To Aru Majutsu no Index SS:NT

Parte 1

Este fue un domingo especial.

-Escucha, Index. Usa este dinero con cuidado.

El chico llamado Kamijou Touma colocó un sobre de dinero en sus manos.

-Este dinero provino de todos los acertijos que resolviste en ese sitio de recompensas. Resolviste tantos tan rápido usando mi cuenta que tengo un poco de miedo de que alguien de contrainteligencia me esté vigilando, pero este dinero definitivamente te pertenece. Puedes comprar lo que quieras con él y no tienes que comprar nada que no quieras. Piensa detenidamente si quieres guardarlo o usarlo y asegúrate de no arrepentirte de tu decisión.

Y luego…

-¡Wahah! ¡¡Con esto, puedo comer ramen y tempura y panqueques y yakiniku y sushi y curry y filete de Salisbury y gyudon y shabu-shabu y empanadillas chinas y pato de Pekín y sukiyaki y rosbif y pollo frito y oden!!

-¿¡Qué acabo de decir!?

Index se deslizó pasando al chico de cabello puntiagudo que se sentía mareado y salió corriendo del dormitorio de estudiantes con el gato calicó.

Sin embargo, ella no se había ido para comer takoyaki con su cena ni nada por el estilo.

-Voy a comprarle un regalo a Touma. ¿Qué debo conseguir, Sphinx?

Index parecía del tipo que simplemente se perdería en algún lugar cercano, pero tenía una memoria perfecta. Mientras no entrara en pánico y luego tuviera problemas para acceder a sus recuerdos, visitar el distrito comercial cerca de la estación era simple.

Pero entonces…

-¿?

De repente se detuvo.

Dos chicas que vestían el uniforme de invierno de la Escuela Secundaria Tokiwadai salieron de una tienda combinada que no era exactamente una librería, ni una tienda de CD, ni una tienda de alquiler, ni una tienda de juegos.

-Eso es extraño. Kuroko, ¿este lugar no solía tener lanzamientos los lunes un día antes?

-Vender cosas antes de tiempo va en contra de las reglas, por lo que probablemente alguien los persiguió.

Eran Misaka Mikoto y Shirai Kuroko.

El gato en los brazos de Index comenzó a luchar ante la aparición de esta verdadera dama de clase alta. Probablemente estaba sintiendo los "efectos secundarios" de sus poderes eléctricos.

Y Index tenía su propio comentario que hacer.

-¡E-este dinero es importante, así que no puedes tenerlo!

-¿¡Qué!? ¿¡Por qué me tratas como a un bandido en el momento en que me encuentras!?

Mikoto estaba a punto de que le salieran cuernos de la cabeza ante la repentina falsa acusación, pero la sospecha permaneció en los ojos de Index mientras retrocedía lenta y cautelosamente.

-Touma dijo que hay un sistema aterrador que permite que las chicas malas tomen tu dinero si haces contacto visual.

-No sé qué tiene que ver ese idiota con esto, pero esto significa que puedo ir a golpearlo, ¿verdad?

-¡Y una matona que siempre actúa de forma violenta y animada en los callejones traseros tiene que ser una chica mala! Así que tengo que tener cuidado.

-…Onee-sama.

-¿Eh? ¿No confías en mí en absoluto? No veo por qué empezarías a mirarme en modo Judgement.

De repente, un camión grande pasó junto a las chicas. Era domingo por la mañana, pero parecía que el negocio de las entregas todavía estaba bastante ocupado. Basado en el logo en el costado, parecía llevar ingredientes para restaurantes.

El polvo se arremolinó en el aire y se necesitó viento para levantar ese polvo fino del suelo.

Y eso también significaba algo más.

Index observa como las faldas de las dos chicas son voladas hacia arriba.

El silencio cayó por un tiempo.

Index hizo lo mejor que pudo para mantener su silencio mientras la tela se elevaba, flotaba y finalmente era empujada hacia abajo por la gravedad.

El gato en sus brazos soltó un maullido.

Index luego vacilante le ofrece el sobre que se ve tan prístino como si todas las arrugas hubieran sido eliminadas.

-Lo lamento.

-¿¡Qué!? ¿Te parezco tan aterradora? Por un lado, llevo pantalones cortos, así que en realidad no importa. ¡Y si empiezas a empujarme con dinero, me hace ver como el malo!

-Touma dijo que puedes pagarle a la gente para que compense los problemas.

-¡¡Realmente me molesta que sigas mencionando a ese idiota!!

