Fate/Zero:Corazón de Monstruos

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HISTORIA EXTRA

CORAZÓN DE MONSTRUOS

Incluso si los monstruos poseen el corazón de un hombre–

No había necesidad de un hombre el poseer el corazón de un monstruo.

Sólo que – él quería un monstruo.

Un monstruo que superara todo.

Sin embargo, era difícil hacer un monstruo.

Difícil, difícil…

A pesar de eso, él hizo lo mejor que pudo, y lo realizó.

Lo que yo esperaba no era la acción en sí misma, sino el monstruo en sí.

Un Mustang antiguo – rentado en una tienda de alquiler de autos de manera barata – viajaba en el desierto interminable a una gran velocidad, sin cambios desde pocas horas antes. El estéreo del auto no estaba sonando estruendosamente con música, ni tampoco jóvenes y encantadoras voces podían ser oídas desde el coche.

Un joven asiático conducía el Mustang. A pesar de que estaba conduciendo por este larguísimo camino, no había ningún rastro de cansancio en su rostro. – Es decir, tampoco parecía estar disfrutándolo.

Su expresión era fría. Ni aburrida ni molesta – solamente era fría.

Él ya había experimentado una vez el infierno. Incluso ahora, cuando él se dirigía al infierno, todo lo que se podía ver en sus ojos era la considerable experiencia en batalla.

Su nombre era Emiya Kiritsugu.

Estados Unidos… este lugar es absurdamente enorme.

Esa fue la primera impresión que Emiya Kiritsugu tuvo de este país llamado Estados Unidos.

Eran más de cinco horas desde que compraron los materiales necesarios en Nueva York. Estaban conduciendo a lo largo de esta vacía autopista. No había nada más que la gris y continua carretera. Activando un poco su prana, Kiritsugu alejó la somnolencia que sentía… Si un accidente ocurriera en un lugar como éste, no significaría nada más que problemas.

En un principio, ella era la que debía de conducir. Pensando en eso, Kiritsugu echó una mirada a la mujer durmiendo en el asiento delantero.

La persona que estaba dormida parecía estar frunciendo el ceño de disgusto, como si estuviera pensando profundamente acerca de algo… pero Kiritsugu sabía que ella sólo estaba durmiendo.

Vaya, vaya – él suspiró. Y entonces, como si adivinara sus sentimientos, ella abrió los ojos, y dijo.

“¿Qué pasa, chico? ¿Hay algo en mi cara, o te sentiste impaciente?“

“… ¿Podemos cambiar antes la conducción?”

Hacer frente a las palabras de Natalia Kaminski directamente (excepto en las batallas), acababa siendo agotador e inútil – como su discípulo número uno, Emiya Kiritsugu entendía muy bien este hecho.

“No. Estoy cansada. Mientras yo estaba negociando ahora mismo, tú solamente te quedaste de pie al lado, ¿cierto?”

Negociación… eh, Kiritsugu negó con la cabeza.

“… Yo tenía la intención de mantener tu protección.”

El grupo con los que estaban negociando era de hecho, una pequeña pandilla. Por aquí, cuando señalas las armas que quieres, ellos te muestran la cosa, y aumentan el precio – esa era la forma en la que ellos hacían las cosas aquí.

Las negociaciones se rompieron, y lo único que quedó fueron las armas que ellos habían escogido – no dejaron ningún cuerpo.

“He apretado el gatillo demasiado pronto.”

Silencio. Embarazoso, pero fue como Natalia había dicho. A la velocidad a la que ella apretó el gatillo, había ganado.

En realidad, ella no debía haber sido capaz de ganar sino por sus reflejos.

Natalia Kaminski era descendiente de una mitad de Succubus de sus ancestros. Como aprendiz, Emiya Kiritsugu había comenzado desde un sitio extraordinario.

Al principio, ella había superado a Kiritsugu en todo – no había posibilidad de que él pudiera ganar. Suponiendo que hubiese uno, éste tenía que ser un área que él no hubiera aprendido de ella, sino que hubiese llegado a dominar por sí mismo.

“Además, hemos venido de todas maneras a los Estados Unidos, y hasta ahora no me has dicho el nombre del objetivo.”

“¿Hmm? Ah, ahora que lo pienso, me he olvidado de eso.”

“No olvides cosas tan importantes.”

“Lo siento, lo siento” Haciendo una mueca, Natalia sacó una fotografía.

“El plan es conocer al tipo que hizo esto.”

“… Eh.”

Por un instante, su corazón dio un brinco. El contenido de la fotografía parecía ser una combinación de varios seres humanos.

Un cuerpo que fue picado, luego sus pedazos se colocaron juntos, y luego se separaron. En el centro, había un enorme agujero negro.

“Esto fue tomado hace más de veinte años. Ellos descubrieron esta cosa en Baviera, Alemania del norte. Esta fotografía no es clara, pero al parecer esta cosa estaba corriendo en dieciocho patas de caballo. “

“¿Patas de caballo, has dicho?”

Natalia sonrió amargamente.

“Un producto de baja calidad. El hombre que hizo esto fue un mago llamado Heinrich Zepter. “

“¿Cuál fue su objetivo de hacer una cosa así?”

“He aquí. La ‘Resurrección de los muertos’.”

“¿Resurrección…?”

Las personas involucradas en la taumaturgia han pensado en eso por lo menos una vez – el milagro de resucitar a sus preciosos seres queridos.

“Cuando dije ‘Resurrección de los muertos‘, ¿en qué estabas pensando?”

“Esa es–”

Esa es la recuperación del cuerpo perdido, y el alma perdida. Y recuperar el tiempo perdido.

Diciendo eso, Kiritsugu recordó los rostros del hombre y la mujer, pero descartó esta idea al momento siguiente.

“La versión de la ‘Resurrección de los muertos’ de Heinrich es un poco diferente a la tuya.”

Por lo general, el milagro llamado ‘Resurrección de los muertos’ se refiere a lo que pensaba Kiritsugu – el ‘Renacimiento del alma y la carne’. Esto no era algo que sólo podía ser ignorado. Si el alma no era revivida, y era sólo un cuerpo en movimiento, sería lo mismo que un putrefacto fantasma come cadáveres.

“Si consigues revivir el cuerpo, entonces eso es suficientemente bueno; el alma no es importante – Ves, ¿no es eso herejía?”

“No lo entiendo. Reviviendo sólo el cuerpo, ¿cuál es el punto?“

“No tengo ni idea. Tal vez el creador ni siquiera lo sabe.”

“¿Por qué?”

“Durante generaciones, la familia Zepter ha estado inmerso en el milagro de la resurrección de los muertos. Inicialmente, se concentraron en revivir cuerpos de forma impecable. Después de eso, trabajaron duro para juntar las partes del cuerpo. Y, por último, trataron de crear seres vivos al unir las diferentes partes del cuerpo y darle a la criatura las funciones corporales.”

– Al final, ya ni siquiera era la ‘Resurrección de los muertos’. En su lugar…

“Así es. Ellos se han extraviado lejos de su intención. Esto ya no es la ‘Resurrección de los muertos’, sino la ‘Creación de monstruos’.” Desde hace unas pocas generaciones, ya había indicios de que la familia Zepter estaba experimentando en forma imprudente.

