To Aru Majutsu no Index:NT Volumen20 ?
No dejes que te sacuda. Piensa.
¿No había destruido Aleister Crowley la cábala mágica más grande del mundo?
Ese fenómeno no podía ser anulado sin motivo alguno.
Esta era una historia del mundo mágico. Había una teoría preestablecida detrás de todos los eventos.
Ya tenías que haber visto lo que era necesario.
Así que piensa en todo lo que has visto y oído.
Así fue el líder de los Dorados, Samuel Liddell MacGregor Mathers.
Tenía que haber una razón por la que estaba aquí.
Podría ser un truco, una escapatoria o un nombre. Encuentra eso y todo cambiaría.
Un ruido explosivo estalló.
Varios colores de luz florecieron como innumerables flores para decorar inapropiadamente el cementerio de la Abadía de Westminster.
Pero antes que nada.
Incluso si estaba cansada de tantas batallas en rápida sucesión, Aleister Crowley podría usar el Tripping espiritual y la Blasting Rod al mismo tiempo, podría usar la optimización de su sacrificio de sangre para mantenerse al día con la batalla supersónica de un Santo, y ella podía neutralizar y secuestrar toda la magia occidental moderna, por lo que era inusual que alguien fuera capaz de enfrentarse a ella en una batalla puramente mágica.
Tendría que ser un Dios Mágico puro como Othinus o Nephthys.
O tendría que ser un mago extraordinario como Westcott o Mathers que tenían su propio método de control único que habían usado para competir por el estándar de lo que se convertiría en la magia occidental moderna.
-¿¡Gah!?
-¡¡Aleister!!
Kamijou instintivamente corrió cuando vio a la chica plateada girar en el aire y estrellarse contra el suelo. No parecía que pudiera respirar correctamente, pero ¿era eso realmente debido al daño físico?
Aleister Crowley había dominado la magia, pero sus ojos estaban muy abiertos por el terror y las pupilas vagaban sin rumbo fijo. Sus conductos lagrimales se aflojarían si no tuviera cuidado. Esa chica plateada ya no se sentía como un mago histórico. Su alma parecía haber vuelto a algo acorde con su aparente edad.
Kamijou escuchó algo similar a un bastón girando en el aire.
Sombrero y capa. El llamativo uniforme escocés que tanto le gustaba a cierto mago. Algunos objetos bailaban alrededor de ese hombre sin cuerdas para sostenerlos: una vara de fuego, una taza de agua, una daga de viento y un disco de tierra. Era un conjunto completo de las Armas Simbólicas fundamentales que usaban los cuatro elementos para desempeñar un papel en todas las ceremonias mágicas.
-¿Qué ocurre?
Inmediatamente habló en inglés. Basándose en la velocidad de la pronunciación, Kamijou podía decir que era diferente del inglés americano que había aprendido en la escuela. ¿Era esa la pronunciación encontrada en Escocia? Estaba realmente agradecido de que Othinus le tradujera después de regresar a su hombro.
-¿¡Qué pasa, qué pasa, qué pasa!? Destrozaste la cábala dorada que construí y tomaste el control de toda la magia del mundo, pero ¿descuidaste tus estudios después? ¿¡Esto es todo lo que tu magia tiene para ofrecer!?
Magia y ciencia.
Ese humano supuestamente había adquirido una teoría unificada antes de separarlos así. Aleister Crowley había hecho todo eso y, sin embargo... no, por lo que se llenó de miedo al encontrar algo que no entendía. Al ver a su estudiante temblando como una niña frágil, Mathers chasqueó los dedos de manera desinteresada.
-No siento ningún poder en ti. Sin embargo, no parece que simplemente te hayas deteriorado. Hm, ¿qué podría significar esto? Creo que soy el asesino de su hija, ¿no es así?
-…
Aleister estaba abrumada por el miedo a lo inexplicable, pero ahora sus hombros temblaban de una manera diferente a la anterior.
-Ah, claro.
¿Qué conexiones había hecho ese hombre en su mente?
Mathers alcanzó algún tipo de respuesta a una velocidad y con conexiones que ninguna persona normal podría esperar igualar.
-Eso significaría, sí, y hay un Gran Demonio, así que, hm, agrega la coincidencia de un Santo Ángel Guardián y… eso lo explica. El número es 93 y el nombre Aiwass. Si mi teoría es correcta, salvarla sería posible. Sin embargo…
No era un tono de burla.
Era un tono despiadadamente casual como si alguien golpeara el sello de "reprobado" contra el centro de una boleta de calificaciones.
-Aleister, tu hija no debería haber sido salvada.
Esas palabras fueron demasiado.
Incluso para Kamijou Touma que estaba mirando desde un costado.
-Nuit Ma Ahathoor Hecate Sapho Jezabel Lilith era superflua, ¿no es así? Fue su salvación lo que le robó a Aleister Crowley el poderoso enfoque direccional de ser un vengador. Cobarde. Eres una estrella patéticamente atenuada que ni siquiera podría significar el amanecer en tu propio mundo cerrado. Si hubieras venido aquí como el vengador solitario que continuó puliéndose después de la Batalla de Blythe Road, es posible que hayas podido esquivar mi espada mortal y escapar.
