Fate/Zero:Acto 1 Parte 3

From Baka-Tsuki
Jump to navigation Jump to search

-282:14:41[edit]

Al mismo tiempo, en la lejana tierra del este que se encuentra al otro lado del océano, otra persona estaba recibiendo la misma clase de reporte que Kiritsugu, proporcionado por su espía en Inglaterra.

Al ser un mago legítimo Tōsaka Tokiomi no dependería de utilizar las nuevas tecnologías del mundo vulgar como lo hace Kiritsugu. Él era hábil en utilizar la técnica secreta exclusiva de la familia Tōsaka para comunicarse a largas distancias, una gema mágica pasada a través de las generaciones.

Alzándose en Miyamachou dentro Fuyuki se encuentra la mansión de los Tōsaka. En el taller de Tokiomi construido debajo de la superficie, una instalación de equipo experimental similar a lo que es conocido comúnmente como un péndulo negro se encontraba siendo preparada. La diferencia entre el equipo experimental de la física común y este era que la plomada de gran tamaño contenía una gema mágica que era una reliquia familiar de los Tōsaka, y que fue construido para que la tinta que fluía a través de la cuerda pudiera mojar esta gema.

La piedra que hacia juego con la joya de este péndulo actualmente la poseía el espía de los Tōsaka. Si esta piedra fuera puesta frente a un papel continuo y se comenzara a escribir, el péndulo que hacia pareja con ella comenzaría a ondularse, la tinta que gotearía comenzaría a escribir un texto perfecto y sin errores en el papel continuo debajo de ella. Este era el tipo de estructura de la que se trataba

Justo ahora, la gema en el péndulo y la piedra del otro lado del mundo en Londres, se encontraban ondulando en sincronía, y al observar este extraño y repetitivo movimiento sin patrones, la escritura del espía comenzaba a reaparecer delicada y certeramente.

Tokiomi, notando este hecho, levanto el papel sin esperar a que la tinta se secara completamente y comenzó a consultar lo que estaba grabado en él.

“— Sin importar cuantas veces vea este aparato siempre me hace sentir que es poco confiable.”

Kotomine Kirei, quien había estado relajado a su lado todo este tiempo, expreso sus sentimientos sin ningún tacto.

“Oh, ¿Así que crees que el fax es más conveniente?”

“Si se utiliza este método, sin importar si fallara la energía eléctrica, no habría ninguna interrupción. Tampoco hay ninguna necesidad de preocuparse sobre que el reporte sea divulgado. Sin necesidad de depender de la tecnología nueva, nosotros los magos hemos poseído desde hace mucho aparatos que no son inferiores a las herramientas modernas de hoy en día.”

Aun así, desde el punto de vista de Kirei, que el fax pueda ser utilizado por cualquiera lo hacía mucho más conveniente. ‘Cualquiera’ podía utilizarlo, esta inevitabilidad era definitivamente algo que Tokiomi no podía comprender. Es perfectamente razonable que las técnicas y conocimientos de los aristócratas y los plebeyos sean diferentes… aun en la actualidad, Tokiomi aun llevaba consigo este modo de pensar tan atrasado, él en verdad era un ‘mago’ legítimo.

“El último reporte de la ‘Torre del Reloj’. El ‘prodigio’ Lord El-Melloi parece haber obtenido una reliquia perdida. Si ese es el caso entonces está confirmado que él también será un participante. Hmph, un oponente peligroso. Así que está claro, ya existen cinco Maestros incluyéndome a mí mismo…”

“De verdad me preocupa que aun se mantengan dos posiciones vacías.”

“¿Por qué?, simplemente quiere decir que no hay portadores adecuados para los Sellos de Comando. Cuando el tiempo se termine, el Grial llenara los espacios vacíos al azar para llenar los siete puestos sin que repare en la calidad de los seleccionados. Con el fin de tener suficiente gente deberán de haber dos personajes menores. No hay necesidad de estar alerta.”

Esto en verdad era adecuado al optimismo de Tokiomi. Al haber sido su estudiante por tres años, Kirei ahora entendía a su maestro bastante bien. Aunque él en verdad es una persona bastante detallada en sus preparaciones, tiene el hábito de dejar pasar los pequeños detalles una vez que ha entrado en acción, y el hacerse cargo de esos pequeños detalles en su lugar es probablemente su responsabilidad, Kirei había entendido esto hace mucho tiempo.