La impecable resurrección de los muertos – pero si la persona estaba senil, o había muerto de un accidente inesperado, era imposible que su cuerpo fuese revivido perfectamente a eso antes de su muerte.

Debido a eso, si el renacimiento era necesario incluso si los miembros fueran separados – no, esto no se limitaba a que sus miembros estuvieran adjuntos al torso, el revivir el estado de un ser sin un miembro –

Sin embargo, debido a eso, un mayor avance en la técnica de la resurrección era necesario. La técnica para unir a los miembros separados del cuerpo era necesaria; para ser capaz de unir los nervios y permitir que el cuerpo se mueva. Si las partes no eran suficientes, una técnica era requerida para fabricar esas partes.

Lo que se necesitaba era la técnica para operar completamente el cuerpo. Con el fin de combinar, sintetizar, unir, y operar todas las partes del cuerpo, independientemente de sus estados.

“Y, ¿fueron reprendidos por la Asociación?”

“Si un pueblo entero fuese utilizado como parte del experimento, incluso la Asociación levantaría su enorme trasero y tomaría alguna acción, eh.”

“…”

Todo un pueblo, en esas palabras, los ojos de Kiritsugu se nublaron ligeramente. Anteriormente, él había visto una escena exactamente así antes – un infierno donde literalmente todo se perdió.

“Pero Heinrich escapó de la muerte, y su paradero se desconoce… pero–”

“¿Fue descubierto en los Estados Unidos?”

“Exactamente. El monstruo que creó aparece en un pueblo, y estaba violentamente encolerizado.”

“¿Era ese monstruo?”

“Los policías estadounidenses son excelentes. Era una criatura desconocida, pero lo mataron en ese mismo momento, y lo exterminaron con éxito. Una claridad y diligencia admirables.”

¿Eso se llama excelente? – Pensó Kiritsugu, pero no lo dijo.

“Y después, recibí una llamada del mago que había ido a recuperar el cadáver. Como resultado de la investigación, se ha confirmado que Heinrich se encuentra en esa aldea. Y por lo tanto, aquí estamos.”

“Por fin he entendido la misión.”

“Eso es. Es para matar a Heinrich Zepter, el mago que se ha alejado del buen camino, lo antes posible. ¿Alguna pregunta?”

“No.”

Respondiendo desinteresadamente, Kiritsugu pisó el pedal y aceleró.

Después de una hora, con la puesta del Sol en el oeste, el pueblo – ‘Present Mountain’ – apareció abruptamente.

Había un garabato en la entrada del pueblo. Según éste, allí había dos mil personas.

Viajando en el camino sin pavimentar, el coche se sacudía a su paso sobre las piedras.

“Hay un hotel por allí. Vamos a crear nuestra base ahí en primer lugar.”

Asintiendo, Kiritsugu se detuvo frente al hotel. En el instante en que abrió la puerta y respiró el aire polvoriento, se dieron cuenta que estaban siendo observados.

No había una intención de matar – ellos estaban siendo simplemente observados.

“Oh, mi…”

Natalia murmuró mientras sacaba su equipaje desde el maletero del coche. Pudo levantar fácilmente la maleta llena de diversas armas.

“Natalia, ¿qué piensas?”

“Bueno… Esperemos que ellos sean sólo curiosos. Pero vamos a tener en cuenta el peor de los casos también.”

“¿Tendríamos que luchar contra dos mil personas?”

“El peor escenario es si él huye descalzo al desierto Estadounidense.”

Diciendo eso, Natalia sonrió. Ella sacó algo pequeño de la maleta que tenía en la mano, y se lo entregó a Kiritsugu.

Él la atrapó y sintió que era pesado. Activando su circuito mágico, casi se sintió a gusto, pero no pudo cuando se impulsaron por la escalera dentro del territorio del enemigo.

Ambos entraron en el hotel. El personal en el mostrador los miró con suspicacia.

“Nos gustaría hospedarnos esta noche.”

“100 dólares por noche.”

“30 dólares me parece bien.”

“100 dólares por noche.”

“… Está bien. 100 dólares por noche.”

Natalia le dio 200 dólares. Sin dejar de mirarlos con recelo, el empleado puso las llaves sobre el mostrador.

“Habitación 208.”

“Kiritsugu.”

Asintiendo, él la siguió y subieron las escaleras. En la última habitación en el segundo piso, había una puerta podrida.

“¿Existe aún la necesidad de llaves?”

Atónita, pero aun así Natalia abrió la puerta. Dejando caer la pesada maleta sobre la cama, él frunció el ceño a través del polvo que se asentaba.

“Natalia, ¿qué sigue? ¿Reamente nos quedaremos para la noche?”

“Si los habitantes nos lo permiten, eso es.”

