguir el omnipotente dispositivo concede deseos, ¿’Akasha’? Qué inútil deseo.”

La única cosa que cada mago anhela incluso en sus sueños; así de fácil lo tomaba a risa. Pero Kirei era capaz de sentir empatía con él.

“El anhelante deseo por la ‘raíz’ es algo que cada mago tiene. Cualquier espectador no sería capaz de comprenderlo.”

“Si eso es así, tú eres uno de esos espectadores también, Kirei. Por lo que yo sé, antes de esto, tu posición es una opuesta a los magos, ¿cierto?”

Archer aparentemente había oído de la complicada postura de Kirei. Aunque él siempre viste un aire de altivez, su habilidad de recoger información es increíblemente aguda.

Kirei cruzó sus brazos, inmerso en su pensamiento. En lugar de cómo el aprendiz de Tōsaka Tokiomi, si él mira las cosas desde el lugar del representante de la Asamblea del 8vo Sacramento, ¿cuál es el propósito del Toque del Cielo de Tokiomi?

“… Se puede decir que el camino que lleva a la ‘raíz’ lleva al ‘exterior’ del mundo. Lo que quiere decir que no traerá ningún efecto al ‘interior’, que es este mundo. Para la Iglesia, que solo se enfoca en el ‘interior’, la búsqueda de los magos es en todo sentido inútil. Solo podemos tomar sus acciones como un plan sin significado.”

“Oh, ya veo. Parece que yo soy el único interesado en las cosas relacionadas a este universo, que también es mi jardín.”

Hablando como si poseyera el universo… Tener una actitud tan arrogante verdaderamente se acomoda a su condición del ‘Rey de los Héroes’.

“No estoy interesado en los territorios que no puedo dominar. Es por eso que no me interesa esa cosa de la ‘raíz’ en lo más mínimo.”

Kirei sonrió amargamente. En otras palabras, esta postura de Archer va contra todos los otros magos. Es por eso que es razonable para Tōsaka Tokiomi, un típico mago, se sienta desamparado con alguien como Archer.

“Si el Santo Grial de Fuyuki es solo un dispositivo especial que va tras la ‘raíz’, sin importar cuán violentamente los magos peleen por él, creo que la Santa Iglesia solo los ignoraría. Desafortunadamente, la habilidad del Santo Grial para cumplir deseos es ‘omnipotente’. Tiene un misterioso poder ilimitado capaz incluso de cambiar el ‘interior’ del mundo. Si un poder tan grande cayera en las manos equivocadas, se volvería una existencia que amenaza nuestra fe. Esta es la razón por la que la Santa Iglesia escogió a Tōsaka. En lugar de ignorar este asunto y dejar que el Grial cayera en las manos equivocadas, es mejor si es desperdiciado en un ‘deseo aburrido y sin significado’… Pero tengo la impresión de que mi padre tenía otros propósitos en el principio.”

“Lo que quieres decir es que, ¿los otros Maestros pelean por el Santo Grial por razones diferentes a la de Tokiomi?”

Kirei asintió en respuesta a la pregunta de Archer.

“Mientras Tokiomi es el típico mago, él es también uno de los más de derecha. En esta era, la gente que persigue la magia pura como él ya no existen. Todos los otros persiguen los privilegios de las riquezas mundanas. Prestigio, deseos, poder… todos estos son deseos que pueden ser satisfechos ‘dentro’ del mundo.”

“¿No es eso genial? Esas son todas mis cosas favoritas.”

“Tú no eres sino un rey que reinó sobre esta gente ordinaria, Gilgamesh.”

Negándose a responder, Archer meramente rió y terminó su delicioso vino en un solo sorbo. Según la evaluación de Kirei, él no se sentía insultado en absoluto.

“¿Y qué hay de ti? Kirei, ¿Qué deseo quieres satisfacer al poner tus manos en el Santo Grial?”

Frente a una pregunta tan directa, por la primera vez, Kirei vaciló.

“Yo…”

Ciertamente. Esta es la pregunta más fundamental de todas. ¿Por qué están los Sellos de Comando grabados en la mano izquierda de Kotomine Kirei?

“Yo… no tengo ningún deseo en particular.”

Frente a la vaga respuesta, las rojas pupilas de Archer emanaron un coqueto brillo.

“¿Cómo puede ser posible eso? ¿Yo pensé que el Santo Grial solo invocaba a aquellos con deseos?”

“Debería ser así. Pero… yo tampoco estoy seguro de la razón. ¿Por qué me escogería el Santo Grial? A alguien sin un ideal que cumplir; alguien sin ningún anhelo que satisfacer… ¿Por qué soy elegido?”

“¿Es algo que valga tal frustración?”

Notando su profunda mirada, Archer no pudo evitar reír estrepitosamente.

“Si no es por algún deseo o ideal, ¿no sería suficiente con buscar placeres?”

“¡Maldito!”

La furia de Kirei básicamente era creada inconscientemente.

“¿Quieres que yo, un discípulo de Dios, busque placeres?... ¿Cómo puedo cometer un acto tan pecaminoso que solo me condenaría?”

“¿Acto pecaminoso? ¿Condenar?”

Mirando a la seria expresión de Kirei, Archer sintió más sentido en esas palabras. Sin llevar ninguna buena voluntad, Archer se rió de él.

“Huh. Ese fue un salto en la lógica, Kirei. ¿Por qué correlacionaste el placer con el pecado?”

