Zero no Tsukaima - Spanish Versión: Volumen 10 Capítulo 2

From Baka-Tsuki
Jump to navigation Jump to search

Capitulo 2: Elfo

Junto al lago Ragdorian, que estaba situado en la frontera entre Galia y Tristain, frente a una casa cercana de aspecto antiguo, una chica de pelo azul que estaba montado en un dragón de viento descendió.

Aunque podía verse el escudo de armas de la familia real de Galia a las puertas de la residencia, había sido humillado por una antiestética abolladura en forma de cruz. Esta era la casa en la que la madre de Tabitha vivía calladamente... Era la premisa de la Ex-residencia Orleans.

Tabitha reflexionó sobre el contenido de la carta que había destruido completamente la noche anterior. Era una carta con el sello de la familia real de Galia. Algo breve había escrito dentro:

"Charlotte Hélène Chevalier de Parterre. La privación de su título como mi asistente mano derecha, Chevalier, y su estatus social. P.D.: La madre de la persona antes mencionada, ex-Duquesa de Orleans, es retenida. Para aprobar las negociaciones de fianza, dentro de una semana, la antes mencionada persona deberá presentarse en la residencia oficial del ex-Duke de Orleans."

"Negociaciones de fianza" es una expresión extremadamente suave. Tabitha ciertamente no se dejo engañar. En otras palabras, esto significaba "Ya que su madre ha sido hecha un rehén, ¡ríndase pacíficamente!" Tras eso, un juicio por la traición de Tabitha probablemente comenzaría. El resultado podría ser... si tenía suerte, las galeras. si no... ella realmente prefirió no pensar en ello.

Junto a la refrescante brisa de la mañana, la luz del amanecer de primavera le dio en el rostro. En un instante, esa brisa refrescante se convirtió en una helada y congelada aura, tan pronto como Tabitha dio un paso dentro de la residencia.

Sylphid, que estaba sentada, emitió un sonido preocupado: "¡Kyui!"

"¿Vas a rendirte pacíficamente?" Esos ojos preguntaron.

"Escalofrío."

Frente a la puerta, ella dijo a su fiel familiar, tras lo cual, "Tsush, tsush..." Sylphid se acercó a ella.

Tabitha dio la vuelta, y detuvo a Sylphid.

"Espera. Terminaré pronto."

Sylphid meneó la cabeza.

Este sabio dragón entendió. Su maestro obviamente no tenía la intención de rendirse. Ella intentaba pelear, y recobrar a su madre. Naturalmente, el gobierno real de Gallia no debió pensar que Tabitha rendiría su varita pacíficamente. Para ganar contra esa magia de viento, debieron preparar muchos poderosos usuarios.

Por su traición, absolutamente no hay razón alguna para ellos de seguir empleando a Tabitha. Desde el comienzo, la familia real había deseado despojar a Tabitha de su vida. Sin embargo, si ella hubiera sido asesinada junto con su padre, habría resultado que la facción del ex-Duque de Orleans montara en cólera. Consecuentemente, le asignaron peligrosas tareas, pensando que podrían deshacerse de ella de esa forma.

Aún así, Tabitha se las arreglo para cumplir bien con esas tareas. Los actuales partidarios del rey ciertamente debían estar impacientes.

Esta vez... era la oportunidad para emplear todo su potencial para matarla. Sylphid notó la desagradable atmósfera envolviendo la casa. El aire daba la fría sensación de pinchar la piel, y las escamas de Sylphid se agitaron.

"¿Lo entiendes, cierto? A partir de ahora comienza la lucha. Del mismo modo, como siempre, esperame en el aire."

Sylphid nunca se unió a Tabitha en sus batallas. "Porque no tengo las piernas para volver", con esa razón, ella usualmente esperaba pacientemente en el aire a que la batalla de su maestro terminara.

Sin embargo, esta vez era diferente.

El enemigo de Tabitha es la familia real de Galia.

Era un oponente de un nivel completamente diferente al de las bestias, magos o semihumanos contra los que había luchado hasta ahora.

Un reino contra una persona; no importaba cuanto se esforzara, no tenía posibilidades de ganar.

Esta ex-residencia de los Orleans ya no era el lugar de los preciados recuerdos de Tabitha.

Ahora era un campo de batalla.

Era un lugar donde el verdugo, que había sido enviado a matarla, estaba esperando; su atud, su tumba.