“Pero hablando de ser cuidadosos – Kirei, nadie te vio entrar a esta casa, ¿cierto? Al menos en apariencia, nosotros ya somos enemigos.”

Completamente de acuerdo al plan de Tōsaka Tokiomi, la realidad fue alterada y anunciada. Kirei, quien había sido escogido por el Grial tres años atrás, escondió cuidadosamente la insignia en su mano derecha de acuerdo a las órdenes de Tokiomi hasta la llegada de este mes, antes de anunciar el hecho de que los Sellos de Comando habían aparecido en su mano. Desde ese momento, él corto todos sus lazos con Tokiomi para aparentar ser un contendiente por el Grial.

“No necesitas preocuparte. Sin importar si pudiera ser visto o no, no hay familiares o hechizos de vigilancia en esta casa. Yo —"

“— Yo lo garantizo.”

La voz de una tercera persona los interrumpió, y al mismo tiempo hizo su aparición a lado de Kirei una sombra negra.

El Espíritu Heroico que había estado acompañando a Kirei todo este tiempo en su forma espiritual había aparecido en este momento frente a Tokiomi.

Esa delgada y alta sombra tenía una gran diferencia comparándola con el prana de un humano normal. Él era ‘algo inhumano’. Un extraño vistiendo una larga capa negra y una máscara de calavera blanca que ocultaba sus facciones.

Si, él era el primer Espíritu Heroico invocado en el cuarto Toque del Cielo, el Sirviente “Assassin” quien había realizado un contrato con Kotomine Kirei — Hassan-i Sabbāh.

“Sin importar que trucos utilicen, ellos jamás podrán esconderse de mis ojos, los ojos del Espíritu Heroico del Subterfugio, Hassan. Mi Maestro, Kirei, no tiene el aura de alguien que es perseguido por un enemigo… puedes relajarte.”

Como si entendiera que la posición de Tokiomi estaba aun mas allá que la de su propio maestro, Kotomine Kirei, Assassin reporto esto educadamente con una reverencia.

Y entonces Kirei dijo,

“Tan pronto como un Espíritu Heroico invocado por el Grial aparezca, sin importar a que Clase pertenezca, en definitiva será reportado a mi padre acertadamente y sin error.”

El Padre Risei era el supervisor del Toque del Cielo, asignado como el Sacerdote en jefe y enviado a la Iglesia de Fuyuki. Actualmente él tiene en su posesión un aparato mágico conocido como el “tablero espiritual”. Este tiene la función de mostrar los atributos de los Espíritus Heroicos invocados por el Grial.

La identidad de los Maestros solo podía ser confirmada por los reportes de la gente, pero la cantidad y Clase de los Sirvientes que aparecerían, sin importar donde fueron invocados, definitivamente sería mostrado en el “tablero espiritual”, para garantizar al supervisor un mejor control de la situación.

“De acuerdo a mi padre, mi Assassin es el único Sirviente que ha sido invocado hasta ahora. El que los demás magos realicen alguna acción aun esta por suceder.”

“Si. Pero solo es cuestión de tiempo. Tarde o temprano habrá familiares pertenecientes a otros Maestros entrando y saliendo alrededor de esta habitación. Esto se debe a que este lugar y la mansión Matō, al igual que el lugar de residencia de los Einsbern son locaciones confirmadas en las que habita algún Maestro.”

Comparándolas con las tres familias imperiales, la ventaja de los magos extranjeros radica en que el lugar en el que se ocultan es desconocido para todos. A causa de esto, durante las primeras etapas del Toque del Cielo, sin importar de qué familia se tratara ellos utilizarían a sus espías para realizar el reconocimiento.

No es que Kirei no confiara en la red de información de Tokiomi, es solo que ellos tenían que estar en guardia ante la posibilidad de que los dos Maestros restantes estuvieran utilizando medidas sabias para ocultar su presencia. Si era necesario enfrentarse contra un oponente con este tipo de estrategia, el Sirviente de Kirei, Assassin, podía utilizar sus poderes hasta su más grande límite.

“Puedes marcharte, Assassin, continua vigilando el exterior. Sé muy cuidadoso.”

“Entendido.”