Parte 2

A pesar del problema anterior, Index está llena de energía.

Mikoto y Shirai habían rechazado el dinero, por lo que el sobre estaba a salvo.

-¡Honestamente, Ciudad Academia es como un laberinto hoy! ¡Tomará mucho trabajo completar esta misión!

-Ah… ah, ja, ja. De todos modos, creo que es bueno que hayas resuelto eso sin causar ningún problema real.

Una chica rió amargamente mientras caminaba junto a Index y tocaba las almohadillas de las patas delanteras del gato.

Su nombre era Kazakiri Hyouka. Tenía el pelo largo y negro con un ligero rastro de castaño y sus rasgos más notables eran las gafas que definían casi por completo la impresión que la gente tenía de su rostro y los abundantes pechos que simbolizaban su aura un tanto suave. Además de eso, vestía el blazer azul marino de la Escuela de Niñas Kirigaoka, que era famosa en cierto sentido de la palabra.

Si uno ignoraba la estática que recorría su contorno ante cualquier fuerte ráfaga de viento o la bocina de un auto, se veía como una chica de preparatoria perfectamente normal.

Los amigos de Index como Kazakiri Hyouka o Meigo Arisa tienden a no ser normales.

-Entonces, ¿qué le vas a dar a Kamijou-kun?

-¡Cualquier cosa que lo haga feliz!

-Supongo que no investigaste esto en absoluto.

Index entonces se congeló en su lugar.

Confundida, Kazakiri siguió la mirada de la chica y vio un puesto de taiyaki hecho con una casa rodante modificada.

Incluso tenía un cartel que anunciaba un taiyaki gratis con cualquier orden de cinco o más.

-Algo… para hacer feliz a Touma… Sí, esto debería hacerlo feliz. Sé que lo hará.

-¡N-no puedes, Index-chan! ¡Tengo la sensación de que esa elección te hará daño más tarde!

Kazakiri agarró la mano de Index y la alejó para evitar que confundiera sus propios deseos con la felicidad de otro, pero los dos continuaron avanzando poco a poco hacia el estrado. Es probable que todos lo hayan olvidado, pero la fuerza base de Index era bastante alta. Era solo que las condiciones para activar esa fuerza eran extremadamente limitadas: cuando se activaba la seguridad de la biblioteca del grimorio, cuando se trataba de comida, cuando Kamijou Touma requería castigo, etc.

-Pasta de frijol rojo… queso… ¡y hasta tienen crema pastelera! ¡¡Pero si solo compro uno de cada uno, pelearemos por ellos, así que necesito comprar al menos dos de cada uno!!

-¡No puedes, no puedes, no puedes, Index-chan! ¡Terminarás comiéndotelos todos tú misma de todos modos!

-Entonces compraré tres de cada uno para que puedas tener- ¿¡por qué!?

Los dos fueron detenidos por un sonido agudo.

El gran ruido que apuñaló sus tímpanos fue el de cristales rotos. Ambos miraron y vieron que una camarera había dejado caer una pequeña botella de bebida de su bandeja mientras caminaba entre las mesas en el café abierto ubicado alrededor del puesto de taiyaki.

-¡Kyah! L-lo siento. Iré a buscar un reemplazo de inmediato.

Mientras tanto, robots de limpieza con forma de tambor llegaron de todas partes y se tragaron los fragmentos.

Index mira con temor a esos trabajadores.

-Uuh… Ciudad Academia realmente es como un laberinto hoy. Estoy viendo cosas siniestras en todas partes.

-N-no te preocupes, Index-chan. Solo están limpiando, así que no muerden.

Parte 3

-Y luego dije alto y claro: '¿De verdad crees que puedes vivir solo con suplementos?'

La chica que habla con orgullo frente a Index es Tsuchimikado Maika.

Asistió a la escuela de sirvientas de Ryouran y, en pocas palabras, era una sirvienta en formación. Llevaba el uniforme de sirvienta incluso en sus días libres y por alguna razón estaba sentada encima de un robot de limpieza con forma de tambor.

Index habla mientras mira de un lado a otro entre el tambor y la sirvienta.

-E-eres una invocadora más grande de lo que había escuchado. Puedes usar poderes más allá de los del hombre.

-¿Hmm? ¿No ves estos robots de limpieza por toda la ciudad?

Maika inclinó la cabeza con ternura, pero no recibió respuesta.