Si este fuera un "campo de batalla", aún así estaría bien; pero su amada ama no debería aventurarse sola dentro de este "cementerio".

Tabitha miró firmemente a Sylphid, que la observaba con esos ojos bravos.

Con una suave voz, como instruyéndola, Tabitha dijo.

"Porque estás esperando, yo puedo pelear. Porque tengo un lugar al cual volver, yo puedo pelear."

Aunque Sylphid estaba inmovil por un momento... sus ojos se cubrieron de lágrimas, y asintió con fuerza.

"¡Kyui!"

Gentilmente, Tabitha frotó la nariz de sylphid. Firmemente, Sylphid levantó la cara, y se elevó al cielo.

Observando a Sylphid que daba vueltas alrededor del cielo sobre la residencia, con la misma expresion de siempre, "Gracias", murmuró.



La puerta de la sala de espera no estaba cerrada.

Tabitha la empujó, Giiiiiiiiiii... Con un sonido pesado, se abrio la puerta.

Usualmente, el mayordomo, Percerin, avanzaría hacia ella, pero... aparte del mortal silencio y fria atmósfera, nada mas la saludó. Se suponía que habría sirvientes en la residencia, pero no había ni la más pequeña indicación de la presencia de un ser humano.

Más alto que ella, sujetó casualmente su áspero y nudoso baculo, y se enfrentó lentamente al interior de la residencia.

Ella tenía su expresión habitual, sus movimientos habituales, pero la rabia de Tabitha cambió la atmósfera a su alrededor.

Caminó por el largo corredor que conduce a la estancia de su madre en el interior de la residencia, y... las puertas a la izquierda y derecha del corredor se abrieron simultaneamente. Al mismo tiempo que las puertas se abrieron, volaron flechas simultaneamente. Imperturbable, Tabitha agitó su varita.

¡Piiiiiinnngggg! El sonido del vapor de agua fundiéndose en el aire pudo escucharse, materializándose en una barrera de hielo alrededor de Tabitha, repeliendo las flechas.

Como si le diera la bienvenida a las flechas, subsecuentemente, de las puertas abiertas, salieron soldados. Aún así... viendolos más de cerca, portando espadas, esos no eran humanos.

Concedidos con una voluntad, esas eran marionetas mágicas, gárgolas.

Enfrentándose de cerca con 10 firmes gárgolas sin miedo, los magos normales no serían capaces de enfrentarse con ellas.

Sin embargo, el poder mágico de Tabitha en esos momentos estaba lleno de ira.

Sosteniendo su baculo en alto, los incontables témpanos de hielo a su alrededor brillaron con un color pálido, girando. Su corto cabello también se agitó intensamente debido al tornado que invocó, con ella al centro. Unos "Témpanos ventosos" de velocidad y potencia nunca antes mostrada, golpearon a las 10 gárgolas al mismo tiempo... y las mandó a volar.

Debido a la magia contenida en el "Témpanos ventosos", las gárgolas que habían sido atravezadas se congelaron instantáneamente. Este era el resultado del creciente poder mágico buscando su destino.

Con una intensa furia, incluso que se diera cuenta, el rango de Thabita se elevó un nivel.

El segundo poder del Viento, y el segundo poder del Agua residían en su especialidad, "Témpanos ventosos".

Justo ahora, los usuarios normales no podrían ser capaces de combatirla.

Con su experiencia como el caballero secreto de Galia, el Caballero de North Parterre, y su furioso encantamiendo cuadrado de Viento, esta pequeña chica de cabello azulado se había convertido en un prominente guerrero incluso en toda Halkeginia.

Tabitha se paró frente a la puerta de la habitación de su madre, y giró la perilla.

No estaba cerrada.

La doble puerta se abrió casualmente.

Una cama y un pequeño escritorio podían verse. Sobre la cama, la figura de su madre estaba ausente.

La ventana estaba abierta, y la brisa primaveral entraba.

Había libreros alrededor de las paredes... Un hombre estaba ahí.

Vestido con un pálido traje marrón claro, era un hombre alto y delgado. Usaba un sombrero de un pais extranjero, con ala amplia y una pluma sobre éste. De las partes descubiertas de su sombrero, cabellos dorados caían hasta su cintura. Con la espalda frente a la entrada de la habitación en la que Tabitha estaba de pie, él encaraba el librero del muro, y estaba aparentemente haciendo algo entusiastamente.