Al recibir la orden de Kirei, Assassin una vez más asumió su forma espiritual y abandono el cuarto. Para un Sirviente que desde un comienzo es una entidad espiritual, es posible el pasar a voluntad de su forma física a su forma espiritual.

Assassin tenía la habilidad especial llamada “Presencia Oculta” que otras Clases no poseen. Él no tenía rival en el rastreo y los movimientos ocultos.

Para Kirei, cuya responsabilidad no es perseguir la victoria si no proveer ayuda a Tokiomi, el invocar a Assassin fue la mejor opción.

Ese era el mejor plan de batalla.

Primero permitiría que el Assassin de Kirei fuera investigando detalladamente las estrategias de batalla de los otros Maestros y las debilidades de sus Sirvientes. Después de obtener de esta manera un método para una victoria segura, el Sirviente de Tokiomi podía ser utilizado para derrotarlos a cada uno de manera adecuada.

Es por esto que Tokiomi debe de invocar un Sirviente que posea grandes habilidades ofensivas. Sobre el tema de que Espíritu Heroico había escogido, Kirei jamás le había escuchado mencionar algo de ello.

“La reliquia sagrada que prepare arribo por la mañana.”

Como si entendiera las dudas de Kirei a través de su expresión. Tokiomi dijo esto sin esperar a que Kirei realizara la pregunta.

“He encontrado lo que estaba esperando. El Sirviente que invocare ciertamente tendrá una ventaja ante todos nuestros enemigos. Si se trata de un Espíritu Heroico, entonces no tendrá ninguna oportunidad de victoria ante él”

Tokiomi, mostrándose secretamente feliz por esto, mostraba en su rostro el brillo de la confianza incomparable con la que había nacido.

“La ceremonia de invocación será llevada a cabo esta noche – si ningún otro maestro nos está espiando, Kirei, también podrás estar presente al igual que tu padre.”

“¿Mi padre también?”

“Si. Si ‘él’ es invocado exitosamente, entonces nuestra victoria está asegurada. Deseo compartir esta felicidad con todos ustedes.”

Este tipo de confianza arrogante mostraba, sin ocultar nada, todo aquello que podía ser dicho de aquella característica hereditaria perteneciente a Tōsaka Tokiomi. Sobre su enorme ego, Kirei sentía un poco de respeto pero también sentía admiración.

Repentinamente Kirei noto la joya del péndulo. El movimiento de la joya sobre el papel no ceso, continuo escribiendo continuamente.

“Parece que aun hay mas por llegar.”

“Si, ah, es la investigación concerniente a otro asunto. Esta no es la información más reciente – es probable que se trate de mi petición de investigar al Maestro de los Einsbern.”

La información sobre la familia Einsbern, quienes habían cortado todo contacto con el mundo exterior era de verdad difícil de obtener incluso en la Torre del Reloj de Londres. Pero Tokiomi ya había dicho antes que había una pista sobre ese Maestro. Tokiomi enrollo el papel a su lado y lo puso encima de la mesa, entonces tomo el papel que contenía el nuevo texto.

“…Esto fue algo que paso nueve años atrás. Los Einsbern que siempre habían estado orgullosos de la pureza de su línea de sangre, repentinamente hicieron de un mago del exterior su yerno. Esto había instigado mucho debate dentro de la Asociación en ese tiempo, pero los únicos capaces de ver la verdad de ese asunto, además de mí, solo podría ser el viejo jefe de la familia Matō.”

“Los magos de la familia Einsbern que solo destacan en la alquimia no eran adecuados para el combate desde el comienzo. Esto también fue el factor que contribuyo a sus derrotas en los rituales previos del Toque del Cielo. Esa gente parece haber perdido finalmente su paciencia.”

“Este mago que encontraron parece que en verdad ‘llena los requerimientos’”

Después de observar rápidamente el contenido del papel mientras caminaba, Tokiomi le entrego el papel a Kirei. Después de ver el titulo “Reporte de Investigación: Emiya Kiritsugu”, los ojos de Kirei se entrecerraron ligeramente.

“Ese nombre… lo he escuchado en algún lugar antes. Supuestamente esta es una persona peligrosa.”

“Oh, ¿Acaso la Santa Iglesia sabe de esto? El ‘Asesino de Magos’ Emiya en verdad era notorio en ese tiempo. Sin pertenecer a la Asociación en apariencia, pero en verdad era la herramienta asesina de los altos rangos de la Asociación.”