Mientras Index temblaba de miedo, el robot en forma de tambor se balanceaba hacia adelante y hacia atrás mientras luchaba contra una mancha obstinada en el suelo. Parecía ser una situación desastrosa en la que un chicle ya formidable en el camino tenía pedazos de un globo reventado atrapados.

Por cierto, Kazakiri Hyouka se había desvanecido en el aire en el instante en que Tsuchimikado Maika llamó a Index. Para ese amigo, no fue una ocurrencia rara.

-Kamijou Touma estaba diciendo que quiere un horno de vapor.

-¿Vapor?

-Son convenientes y cambian por completo el repertorio de platos que puedes preparar. Probablemente quería alimentar a su compañero de cuarto con algo bueno.

-…

Hablar de cocina parecía emocionarla porque el tono de Maika era tenso.

A pedido de Index, guió a la monja blanca al rincón de cocina de una tienda de electrodomésticos (y trajo el robot de limpieza con ella.)

-¿Estás seguro de que esto es lo que quieres comprar? No es exactamente un regalo sexy.

-Está bien. Si hace feliz a Touma, eso es todo lo que importa.

La caja era grande y pesada, así que hizo los arreglos para que se la entregaran. Pero a pesar de vivir allí, Index no sabe el nombre exacto o la dirección del dormitorio. Esa sorpresa desagradable la obligó a obtener la ayuda de Maika nuevamente.

Y allí el emocionante domingo de Index llegó a su fin.

Ella había completado completamente su misión.

-Espero que a Touma le guste.

Caminó a casa mientras sostenía al gato calicó.

Otro nuevo día comenzaría mañana.

-Espero que lo haga sonreír. ¿Verdad, Sphinx?

…

…

…

Parte 4

Por supuesto que no es así como termina.

Aquí es donde realmente comienza. ¿Está bien, Index-chan?

Parte 5

Después de separarse de Tsuchimikado Maika (y el tambor que estaba montando), Index se apresuró a regresar al dormitorio. Sin embargo, se desvió de la carretera principal en el camino y entró en un callejón. Caminó hasta un espacio rectangular rodeado de edificios por los cuatro costados. Era demasiado lúgubre para llamarse plaza y probablemente se creó cuando se demolió un edificio más pequeño y no se construyó nada nuevo en su lugar.

El gato calicó maulló mientras lo sostenía frente a su pecho.

No había otro sonido que ese y no había nadie más allí.

-Bastet.

Sin embargo, la chica llamada Index habla claramente.

-Una diosa de la mitología egipcia. Era la diosa de la bendición del Nilo y de la agricultura y a menudo se la dibujaba con cuerpo de mujer y cabeza de gato. Además, sus adoradores veían a los gatos como sagrados, trabajaban para complacer a los gatos que consideraban sus mensajeros y los usaban como agentes para comunicarse entre el hombre y Dios.

No estaba hablando consigo misma.

Sus palabras estaban dirigidas a alguien.

Index almacenaba los originales de 103.000 grimorios en su cabeza y la hostilidad llenó su mirada.

Y esa mirada se volvió hacia el gato calicó en sus brazos.

-¿Qué tal si sales? Me gustaría recuperar mi Sphinx.

Su única respuesta fue un ligero dolor en el dorso de la mano.

El gato, normalmente obediente, la había arañado. Aflojó su agarre más por lo repentino que por el dolor y el gatito llamado Sphinx se le escapó.

Aterrizó hábilmente en el suelo sucio, retrocedió y la miró.

Y las palabras se deslizaron de su pequeña boca.

-Tch. Así que no pude robar al gato.

No.

Una ráfaga de viento pasó junto al gato y reveló el cuerpo físico de una chica no tan diferente de Index.

Era una maga de piel morena con cabello largo y negro.

-Tenía la esperanza de mirar dentro de tu cabeza usando un gato, ya que son las ‘bestias que llevan las palabras de los dioses’, pero eso también fracasó. Por otra parte, es realmente tu culpa por darle a tu gato un nombre así. Una vez que escuché ese nombre, ¿cómo se supone que voy a resistirme a usarlo?

Llevaba un vestido camisola rosa que le llegaba casi hasta los tobillos, pero la tela era tan delgada que casi se podía ver todo su cuerpo a través de ella. Eso solo fue suficiente para dejar una impresión, pero fue solo el comienzo para ella. Su característica más notable era la capa negra con capucha que ocultaba toda su silueta.