El sonido de páginas volteándose podía escucharse. Para su asombro, el hombre estaba aparentemente leyendo un libro. Ella nunca había escuchado de un asesino que diera la espalda a su enemigo y leyera un libro.

Frente a esa espalda, Tabitha habló en voz baja.

"¿A dónde llevaron a mi madre?"

Como un bibliotecario al que llamaran, el hombre se dio la vuelta con un gesto completamente ordinario, sin la menor indicación de hostilidad o sed de sangre.

"¿Madre?"

Con un tono cristalino, era una voz clara y aguda.

Las pupilas de esos ojos rasgados brillaron con un color azul claro. Tenía características finas y extremadamente adorables. No obstante, su edad no podría decirse del todo. Aunque parecía ser un muchacho, uno podría creerle si dijera que tenía 40 años de edad - tenía esa clase de aura misteriosa a su alrededor.

"¿A dónde llevaron a mi madre?"

Con la entonación exacta, Tabitha repitió. Aparentemente preocupado, el hombre miró al libro, pero... abrio su boca de nuevo.

"Aah. ¿La mujer que las tropas de Galia tomaron en custodia? No se su ubicación."

En ese caso, no me eres útil. Diciendo esto, Tabitha agitó casualmente su varita. Témpanos ventosos atacaron al hombre en el pecho.

Sin embargo, las flechas de hielo de Tabitha se detuvieron exactamente en frende del pecho del hombre. No había ningun indicio de que él hubiera recitado algún hechizo. Las flechas detenidas cayeron sobre la cama, y se hicieron pedazos.

Se sentía como si las flechas hubieran perdido su fuerza debido a un muro. ¿Que era el poder mágico que usaba este tipo?

Tabitha levantó su varita con precaucion. Pensaba examinar los movimientos de su oponente. "Esta 'historia' es maravillosa."

El siguiente movimiento del hombre tomó a Tabitha por sorpresa. De alguna forma, el hombre había alcanzado el libro del librero que previamente había estado leyendo.

"En nuestro caso, no tenemos esa cultura. Los 'Libros' están limitados a registrar los fenómenos exactos, historia, y contenidos de investigación. Añadir la interpretación personal a la historia y hacerla divertida de leer, despertando los sentimientos del lector, causando que se adentre en el punto de vista del autor... es algo interesante."

El hombre en el traje extranjero informó a Tabitha en una voz sin la menor implicación de hostilidad.

"Esta historia de "El Heroe de Ivaldi"... ¿ya la has leido?"

El momento en que el hombre regresó la vista al libro, Tabitha liberó nuevamente carámbanos voladores hacia él. Esta ocasión, fueron el doble de la cantidad previa.

Aún así... como esperaba, las flechas de hielo perdieron su fuerza frente a la mano del hombre, y cayeron sobre la cama.

Sin preocuparse del todo por el encantamiento de Tabitha, el hombre continuó sus palabras.

"Oh si, la 'historia' de tu gente es realmente interesante. Y están en nuestra contra en cuestión de religión... Pero nuestro único santo es tambien un heroe para tu gente."

Sombras de ansiedad comenzaban a mostrarse en la cara de Tabitha. No entendía por qúe sus flechas de hielo se detenían a medio camino. ¿Algún tipo de magia de Viento? Nunca había visto o escuchado de tal elemento mágico.

Entonces Tabitha comprendió.

¿Elemento Mágico?

Existe otro elemento mágico en este mundo.

Como el Caballero de North Parterre, los encantamientos usados por los semihumanos que había combatido muchas veces antes...

"Magia Antigua..."

Con un rostro extremadamente misterioso, el hombre murmuró.

"¿Por qué ustedes, bárbaros, nos llaman de esa forma tan poco refinada?"

Tras eso, en una voz que no escondía nada,

"Ah, ¿o quizá me ha confundido con un bárbaro? Disculpe. Es educado retirarme el sombrero en el primer encuentro con ustedes los bárbaros."

Diciendo esto, el hombre se quitó el sombrero.

"Yo soy Bidashal de 'Neftes'. Encantado de conocerle." De su rubia cabellera.... largas orejas puntiagudas emergían.

"Elfo."