“Eso es porque…”

Kirei no podía responder. Y Kirei también estaba inseguro en cuanto a cómo terminó en una situación tan incómoda, algo que él nunca había experimentado antes.

Con el silencio de Kirei, Archer se volvió crecientemente más lleno de sí mismo y comentó:

“Adquirir placer por medio de pecados está ciertamente mal. Pero los humanos si adquieren felicidad a través de virtuosos medios. Si tú dices que el placer en sí es pecado, ¿Tiene acaso algún sentido?”

Una pregunta tan elemental, y aún así ¿por qué combatía tanto para poder responder? La razón eludía a Kirei. Él sentía como si una indiferente intranquilidad estuviera encerrada en un desconocido territorio profundo en su corazón.

“… ¿Qué placeres? Ni siquiera los tengo. Es por eso que no los buscaré.”

Finalmente abriendo su boca, Kirei respondió con una voz en absoluto distinta a la de él, inseguro y vacilante – como si no pudiera encontrar la respuesta y simplemente saliera con una frase para enfrentarlo.

Archer lo escrudiñó, y después estallo en carcajadas.

“Kotomine Kirei, repentinamente he encontrado un nuevo interés en ti.”

“… ¿Qué quieres decir?”

“Solo bromeo. No me escuches.”

Vertiéndose a sí mismo otra copa de vino tinto, se reclinó en el sofá, hablando estrepitosamente.

“La felicidad es una parte esencial en el alma humana. No hay una distinción de un ‘si’ o un ‘no’. Solo cuenta si ‘estás’ o ‘no estás’ al tanto. Kirei, solo has fallado en encontrarlo en las profundidades de tu corazón. Para experimentar la felicidad, eso es lo primero que se debe hacer.”

“Ocúpate de tus propios asuntos, Sirviente. Tratando de educarme…”

“Esta no es una educación ordinaria. Es aquella obtenida por un rey que ha experimentado todos los lujos y los placeres del mundo. Escucha cuidadosamente.”

A pesar de haber dicho eso, Kirei estaba en realidad analizando meticulosamente todo lo que Archer decía.

Por alguna razón, esas arrogantes palabras enviaban ondas por sus nervios.

“Kirei. Primero que todo, tú tienes que entender algo acerca de esto llamado entretenimiento.”

“¿Entretenimiento?”

“U-huh. Limitar tus aspectos a solo el ‘interior’ no es el camino correcto. Debes ampliar tu horizonte… Oh sí. Empecemos dejándote experimentar mis entretenimientos. ¿Qué tal suena eso?”

“Para el ‘yo’ de ahora, no hay algo como ‘tiempo para entretenimiento’.”

Yo soy diferente de ti, pensó Kirei silenciosamente.

“Oye, no digas algo así. Después de cumplir las tareas de Tokiomi tendrás mucho tiempo, ¿eh? Tu deber es despachar espías para monitorear los movimientos de los otros cinco Maestros, ¿cierto?”

“… Estás en lo correcto.”

“En ese caso, no solo deberías entender sus intenciones y estrategias de batalla. ¿Qué tal si también buscas sus razones para buscar el Santo Grial y me haces enterar sobre ellas? ¿Eso no es algo muy arduo para ti, no es así?”

Ciertamente, este tipo de investigación no divergía mucho de la que le asignaba Tokiomi.

Assassin que observaba la vida diaria como su objetivo podía fácilmente registrar sus conversaciones. Con analizar el contenido de sus diálogos, la razón por la que ellos pretendieron el Santo Grial podía ser deducida fácilmente. Todo lo que debía hacer era pedirle a Assassin que prestara atención extra a este tipo de conversación.

“… Pero Archer, ¿Por qué quieres saber esas cosas?”

“Lo mencioné antes, ¿no es así? Estoy interesado en el comportamiento de los seres humanos. Y entre los que pelean por el Santo Grial debe haber uno o dos Maestros interesantes, ¿cierto? Al menos más interesantes que Tokiomi.”

Kirei trató de refrescar su cabeza y pensar racionalmente. Él solo había visto a Emiya Kiritsugu con interés, ignorando completamente al resto. Además, él no tenía ninguna obligación de estar de acuerdo con la petición de Archer. Como sea, si él pudiera conseguir algo de influencia sobre este Sirviente que estaba completamente fuera del control de Tokiomi, quizás eso podría traer efectos positivos para el bando de Tokiomi en el futuro.

“… De acuerdo, Archer. Te lo prometo. Pero tomará un tiempo.”

“Ningún problema. Tengo paciencia para esperar.”

Después de terminar nuevamente en vino tinto Archer se levantó del sillón. Sus movimientos no solo provocaron que el aire se sacudiera/flaqueara levemente; el brillo dentro del cuarto fluyó/se adecuó con él también. Este Espíritu Heroico que controlaba todas las creaciones de la Tierra parecía emanar un invisible resplandor de su cuerpo entero.

“Ah, y vendré nuevamente a probar tu delicioso vino. Tu colección puede competir incluso con los vinos celestiales. Dejarlos reuniendo polvo en la alacena de un monje es un gran desperdicio.”

Inexpresivo, Kirei ni consintió ni disintió. Quizás Archer tomó su silencio como consenso. Luciendo una sonrisa satisfecha, dejó la habitación.