Sus extrañas aberturas verticales para las pupilas y el diseño de orejas de gato en la parte superior de su capucha probablemente estaban relacionados con la diosa a la que servía.

Ella era una maga egipcia.

La niña blanca observó a la sacerdotisa gata y le habló a ese místico gato negro.

-¿Qué quieres?

-Ay, vamos. Ya dije que quería mirar dentro de tu cabeza que ambas sabemos contiene 103.000 grimorios. Seguramente eso es suficiente para resolverlo.

-Eso no es lo que quise decir. ¿Por qué quieres armar un nuevo grimorio en mi cabeza?

-…

Le había tomado sólo un segundo ver a través del plan.

Justo cuando la sacerdotisa de Bastet se congela por un momento, Index continúa como si deslizara otra hoja delgada entre los engranajes.

-Cuando estaba hablando con Pelo Corto, un camión grande arrojó polvo al aire. Había una descripción relacionada con el Nilo incorporada en él. Por supuesto, el texto completo solo duró una vigésima parte de segundo, por lo que es posible que una persona normal no haya podido leerlo.

Por eso Index les había ofrecido el dinero. Se había dado cuenta de que podría haberlas involucrado en algún tipo de problema mágico.

-Cuando estaba viendo el stand de taiyaki con Hyouka, la camarera se cayó y rompió una botella pequeña. La botella original debió tener algunos jeroglíficos escritos con tinta tenue. Había 152 fragmentos en total, incluidos los más pequeños que un milímetro. Podrías leer lo que estaba escrito en la botella original acomodando todos esos fragmentos en tu cabeza.

Es por eso que Index dijo que la ciudad era como un laberinto. Ver los jeroglíficos de la mitología egipcia en un entorno de superficies duras hechas de asfalto y cemento le había recordado de algún modo a las pirámides y los megalitos.

-Cuando estaba hablando con Maika, vi un globo reventado. El globo también tenía algo escrito. Al imaginar las piezas restantes expandidas y combinadas en el globo inflado, pude imaginar la verdadera cadena de escritura.

Por eso había mencionado una invocadora. Los jeroglíficos que estaba viendo aquí y allá eran las formas de los dioses antiguos y eso le había traído a la mente un término relacionado.

Index miró directamente a la sacerdotisa gata y habló.

-Utilizaste la historia de los gatos que roban información y pusiste fragmentos de texto alrededor para que no los notara. De esa manera podrías armar un libro en mi cabeza y luego robarlo de mi cabeza sin que me dé cuenta. Estoy bastante seguro de que esa era tu intención, pero ¿por qué? Para desglosar la información y modificarla en innumerables pistas como esa, ya tenía que haber poseído el libro original. No entiendo por qué me pides que lo reconstruya.

-Ya veo. Así que esta es la biblioteca de grimorios.

La chica que servía a la diosa gato Bastet jugueteaba con el diseño de orejas triangulares de su capucha.

-Por cierto, asumo que ya sabes qué grimorio estaba tratando de construir en tu cabeza.

-No conozco un método para que alguien arme un rompecabezas y aún así no vea la imagen completa. -Respondió Index con una voz encantadora pero aguda. -El Libro de los Muertos. El grimorio de papiro enterrado en las pirámides con las momias para algún día devolver el alma del faraón a este mundo.

-Eso es suficiente.

La chica le dio una sonrisa feroz.

Esa sonrisa era tan intimidante como el gran felino que decía ser el rey de las bestias.

-Solo necesitaba saber que había sido elaborado correctamente en tu cabeza. Usar el gato falló, pero tengo otros métodos. Incluso puedo romperte el cráneo y sacarlo de esa manera.

-…

-Y me llamaste Bastet, pero tendré que descontar algunos puntos por eso. No está del todo mal, pero tampoco del todo bien. Supongo que incluso una biblioteca de grimorios comete errores.

Mientras hablaba, la sacerdotisa gata se llevó el dedo índice a la boca y mordió ligeramente la punta.

-Soy una sacerdotisa de Sekhmet. Sirvo a esa diosa de la sangre derramada y la matanza que está simbolizada por la leona y a veces se la ve como idéntica a Bastet, diosa de la fertilidad y la producción.

Un momento después, una garra bestial que parecía un cuchillo salió disparada de la punta de su dedo ensangrentado.