“Así que en las palabras de la Iglesia él seria algún tipo de Ejecutor, ¿correcto?”

“Aun de una naturaleza peor que esa. Él es un asesino a sueldo que ha llevado a cabo un entrenamiento especial para asesinar magos. Porque solo los magos pueden comprender tan bien a otros magos, él utiliza los métodos más incompatibles con las reglas de los magos para asesinar a otros magos… es la clase de hombre que utilizaría métodos despreciables sin pensarlo.”

Había un odio obvio en la voz de Tokiomi, aun así Kirei comenzó a sentir algo de interés por el hombre llamado Emiya Kiritsugu. Ya había escuchado rumores sobre este hombre, parece que se había opuesto a la Santa Iglesia en el pasado, y existía gente que le había dicho a Kirei que fuera muy cuidadoso con este hombre.

Kirei comenzó a leer la información que se le había entregado. La mayoría de lo que estaba escrito era una investigación sobre las estrategias de batalla de Emiya Kiritsugu – los casos de personas desaparecidas y accidentes que se creía eran magos que él había asesinado; pero principalmente se trataba de un análisis de su metodología. Mientras leía, Kirei comenzó a entender gradualmente el porqué es que Tokiomi odiaba a este hombre. Las emboscadas y asesinatos solo eran la punta del iceberg.

Plantar una bomba en público; derribar un avión con muchos pasajeros a bordo, estos eran el tipo de casos increíbles que estaban siendo reportados. También era extrapolado que las tragedias del pasado reportadas como graves actos de terrorismo fueron, de hecho, actos criminales realizados por Emiya Kiritsugu con el único fin de asesinar a un solo mago. Aunque no había evidencia para culparlo, al mirar la información proporcionada, se convertía en una historia bastante creíble.

Asesino, esa palabra era bastante adecuada. Magos oponiéndose los unos a los otros hasta llegar al punto de asesinarse, estos escenarios eran comunes. Sin embargo, se trataba puramente de una competición de hechicería, y usualmente se decidía a través de una serie de procesos que se apegaban a ciertas reglas de combate. Al decirlo de esa manera, el Toque del Cielo cae también en esta categoría, aunque es llamada una ‘guerra’, no es un duelo a muerte caótico, si no que existen una serie de estrictas reglas y regulaciones.

No había ni siquiera una sola línea de texto que dijera que Kiritsugu había llevado a cabo una batalla como esta, utilizando las ‘regulaciones de los magos’.

“Para comenzar las cosas llamadas magos existen fuera de las leyes humanas, y eso es aun mas razón para obedecer estrictamente las reglas de nuestro propio mundo.”

Tokiomi dijo esto, con su voz tranquila llenándose de enojo.

“Pero este hombre llamado Emiya ignora completamente las reglas. No tiene el más mínimo orgullo de un mago. Esta clase de hombre es imperdonable.”

“¿Lo que dijiste fue… orgullo?”

“Si. Incluso este hombre seguramente atravesó el estricto entrenamiento de un mago.”

“Si ese es el caso entonces ciertamente él tiene la fe necesaria para sobrepasar cualquier dificultad. Es imposible olvidar sus intenciones originales y sus deseos, aun después de haber logrado el éxito.”

"..."

Lo que Tokiomi dijo estaba equivocado. Aquel que se somete a un entrenamiento brutal aun sin ninguna intención, esa clase de idiota, existe en este mundo. Esto lo entendía Kirei mejor que nadie.

"— ¿Así que porque es que este Emiya Kiritsugu se convirtió en una herramienta asesina?"

“Eso probablemente se deba al dinero. Después de entrar en la familia Einsbern, él quedo limpio. Ya ha obtenido suficiente dinero para no preocuparse por ello el resto de su vida, así que parece razonable – debería de estar escrito en ese reporte, ese tipo hizo más que solo asesinatos. Parece que ha hecho cosas alrededor del mundo ante cualquier oportunidad de hacer dinero extra.”

Era justo como decía Tokiomi, cerca del fin del reporte, además de incidentes relacionados con magos, había muchas más experiencias de Emiya Kiritsugu. Así que así eran las cosas, Kiritsugu podía ser localizado en la mayoría de los conflictos que sucedían alrededor del mundo; él no era solo una maquina asesina, sino que también realizo muchos trabajos como mercenario.