Al decir esto, ella rápidamente tomó las llamadas armas modernas – armas de fuego, municiones y granadas – y algunos equipos de hechicería que parecían varitas y pieles de animales pasadas de moda, atados juntos con cuerdas. Siguiendo su ejemplo, Kiritsugu comenzó a tomar las armas de la maleta. Por cierto, en este momento Kiritsugu todavía estaba en formación. Por lo tanto, aún tenía que llegar a esa etapa en la que podía usar su ‘Origen’ de manera efectiva y matar a los magos. Debido a eso, todavía no tenía su carta de triunfo de sus últimos años – el Thompson Contender, y la Bala Origen, ni había adquirido su habilidad de Control Innato del Tiempo. Básicamente, su equipo eran las ideas de Natalia, que funcionaban como su copia respaldo. Su papel era el de disparar balas en enormes cantidades, y también como a larga distancia, con un tiro mortal con un francotirador. De su maleta, Kiritsugu sacó una metralleta Calico2. Poniéndolo en el bolsillo lateral de su funda, tomó el Rifle Weatherby Mark V3 de Natalia, y frunció el ceño. “¿Realmente se supone que usaré esto?” Debido a su enorme fuerza, ésta no era un arma que se usaría comúnmente al inicio de una batalla, en contra de los magos en general. “Él es nuestro enemigo. No sólo estamos luchando con un monstruo. Por lo tanto, con esto, incluso podemos destruir los dinosaurios de la era antigua.” Naturalmente, en el mundo de hechicería, existen criaturas que no pueden ser destruidas por este rifle – especies fantásticas. Aun así, debería ser suficiente contra el mago que probablemente se convertiría en su enemigo. Su oponente era un mago hereje que manipuló la carne, y creó monstruos… Pero incluso si él fuera a dejar de usar su hechicería, y suplicara por su vida con lágrimas en su rostro, Kiritsugu todavía apretaría el gatillo sin vacilar. Kiritsugu agarró el grueso cañón del rifle con fuerza. Su peso le daba la sensación de tener un arma peligrosa. “…” La expresión en el rostro de Natalia cambió de una mirada distante a una mirada afilada como un cuchillo. Antes de que Kiritsugu pudiera preguntar algo, ella indicó con sus dedos – “Se mueve”. “Esta habitación se mueve. Lo sentí.” Un murmullo. Kiritsugu se dio cuenta también. Al mismo tiempo, comprendió lo que debía hacer. Rápidamente, sacó la mina terrestre anti-personal de su maleta, y puso el cable cerca de la puerta. En el instante en el que se abriera la puerta y alguien entrara, ellos les tenderían una emboscada con 700 esferas de hierro. Sin hacer ruido, Natalia rompió el muro de la habitación, e hizo un agujero donde pudiera pasar una persona – exactamente no lo derrumbó; ella lo redujo en añicos. Obviamente, se trataba de una técnica que sólo se podía hacer por el fortalecimiento de sus capacidades corporales con prana. Tras indicar que ya estaba hecho, Natalia se deslizó a través del agujero en la habitación de al lado, y contuvo el aliento. El sonido de las pisadas. Incluso Kiritsugu – aun siendo un aprendiz – pudo sentir la animosidad desbordante. Natalia se paró frente a la puerta. Kiritsugu la siguió atravesando el agujero, y apretó la metralleta Calico con fuerza. Se oyó un golpe en la puerta de la habitación. Natalia y Kiritsugu se quedaron en silencio. El sonido de los golpes poco a poco ascendió a violentos estruendos. Kiritsugu colocó suavemente la oreja en la pared. Él debía ser capaz de oír el sonido de la mina claymore4 poniéndose en marcha. Uno de ellos estaba pateando la puerta. En el momento en que la puerta se abrió de una patada, un sonido atronador se oyó, y sacudió el hotel entero. Casi al mismo tiempo, Natalia entró en acción. Con un solo golpe, derribó la puerta y saltó encima del resto de los aldeanos que estaban armados con antiguos fusiles y hachas. Kiritsugu corrió hacia la pared, cerca de las escaleras con agilidad, pero se detuvo cuando escuchó algo. Reconociendo al gerente de la recepción en este momento – ahora armado con un revólver antiguo – Kiritsugu abrió fuego sin la menor vacilación. Los miembros del personal que estaban corriendo por las escaleras fueron bañados por balas. Convulsionándose, la sangre se espació de ellos y cayeron muertos. “Vamos.” “De acuerdo.” Kiritsugu coincidió con Natalia. Escaparon por la puerta trasera del hotel, y observaron desde lejos a los aldeanos que se habían reunido en el hotel debido al sonido de la explosión. Estaban sin expresión. Sin sorpresa, sin tristeza, sin enojo – ellos estaban simplemente mirando al hotel, con la boca cerrada. Estaban armados con rifles, pistolas, hoces, hachas y otras armas peligrosas. Finalmente, se movieron lentamente, y luego corrieron hacia el interior del hotel. No tenían miedo, ni dudas; ni siquiera rabia. Después de observar eso, Kiritsugu le entregó los binoculares a Natalia. Al darse cuenta de eso, ella maldijo en voz baja. – Por lo general, si un mago se esconde dentro de una comunidad de aldeanos muy unida, probablemente tomaría alguna de las dos medidas diferentes. Uno, el aislamiento total. Sin involucrarse con nadie ni con nada, ocultándose todo el tiempo, incluso si llegase a ser criticado por quienes lo rodea – la técnica utilizada por los magos que aman la tranquilidad. Y la otra forma cruel era poner todo el pueblo bajo su control. Incluso en un país pequeño como Japón, una comunidad de ‘aldeanos’ podía ser establecida fácilmente. En consecuencia, si todo el pueblo era puesto bajo el control de la hechicería, la probabilidad de que el mago fuese expuesto se reduciría drásticamente. La medida que tomó Heinrich Zepter era el último. Los habitantes del pueblo estaban completamente inexpresivos. La razón por la que fueron separados de sus sentimientos no era para que ellos pudieran soportar algo malo, sino para que sus actividades cerebrales pudieran verse restringidas por un tercero. Probablemente para que cierta información no se filtrara – la ubicación del rey de este pueblo, Heinrich Zepter. “Maldita sea. Si ese es el caso, no vamos a ser capaces de encontrar alguna pista preguntando por los alrededores.” “¿Qué te parece si capturamos una persona y le preguntamos con hechicería?” A la sugerencia de Kiritsugu, la expresión de Natalia se volvió más molesta. “Nuestro oponente es un mago. Él hubiera llevado a cabo las medidas de seguridad por sí mismo en caso de que su ubicación fuese revelada…“ “Si seguimos así, el secuestro no va a funcionar.” “… No hay opción al respecto. Vamos a tratarlo.” Suspiró Natalia. Los dos escaparon por la puerta trasera del hotel, y salieron corriendo en cuclillas. Después de un rato, llegaron a un lugar parecido a un establo. Kiritsugu rápidamente cerró la boca de un hombre que cuidaba de los caballos perezosamente, y le puso un cuchillo en el cuello. “¡No te muevas! ¡Silencio!” Sin embargo, incluso después de haber hecho todo esto, el hombre no parecía resentido, o sorprendido, o que tuviera miedo – su cara estaba totalmente inexpresiva. Reteniendo la boca con fuerza, Kiritsugu trató de hacer comprender al hombre que hablaba en serio, pero