Justo después que Archer partiera, la majestuosa atmósfera dejó el cuarto también; reemplazándola la mundana atmósfera del cuarto.

Finalmente solo, Kirei comenzó a meditar sobre la extraña conversación que había sostenido con el extraño visitante.

Era la primera vez que había tenido una conversación de uno a uno con Archer.

Y pensándolo bien, sean Sirvientes o Maestros, todos ellos pelean con todo lo que tienen en este Toque del Cielo para satisfacer ciertos deseos– salvo ese incontrolable Rey de los Héroes que aparentemente no está interesado en el Santo Grial en absoluto. Entre los Sirviente reunidos en Fuyuki, él debía ser aquel con la menor voluntad de pelear. Desde este punto de vista, parecía que él compartía los mismos sentimientos con Kirei – él debía ser el único Maestro que participaba en el Toque del Cielo sin razón.

No, quizás la razón aún existía, solo que Kirei aún no la había descubierto. Debía haber un anhelante deseo por que el Santo Grial lograra ciertos milagros, quizás en algún profundo lugar en su corazón.

De todas formas, está definitivamente no es la ‘felicidad’ de que Archer habló.

Él que sabía la respuesta no era Archer; es alguien más.

La persona en cuestión es Emiya Kiritsugu. Todo estaría resuelto si la conversación de ahora hubiera ocurrido entre él y Emiya Kiritsugu, pensó Kirei.

Por supuesto que sus posiciones eran completamente diferentes. Por eso ellos hubieran discutido usando sus armas en vez de sus palabras. Pero aún en ese caso estaría bien, ya que Kirei solo había querido pelear con esa persona llamada Emiya Kiritsugu; una conversación entre hombres.

En cuanto esos pensamientos cruzaron su mente, Kirei recogió las botellas vacías de vino que habían sido lanzadas por Archer.





-140:41:54[edit]

En la escena del colapsado hotel Hyatt de Fuyuki el equipo de rescate trabajaba impetuosamente a lo largo de la noche.

Después de que se perdiera el efecto de la magia de Kiritsugu el personal de evacuación descubrió que aún quedaban dos Vips en el edificio cuando colapsó.

Como ellos estaban en el piso más alto del hotel cuando ocurrió el incidente, los rescatistas perdieron todas las esperanzas de encontrarlos vivos. Aún así, sus cuerpos debían ser encontrados antes de que finalmente tiraran la toalla. En la movilización bajo el brillo de la luz del día, los rescatistas rápidamente despejaron todos los escombros en la escena usando excavadoras.

En el amanecer del día siguiente, el equipo de rescate que trabajó arduamente a lo largo de la noche estaba exhausto. En ese momento algo extraño ocurrió.

“¿Dices que encontraste algo extraño?”

Esto fue seguido por la inmediata llegada del jefe del equipo de rescate a la escena. De acuerdo a los trabajadores, habían encontrado una esfera de plata de unos tres metros de diámetro entre los escombros. Sin importar como lo examinaran, no parecía como parte de los materiales de la construcción de ninguna forma. Fuera de la nada, solo había aparecido en medio de los escombros.

“… ¿Viene del edificio? ¿Alguna de las decoraciones del restaurant giratorio del piso superior?”

“Incluso si ese fuera el caso, esta cosa está perfectamente intacta. ¿No es extraño?”

Tras una observación más profunda, su superficie ciertamente no tenía rastros de daño en absoluto. Reflejando la brillante luz como un espejo, parecía como si recién hubiera sido pulido.

“¿Por qué… no pareciera como mercurio?”

El desconcertado jefe expuso sus pensamientos mientras tendía su mano en la superficie de la esfera.

Con el primer contacto, sorprendentemente, la esfera se hundió hacia dentro.

“?”

En cuanto el perplejo jefe lo vio en un análisis más cercano, se dio cuenta de que él no había presionado hacia dentro– él meramente lo había tocado.

“¿Jefe?”

“…”

Sin notar nada extraño, los rescatistas alrededor pusieron una confundida expresión y miraron a su jefe con una apariencia helada.

“¿Pasó algo?”

“… debemos quitar esta cosa de este lugar.”

“¿Huh?”

“… Usa el camión para llevarlo lejos. Apúrate.”

Repentinamente el jefe parecía inusualmente tranquilo. Con una voz serena instruyó a los trabajadores para que actuaran rápido.

Aunque los trabajadores seguían un poco perplejos, ellos sabían que el objeto de origen desconocido ante sus ojos debía ser removido de la escena inmediatamente. Así ellos levantaron sin demora a la esfera hacía la parte trasera del camión.

“¿Huh? ¿Dónde está el jefe?”

Un miembro bruscamente se dio cuenta de que el jefe que los había estado supervisando hace solo unos segundos, había desaparecido. Y desde atrás de las espaldas de los ocupados rescatistas, se oía el sonido de un motor partiendo.

En el asiento del piloto del camión, lentamente sacando al camión de la escena, estaba el jefe de los rescatistas sin expresión. Pero cuando los rescatistas notaron esto ya era muy tarde. El camión que sacó la esfera plateada se había desvanecido entre las calles en la luz del amanecer.

Cinco horas más tarde, en las afueras de la ciudad, una patrulla de policía descubrió al camión perdido con el jefe aún sentado en el asiento del piloto, inconsciente. Como sea, el camión que había transportado la esfera plateada en su parte trasera había sido dejado como un cascarón vacío.