“…Este documento, ¿Puedo tomarlo prestado para leerlo a detalle?”

“Ah, seguro. Si puedes analizarlo a detalle para mi, entonces serias de gran ayuda. Yo aun estoy ocupado preparando el ritual de invocación de esta noche.”


※※※※※


Kirei abandono el taller del sótano y regreso al piso superior. En el pasillo él se encontró con una joven señorita luchando con una gran cantidad de equipaje.

“Buenas tardes, Rin.”

Su deseo no era llamar su atención de alguna manera especial, si no solo con la intención de saludarla normalmente, sin embargo la chica detuvo sus pasos y observo a Kirei con sus grandes ojos. Él había estado en contacto con Rin dentro de esta casa por tres años, aun así la sospecha en los ojos de la chica en lo que concernía a Kirei no había disminuido.

“…Buenas tardes, Kirei.”

Con una voz seca, pero aun con la actitud apropiada, Rin respondió al saludo de Kirei. Aunque era joven, Rin ya actuaba de manera similar a su madre, sus acciones eran refinadas y parecidas a las de una dama. Ella no era cualquier persona, si no la hija de Tōsaka Tokiomi. El que fuera diferente de los otros estudiantes de su edad era perfectamente natural.

“¿Vas a salir? Ese equipaje es enorme.”

“Si. A partir del día de hoy nosotros iremos a la casa del abuelo por un tiempo. Incluso tomare el tren desde ese lugar para ir a la escuela.”

A causa de que el inicio del Toque del Cielo era inminente, Tokiomi decidió permitir que su familia viviera temporalmente en el distrito aledaño – en la casa de su suegra.

Tanto la madre como la hija no podían ser expuestas al campo de batalla, eso era demasiado peligroso. Por supuesto que esto era un arreglo razonable.

Pero su hija Rin parecía insatisfecha con esto. Aunque sus facciones estaban relajadas su linda boca estaba arqueada, mostrando que no se encontraba contenta. Aunque ella se convertiría en una dama en el futuro, justo ahora solo era una niña. No se podía esperar que actuara totalmente como una dama en este punto.

“Kirei, tú te quedaras con mi padre para ayudarle en la pelea, ¿cierto?”

“Si, como su aprendiz eso es justo lo que debería de hacer.”

Rin no era una chica ingenua. Como la sucesora en la línea de magos de los Tōsaka, ella ya había recibido las enseñanzas expertas de Tokiomi. Sobre el inminente Toque del Cielo de Fuyuki, ella estaba equipada con un cierto grado de conocimiento.

Sobre el hecho de que ella tuviera que ir a la casa de su abuelo, ella podía entender la razón verdadera. Pero, lo que la mantenía insatisfecha era que – después de que se hubieran marchado, Kirei sería el único que permanecería en la casa de los Tōsaka y podría hacer lo que él deseara.

Rin tenía un respeto extraordinario por su padre Tokiomi. Precisamente por esta razón, como su sucesora, Rin odiaba a Kirei probablemente porque él se convirtió en el primer estudiante de Tokiomi, aprendiendo la hechicería de este.

“Kirei, ¿puedo confiar en ti? ¿Protegerás a mi padre hasta el final? ¿Podrías prometerme eso?”

“Eso es imposible. Si esta guerra fuera lo suficientemente benigna para que pudiera prometerte eso, entonces no habría ninguna razón para que tú y tu madre fueran alejadas del peligro, ¿cierto?”

Kirei no estaba dispuesto a pronunciar unas palabras vacías para confortarla, y por ello dijo simplemente la verdad. Pero los ojos de Rin se volvieron más fieros, observando al aprendiz mayor de manera descarada e imprudente.

“…Como pensaba, no me agradas ni un poco.”

Solo cuando pronunciaba palabras que estarían de acuerdo a su edad, Kirei obtenía una impresión favorable de la chica.

“Rin, no hables de manera tan descortés enfrente de la gente de nuevo. De otra forma pondrás los valores morales de tu padre en duda.”

“¡Esto no tiene nada que ver con mi padre!”

Al ver que incluso su padre había sido utilizado como escudo; el enojo de Rin provoco que incluso su rostro se pusiera de un color rojo profundo. Esto era exactamente lo que Kirei había esperado ver.