Parte 6

Sekhmet era una diosa a menudo representada con cuerpo de mujer y cabeza de leona. Era la esposa de Ptah, el dios supremo de la mitología egipcia, y era una diosa de la guerra extremadamente poderosa. Ella usaría la fuerza de un león para destrozar completamente a cualquier incrédulo o traidor a la fe y alcanzaría el éxtasis puro mientras se bañaba en la lluvia torrencial de sangre producida por su matanza.

Al igual que Durga de la mitología india o Frigg de la mitología nórdica, simbolizaba la crueldad y la violencia de las mujeres que normalmente se mantenían ocultas.

Era una diosa creada a partir de una extracción concentrada de todos los aspectos más aterradores de una mujer.

Y una sacerdotisa que servía a esa diosa necesitaba ese mismo poder.

Lo que significaba…

-Ja ja.

Despertó esa mentalidad al entrar en trance.

Y ganó la gran fuerza de un león, incluso si eso significaba transformar temporalmente su cuerpo físico.

Al unir a los dos, se elevó a sí misma a un ser que empuñaba las garras abrasadoras y los colmillos de una bestia con la mente sabia de una diosa.

-Ah, ja, ja. ¡¡Ah, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ha, ja, ja, ja!!

Usó las garras bestiales que se extendían desde sus dedos para desgarrar su propio pecho dentro de la capa negra. Este fue un ritual de Sekhmet, diosa de la sangre derramada y la matanza. Mientras desgarraba a los traidores de la fe y se bañaba en su sangre, también se embriagaba profundamente en la sangre desbordante de su propia carne. Su sacerdotisa podría exponer con más fuerza su lado bestial haciéndose daño a sí misma. Este no era el león visto en una enciclopedia zoológica. Esta era la bestia legendaria creada únicamente en la imaginación humana y estaba extrayendo su poder para su propio uso.

Ella cumpliría su papel como sirvienta de Sekhmet.

Obtendría poder matando a los traidores de la fe y bañándose en su sangre.

Ella no necesitaba desarrollar ningún misticismo a gran escala o arte secreto. Ella simplemente tenía que buscar la habilidad de matar.

Y esa búsqueda condujo al poder de una bestia: garras y colmillos.

(Terminemos con esto.)

Simplemente reunir un poco de fuerza en sus dedos envió un gran crujido por todo su cuerpo. El sonido fue lo suficientemente fuerte como para haber roto los tímpanos de una persona normal.

(No importa lo que le suceda mientras la cabeza permanezca. ¡¡Si abro el cráneo y saco la información dentro de quince minutos, puedo obtener el Libro de los Muertos sin dañarlo!!)

La distancia de unos pocos metros ya no importaba.

Incluso si toda esa distancia se hubiera llenado con concreto grueso, podría haber atravesado el centro del esbelto cuerpo de la monja con un movimiento de su brazo.

Entonces…

Y todavía…

-Oh, entonces eso es todo.

En la vigésima parte de un segundo que le tomó balancear su brazo horizontalmente, la sacerdotisa de Sekhmet pensó que escuchó esas palabras.

No era una voz. Una voz no se habría propagado por el aire lo suficientemente rápido como para alcanzarla.

Esta era una técnica utilizada por cierto tipo de mago cuando necesitaban encantamientos de velocidad extremadamente alta. Index usó eso para transmitir sus pensamientos a la sacerdotisa de Sekhmet a través de los movimientos de sus labios en lugar de su voz.

La chica se metió casualmente en el reino de alta velocidad que supuestamente solo pertenecía a la sacerdotisa.

La chica conocida como Index ahora existe en ese reino.

(No.)

La sacerdotisa de Sekhmet finalmente sintió un escalofrío recorrer su espalda.

Pero fue demasiado tarde. Ella ya había comenzado a balancear su brazo horizontalmente. No podía cancelar esa acción ahora.

(¿¡Ella existe en un reino de velocidad incluso más alto que el mío!?)

Y para agregar a eso.

(Ella ha notado mis garras, pero no está tratando de evitarlas. ¿¡Ni siquiera está parpadeando!? ¿¡Qué tiene escondido bajo la manga en su reino de velocidad aún mayor!?)

Parte 7

Por cierto, esta conversación había ocurrido en el dormitorio de estudiantes de Kamijou Touma como si fuera completamente normal.

-¡Touma, Touma! ¡¡Magical Powered Kanamin volvió a estar en plena forma hoy!!

-Sí, y estoy seguro de que los actores de doblaje se alegrarán si estás tan feliz incluso cuando se trata de una repetición.