※※※※※

“…”

“…”

“… Disculpe, ¿Es esta la casa de los Mackenzie?”

“Sí. Ese es el nombre del dueño de la casa.”

“… Entonces, ¿quién es?… ¿Señor Rey de los Conquistadores, Alejandro…?”

“Yo soy él.”

“… Ah, ah. Err… ya veo. Ah, haha… ah. ¿Entonces podría firmar aquí?”

“¿Firmar? De acuerdo… ¡hecho!”

“Muchas gracias. Pe-perdón por la molestia.”

“Hmm. No hay ningún problema.”

Waver Velvet estaba muy acostumbrado a permanecer en la habitación del segundo piso de la casa de Glen Mackenzie como si fuera su propia casa, y ahora despertaba de su sueño.

El sol se había levantado completamente. Tratando el día como un día festivo, estaba tendido ociosamente en la cama, rehusando a levantarse. No debería doler si siguiera recostado así, ¿cierto?

Todo lo que ha pasado hasta ahora ha sido como un sueño. El inigualable enfrentamiento a muerte y la destrucción.

Pero los Sellos de Comando grabados en la parte trasera de su mano izquierda le recordaron a Waver que este no era un sueño.

Como el maestro de Rider, Waver ha presenciado la fiera batalla entre Sirvientes anoche – ese un hecho irrevocable.

En ese momento, por la primera vez en su vida, este joven entró en el campo de batalla, por la primera vez, vacilando entre la vida y la muerte.

Agitación, horror; él jamás los había sentido antes con tanta fuerza.

Como sea, lo que quedaba en su corazón en este momento… no eran sensaciones relacionadas con el miedo. Sino que impulsos llenos de goce y emoción surgían de su corazón.

Waver no tuvo ningún logro anoche – cada acción fue decidida por Alejandro solamente. Como Maestro él solo había estado junto a su Sirviente, atestiguando todo desde el lado. Aún peor, él se desmayó en el clímax de la batalla, volviéndolo incapaz de presenciar el resultado final de la pelea.

De todos modos, Waver aún sentía que había sido una batalla muy significativa. Las cosas y valores que él obtuvo de ella, parecía que solo él lo comprendía.

“… ni siquiera atreviéndote a mostrarte frente a mí, cobarde; no eres digno de ser mi oponente para nada…”

Esas palabras iban dirigidas al Maestro de Lancer. Lord El-Melloi, alguien que Waver odiaba y temía, fue mofado por Rider como un cobarde.

Pero el valor que Rider sostenía con orgullo era meramente idiotez imprudente en los ojos de Waver. Si él hubiera sido el que planeara la estrategia de batalla, él hubiera dejado a su Sirviente cruzar espadas en el campo de batalla, mientras él como Maestro se hubiera ocultado detrás de la cortina para observar el progreso del combate – lo que era la misma táctica de Kayneth. Esto es lo que la gente llama estrategias de batalla propiamente como tales.

Pero…

“… el hombre que merece ser mi Maestro debe ser un guerrero que monta conmigo hasta el campo de batalla…”

Por supuesto que Waver no era el tipo de persona que cargaría hacia el enemigo junto a Rider. Escondido del lado del puente, él en realidad estaba tan aterrorizado que trepó en el carro solo queriendo escapar inmediatamente. Como sea, esta reacción había sido confundida por un acto de valor.

No obstante, en este momento no debía seguir persiguiéndose más por esas cosas.

Sin importar cuales fueran sus razones, Waver podía aún recordar claramente el contacto de la mano de Rider en su hombro – tan amplia, tan fuerte.

“Sí. Este tipo de persona ES mi Maestro.” Rider le había dicho eso a él.

Comparado a Lord El-Melloi – el prodigioso, famoso catedrático, alguien a quien Waver no le podía llegar a las suelas de los zapatos, Waver era mucho superior entonces.

Su valor finalmente había sido reconocido – y pensándolo, esta era la primera vez que alguien reconocía su capacidad.

Aunque los halagos y las calumnias son cosas insignificantes, para este joven que nunca había sido halagado por nadie antes, serlo era algo realmente excitante.

Esa es la razón porque Waver está en el séptimo cielo ahora. Sin importar cuanto lo intentara no podía contener su emoción.

Aunque su Sirviente no lo trataba con la cortesía exigida por un Maestro y siempre había llamado a Waver por su primer nombre, aún así, sin importar que tan irrespetuoso fuera este obstinado, Waver al menos se debería sentir agradecido hacia él. Después de todo, Rider había sido el primero que lo valorara.

“…”

Torturado por sus complicados pensamientos, Waver hundió su cabeza bajo las sábanas. Desde hoy en adelante, ¿qué actitud debería llevar cuando trate con su gigante Sirviente?

En ese momento, Waver repentinamente se dio cuenta de que los usuales ronquidos detrás de sus oídos en las mañanas estaban ausentes.

Waver levantó su cabeza de las sábanas y descubrió que Rider que usualmente duerme en la cama, no estaba ahí. Para alguien que aborrecía la forma espiritual, él no podía simplemente cancelar su forma física y cambiar a forma espiritual sin alguna buena razón. Además, incluso si se hubiera desmaterializado, como su Sirviente, es imposible para Waver no sentir nada de su presencia en absoluto. Así que solo hay una posibilidad – Rider no está en la casa.