no estaba seguro si ese hombre lo entendía o no. “Estamos buscando a un hombre llamado Heinrich Zepter.” A pesar de ello, Kiritsugu aún preguntó. Para probar que el cuchillo no era falso, cortó ligeramente la cara del hombre. “No te queda mucho tiempo. ¡Responde!” El hombre asintió lentamente. Señaló hacia el este. Después de eso, levantó tres dedos. “¿A tres kilómetros de aquí hacia el este? ¿O trescientos metros?” Él negó con la cabeza, y luego asintió – pareciera que el último era el correcto. Después de eso, en el momento en que Kiritsugu trató de matar al hombre con el cuchillo– la espalda del hombre se movió un poco. “¡Chico, muévete!” Al oír estas palabras, Kiritsugu paró de tratar de apuñalar al hombre, y rodó inmediatamente hacia un lado. Al mismo tiempo, un tercer brazo apareció en la espalda e hizo un corte en el espacio donde él se encontraba hacía un momento con gran fuerza. Era un brazo extraño. Era largo y poderoso, a pesar de tener apariencia de un brazo parecido a la de una momia seca. El brazo giró y atacó directamente a Natalia. Como una pelota, la mandó a volar y golpeó el muro. “¡Natalia!” En su grito, Natalia le ordenó, sin duda alguna. “¡Dispárale!” Al instante, Kiritsugu actuó –sosteniendo la metralleta Calico en una mano, apretó el gatillo con la otra. Con una fuerte determinación que hizo que el rifle se desenfocara ligeramente debido al retroceso, Kiritsugu disparó más de veinte balas sobre el hombre. Sin siquiera gemir, el hombre se derrumbó. “¿…?” Kiritsugu sintió que algo andaba mal. Obviamente, ésta no era la primera vez que le disparaba a una persona; pero se sentía como si hubiera asesinado a tiros algo diferente. “¡Chico, mira!” Natalia le dio una patada al cuerpo, y Kiritsugu entendió por qué se sentía de esa manera. “No está sangrando en lo absoluto.” “Sí, es eso. Algo así como una criatura devoradora de cadáveres. Desde afuera parecía estar vivo, y él quizás lo pensó un poco también. Pero por dentro está–” Sacando un cuchillo de su tobillo, de un solo corte, abrió el cuerpo desde el pecho hasta el estómago, y reveló su contenido. “–Vacío. Mira esto. No sólo los pulmones y el corazón. El resto ya fue removido… hmm, ¿esto es debido a que esas eran las únicas partes necesarias para vivir y hablar?“ “Natalia, este no es el momento para estar impresionado. Salgamos rápido de aquí.” “Eso es cierto. Los aldeanos deben estar corriendo para acá después de escuchar ese fuerte ruido.” Algo enorme se retorció detrás de Natalia. Ella vio la mirada de pánico en el rostro de Kiritsugu, y sintió una fuerte intención de matar, como si algo estuviera a punto de atacarla por la espalda. Agachándose, Natalia mostró sus magníficos reflejos para dirigir una potente patada detrás de ella. “Oye, oye.” Incluso Natalia se quedó boquiabierta, y miró a la criatura frente a ella. Era un caballo. No había nada inusual acerca de que sea un caballo. Y no había nada inusual acerca de que ella lo atacara.   El único hecho inusual fue que este era un caballo de dos cabezas; estaban fusionados perfectamente. El lugar donde se habían unido era pegajoso, parecido al chocolate fundido. Entre las ocho patas, dos de ellas eran como las del hombre de hacía unos momentos – llenas de arrugas como un monstruo. “… Un buen gusto tiene su creador.” Quejándose, Natalia pateó a la enorme criatura de nuevo. Atrapando al tembloroso caballo, ella fortaleció su brazo con prana, e hirió al caballo. Sin embargo, el caballo se encolerizó, tratando de patear a Natalia. De alguna manera, mientras ella estaba tratando de retener al caballo, una flecha fue disparada hacia ella. Sin embargo, los sentidos de Natalia eran extraordinarios. En el instante en que sintió que la flecha se acercaba, ella retuvo el cuello del caballo con las dos manos, y lanzó una potente patada – la flecha que se aproximaba se rompió en el aire. Kiritsugu percibió al aldeano que estaba apuntando con arcos y flechas en la azotea. Sin esperar las órdenes de Natalia, él rápidamente apuntó su rifle y le disparó. Junto con el estremecedor sonido, sus hombros se entumecieron. Un gran agujero apareció en el pecho del hombre. “… ¡Maldita sea!” Era su negligencia, la criatura era más fuerte de lo que había pensado. El caballo de dos cabezas escapó del agarre de Natalia. El caballo los miró a ambos con odio, y se retiró rápidamente. Ellos se sorprendieron, pero se movieron con rapidez. “¡¿Va a… subirse a la pared?!” El enorme caballo era sorprendentemente rápido – ágilmente subió la pared de una de las casas del pueblo. Kiritsugu rápidamente apuntó su rifle y disparó contra él. Golpeó los tablones de la pared – se sintió como un golpe directo. Mientras cojeaba, después de haber subido a la azotea, el caballo de dos cabezas volteó una de sus cabezas a un lado y empezó a galopar en el techo. “… ¿Tienes dos corazones?” Kiritsugu quiso maldecirse a sí mismo por haber dejado pasar un hecho evidente. ¡Espera! Al grito de Natalia infundido de ira – pero con un estridente tono alto, el caballo saltó y galopó hacia el lugar donde los aldeanos estaban reunidos. Un salto como el de una rana de tamaño natural. Natalia probablemente podría ir tras él, pero en ese momento era obvio que ella iba a toparse con esos aldeanos. “¿Qué vas a hacer? ¿Vas a atacar?” A las palabras de Kiritsugu, Natalia mostró un momento de vacilación. Era algo raro para una mujer que tomaba decisiones de forma espontánea. Pero, pensando en ello, sólo había dos opciones en esta situación – escapar o atacar. Al menos, esas fueron las únicas ideas que vinieron a la mente de Kiritsugu. Descubrir al azar la sede de los magos estaba a la altura de sus locuras. Sin embargo – “No – no vamos a atacar.” “Por lo tanto, ¿escaparemos?” “No – no vamos a salir corriendo.” Natalia presentó una tercera opción. Mirando a Kiritsugu, ella sonrió ampliamente y dijo. “Voy a morir. Y luego, llevarás el caballo a Zepter.” Esto hizo que Kiritsugu quedara estupefacto. Después de recibir los informes del caballo de dos cabezas, en gran número, los habitantes del pueblo llevaron al animal a un establo. Sumaban alrededor de la mitad de toda la población. Y luego, descubrieron a una mujer que caminaba tambaleándose. Alguien puso una flecha en un arco, y la disparó. Alguien apretó el gatillo de un rifle viejo. Y todo terminó. Recibiendo un disparo en el codo por la bala, y en el abdomen por la flecha, la mujer se desplomó lentamente. Los aldeanos rodearon el cadáver de la mujer, mirándola. “Está muerta.” “Sí.” “Tenemos que llevarla al médico.” “El médico no está cerca.” “Umm. Sawyer está aquí.” “Aquí no hay instalaciones adecuadas. Vamos a dejarla con Sawyer y los demás.” “Vamos a hacerlo.” “Podría haber otro por ahí.” “Encuéntrenlo también.” Ahogando su conciencia, sin tomar ningún aliento, con su corazón totalmente inmóvil, Natalia estaba literalmente ‘muerta’; sólo su sentido del oído todavía estaba en funcionamiento. Por consiguiente, las profundidades de su conciencia respondieron a la palabra ‘doctor’, y