-Pero no puedo soportar cómo la cantidad de adornos en su cintura sube y baja a veces. ¿Porqué hace eso? No tiene lógica y no es ningún tipo de magia misteriosa, ¡así que me enoja!

-¿Qué? ¿Alguien se olvidó de dibujar algo? Pero no he visto a ninguna de esas personas obsesivas señalar eso en línea.

-Es cierto. ¡¡Parece que está peleando sin problemas en la televisión, pero cuando pienso en ello, las decoraciones aparecen y desaparecen!!

-No estás haciendo algo loco como memorizar los treinta fotogramas por segundo y examinarlos todos al instante, ¿verdad?

Parte 8

Pero no importa cuán excelente sea la memoria perfecta de Index, eso es todo lo que tiene. Incluso si pudiera analizar los 30 fps de la animación o los 60 fps de un juego de lucha, no podría moverse en una trigésima parte de un segundo y esquivar un ataque del rey de las bestias.

Todo lo que pudo lograr fue determinar lo que estaba sucediendo y usar los movimientos de los labios del encantamiento de ultra alta velocidad para transmitir un breve texto a la sacerdotisa de Sekhmet que tenía la velocidad de una bestia.

Sin embargo, eso fue suficiente.

Ella era la biblioteca de grimorios que había reunido 103.000 grimorios.

Ella era una especialista en determinar instantáneamente una contramedida para todo tipo de magia y ataques.

(Solo tengo que sorprenderla.)

La parte aterradoramente inteligente de ella llegó a esa respuesta.

Todo lo que podía hacer era mover los labios.

No es que ni siquiera parpadeara. Ni siquiera podía parpadear.

Sin embargo, fue suficiente para confundir a la sacerdotisa de Sekhmet.

Poco a poco, esas pequeñas cosas se acumularían y traerían una confusión fatal a su mente.

(Un truco crea una brecha instantánea en los pensamientos de tu oponente, pero ese instante será un retraso fatal para ti. Después de todo, tu cuerpo continuará moviéndose en ese momento.)

Diez segundos para una bicicleta y diez segundos para un automóvil eran completamente diferentes.

Lo mismo podría decirse de un coche en la carretera y de un coche de carreras en el circuito.

La diferencia era aún más pronunciada entre un coche de carreras a toda velocidad y un caza supersónico a toda velocidad.

Un momento de distracción o un vacío instantáneo en los pensamientos tendría graves consecuencias si se tratara de la suficiente velocidad.

-Gah.

La niña gritó desde cerca.

Mientras Index se mueve a velocidad normal, el grito se distorsiona como si fuera por el efecto Doppler.

-¡Aaaaaaaaaaaaaa! ¡¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!

Index en realidad no la había arrojado.

La brecha en sus pensamientos había causado que la sacerdotisa de Sekhmet perdiera el control de su propio cuerpo, diera un paso en falso, perdiera el equilibrio y girara como si se hubiera resbalado.

Las garras que deberían haber alcanzado a Index cortaron el aire a unos pocos milímetros de su nariz.

Y eso fue todo lo lejos que llegó.

El cuerpo de la sacerdotisa de Sekhmet voló por el aire mientras giraba. No solo tropezó sola, sino que dio una voltereta en el aire al menos dos veces y comenzó a caer. Su espalda se estrelló contra el suelo duro.

Este no era un método de aikido que usaba apalancamiento o cambio de peso corporal. Parecía más una extraña técnica de qigong o un golpe final en espíritu sumo, un tipo de danza ritual en la que un especialista en jujitsu entraba solo en la arena y hacía el papel de ser arrojado por un dios.

Un sonido explosivo estalló después de un breve retraso.

La sacerdotisa de Sekhmet tiene dificultad para respirar, pero Index mira hacia abajo a ese león que tiene una capa negra sobre su cabeza.

-Tú no eres la diosa león Sekhmet.

-Kh.

Psicológicamente, estas palabras podrían convertirse fácilmente en un golpe fatal.

-Si lo fueras, no podrías haber intentado usar un gato para robar información en tu plan original. Por eso debes ser Bastet, diosa de la fertilidad y la producción. Eres una sacerdotisa de la diosa gato, no de la diosa león.

-…¡¡Ah…kah…!!

La chica a la que se refieren como Bastet trató de discutir, pero aún no podía respirar.

Y así la monja siguió dando sus respuestas.