Waver empezó a pensar calmadamente. Él había dormido más de la cuenta en la mañana; así que no era raro que Rider se levantara más temprano que él.

Como sea, el problema en cuestión es que Rider no estaba en la casa, lo que significa que Rider iba a otros lugares sin el permiso de Waver–

Desde las escaleras del pasillo se pudieron oír pasos subiendo la escalera.

A partir de lo pesado de los pasos, Waver podía decir que era Rider, sintiéndose un poco aliviado. No obstante, al reconocer el significado de esos pasos tan pesados, Waver palideció inmediatamente.

“Oh, ¿Así que estás despierto, eh? Niño.”

La voz de Rider fue acompañada por su enorme torso que apareció en la puerta. Y considerando la espesa armadura que estaba vistiendo… Aunque Waver se había acostumbrado a estos extraños sucesos, él aún lo encontraba algo extraño e inimaginable. Si esta escena extremadamente inusual fuera vista por la pareja Mackenzie, él temía que la hipnosis que había lanzado en ellos se nulificaría muy rápido.

Por eso Waver había, con algo de dificultad, conseguido convencer al Sirviente que derechamente se negaba a desmaterializarse, a permanecer en el segundo piso y no estar dando vueltas a su antojo… Al menos, ese era el caso, hasta esta mañana.

“… Tú… ¿bajaste las escaleras vestido así?”

“No te asustes, ¿de acuerdo? La vieja pareja de esta casa salió temprano en la mañana. Así que estamos solo los dos. Bajé para recibir el paquete de correo expreso.”

Parece que Rider también sabía que debía dar su mejor esfuerzo por no ser visto por la pareja Mackenzie. Waver, que estaba levemente aliviado por esto, súbitamente notó que algo faltaba. Nerviosamente, él examinó al gigante de pies a cabeza.

En las manos del gigante había un pequeño paquete con la etiqueta del correo expreso.

“… ¿Así que fuiste a la entrada principal con este traje?”

“No tenía opción. No podemos despachar al hombre de las entregas sin mostrar ninguna gratitud, ¿cierto?”

Ya era muy tarde.

Pero afortunadamente no había sido descubierto por nadie que viviera cerca, solo por el repartidor del correo que viene ocasionalmente a entregar paquetes. A pesar de eso, era muy probable que esto saliera del cartero, diciendo algo como que hay un guerrero en armadura Griega en esta casa. Todo lo que él podía hacer era rogar que esa persona tomara esto como alguna broma.

“Además, este ni siquiera es tu paquete, ¿así que no tendrías ni que expresar gratitud, cierto?”

“¿Huh? No. Es mi paquete.”

“… ¿¡Qué!?”

Rider lució su paquete a Waver – “Fuyuki, Distrito Miyama, 228 Residencia Mackenzie. Para el Rey de los Conquistadores, Alejandro”. Este descabellado contenido se desplegaba abiertamente en la boleta de recibo. En la columna del distribuidor estaban las palabras “Especializados en productos de referencias: Tienda Animan Bar Nanbo”.

“¿Qué es esto? Rider, explícame.”

“Solo estoy probando esta cosa de las ordenes por correo. Habían una gran cantidad de productos que capturaron mi atención en el anuncio de ‘Milicia Mundial Mensual’.”

“¿Eh? ¿Ordenes por correo?”

Cuando lo pensó con detención, Waver finalmente entendió porque Rider le había pedido una tarjeta postal cuando le pidió a Waver que comprara revistas militares y cintas de grabación. En ese momento, Waver no tenía la más remota idea de para qué era la tarjeta postal… No, más bien Waver ni siquiera lo había considerado.

“Yo dije, ¿Dónde demonios aprendiste a hacer ordenes por correo?”

Aunque los Espíritus Heroicos adquieren conocimientos del Santo Grial, estos no irían al grado de aprender cómo hacer órdenes por correo. Waver estaba muy poco dispuesto a creer que esa fuera la realidad.

“¿Huh? ¿No explicaban claramente ese tipo de asuntos en la parte trasera de la revista y de las cintas de grabación? Solo míralas un momento y entenderás.”

“¿Cuándo viste esos anuncios… huh? ¿Y de donde sacaste el dinero para la orden por correo?”

“No te preocupes, ya lo he pagado todo.”

Riendo alegremente, Rider le devolvió su billetera. Aparentemente él había tomado la billetera de su Maestro sin permiso mientras él dormía.

Este hombre es tan ingenuo que incluso había querido comprar un bombardero invisible; nadie sabía qué clase de costosa mercancía había comprado esta vez. Espantado, Waver tomó su billetera y revisó la suma de dinero adentro mientras contenía sus lágrimas.

Después de revisar, se dio cuenta de que el número de los billetes de 10.000 yenes seguían inmutados adentro; solo faltaban unos cuantos billetes de unos mil yenes. Waver soltó un enorme suspiro de alivio. Como había colapsado en el alivio, la furia de Waver hacia Rider por haber tomado su billetera sin permiso había disminuido.

Este adolescente ni siquiera estaba al tanto de su desamparo. ¿Se le consideraría afortunado o desafortunado?

En cuanto a Rider, él estaba junto a Waver, murmurando una tonada mientras abría alegremente el paquete.

“¡Hoho!”

Gritó de júbilo luego de abrirlo.

“¡No está mal! ¡No está mal! Me gustó mucho. El producto real se ve aún mejor que el de las fotografías.”