Tabitha exprimió un asombrado sonido de su garganta. Este hombre es un elfo. Permaneciendo en el extenso desierto al este de Halkeginia, una raza con una larga vida.

Una raza que sobrepasa por muchas hojas la historia y civilización comparada con la de los humanos.

Los temerarios guerreros que son usuarios de la poderosa magia ancestral. Tabitha apretó fuertemente su varita. Incluso para el Caballero de North Parterre Tabitha, quien ha combatido con varios tipos de enemigos, había dos oponentes que no deseaba encontrarse. Uno de ellos son los dragones. Para un humano al combatir contra un dragon maduro, el peligro es demasiado grande. El poder y vitalidad de la llama de los dragones fácilmente sobrepasa sus fuerzas mágicas.

Y el otro son los elfos, uno de los cuales estaba de pie justo en frente de sus ojos.

Al ser la primera vez que veía un elfo, Tabitha fue golpeada de asombro... y terror subsecuentemente. De acuerdo a los rumores, sus poderes mágicos eran extraordinarios. No importaba como, sus Témpanos ventosos no lo alcanzarían del todo...

"Tengo algo que pedirte."

Con una voz lastimosa, el hombre que se llamaba a si mismo "Bidashal de Neftes" le dijo a Tabitha.

"¿Pedirme?"

"Sip. Mi petición es que no te resistas. Nosotros los elfos no gustamos de batallas inútiles. Desecha tus intenciones, debo llevarte de regreso con Joseph. Porque lo he prometido. Ese es el por qué, si puedes, quiero que vengas conmigo pacíficamente."

Al oir el nombre de su tío, la sangre de Tabitha fluyó de regreso.

¿Cómo puedes tener miedo? ¡Tu decidiste traer a tu madre de regreso! No importa si es un elfo o un dios, no me detendré aquí.

Mientras que el miedo se desvanecía de su corazón, una tempestuosa tormenta la inundó de nuevo.

La fuerza de la Magia es la Fuerza de Voluntad.

La Fuerza de Voluntad son los sentimientos.

El poder de los sentimientos fuertes influencían la cantidad todal de la fuerza mágica.

En medio de su furia y agitación, esa parte de ella que la mantenía fría como la nieve, le enseñó a Tabitha a incrementar el poder de su elemento.

Tabitha comenzó a recitar un encantameinto Triangular que poseía la fuerza de un cuadrado.

Combinando la belleza artística formada por el hielo y el viento interviniendo entre ellos, y la agudeza que podría cortar cualquier cosa que la tocara en dos, la "Tormenta de hielo" apareció.

"Raguuzu Wootaru Isu Iisa Hagaraasu..."

Por un instante, el aire alrededor de Tabitha tembló y se congeló.

La corriente de aire helado giró alrededor de su cuerpo como incontables objetos serpenteantes.

Combinando la belleza artística formada por el hielo y el viento interviniendo entre ellos, y la agudeza que podría cortar cualquier cosa que la tocara en dos, la "Tormenta de hielo" apareció.

¡Buuuooo, buuuooooo, buururoooooooooooo!

Destrozando el interior del cuarto, la "Tormenta de hielo" rugía.

El ojo de la tormenta se levanto de su cuerpo a su varita.

Al mismo tiempo, apuntando al semihumano, ella bajó su varita. Eso fue hecho en una fracción de segundo.

Aparentemente, sin importar qué defensa mágica fuera empleada, él debería salir volando de un golpe.

Aún así... El rubio y alto elfo ignoró completamente la furiosa "Tormenta de Hielo" que se acercaba a él.

Su mirada no se apartó de Tabitha del todo.

Ni ira ni hostilidad podian sentirse de esas finas pupilas.

Tabitha reconoció el verdadero significado de eso que se encontraba en las pupilas del elfo, y quedó asombrada.

De algún modo, eso dentro era "limitación".

Y el ataque mágico que poseía la fuerza de un cuadrado estaba por atacarlo... Hasta ahora, el elfo seguía sin ver a Tabitha como un enemigo.

El cuerpo del elfo fue abrazado por la "Tormenta de Hielo"... En ese instante cuando parecía que sería así...

Los giros de la tormenta de hielo regresaron abruptamente.

Solo así, manteniendo la misma cantidad de fuerza, se precipitó hacia Tabitha.

"Iru Furu Dera..."