llegó a una conclusión después de reflexionar – Doctor, es decir, ‘el que los cura’, tenía que ser Heinrich Zepter. Bueno, llévenme allí, al lugar de Heinrich Zepter. Kiritsugu se había metido dentro de una casa abandonada, y exhaló un suspiro de alivio después de sentir el prana que Natalia dejaba. Parecía que el muro podría derrumbarse. Fue una suerte que los aldeanos no tomaran ninguna acción imprudente como diseccionar el cadáver en el lugar. Sin embargo, ahora era el momento crítico para Kiritsugu. En primer lugar, debería localizar hacia dónde se dirigía el prana de Natalia. Eso era relativamente fácil, pero el problema era cómo llegar hasta allí. Deslizarse hasta allí a través de dos mil aldeanos sin ser notado. “Oh bueno, ese chico debería ser capaz de trabajar en algo.” Natalia dijo eso mientras sonreía, al mismo tiempo que se dirigía al lugar de la muerte. “Naturalmente, él será capaz de hacer algo.” Mientras murmuraba eso, Kiritsugu centraba más sus nervios. Colgando de una cuerda, una piedra brillante comenzó a moverse sin ser tocada. Al poco tiempo, la piedra señaló hacia un punto por delante. “… Este, ¿eh?” Después de asegurarse de que no había nadie cerca, él se deslizó con rapidez desde la salida de la casa. Siendo llevada por los aldeanos, Natalia fue trasladada a la casa del doctor. Ella predijo – que Zepter no iba a creer la descuidada declaración de su muerte por parte de los aldeanos. Ella predijo – que en el instante que Zepter la viera, iba a tratar de matarla. Ella predijo – que debido a que, en lugar de dar su reconocimiento hacia ella, él iba a moverse primero, y tomaría el control de la situación inmediatamente. Ella predijo – que los aldeanos decían “El doctor no está aquí. ¿Está lejos?” De todas formas eso sería conveniente. Como había un millar de ellos allí, ellos no serían demasiado difíciles. Una pregunta – ¿Quién era ‘Sawyer’? ¿El representante del doctor? Entonces él debía ser su aprendiz o ayudante. En cualquier caso, si era alguien que seguía practicando su oficio, entonces ella debía de tener cuidado con él también. Un deseo – Ella quería que los aldeanos no se entretuvieran en la casa del doctor después de que la dejaran, sino que regresaran a casa inmediatamente. Ella escuchó el sonido de una puerta abriéndose en algún lugar. Oyó el rechinante sonido del piso producido por alguien caminando pesadamente. Natalia comprendió que había arribado. Debido a que no estaba respirando, ella no podía sentir el olor, pero sintiendo con su piel, pudo comprender que ‘había entrado en la casa’. Ella suprimió su prana tanto como pudo. Con la información que había estado transmitiendo, Kiritsugu ya debería conocer la localización de este lugar. Su estrategia estaba basada en esa suposición. “Sawyer… trae los ingredientes aquí.” “Ya eta ai.” (Ya están allí) Una voz poco clara. Al parecer era el sujeto llamado Sawyer. Junto al sonido de pies arrastrándose, ella era capaz de oír el sonido de algunos metales arañando el suelo. Sin embargo, aún no podía abrir sus ojos. Los aldeanos se marchaban. El sonido de pasos se desvanecía gradualmente, y junto a un largo sonido chirriante, la última persona cerró la puerta y se marchó. Después de confirmar eso por algunos segundos – en primer lugar, ella activó su visión. Sin mover su cabeza, observó sus alrededores. Justo como esperaba, no había herramientas médicas, pero en la pared había varios tipos de herramientas mágicas, un martillo para diseccionar, cuchillos, y machetes. En los frascos de la estantería, con cinco brazos y colmillos afilados, fetos la observaban con pupilas blancas. En el abarrotado piso habían pilas de libros mágicos – no habían libros raros, pero eran muy caros – esparcidos y apilados. Las paredes, las camas, la iluminación; todo estaba gastado, pero sin lugar a dudas, este era el taller de un magus. Natalia creía esto firmemente. Este lugar era la residencia de Heinrich Zepter. “¿…Qué? ¿Aún estás con vida?” A la vez que saltó de la cama – activando sus circuitos mágicos, ella rompió el cuello de Sawyer, quien aún estaba distraído. “¿Oh?” Tras romper su cuello, Natalia descubrió algo. La cara de Sawyer asumió una expresión inexplicable, como la de una pintura surrealista. Y luego, a pesar del hecho de que el cuello de Sawyer había sido roto, él aún continuaba con vida. Vivo y moviéndose. “¡Qué estás haciendo!” Sin colocar su cabeza desprendida y colgando sin siquiera ubicarla en la posición correcta, Sawyer atacó con un machete corroído con sangre. Evadiéndolo fácilmente, ella concentró prana en su mano, y asestó un golpe de karate a su cuello – su cuerpo fue partido a la mitad. Ella se alejó de la chorreante sangre. Esta vez, Natalia realmente creía que lo había eliminado. El hombre frente a ella – ya sea un magus, un fantasma devorador de cadáveres, u otra criatura, en el momento que su corazón fue escindido, él perdería todas sus funciones corporales. – Se suponía que ese sería el caso. “¿Qu…?” Ella estaba conmocionada. Partido limpiamente a la mitad, aún exudando sangre e intestinos, el cadáver se retorció. Los restos del cuerpo de la derecha y la izquierda se ayudaron y sostuvieron mutuamente, mientras el cuerpo intentaba ponerse de pie. “Muévete… gi… vide… videeeooo…” “– Cualquiera sea la investigación que él estuviera realizando, nunca hubiera imaginado un monstruo tan repugnante.” Suspirando, ella pateó a Sawyer – que intentó atacarla. “Im… posible…” “¿Dónde se encuentra el ‘doctor’ que te creó? Si no me lo dices, te cortaré hasta que no puedas decir una palabra.” Recogiendo el machete, Natalia lo sostuvo en la garganta de Sawyer. “Doctor… ALLÍ…” Con un dedo tembloroso, Sawyer apuntó a la biblioteca. Natalia pensó que había una salida detrás, pero al parecer ese no era el caso. “Ttt, televvi… televisión…” El alborotado dedo de Sawyer se alternaba entre la televisión y la biblioteca. En la biblioteca se encontraban algunos absurdos libros de hechicería, algo como los registros clínicos de los aldeanos, y – “¿Videocinta…?” ¿Televisión y videocinta? Por un momento, la atención de Natalia se desvió de Sawyer quien se retorcía detrás de ella – o más bien, ella no sintió que nadie la tuviera en la mira. Debido a eso, en el instante que ella volteó, junto con el sonido del piso de madera rompiéndose, no pudo detener a Sawyer de ser tragado a una tremenda velocidad. “¡¿…?!” En pánico, ella corrió hacia el hoyo que había aparecido en el suelo – una oscuridad total, como si estuviera dirigido hacia las profundidades del infierno. No podía verse nada. Ella encendió un cigarrillo y lo arrojó dentro. La pequeña luz roja cayó en las profundidades del hoyo antes de desaparecer lentamente. “Pues bien…” Luego de estar desconcertada por un instante, Natalia encendió un segundo cigarrillo, recogió la videocinta y los registros médicos, y se sentó frente a la televisión. En esta aldea había monstruos capaces de arrastrar un cadáver en un instante. Si ese era el caso, obviamente ella necesitaría obtener