“… ¿Una camiseta?”

Rider sacó una camiseta de tamaño XL del paquete. Sin importar como Waver lo viera, solo lucía como una baratija. En el frente de la camiseta estaba impreso un llamativo logo encima del mapa mundial – “Las Grandes Tácticas del Almirante”. Parecía como uno de esos productos que las compañías de juegos publicaban en la página inicial de la edición especial de una revista.

“En realidad no está mal. Después de que vi a Saber anoche tuve una repentina inspiración también. Si vistiera ropas contemporáneas cuando vaya a la calle no te importaría, ¿cierto?”

El Espíritu Heroico de Waver odiaba la forma espiritual y prefería fuertemente la forma física. Aunque Waver tenía dolores de cabeza sobre este asunto, el resquicio de esperanza era que al menos Rider no pensaba en salir de compras a la ciudad. Ahora está en un gran problema. Waver estaba furioso al punto de querer maldecir a Saber (que le dio a Rider tal idea) y a su Maestro hasta la muerte.

Mientras tanto, Rider se había probado su nueva camiseta y lucía varias poses, mostrando solo simple felicidad en eso.

“¡Wahaha! Tal como lo quería – El efecto de tener al mundo entero en mi pecho. ¡Haha! Realmente me hace feliz.”

“…ah, ahh. Sí, Sí.”

¿Qué tal si solo seguía cubriéndose la cabeza y lo pensaba durmiendo? Si hiciera eso quitaría la imagen del regocijado Rider vistiendo una camiseta de su vista; y escaparía de vuelta al gentil sueño. Actualmente, esa es la mejor idea. Waver lo podría pensar. Cuando se levante la próxima vez el mundo sería un lugar mejor, ¿cierto?

Debía abandonar esa noción tan tentadora en cuando pensó en que haría Rider después.

“… Oye Rider espera. ¡Dije espera!”

Notando que Rider estaba a punto de salir a lucirse fuera de la casa, Waver, nervioso, lo detuvo inmediatamente.

“¿A dónde vas?”

“¿Tienes que preguntar eso? A la calle por supuesto. A mostrar a esos campesinos la nueva apariencia del poderoso Rey de los Conquistadores.”

Vestir solo una camiseta en el frio viento de Noviembre ya era suficientemente extraño. Y encima de eso, su valeroso cuerpo solo estaba cubierto por una camiseta, nada más.

“¡Al menos viste unos pantalones antes de salir!”

“¿Huh? ¿Esa cosa que provoca que te tropieces? Oh sí. Pensándolo bien, todos en este país visten esa cosa.”

Luciendo un poco molesto, el moreno gigante que ni siquiera vestía ropa interior sostuvo su frente con el puño mientras preguntaba seriamente a Waver:

“¿De verdad tengo que vestir eso?”

“Debes.”

Aunque no se había lavado su cara aún, la somnolencia de Waver había desaparecido en una nube de humo.

Este desconsiderado idiota musculoso, ignorante del sentido común, que es tan falto de modales como un gorila…Una vez que Waver pensó en las incontables indulgencias que había hecho por él, él no podía evitar sino sentirse enfadado.

“Déjame poner esto claro. No saldré a la ciudad solo a conseguir pantalones de tamaño súper grande para ti. Definitivamente no iré.”

“¿Qué acabas de decir?”

Con una mirada exagerada Rider miró a Waver. Pero Waver no daría un paso atrás esta vez – él había establecido su determinación con una voluntad de hierro.

“Oye bobo, ¿acaso te pones en contra de mis majestuosas hazañas?”

“¡Tus majestuosas hazañas y tus pantalones no tienen ninguna relación! ¡Antes que salgas a divertirte muéstrame lo que puedes hacer! ¡Al menos mata alguno de los Sirvientes oponentes!”

“¿Eh? Eres un sujeto bastante impaciente. Tú puedes comprometer a un Sirviente a un combate cada vez que quieras, tú sabes.”

“¡Entonces hazlo ahora! ¡Mata al menos uno de ellos! Si haces eso, te compraré pantalones o lo que quieras.”

Poniendo una súbita apariencia solemne, Rider se quedó en silencio.

“… Oh, ya veo. Comprendido. Por ahora, en tanto te presente la decapitada cabeza del enemigo, ¿juras que me conseguirás un par de pantalones?”

Frente a Rider que se rindió con tal diligencia, Waver más bien se sintió desvalido.

“… ¿Así que de verdad quieres ir a la calle con solo esta camiseta?”

“¿Acaso no está haciendo la Rey de los Caballeros lo mismo? Como el Rey de los Conquistadores, ¿Cómo puedo quedarme atrás de ella tan fácilmente? Y sin importar que, me gusta mucho el diseño de esta camiseta. Queda bien con el atuendo del conquistador.”

El idiota sin ningún gusto ha sido elogiado por generaciones como un héroe; ¿Es acaso una mordaz broma de los antiguos historiadores? El tren de pensamiento de Waver inconscientemente voló a través del tiempo y el espacio y llegó al pasado distante.

En ese exacto momento, ¡boom! Una explosión ensordecedora reverberó en los oídos de Waver.

No, para ser específicos, no fue un sonido, sino un estimulo auditivo. Atacó directamente los nervios sensitivos de un mago de Waver – en otras palabras, un impulso mágico.

“¿Qué fue eso?... En el este.”