“¡Escucha Kirei! ¡Si mi padre es herido a causa de tus errores, yo definitivamente jamás te perdonare! Yo —"

En ese momento, con lo que podría decirse era el instante preciso, la sombra de Aoi apareció. Al haber acabado con sus preparaciones, pero a causa de que Rin no volvía, ella fue a verificar la situación.

“¡Rin! ¿Qué estás haciendo? ¿¡Por qué estas gritando!?”

“— Ah, yo solo estaba… —”

“Antes de partir, ella vino a darme ánimos, mi señora.”

Kirei pretendió estar tranquilo y ayudo a propósito a Rin, pero Rin se enojo mucho más. Aunque ella no podía decir nada enfrente de su madre así que se dio la vuelta para marcharse.

“Te ayudare con tu equipaje. Rin, esa maleta es demasiado pesada para ti.”

“¡No! ¡Puedo hacerlo sola!”

Rin empujo la maleta aun mas vigorosamente que antes, y por esa causa se vio envuelta en una pelea aun mas fiera con la maleta, pero a pesar de todo, finalmente logro sacarla por la puerta. Kirei sabía que el actuar de esa manera no era muy apropiado para un adulto maduro, pero aun así deseaba reírse de Rin cuando tenía oportunidad.

Aoi, quien permanecía ahí, profirió una reverencia muy respetuosa hacia Kirei.

“Kotomine-san, dejare a mi esposo en tus manos. Por favor ayúdale a realizar sus deseos.”

“Daré mi mejor esfuerzo, por favor no se preocupe.”

De la manera en la que Kirei lo veía, Tōsaka Aoi era la esposa perfecta. Solemne y discreta, meticulosa, comprensiva con su esposo y nunca interfería, valorando la lealtad tan alto como el amor y el respeto a su tarea – en resumen, ella era el modelo de la madre y esposa perfecta de los tiempos antiguos. En una era donde el movimiento feminista había comenzado a empapar la sociedad, ella era como una persona gravada en piedra. Tokiomi realmente había escogido a una persona muy compatible con él mismo como su esposa.

Kirei permaneció de pie en la puerta para ver partir a madre e hija. Partiendo no en un taxi, si no en un carro privado, con Aoi manejando. No solo el chofer si no que todos los sirvientes, comenzando la semana pasada, habían partido. Esto se hizo para prevenir el lastimar a inocentes y también es un tipo de táctica cuidadosa contra el espionaje. Tokiomi no era lo suficientemente cuidadoso para mantener su guardia aun contra sus sirvientes; esta sugerencia fue de Kirei, y Tokiomi fue casi forzado a llevar a cabo este acto.

Antes de que el carro partiera, Rin, quien estaba fuera de la vista de su madre, le saco la lengua a Kirei, haciéndole gestos. Kirei se rió amargamente y las vio partir con su mirada, entonces regreso a la ahora vacía mansión.


※※※※※


Tokiomi aun no había abandonado el taller. Kirei, quien era el único ocupante del salón de estar, comenzó a leer detalladamente el reporte que hablaba de Emiya Kiritsugu.

No entendía porque es que tenía un interés tan intenso en este extraño mago que ni siquiera conocía. Tal vez era una causa derivada de algún tipo de sentimiento de placer proveniente del odio puesto en este hombre por su maestro Tokiomi.

La relación de maestro y estudiante mantenida por tres años dentro de esta casa siempre ha tenido un aire de sátira en ella.

Como maestro, Tokiomi no puede quejarse de la concentración de Kirei al aprender ni en su comprensión tan rápida; originalmente un sirviente de lo sagrado que detestaba toda la hechicería, y aun así poseía un inmenso interés en todos los campos taumatúrgicos. Kirei utilizaba lo que podía ser llamado como un deseo codicioso por el conocimiento, que lo hacía capaz de aprender todo, esto hacia feliz a Tokiomi. Ahora la confianza de Tokiomi hacia Kirei era completamente inquebrantable, aun al punto de hacer que su única hija, Rin, le mostrara respeto a Kirei como su aprendiz mayor.

Pero comparada a la amistada de Tokiomi que seguía en incremento, el corazón de Kirei se volvía más y más desolado.