En un momento, con el encantamiento de "Volar", Tabitha flotó y trató de evadirlo.

Tabitha que tenía una gran experiencia en batalla, completó su encantamiento en un instante.

Liberar.

Al momento en que estaba a punto de volar, los ojos de Tabitha se abrieron enormes.

¡No puedo volar!

Sin que ella lo notara, sus piernas fueron sostenidas por la cama. La cama que se había transformado en algo paredido al barro, sujetó los tobillos de Tabitha firmemente.

Estupefacta, Tabitha murmuró.

"Magia Ancestral de los elf...."

No pudo terminar sus palabras.

Tabitha fue completamente tragada por la "Tormenta de Hielo" que ella hizo, y perdió su consciencia.



Tabitha que había caido boca abajo, desgastada, fue abordada por Bidashal. El pequeño cuerpo de Tabitha había sufrido incontables cortes debido a las hojas de hielo que ella misma hizo. Sangre de sus heridas mezcladas con agua, hacían un lío terrible en la sabana de la cama.

Bidashal extendió su mano al cuello de la colapsada Tabitha. Apenas estaba viva.

"Oh agua que fluyes en este cuerpo..."

El alto elfo comenzó a recitar un encantamiento con voz clara. La magia que había sido bautizada por los Halkegianos como "Ancestral", era conocida por los elfos y semihumanos que la empleaban como la "fuerza de los espíritus".

Como si fueran pintadas con pintura, las heridas en el cuerpo de Tabitha fueron sanadas. Comparada con el elemento mágico de "Curación", la sanación de sus heridas era mucho más rápida.

Bidashal cautelosamente levantó a Tabitha cuyas heridas fueron sanadas.

Miró através de la ventana, y notó a un Dragón del viento mirándolo a él. Evidentemente, este era el familiar de la dama que había sido vencida. Esos ojos brillaban con ira.

Por esos ojos, Bidashal se dio cuenta de que Sylphid no era un Dragón del Viento ordinario.

"Dragón Rhyme, huh..."

Adivinó la verdadera identidad de Sylphid inmediatamente.

Los Dragones Rhyme podía decirse queeran una especie extinta. Una bestia mitológica con gran inteligencia, poseedores de Magia antigua, y expertos en sprachgefühl (habla y lenguaje).

La inconsciente chica en sus brazos... Para hacer un familiar de un Dragón Rhyme, debió de tomarle una gran cantidad de habilidad. Si ella no fuera reconocida como su maestro durante el "contrato", podría haber sido peligroso, posiblemente.

"Dragón Rhyme. No tengo intención de pelear contra tí. El 'Gran Propósito' no desea que yo pelee contigo tampoco."

"El 'Gran propósito' es... el concepto general en que creían los elfos, los Dragones Rhyme... los antiguos habitantes de Halkeginia. Ellos existían con la fuente que fue llamada 'la fuerza de los espíritus', algo que determinaba sus respectivas acciones... Era algo parecido a un dios para los humanos.

Desechando al "Gran Propósito", este Dragón Rhyme frente a sus ojos no se haría para atrás. Por el contrario, como si reuniera coraje, comenzó a rugir.

Este dragón conocía lo que es el "miedo". Consciente de su escondida habilidad como usuario de la "fuerza de los espíritus", que era muchas veces más fuerte, ella mostró sus fauces.

"¿Fuiste tan lejos como para vender tu alma a los bárbaros? Familiar, que existencia tan patética."

Al mismo instante que Bidashal murmuraba esto, Sylphid atravesó rompiendo el muro, y voló hacia él.

Sin embargo, la expresión de Bidashal no cambió ni un poco. él solamente levantó su mano hacia Sylphid.

Era algo bizarro que un elfo tan delgado detuviera a un enorme dragón con solo una mano. Sylphid trató de luchar... pero no pudo moverse.

El poder de la magia era muy fuerte.

Bidashal levantó su mano izquierda sobre la cabeza de Sylphid, Lentamente... los párpados de Sylphid se cerraron.

¡Dooonnn! Mirando hacia abajo al Dragón Rhyme que había perdido la consciencia y caido en la cama, Bidashal murmuró.

"Oh, 'Gran Propósito'... por favor perdona tan tonto uso de la 'fuerza de los espíritus'."


Anterior: Capítulo 1 Pagina Principal Siguiente: Capítulo 3