Como un Sirviente, Alejandro también pudo sentir el estimulo claramente.

Desde las cortinas abiertas uno podía ver una capa de humo dispersándose en el cielo claro. Aunque el patrón de la nube parecía como esas nubes formadas por los fuegos artificiales, el brillo destellante no lo hacía parecía como ninguna clase de fuegos artificiales.

A pesar del hecho de que Waver podía ver el humo con claridad, dado que había sido formado a partir de magia, fuera de los magos, la gente no podía verlo. Lo mismo iba para el ruido. Para una persona normal este no sería sino el ruido normal de los fuegos artificiales.

“Esa ubicación… ¿Es donde está la Iglesia Fuyuki, cierto?”

Como uno de los Maestros participando en la Guerra del Santo Grial, Waver poseía al menos el conocimiento esencial. Así que el comprendía inmediatamente el significado tras la señal.

Como la supervisora de la guerra, la Santa Iglesia dispararía esa señal cada vez que hubiera algo crucial que informar a los Maestros. Este es el método más apropiado para informar a los Maestros, dado que la Santa Iglesia no tendría la menor idea de donde estarían ellos.

“¿Será algo relacionado con nosotros?”

Waver luchó por encontrar la mejor respuesta a la pregunta de Rider.

“No podría decir que sea completamente no relacionado a nosotros. Como debería ponerlo…”

De hecho, Waver no le anunció a la Santa Iglesia su identidad como Maestro.

En tanto su Sirviente esté en la tierra de Fuyuki, naturalmente su posición como Maestro estaría establecida. Así que no había nada que instara a hacer las cosas bajo la aprobación de la Iglesia – fue lo que decidió Waver. Después de todo, él había obtenido la santa reliquia a través de métodos sin escrúpulos. Si hiciera alguna otra cosa extraña ¿no se estaría metiendo más en problemas?

Como sea, sería inseguro ignorar el consenso llamado por la Iglesia Fuyuki. Una reunión para todos los Maestros convocada por la Santa Iglesia supervisora, ¿qué emergencia podría ser? Normalmente sería algo relacionado al enmendar de las reglas, adición de nuevas condiciones… Además, podría anunciar alguna nueva información.

Esta información podría ser el punto clave para las batallas de aquí en adelante. A partir de la situación actual, sería mejor si escuchara las sugerencias del supervisor. Y en caso de que fueran ciertas regulaciones que los restringieran, cuando venga el momento, todo lo que tendría que hacer sería ignorarlas.

“Rider, discutiremos acerca de los pantalones en otro momento. Tengo otras cosas que preparar ahora.”

“¿A qué le tienes tanto miedo? Es difícil conseguir tan buen clima para pasear.”

Dejando de lado al decepcionado Rider, Waver comenzó a hacer sus preparaciones.





-138:15:37[edit]

Una pesada atmosfera rondaba los bancos de la iglesia.

Notando la densa aura demoniaca en frente de él, el Padre Kotomine Risei no pudo evitar reír amargamente.

Ha pasado alrededor de una hora desde que se mandó la señal de convocación. Ninguno de los Maestros vino a la Iglesia de Fuyuki, en su lugar se habían reunido cinco familiares. Aparte de Kirei, que había sido retirado de la guerra en la superficie y el Maestro de Caster, Ryuunosuke, que no habría sido capaz de sentir la señal, los otros Maestros habían enviado a sus representantes. Parece que los otros Maestros no se molestarían por sus modales frente a la iglesia.

Tōsaka Tokiomi también había enviado a su familiar a la reunión. El resto de los familiares debían haber sido despachados por Einsbern, Matō y los otros Maestros extranjeros. Esto también probaba que Lord El-Melloi, cuyo paradero era desconocido, seguía vivo.

“Hasta había preparado especialmente las bromas de recibimiento, pero parece que nadie ha venido. Así que iré directamente al punto.”

Luego de la simple apertura, el viejo Padre enfrentado a la congregación libre de humanos – al menos ningún humano estaba presente en la audiencia – continuó:

“La Guerra del Santo Grial, que puede realizar todos sus deseos, está presentemente en una gran crisis. Se supone que el Santo Grial le otorga su poder solo a los Maestros y Sirvientes que lo busquen, pero ahora contamos con un traidor. Ignorando la obligación principal del Santo Grial, él y su Espíritu Heroico han malversado el poder entregado a ellos para sus frívolos deseos.”

Risei no se preocupaba de la respuesta de la multitud, posiblemente dado al hecho de que se había acostumbrado a predicar como Padre. Ya que obviamente, la congregación solo podía oír silenciosamente. Luego de un toser silencioso, el viejo Padre siguió hablando.

“Descubrimos que el Maestro de Caster es el hombre que está detrás de los casos de asesinatos seriales y secuestros que han ocurrido últimamente en Fuyuki. Él ha usado a su Sirviente para llevar a cabo estos crímenes, pero ha ignorado la escena del crimen después que terminara, sin encubrir sus rastros. Lo que este acto de severa violación trae – creo que lo entenderían sin que lo explicara.”

Aunque no había respuesta de los familiares, los Maestros que oían sus palabras deberían estar titubeando en este momento, al menos ligeramente. Tal como reaccionó Tokiomi esta mañana; aquella es la reacción normal de un mago.