-Y Sekhmet en realidad estaba dentro de mi cabeza. Allí construiste el Libro de los Muertos. Ese es el grimorio enterrado con las momias de los faraones, pero a diferencia del Libro de la Ley o la Rama Dorada, no es un libro único con un formato decidido. Para permitir que el faraón regrese del inframundo, cada copia individual debe ser personalizada de acuerdo con las obras y los pecados específicos del faraón. Por esa razón, se debe hacer un nuevo grimorio cada vez que muere una nueva persona.

-¡¡Si… lencio!!

-¿Qué esperabas hacer con este Libro de los Muertos? -preguntó Índice. -¿Por qué querías leer las obras y los pecados de la persona muerta llamada Sekhmet?

Parte 9

Una chica había admirado a alguien.

Recordaba a esa persona como una estricta hermana mayor.

Esa persona se había negado a aceptar aprendices, por lo que la niña se vio obligada a aprender sus técnicas a través de la observación en lugar de que se las enseñaran. Aun así, la niña ahora podía decir que había sido edificada por ella.

Pero esa persona se había ido.

La muerte siempre fue irrazonable y aclarar los arrepentimientos de uno no devolvía nada.

Había algo que la niña solo se había dado cuenta una vez que había perdido a esa persona a la que admiraba: no sabía nada sobre esa persona. Quería contarle al mundo sobre la persona, pero no tenía forma de determinar si algo de eso era exacto.

Por eso había querido saber.

Por eso había querido leerlo todo.

Quería saber qué había hecho esa persona en su vida y quería saber qué recompensas y castigos se había ganado esa persona. Esa maga nunca le había revelado su pasado a nadie, por lo que la niña había querido leer el Libro de los Muertos que esa maga había escrito en su vida.

No estaba pensando en nada tan grandioso como recuperar el alma de esa persona o preservar eternamente su cadáver. Simplemente quería contarle al mundo sobre esa persona y explicar qué tipo de persona había sido. Seguramente eso podría permitirse.

Esa persona se había ido a la tumba sin una sola queja y se había quedado en silencio sobre todo eso, por lo que quizás no quería que nadie hablara de ella. Puede que ella no haya deseado nada de esto.

Sin embargo, la chica quería entenderla sin importar qué.

Después de todo, los registros decían que esa persona era terriblemente cruel y despiadada y que no era más que una diosa de la sangre derramada y la matanza. La gente creía que esa era la visión correcta de ella, por lo que la niña quería expresar algunos hechos simples como que la persona había tenido debilidad por los alimentos dulces o que siempre se había lanzado directamente al campo de batalla cuando escuchaba a un niño llorando, incluso si no tenía nada que ganar en esa batalla.

Entonces…

Por esta razón…

La niña preocupada por todo esto se había asustado de que ella misma no conocía realmente a la persona a la que admiraba.

Al igual que las otras personas ignorantes, ¿qué sabía ella realmente de esa persona?

Parte 10

-Los… diagramas…

La sacerdotisa de Bastet prácticamente jadeó las palabras mientras yacía en el suelo.

Miró a Index y al intelecto humano que había derrotado a la bestia.

-Tenía su Libro de los Muertos... pero estaba incompleto. Los diagramas... faltaban... debido a los ladrones de tumbas. Necesitaba... esos diagramas... así que...

-Oh, así que eso es todo. -murmuró Index.

Los grimorios podían transmitirse de una persona a otra. Quedaría sólo el original, pero se podría hacer una copia nueva.

Cuando eso sucedió, las ilustraciones y los diagramas causaron la mayoría de los problemas.

En ediciones consecutivas, incluso los grimorios que cubrían las ceremonias de la cábala mágica dorada tenían alteraciones en los círculos mágicos, el símbolo de la rosa y otras descripciones que necesitaban ser vistas para entender (La mayoría de los cambios se hicieron para que se vieran más elegantes e impresionantes). El texto por sí solo no era suficiente para un grimorio. Sin el texto correcto y los diagramas correctos, no se podría alcanzar la verdadera sabiduría. La ignorancia y la vanidad humanas esconderían la clave en alguna parte.

La sacerdotisa de Bastet lo había buscado con locura.

Había guardado el texto incompleto en su corazón y buscado las ilustraciones y diagramas perdidos.

El rompecabezas disperso no tenía suficientes piezas, por lo que usó la cabeza de Index para llenar los espacios.

Incluso si el grimorio estuviera incompleto, sus 103,000 grimorios podrían usarse para completar las piezas faltantes después de observar esos espacios desde innumerables ángulos.

Si luego se lo robaran de la cabeza, la Sacerdotisa de Bastet tendría un Libro de los Muertos completo con el texto y los diagramas.