información sobre cómo poder enfrentarlos. La persona en el video era la que había esperado. “Transcendiendo el video, o más bien, finalmente nos conocemos, Heinrich Zepter.” Murmurando eso, Natalia sonrió fríamente. Emiya Kiritsugu confirmó que el edificio al que fue llevada Natalia no era un simple edificio, sino que era uno del cual emanaba intenso olor a sangre, un lugar como ningún otro. El taller del malvado magus fue utilizado para todo tipo de experimentos biológicos, y absorbió todo el sufrimiento y la desesperación. Era una escena siniestra, imposible de describir en una sola palabra. Con una sensación de repugnancia que sobrepasaba al taller de su padre – el lugar en donde Emiya Kiritsugu perdió sus esperanzas en el mundo – mientras soportaba una helada crueldad, él entró lentamente. “Has venido.” Él asintió a las palabras de Natalia. A pesar de estar bajo tales circunstancias, ella estaba instalada en el sofá, mirando televisión. Él casi suelta palabras de incredulidad, pero después de notar que ella apuntaba a la televisión, él volteó hacia la pantalla. “¿Zepter…?” “Sí. Chico, parece ser que esto es una carta de amor del infierno.” En la pantalla aparecía un hombre con cabello largo. Su barba cubría la mitad de su rostro. Sus ojos hundidos no emanaban ni locura ni vacío, sino racionalidad. “- Cazadores de la Asociación. Mi nombre es Heinrich Zepter. El hombre al que persiguen.” No había rastro de éxito en su voz – él simplemente les estaba informando ese hecho con plena indiferencia. “Años después de que miren este video, yo ya no me encuentro en este mundo desde 1978.” “¿…No en este mundo? ¿Son estas sus últimas palabras? Kiritsugu frunció el ceño. “¿Las últimas palabras de un magus…?” Murmuró Natalia. “Es cierto que la familia Zepter se apartó del camino correcto. Éramos capaces de resucitar personas – revivir el cuerpo, revivir el conocimiento almacenado en el cerebro, e incluso restaurar circuitos mágicos destruidos. Ya que hemos llegado tan lejos, sólo resta investigar formas de recuperar el alma de los muertos. Sin embargo, no nos especializamos en el espíritu, sino en revivir la carne.” Él sacudió su cabeza como si estuviera aburrido. “Un dedo, una hebra de cabello, uñas, globos oculares – esta es la técnica que permite resucitar el cuerpo de forma perfecta a través de todo esto. Alternativamente remplazando un brazo perdido con el brazo de otra persona, y hacer que el cuerpo lo reconozca como el original. Y finalmente, ser capaz de inducir la identificación de nuevas partes del cuerpo, y hacer que se muevan.” Él estuvo en silencio por un momento, y murmuró. “… He hecho todo eso… ¿Y qué? Es aburrido, y no importa qué palabras use para describirlo, esto no es más que un simple juguete.” “Sí, así es.” Susurró Natalia – Kiritsugu también estaba de acuerdo. Esta técnica era digna de elogios. Si no fuera algo mágico, y en cambio se hubiera desarrollado a través de métodos científicos, no habría dudas de que tendría un enorme impacto en el mundo. Sin embargo, desde el punto de vista de la hechicería, esta era simplemente una técnica inútil. ¿Quién querría una técnica que produce muertos vivos en masa? En ese momento, Kiritsugu se dio cuenta de algo. Hasta hace sólo un instante, la imagen en la televisión –definitivamente poseía un destello de inteligencia en sus ojos. También había racionalidad en su voz. Pero, al progresar su explicación, gradualmente desaparecieron. “– Sí, nada más que un juguete. Pero, a pesar que nosotros – no – Yo busco el origen como otros magi… Estoy completamente apegado a esos juguetes.” “…” La locura emanaba por todo el cuerpo del hombre en la pantalla. Con una sonrisa rígida, era como si la oscuridad se desbordaba por su boca abierta. “Así es. Estoy completamente apegado a ellos. Me he enamorado de ellos. ¡Las criaturas que inventé me dan alegría desde el fondo de mi corazón!” Observando su sonrisa infantil, Kiritsugu pensó – él había peleado contra magi que se desviaron del camino correcto, en varias ocasiones. Con una actitud con la que parecían ser monjes ascéticos, ellos llevaron a cabo acciones de extrema brutalidad – pero comparado con ellos, Zepter era una persona verdaderamente interesante. Kiritsugu incluso sintió como si su talón estuviera siendo sujetado, y siendo lentamente arrastrado por esta persona. Su visión se oscureció, y comenzó a tambalearse… “Chico, que no te abrume.” Al decir esto, Natalia presionó el cigarrillo que estaba fumando contra la mano de Kiritsugu. “… ¡tsch!” En ese instante, su conciencia regresó junto con el dolor. “Puedes emborracharte con vino, pero un cazador atrapado en la locura debe ser descalificado, ¿no crees?” Al escuchar la severa advertencia, Kiritsugu no pudo evitar hacer muecas. “Hace un momento…” “No era hechicería. Sólo fue una insinuación. Probablemente por eso no pudiste entenderlo huh… Eso fue demencia pura. Su meta, su razón de vida, sus intereses y sus pasatiempos están unidos. Desde el punto de vista de un magus, para nosotros este es el mayor obstáculo.” Motivo – jugar con cadáveres. Razón de vida – jugar con cadáveres. Interés – jugar con cadáveres. Pasatiempos – jugar con cadáveres. “Hay seis manos, y se mueven simultáneamente. Cuatros piernas, comenzando a correr simultáneamente. Dos cabezas, pensando al mismo tiempo, siendo incrustadas en el cuerpo y dando una vista del exterior…. ¡Sí, es realmente divertido! ¡Es lo mejor!” Kiritsugu fue el primero en descubrir esto. “Natalia… El piso en la pantalla, ¿no se está moviendo?” “¿Eh?” Murmurando, Natalia desplazó su atención hacia el piso en la pantalla. Ciertamente se estaba moviendo. Retorciéndose espasmódicamente, como si fuera un ser vivo. “Yo invento monstruos, invento, invento e invento. Es un pena, pero al mismo tiempo, sé que al perseguir mi interés me he desviado del camino de los humanos y los magi. Es por eso que he venido a Estados Unidos; en esta tierra desolada, puedo utilizar la tierra y sus habitantes para llevar a cabo mi investigación a mi gusto.” “…. ¿Esa investigación, tanto como él quiera?” Viéndose satisfecho con sí mismo, él tomó un profundo respiro. “Sí, estoy completamente satisfecho. Fusionando bebés y ancianos, creando hombres de tres cabezas… Incluso Hecatónquiros5. Puedo recrear versiones en miniatura de ellos. Es por eso que estoy satisfecho. Ahora, sólo puedo imaginar una cosa que queda por hacer.” Justo ahora, no era sólo el piso lo que temblaba, sino que todo el lugar lo hacía. Tragando saliva, Natalia y Kiritsugu continuaron observando. “¡Y eso es convertirme a mí mismo en un monstruo! – ¿No es un final estupendo?” Junto a sus palabras, Zepter fue envuelto en algo gigantesco, y junto con un grito de total placer, fue tragado completamente. El video se detuvo, y un ruido apareció en la pantalla. Ambos se pararon, y comenzaron a moverse. “¿Ese sujeto se convirtió a sí mismo en un monstruo?” Kiritsugu preguntó, y Natalia asintió. “…Bueno, no significa nada. Para un magus que se desvió del camino correcto, no