“Él y su Maestro ya no son más su enemigo particular sino una amenaza general a la invocación del Santo Grial. Por lo tanto, doy uso de mi autoridad de supervisión que poseo para estos momentos críticos para cambiar temporalmente las reglas de la Guerra del Santo Grial.”

Declaró él con una voz estricta mientras levantaba su manga derecha, revelando su brazo.

Aunque su cuerpo fuera viejo, aún se podía ver el fuerte y musculoso brazo que había tenido durante sus días de juventud. Imágenes como tatuajes lo cubrían del codo a la muñeca –

No, esos no debían llamarse tatuajes. Los Maestros que participaban en la Guerra del Santo Grial deberían saber de una mirada lo que eran.

“Estos, son los que se han recolectado de las Guerras del Santo Grial anteriores, y fueron confiados a mí como el supervisor de esta Guerra del Santo Grial. La herencia de aquellos Maestros que perdieron a sus Sirvientes antes de la batalla final – sus Sellos de Comando faltantes.”

Luego de esta prueba, nadie dudaría la autoridad del Padre Risei como el supervisor.

Todos los Sellos de Comando no usados en el tiempo eran cuidados por él, el vigilante.

Los Sellos de Comando también son conocidos como marcas santas, la prueba que llevaba consigo el destino de participar en la Guerra del Santo Grial. No solo cargaba el significado del destino, también es un dispositivo para controlar a los Sirvientes.

El fenómeno de los Sellos de Comando ya es un tipo de milagro en sí mismo. Pero aunque este sello en el cuerpo del Maestro posee un enorme poder, los Sellos de Comando aún son una forma agotable de hechicería física. Por eso pueden ser trasplantados o transferidos a través de encantos.

“Yo puedo transferir estos Sellos de Comando a cualquiera según caiga a mi juicio. Para todos ustedes que controlan a sus Sirvientes, ¿supongo que todos saben la importancia y el valor de estos sellos?”

Aunque el solo enfrentaba a los familiares cuyo único deber era pasar lo que habían oído a sus dueños, el Padre Risei lentamente entre en un estado de predicar, y se vio más emocionado.

“Todos los Maestros deben detener sus hostilidades actuales. Todos deben destruir a Caster con todo lo que tengan. Yo seleccionaré al Maestro que consiga aniquilar a Caster y a su Maestro y le otorgaré Sellos de Comando adicionales dada la situación especial.

Si esta misión es cumplida por uno solo, solo esa persona será premiada; si muchos cooperan, todos serán premiados. Una vez que me haya asegurado que Caster sea destruido, la Guerra del Santo Grial continuará.”

El Padre Risei bajó su manga y agregó:

“Así que si hay preguntas me las pueden hacer ahora.”

En la oscuridad se podía oír una conmoción. Sonidos de sillas moviéndose, de levantarse y de partir mezclados entre ellos, y de a poco de desvaneció.

Dado que el anuncio del supervisor había sido comprendido completamente, no tendría sentido demorarse más en este lugar. Actualmente los Maestros no tienen nada que preguntar. Probablemente todos han comenzado sus preparaciones para la nueva competencia.

La iglesia finalmente había vuelto a su estado libre de humanos. El Padre Risei meditaba los futuros avances mientras sonreía.

Después de dar estas instrucciones, todo lo que debía hacer era esperar. Estos cuatro perros hambrientos seguramente conducirían a Caster hacia la desesperación.

El semblante del Maestro marcado y la ubicación del taller de Caster ya eran conocidos. Si a los otros Maestros se les informara probablemente incrementaría la eficiencia. Como sea, si no es manejado cuidadosamente podría alzar sus sospechas. Así, aún no era un momento apropiado para distribuir la inteligencia reunida por Assassin al público.

¿Cómo podrá resistir Caster? Risei y Kirei sintieron que la situación actual no cambiaría inmediatamente a un asedio de 6 a 1. En su opinión, sería difícil para los otros Maestros seguir reaciamente las instrucciones del supervisor, enfocando a Caster como su objetivo principal. Esto es porque ellos sentían que la cacería de Caster era un mero interludio. La verdadera meta de ellos era tener éxito en las peleas de perros consiguientes.

Todos anhelan más Sellos de Comando. Pero si el oponente obtuviera lo mismo, entonces quedaría sin ninguna ventaja.

Estos Maestros en vez de cooperar para obtener juntos los Sellos de Comando, mejor destruirían a Caster por sí solos para ganar ventaja por sobre los otros, aunque lo primero fuera mucho más fácil. Aún más, podrían llegar a obstruirse los unos a los otros en esta competencia.

Si fuera así sería problemático. Si cada uno se obstruyera al otro podría ser desventajoso para los movimientos de Archer.

Los movimientos de todos los Maestros estarían bajo la observación de Assassin, alguien a quien ya casi habían olvidado. El deber de Kirei era ejecutado virtuosamente. Como un mago que aprendió magia al último momento dentro de algunos días, ser capaz de usar métodos tan superiores para controlas a su Sirviente, esto es algo que ni siquiera su profesor Tokiomi podía imaginar.

Por el bien de su fe, por la doctrina de la iglesia, y por el bien de su promesa a sus difuntos amigos; rebosando de confianza, este muchacho había agotado todo lo que tenía desplegando su talento. Ciertamente es un gran logro, algo que hasta su padre había fallado al conseguir.






Regresar a: Acto 4 Ir a: Página Principal Avanzar a: Acto 6