Tendría los registros completos de la vida, los hechos, las recompensas y los castigos de cierto individuo.

Ella tendría la imagen real de esa persona sin falsedades mezcladas.

-La alcanzaré.

No podía reunir fuerzas en su cuerpo.

Ella lo sabía mejor que nadie.

Pero a pesar de yacer en el suelo, la sacerdotisa de Bastet extendió una mano temblorosa hacia arriba como para agarrar el sol. Más allá de esa mano estaba la chica que había memorizado y manejado una gran cantidad de grimorios.

-Bastet llegará a Sekhmet… tengo que hacerlo. Recuperaré... los diagramas... y realmente la entenderé. ¡¡Y para hacer eso… debo… debo…!!

-…

Después de escuchar eso, la monja blanca llamada Index respiró tranquilamente.

Y…

-‘Esto es lo mejor, Leep. En lugar de quedar atrapada por mí, deberías convertirte en una maga más libre. Esa es la verdadera respuesta correcta.’

Esas pocas docenas de palabras fueron suficientes para que la Sacerdotisa de Bastet perdiera completamente de vista la realidad.

-¿Qué?

El tono de voz era el de una chica encantadora.

Sin embargo, el tempo, el acento, las respiraciones y todo lo demás eran los de la persona que conocía muy bien.

Esa persona había descendido a este lugar.

-‘Para ser honesta, estaba confundida por cuánto me admirabas. Yo no era ese tipo de persona, pero al mismo tiempo, era feliz. Por eso me negué a aceptarte como aprendiz y, sin embargo, continué respondiendo parcialmente a lo que querías. Debería haberte rechazado rotundamente, pero tenía miedo de perderte. Lo lamento.'

(No.)

La gata negra pensó en su confusión.

(No conozco a nadie con una mirada tan amable en sus ojos.)

Mientras pensaba largo y tendido, la sacerdotisa de Bastet finalmente se dio cuenta de lo que estaba sucediendo.

Ella misma había obtenido el Libro de los Muertos y lo había leído. Había descrito todas las buenas y malas acciones de esa persona, pero nunca había mencionado el tipo de persona que había sido.

Esa información no estaba en el texto.

Estas fueron las palabras no escritas del león que uno podría decir que estaban entre líneas.

La última versión había sido creada en la cabeza de Index combinando el texto y los diagramas. Al registrar las acciones y los pecados de cierto individuo, el grimorio hecho a la medida había sido ajustado para salvar el alma de ese individuo. Fue con ese grimorio que Index supo esto.

Esto no fue una conversación.

Puede que lo haya parecido, pero técnicamente no lo era.

Era como leer una entrada del diario que alguien había escrito hace mucho, mucho tiempo. Los sentimientos importantes que alguien había escondido durante mucho tiempo en su corazón pero que quería expresar algún día estaban siendo hablados con una persona densa que no entendía nada.

Era como explicar el verdadero significado de un libro a alguien que había leído la propaganda y había cerrado el libro allí.

-‘Estaba realmente feliz cuando creaste un camino a Bastet en lugar de Sekhmet. Así que conviértete en alguien que cubrirá a las personas con una lluvia de bendiciones en lugar de alguien como yo que cubre a las personas con una lluvia de sangre. Si bien eras mi mayor problema, también eras mi mayor esperanza. ¿Entiendes, Leep? Incluso mientras me admirabas, eras una maga que se había adelantado mucho a mí’.

Ese se convirtió en el golpe final.

Era inevitable.

El daño físico estaba atormentando su mente al punto que su falsa convicción y su gran deseo eran las únicas cosas que la mantenían consciente, pero el núcleo final de su ser se rompió.

Cuando escuchó esas palabras, una sonrisa apenas perceptible apareció en sus labios y no pudo evitar que las lágrimas fluyeran.

Y así, el gato negro que había mirado al león abandonó por completo su conciencia.

Parte 11

Index regresó al dormitorio de estudiantes donde esperaba Kamijou Touma.

-¡Kabum! ¡Me muero de hambre, Touma!

-Oye, ¿cómo te fue? ¿Tuviste un buen día?

-¡Estás a punto de tener un buen día, Touma! ¡Tu vapor está a punto de llegar!

-¿?

Kamijou frunció el ceño, pero Index lo ignoró y le habló al gato calicó en sus brazos.

-Este fue un domingo valioso, ¿no es así, Sphinx?

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