-…Math…
-Tú, tonto fracaso de estudiante. Fue salvar a tu bebé lo que te robó tu fundación y eso significará tu muerte aquí. La causa de la muerte de Aleister Crowley quedará registrada para siempre como su superflua hija Lilith.
-¡¡¡¡¡Maaaaaaaaaaaaaaatheeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeerrrrrssssssssssssssssssssssss!!!!!
La chica plateada se sacudió los brazos de apoyo de Kamijou y rugió como una bestia.
Pero el monstruo llamado Samuel Liddell MacGregor Mathers no permitiría que esto se convirtiera en una obra moral.
-Bienvenido de nuevo, Aleister.
Agarró la varita de las Armas Simbólicas que volaban a su alrededor y golpeó el suelo a sus pies con ella.
-A Londres, la ciudad de la niebla, la magia y el dorado.
Incluso luz.
Incluso sonido.
El mundo entero se distorsionó, pero Kamijou no sabía cómo describirlo. Lentamente levantó la cabeza para mirar por encima del sombrío cementerio rodeado de muros. Vio varias figuras extrañas de pie sobre los muchos techos puntiagudos de la Abadía de Westminster.
Paul Foster Case.
Arthur Edward Waite.
Dion Fortune.
Israel Regardie.
Roberto Guillermo Felkin.
Westcott, que había sido rival de Mathers en el liderazgo de la cábala dorada.
Y más.
Y más y más
Y más y más y más.
Había docenas. No, tal vez más. Kamijou Touma solo pudo hacer coincidir algunos nombres con caras debido a su experiencia en el Edificio sin ventanas, donde había sido testigo de la desaparición de la cábala más grande de ese mundo durante la Batalla de Blythe Road. No, técnicamente solo había visto la historia contada por Aleister Crowley.
Aleister había estado gritando con tanta ira que parecía que iba a arrancarle la tráquea a Mathers con los dientes, pero incluso ella titubeó.
-¿El Dorado…?
Estaba aturdida.
No podía creerlo porque era exacto. La chica plateada habló en su extrema confusión.
-¿¿La cábala mágica dorada?
-Recién llegado, tú también fuiste oficialmente declarado muerto en 1947, ¿no es así? Y Lilith también desafió los precedentes al volver a la historia. No olvides que tenemos a Coronzon, una forma de vida superior igual o mayor que tu Aiwass. …Piensas que puedes hacer algo, que otros no pueden violar el supuesto fundamental del sistema técnico conocido como magia que cualquiera puede desarrollar libremente. -La sonrisa de Mathers se profundizó cuando empujó el extremo de su varita en la tierra del cementerio. -Y no pienses en esto como injusto. Debemos darlo todo para celebrar nuestro reencuentro. Y como soy el hombre que creó la cábala dorada, ¿no es perfectamente natural para mí usar los frutos de ese trabajo, incluido el personal de la cábala mágica más grande del mundo?
-…
-Ahora, rehagamos la Batalla de Blythe Road. ¡¡Crowley, una vez me robaste todo!! Es hora de pagarte por eso, y esta vez no puedes confiar en una victoria coincidente. Has perdido tu enfoque direccional como vengador y has abandonado tu crecimiento como mago, ¡así que veamos cuánto puede luchar un tonto que sostiene a su bebé superfluo!
Puede haber sido cierto que el Aleister actual era diferente del Aleister que había conquistado la Batalla de Blythe Road. Si la chica plateada se resistía por sí sola, podría ser derrotada en algún momento porque carecía de su antigua obsesión.
Pero.
Sin embargo.
-Hola.
Un olor a muerte más llegó flotando.
El Nivel 5 #1 de Ciudad Academia entró al cementerio con su bastón de diseño moderno.
-¿Es esto un concurso para ver quién es la persona más mierda? Patético. ¿El bebé es superfluo? ¿No debería haber sido salvada? … Y aquí pensé que había tocado fondo con este presidente de la junta, pero parece que el mundo todavía no ha terminado de decepcionarme.
Una vez que ese título apareció, Kamijou vio la respuesta a la cábala mágica dorada.
Puede haber sido cierto que Aleister había separado la magia y la ciencia.
Eso puede haber sido nada más que una ilusión.
Sin embargo.
Esa ilusión había creado algo real. Sin importar cuáles hayan sido sus motivos ocultos, el Presidente de la Junta todavía construyó Ciudad Academia desde cero. Ella había creado el programa de desarrollo de poderes Esper y había recopilado tecnología de punta allí. También había hecho de la ciudad un lugar lo suficientemente atractivo como para que mucha gente se reuniera allí.
-Mathers… -Kamijou Touma finalmente desató un rugido. -Dijiste que tenemos que hacer todo lo posible para celebrar tu reunión, ¿verdad? ¡Entonces tú haz lo mismo, Aleister! ¡¡La magia ni siquiera importa!! ¡¡Saca todo lo que tienes como Presidente de la Junta de Ciudad Academia!!
Estaban a su lado.
Kamijou Touma y el #1 se pararon a ambos lados de la chica plateada que se había negado a aceptar la cábala dorada.
Los más fuertes y los más débiles hablaron al unísono mientras declaraban la guerra.
-Aleister no está solo. ¡¡Los frutos de su trabajo están aquí!!
El segundo acto ha comenzado.
Finalmente es hora del choque directo entre la magia dorada y la ciencia de Ciudad Academia.
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