Para Kirei, él no estaba estudiando hechicería porque le agradara. Al llevar una larga y piadosa vida en la Iglesia, y aun así terminar sin nada a cambio, a causa de eso Kirei puso todas sus esperanzas en este nuevo estudio que tenia exactamente los valores opuestos de la Iglesia, eso era todo. Pero el resultado era un completo desastre. En el mundo de la persecución de la hechicería, Kirei no encontró nada que disfrutar, ni gano alguna saciedad. Completamente lo opuesto, parecía que había alargado el radio del agujero vacío en su corazón.

Tokiomi no parecía haber notado la decepción de Kirei en lo absoluto. La aseveración de que 'es el mismo tipo de persona que mi padre Risei’ es completamente correcta. Los halagos de Tokiomi y su confianza hacia Kirei eran completamente iguales a las de Risei.

Siempre había una línea imposible de cruzar entre él mismo y la gente como su padre y Tokiomi. Kirei entendía esto completamente, y es probablemente por ello que él tiene tanto interés en una persona que detesta tanto Tokiomi.

Pensó que tal vez este hombre, Emiya Kiritsugu, existía ‘del otro lado de esa línea’

La cautela de Tokiomi hacia Emiya Kiritsugu parecía completamente contra su título de ‘Asesino de Magos’. Así que este reporte de investigación creado a petición de Tokiomi se enfocaba en su ‘historia personal de batallas contra los magos’, cualquier otro dato que no se tratara de este tópico se encontraba bastante simplificado.

Pero, mirando las experiencias de este hombre Kiritsugu en orden cronológico, Kirei comenzó a gana gradualmente una creencia.

Las acciones de este hombre contienen un alto nivel de riesgo.

En su era de asesino por contrato, antes de que entrara a la familia de los Einsbern como su yerno, Kiritsugu completo incontables misiones como todo un experto. Pero la pausa entre las misiones era claramente demasiado corta. Considerando el tiempo que él tendría para las preparaciones y para aceptar las misiones, la única conclusión posible es que él estaba ejecutando simultáneamente varios planes. Y todos estos planes estaban en paralelo, él aparecía en conflictos en varias áreas; y siempre cuando el conflicto se encontraba en su punto más fuerte, en ese punto de destrucción.

Como si fuera un suicida, como si tuviera algún tipo de enfermedad guiándolo… el principio detrás de sus acciones era claramente la auto destrucción.

Esto podía deducirse con seguridad. Este hombre Kiritsugu no tenía un corazón egoísta, el riesgo de sus acciones y el beneficiarse de ellas no encajaban. Era imposible que él fuera un asesino cuya motivación fuera el dinero.

Entonces — ¿Qué es lo que buscaba?

"..."

Inconscientemente, Kirei puso el reporte a un lado, recargo su mentón en su mano, y se hundió en profundos pensamientos. Este hombre, Emiya Kiritsugu, tenía una vida turbulenta inconcebible por otros, pero Kirei no la veía sin relación a sí mismo.

Un mago sin honor, un hombre que perdió sus creencias, Tokiomi lo consideraba como tal.

Si esa era la verdad, las intensas experiencias de Kiritsugu, como si buscara la destrucción… ¿O podría decirse que estaba en un viaje para buscar las respuestas que se habían perdido hace tanto?

Entonces, la cortina de las continuas batallas de Kiritsugu finalmente cayó hace nueve años. Eso es porque a través de buscar continuamente él se encontró con los magos Einsbern buscando la victoria en el Toque del Cielo en las tierras del norte.

Eso quiere decir que fue en ese momento que él obtuvo su ‘respuesta’

Justo ahora Kirei anticipaba ansiosamente su encuentro con Emiya Kiritsugu. Finalmente encontró significado en su participación en la batalla de Fuyuki.

Incluso ahora, él no tenía interés en el Grial. Pero, si Kiritsugu rompió nueve años de silencio por él, Kirei había ganado un significado para venir hasta aquí y participar en esta pelea en la que se puede desvanecer cualquier dificultad.

Debe de preguntarle a este hombre. ¿Qué es lo que estas buscando para participar en esta batalla? ¿Qué es lo que obtendrás de ella al final?

Kotomine Kirei confrontara a Emiya Kiritsugu sin importar nada. Aun si es en el campo de batalla donde ambos apuestan la vida y la muerte.



Regresar a: Acto 1, Parte 2 Ir a: Página Principal Avanzar a: Acto 1, Parte 4