es de sorprenderse que acabe metido en alguna locura. Usualmente, es lógico asociar a tales personas con las absurdidades; por ese motivo tales cosas son reconocidas como la norma.” Natalia volteó abruptamente, y le dijo a Kiritsugu. “Esto también se aplica a ti y a mí. Si nos desviamos un poco de nuestros caminos, caeremos. Como la familia Zepter, al aislarse del mundo exterior y continuar con sus experimentos, sin darse cuenta, en poco tiempo comenzaron a recorrer un camino equivocado. Esa locura te visitará en un pestañeo, y robará tu cordura.” Kiritsugu permaneció en silencio. Las lecciones técnicas y mágicas de Natalia– todas ellas eran importantes, pero él pensaba que las palabras que dijo en este momento eran más importante que todas ellas. “La demencia te encubrirá. Aquellos que son controlados por ella incluso pueden parecer caballeros cultos.” “¿Entonces cómo ves a través de la máscara?” “No juzgues a un libro por su portada. Está bien confiar en tus instintos, pero no dependas únicamente de tu deseo. Y además, no te pierdas.” Ambos observaron el enorme hoyo en el suelo – Parecía el camino hacia el infierno. “Muy bien… es hora de cazar.” Kiritsugu asintió, y sujetando firmemente a Natalia, ambos saltaron. Cinco metros. Diez metros. Quince metros. Cuando alcanzaron los veinte metros bajo tierra, Natalia finalmente vio el suelo. Ella presionó su mano libre contra la pared y con sus uñas freno la caída. Mientras sentía la vibración de la espalda de Natalia, Kiritsugu se preguntó si podrían volver a subir por este lugar, y comenzó a explorar rutas de escape. El descenso de Natalia se detuvo, y Kiritsugu se bajó de su espalda. “… Es realmente inmenso.” Natalia asintió y sonrió ante las palabras de Kiritsugu que eran similares a su impresión de Estados Unidos. Ellos habían llegado a una enorme cueva natural. Era difícil decir qué tan amplio era el lugar. Pero indudablemente esta cueva era tan inmensa como la aldea entera. Y luego, a pesar de la profunda oscuridad que aparentemente negaba toda existencia, ambos confirmaron algo más. Algo está aquí… Algo increíblemente peligroso, herético, repulsivo, y aterrador. Es decir, algo no humano – un socio de los no humanos. Y… |Debido a eso, ambos debían enfrentarse.| Una vez más, ambos eran magi (extraterrestres) que habían sobrepasado los límites de un ser humano normal. Utilizando hechicería, Natalia creó una pequeña lámpara, y Kiritsugu comenzó a avanzar. Después de caminar por un tiempo, Natalia pudo sentir el aroma de algo descomponiéndose. El repulsivo hedor de carne descompuesta. El sonido de aplastar la carne contra carne podía ser oído desde la profunda oscuridad. Apagando la lámpara inmediatamente, ellos caminaron mientras se acostumbraban a la inmersa oscuridad. Y luego… lo vieron. Para ilustrarlo, era una hormiga reina gigante. A través del enorme oviducto, un humano nació. Envuelto en un pegajoso líquido, completamente vestido – y con un rostro que ellos recordaban. El hombre que Kiritsugu debería haber asesinado. “Ese sujeto, es el hote-” “Sí, el hotelero que nos recibió.” Retirando el viscoso líquido con sus manos, él se paró inestablemente, y se adentró en la cueva. “Lo que significa que, todos los aldeanos que nos atacaron hasta el momento…” “Todos ellos eran los hijos de este hombre.” Indudablemente era una criatura que sobrepasaba los sueños más salvajes de Kiritsugu. Al ver esa figura, incluso le era difícil poder mantener su cordura. Su determinación de acero, el rifle en sus manos, y sobre todo, la increíble compostura de Natalia – todo esto fue lo que lo rescató del abismo de la locura. Conteniendo silenciosamente la locura, él esperó instrucciones; y pensó posibles instrucciones. “Bien. El desagradable monstruo similar a Beelzebub6 frente a nosotros, es nuestro objetivo – Heinrich Zepter. Pero… ¿qué crees que deberíamos hacer?” “Debemos matarlo.” “Correcto. Ahora chico, ¿cómo haremos eso?” “Destruyéndolo completamente con fuego. Afortunadamente, tenemos suficientes explosivos. Lo aniquilamos de un solo golpe, antes de que tenga tiempo de reaccionar.” Natalia asintió. “Tu sugerencia es buena. Si tardamos demasiado, los aldeanos también se unirán.” “Entonces…” “Sólo hay un problema. ¿Esa cosa asquerosa es tan estúpida como luce en el exterior? ¿O aún posee la inteligencia de Heinrich Zepter?” “Si él aún posee inteligencia, entonces…” “Entonces él ya debe saber desde hace ya mucho tiempo que nosotros estamos aquí, y que estamos pensando en cómo atacarlo; cosas como esa. Y además, él ya debe haber pensado en una forma de contraatacar. Podríamos ser mutilados y asesinados, o ser conservados como esclavos. Una de esas opciones” “…” “Pero, sobreviviremos. Si cualquier cosa ocurre, hay formas de hacerlo…” “¿Retirada?” “No no, no nos retiraremos. Quiero preparar algunas medidas preventivas.” Diciendo eso, Natalia sacó un arma de la mochila de Kiritsugu. “¿Que harás con eso?” “Primero la esconderé. Es nuestra carta del triunfo.” Natalia sonrió osadamente. “Chico, ¿todas las preparaciones están listas?” Asintiendo, Kiritsugu preparó el rifle Weatherby Mk V. justo como Natalia dijo, esta arma era perfecta para atacar a la criatura. “Pues bien, regresaré.” Ella se paró, y caminó rápidamente hacia el monstruo enfrente. Los ojos compuestos la observaron simultáneamente. Sin ser molestada por eso, y sin ningún rastro de miedo, Natalia hizo una reverencia formal. “Hola, Heinrich Zepter. Es un placer conocerte.” El monstruo permaneció en silencio. Luego, sin abrir su boca, él le habló a Natalia utilizando telepatía. “También es un honor conocerte, Natalia.” “… ¿Cómo sabes mi nombre?” “Yo soy la aldea entera. No hay nada que yo desconozca. Incluyendo a aquel muchacho que se esconde por allí, mientras me apunta.” “…” Kiritsugu estaba en silencio. El rifle estaba listo, y él sólo esperaba la señal. “Ya veo, ciertamente has tenido éxito. Ese es un cuerpo sin límites, que incluso se acerca a la inmortalidad. Pero aun así, eres humano.” “Ciertamente. Yo, Heinrich Zepter, sin ninguna duda soy un humano, y amo este cuerpo.” “Pues bien, ¿pretendes manipular a estos aldeanos que son parte de ti, y vivir una vida pacífica como esta para siempre?” “De ninguna manera. Aún soy humano – un magus. De tal modo, también tengo deseos.” “No es que quieras ser reconocido… ¿Quieres alcanzar el Origen? ¿Utilizar tu inmortalidad para alcanzar el territorio tan deseado por todos?” Él subsiguiente desdén de Zepter hacia esas palabras podía ser sentido incluso por Kiritsugu. El origen – el objetivo que más o menos todos los magi persiguen; la espiral del origen y el final de todas las cosas. “También quiero preguntarte algo, cazadora de magi. ¿Por qué no buscas eso?” “Porque no hay necesidad de desearlo. No estoy satisfecha con tener el mundo entero para mí misma, pero no soy tan codiciosa al punto de estar dispuesta a desechar el mismo mundo.” “Es lo mismo para mí. Amo este mundo caótico. ¿Cuál es el punto de comprender el origen y el final de este mundo?

‘Todo se encuentra allí’, todos esos dichos son aburridos. Lo que simplemente deseo es que pueda transformarme a mí mismo –algo tan simple como eso.”

“¿Oh? Nos llevamos bien, ¿no es así?” Apretando su puño, Natalia activó sus circuitos mágicos, y accionó una magia extremadamente poderosa – obvia incluso para los espectadores. “Sí. ¡Es por eso que en este mundo uno de nosotros es más que suficiente!” En el instante que recibió la señal, Kiritsugu no dudó en jalar el gatillo. Un ensordecedor rugido resonó en la cueva, haciendo estallar los ojos compuestos de Zepter. Natalia comenzó a correr velozmente. Innumerables manos surgieron para atraparla. “– ¡Demasiado ingenuo!” Su brazo derecho brilló, y rebanó los brazos. La pesadilla que seduce hombres y succiona sus almas hasta que queden secos – Natalia, cuyos ancestros eran Succubus7, poseía un tipo de poder especial. El cual era – una potenciación producida al liberar todas sus reservas de prana de una vez. Como un avión de caza incrementa su fuerza de propulsión en un cincuenta por ciento por medio de la postcombustión, la fuerza en sus brazos y piernas; su aguante, su fuerza instantánea – todas sus habilidades corporales fueron amplificadas enormemente. Es algo similar a una mejora corporal mediante el uso de runas, pero por un periodo mucho más corto. Pero para compensar esto, Natalia utilizaba violencia extrema. Enloquecida – Natalia absorbió parte del alma de sus amigos magi más cercanos, y así prepararse para esta batalla. Ella balanceaba su brazo y cercenaba. Sus piernas perforaban el cuerpo, y pateaba haciendo que los intestinos salieran. El potente jugo gástrico comenzó a brotar – ella esquivó el líquido que caía como lluvia con mínimos pasos. Al mismo tiempo, al igual que la precisión de una máquina, Kiritsugu había estado disparándole con el rifle. Las balas Weatherby Magnum8 – que contaban con un peso monstruoso de 500 granos (32 gramos) por bala – continuaron arrasando con la carne de Zepter. Él no era muy duro, sino que era bastante débil. Después de todo, su cuerpo estaba hecho con los restos de hombres y bestias. Pero, debido a eso, él dispersaba y absorbía las balas. Era como dispararle a un montón de lodo. Incluso después de ser golpeado por las balas, él regresaba a su forma original inmediatamente. Subsecuentemente, Kiritsugu comenzó a impacientarse. Sin embargo, a pesar de eso, las manos que jalaban el gatillo, y los ojos que apuntaban – ninguno de ellos permitirían que ese monstruo continuara con vida. Y entonces – los movimientos de Natalia se tornaron lentos abruptamente. El miedo más grande de Kiritsugu se hizo realidad. El precio que le otorgaba a su cuerpo esa gran fuerza – la supuestamente enorme cantidad de prana almacenada había sido cortada repentinamente. Natalia volvió a cambiar a su consumo de prana normal. No significa que su prana haya sido cortado completamente. La consumición de prana se había reducido, y naturalmente, sus habilidades corporales se debilitaron abruptamente. Zepter no perdió la oportunidad. Ella fue atrapada por diez manos restantes. Los ojos compuestos la observaron al unísono. Su respiración se aceleró y comenzó a sudar, aun así Natalia rió. “… Bienvenidos a mi aldea.” Al mismo tiempo que esas palabras fueron pronunciadas, un enorme hoyo se abrió en el medio del abdomen de Zepter… y Natalia fue tragada. “¡Natalia!” Para ella era imposible oírlo. Pero, aun comprendiendo este hecho, Kiritsugu gritó de todas formas. Zepter cambió su objetivo a Kiritsugu. “Bien muchacho. El futuro se encuentra en tus manos. Eres el siguiente. Ven y vive dentro de mi cuerpo.” La gran pared de carne se aproximó a Kiritsugu, quien no se movía para nada. |Eso es todo, ¿Huh?| Kiritsugu se había resignado a su destino. En ese momento – Repentinamente el oviducto de Zepter se inflamó, y estalló en llamas. “¡¿Qu-é…?!” Confundido, Zepter se olvidó de Kiritsugu que se encontraba frente a él. Kiritsugu recordó el arma que Natalia había retirado antes de su mochila – la granada de mano incendiaria TH39. “¡Hazlo ahora!” Al oír esas palabras, Kiritsugu reflexivamente alistó su rifle. En ese instante – el abdomen de Zepter fue hecho añicos, y Natalia salió de su interior. Y, Kiritsugu lo vio. Él se encontraba en el abdomen. Era una momia delgada, pero viendo sus ojos vacíos, él definitivamente era la persona que Kiritsugu había visto en las fotos. Sus ojos se encontraron, y esos ojos se entornaron con temor.   El gatillo fue jalado – y el rifle Weatherby Magnum V aniquiló ese rostro. Los circuitos mágicos, que habían estado manteniendo el cuerpo unido, perdieron contacto con el cerebro de Zepter, se interrumpieron y dejaron de funcionar. Como resultado, el cuerpo se tornó inestable como una masa de carne, y se desmoronó. “¡Ahh, apesta! Huele a vómito.” Parándose abruptamente, Natalia lanzó los brazos y músculos a su alrededor, y comenzó a buscar su objetivo. “Chico, ayúdame. La cresta mágica debe estar aquí, en algún lugar.” Los secretos mágicos que la familia Zepter grabó en su propio cuerpo. Si alguien vendiera eso, podría vivir de manera confortable por bastante tiempo. Después de todo, Natalia era muy extravagante con sus gastos (ella compraba casas y albergues aquí y allá por capricho; ella los llamaba ‘escondites’). Por lo tanto si eso pudiera durar dos meses, sería genial. Al final, el que encontró la cresta mágica grabada en el cadáver momificado fue Kiritsugu. “…” Él estaba por llamar a Natalia, pero titubeó. Esta hechicería herética era demasiado peligrosa. No se trataba de revivir a los muertos, sino de crear otros seres vivos utilizando a los muertos. ¿Está bien que una persona cualquiera herede tal hechicería? Ese era su tren de pensamiento. Él pensó rápidamente. ¿Vas a traicionar a tu maestra? Una pequeña voz resonó en su mente. Pero, eso fue contrarrestado por otra voz… – Hey Kerry, ¿qué quieres ser cuando crezcas? – Dejando de titubear, Kiritsugu introdujo aquella mano en las profundidades de la carne en descomposición. “¿Lo encontraste?” “No… nada. No pude encontrarlo.” Él mintió naturalmente, sin revelar nada anormal. Él incluso se sorprendió de sí mismo al ser capaz de mentir perfecta y naturalmente. Natalia soltó un suspiro. “Si continuamos buscando, deberíamos ser capaces de encontrarlo. Pero es más probable que nos sofoquemos con esta carne descompuesta antes de eso.” “¿Entonces abandonaremos la búsqueda?” Natalia asintió a la pregunta de Kiritsugu con disgusto. “Antes de regresar, incineremos todo esto.” Él se adentró en la cueva, y volteó. La Cresta mágica se encontraba en algún lugar dentro de esta pila de carne putrefacta, pero… Kiritsugu arrojó granadas de mano incendiarias sucesivamente. La carne comenzó a quemarse abruptamente; las flamas incineraron todos los restos. “Esto debería bastar.” Al final, Kiritsugu murmuró eso. Tras salir de la cueva, ellos confirmaron que los dos mil aldeanos se convirtieron en trozos de carne. Muerte, muerte, muerte – no, eso ni siquiera era muerte. Lo que quedaba en este lugar era sólo la sombra de humanos – puros desechos. – Y, en este momento, Emiya Kiritsugu conducía el automóvil. Hasta hace sólo un momento, Natalia ha estado quejándose diciendo “¡Qué desperdicio de esfuerzos! ¡Un gran déficit!”. Pero probablemente al estar exhausta por el uso excesivo de prana, ella se durmió nuevamente. Mientras observaba su cara de dormida, Kiritsugu pensó al respecto. ¿Es correcto hacer algo por tu propio bien? Él no tenía dudas sobre eso. Un mago herético que robó la vida de dos mil personas – No había necesidad de que tal hechicería perteneciente a un demente le sea otorgada a alguien más. Aquella hechicería… debía ser destruida. Lo que le preocupaba era que le había mentido a Natalia. Aún más, a pesar de su aguda intuición, ella no lo descubrió. Pisando el acelerador, Kiritsugu aceleró aún más. Oh bueno, esperaré el siguiente trabajo. Definitivamente salvaré a alguien la próxima vez. Nada quedó después de que Natalia y Kiritsugu abandonaran la aldea. Los edificios fueron completamente destruidos, y el nombre desapareció de los mapas. Unos pocos días después, incluso la ‘muerte’ desapareció de allí. ‘Present Mountain’ – Ya nadie volvió a recordar esta aldea.

FIN